En Lima preocupados por la salud de San Martín

Las funestas nuevas que han corrido en esta ciudad acerca de la salud y vida de Usted han cubierto de luto a todos los amantes de la salud del Perú. La expedición de Alvarado presenta un aspecto lisonjero. Los pueblos en su decisión le ofrecen mil recursos. Es consiguiente que se arredre el enemigo y que Arequipa libre sea la senda para libertad al Cuzco y terminar la guerra con los españoles. La División Auxiliadora de Colombia se embarca hoy para Guayaquil cargada de la execración pública. Ha debilitado con sus gastos los recursos del Estado, ha retardado la marcha de la fuerza que manda Arenales, que estaba pronta a internarse en la Sierra. Soñó Bolivar subyugar al Perú o agregarlo a Colombia. Carta de Cayetano Requena a San Martín, Lima 7/1. (1,T19,1)

Cuando salió del Callao nuestra expedición para los Puertos Intermedios de la costa de Arquipa, escribí a Usted creyendo que en breve Usted se pondría al frente de aquel ejército a consumar la gran obra de sus manos, cual es la libertad del Perú, pero posteriormente se me asegura que su dirección es al otro lado de los Andes. He sabido con sumo dolor la gran enfermedad que acometió a Usted pero acabo de oír se halla ya enteramente repuesto. Carta de Francisco de Echagüe a San Martín, Lima 10/1. (1,T19,2)

Las últimas noticias de ese país me han sacado del amargo cuidado en que me tuvo su enfermedad, los rumores acerca de la salud de Usted aquí fueron funestos. Digo a Usted en mi primera carta, que a solicitud de los jefes del Ejército de los Andes, había sido nombrado Martínez (Enrique, ¿ tenía la bandera del Ejército de los Andes en su poder ?) jefe de Estado Mayor, bajo este carácter regresó de Trujillo y está ya al mando de la vanguardia que manda el ejército de Alvarado. Las diferencias que había entre ambos jefes parece que han cesado. Carta de Guido a San Martín, Lima 11/1. (1,T19,3)

García del Río y Paroissien representa los intereses del Perú

Al mismo tiempo mantengo correspondencia con Juan García del Río, que como enviado del Perú hará las gestiones que convengan al interés general de América, mientras que las que yo haga en París no podrán menos de tener el mismo efecto general. Carta de Antonio Irizarri al Ministro de Estado y Relaciones Exteriores de Chile, Puerto de Havre de Gracia 16/1. (4,T4,22)

Cochrane en Lima injuria a San Martín

Ha llegado al Congreso una manifestación remitida por Lord Cochrane recriminando la conducta de Usted para salvar la suya, no he podido ver hasta ahora este panfleto, pero me aseguran que está insolente y desnudo de pruebas, su introducción o especie de proclama se la envían a Usted después de haber sido reimpresa por un pícaro. Usted no debe extrañar ninguna de estas cosas, porque desde el momento que colgó Usted sus armas y abandonó el teatro de su fama quedó de punto en blanco de ingratos y ambiciosos. Carta de Guido a San Martín, Lima 11/1. (1,T19,6)

Ohiggins y Freire enemistados

No espera yo una contestación a mis cartas, pero cordiales expresiones como las del 8 del corriente que leo y releo con bastante mortificación al cariño que a V he profesado y no apartaré jamás de mi; para mayor dolor no me escribe V de su puño, dejándome en dudas de si lo que leo es dictado por el corazón [...] V ha divulgado secretos. V ha hecho circular que escribí cartas para que la elección de Diputados recayese en los que yo quería. Es verdad, quería hombres de bien, quietos y separados de todo partido. Carta de Ohiggins a Ramón Freire, Santiago de Chile 14/1. (4,T31,51)

San Martín deja Chile por San José de Maipo y regresa a Mendoza por Tunuyán

He llegado a ésta mejor de lo que esperaba. El dador enterará a Usted de mi estado. Mil cosas a mis patronas (madre y hermanda de Ohiggins) y se repite todo suyo su amigo. Carta de San Martín a Ohiggins, Los Arboles (Tunuyán, 100 km al sudoeste de Mendoza y 100 km al este de San José de Maipo en Chile) 27/1. (1,T20,263)

Por todo ello, el hallarme con unos granos en la sentadera que no me permiten cabalgar libremente, y mayormente porque Usted no se dignó devolverme la visita que le hice acá en Luján, no he repetido. Carta de Juan de la Cruz Vargas a San Martín, Luján 22/3. (1,T19,26)

Aunque la salud de Usted sufrió quebranto de consideración por algún tiempo en Chile, al fin he visto con no pequeña satisfacción que el primero del pasado (1/2) llegó a ésa de Mendoza bueno. Carta de Santiago Campos a San Martín, Lima 17/3. (1,T19,22)

San Martín y los rumores en su contra

Ahora bien ¿creerá Usted si le aseguro por mi honor que a mi llegada a Mendoza del regreso del Perú se creyó que mi objeto era hacer una revolución para apoderarme del mando de la Provincia de Cuyo y que se me enseño una carta del gobernador de San Juan, Carril, en la que se aconsejaba se tomasen todas las medidas necesarias para evitar tamaño golpe? Por fortuna del hijo de mi madre que el gobernador de Mendoza (Pedro Molina) en aquella época era un hombre honrado y muy mi amigo, que de lo contrario me hubieran hecho hacer un Acto de fe más ?. Carta de San Martín a Guido. (Montevideo, 6/4/1829;1,T20,117)

A dos meses de mi llegada a Mendoza, el Gobierno que en aquella época mandaba en Buenos Aires no sólo me formó un bloqueo de espías (entre ellos uno de mis sirvientes), sino que me hizo una guerra injusta y poco noble en los papeles públicos en su devoción tratando, al mismo tiempo, de hacerme sospechoso con los demás Gobiernos de las provincias; por otra parte, los de la oposición, hombres que en general no conocían ni aún de vista, hacían circular la absurda idea que mi regreso del Perú no tenía otro objeto que el de derribar la administración de Buenos Aires y suplantarme a ella y, para corroborar esta idea, mostraban (con una impudencia poco común) cartas que ellos suponían les escribía; lo que dejo expuesto me hizo conocer que mi posición era falsa y que, para mi desgracia, había figurado demasiado en la guerra de nuestra Independencia para poder gozar en mi Patria (por entonces) la paz y tranquilidad que mi edad y diez años de una vida demasiado agitada me hacían desear. Carta de San Martín a Juan Manuel de Rosas. (Gran Bourg, 5/8/1839;1,T19,384)

El Ejército de los Andes sigue haciendo historia en Perú

El no haber marchado la División de Arenales para llamar la atención del enemigo hacia el Norte, dio lugar para que Canterac se uniese con Valdés, y de este modo se opuso a Alvarado con una fuerza muy superior a la suya. Parece que Alvarado fue tomado en flanco, y el primer cuerpo que huyo fue el Regimiento del Río de la Plata, pero he oído que los soldados de éste se hallaban casi sin cartuchos. La Infantería que más se distinguió fue la Legión Peruana, de la que sólo se han salvado como 150 hombres. Todos dicen que Lavalle con los Granaderos a Caballo hizo presas de valor que han asombrado al Ejército. Si Usted viniera sería Usted recibido con júbilo por la masa del pueblo y tenderían alfombras en el camino por dónde pasase. Antes de avanzar el Ejército desde las cercanías de Arica, hubo una fuerte diferencia de opinión entre Alvarado y Miller, habiendo éste expresado su parecer que se debían marchar con celeridad sobre Arequipa para no dar lugar al enemigo que se reforzase, y para algunos días se hallaba Miller embarcado para volver al Callao. Yo creo que si se ollese de la llegada de Usted en el Callao las mujeres irían a pie a encontrarle. Carta de Juan Thwaites a San Martín, Lima 5/2. (1,T19,6)

Ohiggins es separado del mando de Chile

Nunca se han atrevido los más descarados de mis enemigos acusarme de cobarde; no pueden negar que en 28 de enero de 1823 era dueño de un ejército fiel en la capital, y dueños de 5 millones de pesos bajo una legítima magistratura, y que en la tarde aquel día, en tales circunstancias, resigné el lugar de Surpremo Director haciendo que el pueblo eligiese una junta provisoria a la que transferi mi autoridad, y todo esto en la flor de mi edad, cuando el amor al poder estaba naturalmente más fuertemente apoderado de mi pecho. Carta de Ohiggins a Miguel de la Barra. (Perú 5/6/1839; 4,T32,323)

Millones de millones de enhorabuenas por su separación del mando. Los que sean verdaderos amigos de Usted se las darán muy repetidas. Si, mi amigo, ahora es cuando gozará Usted de la paz y tranquilidad, y sin necesidad de formar cada dia nuevos ingratos goce Usted de la calma que le proporcionará la memoria de haber trabajado por el bien de su patria. Estoy con cuidado por la salud de Rosita. Hágame el gusto de no privarme de sus noticias. Sigo reponiéndome pero la fatiga aunque disminuida me incomoda bastante. A fines de éste pienso pasar a Buenos Aires, aprovechando de la seguridad que proporciona una expedición que sale de aquel punto contra los indios. Carta de San Martín a Ohiggins, Mendoza 9/2. (1,T20,263)

Con esta fecha elevo a la Excelentísima Junta una solicitud espero encuentre su aprobación, tanto porque conviene a la mayor tranquilidad de la República en el presente estado de cosas, como a mis deseos de alejarme de los tumultos y pretenciones que mi persona pudiera excitar, bien sea entre las tropas que he creado o entre cualquiera otra clase de gentes. Cuando todo esté tranquilo y mi influjo no sea otro que el de un simple ciudadano, entonces volveré a mi amada patria a gozar de este gran bien. Yo no dudo que, penetrado V de esta verdad, contribuya en cuanto esté a su alcance al fin indicado, teniendo el honor de suscribirme, sin más, atento y obediente servidor q.s.m.b. Oficio de Ohiggins a Fernando Errazúris, Valparaíso 12/2. (4,T31,55)

Con el mayor placer he visto su apreciable de 9 del pasado, por el mejoramiento de su salud, que me acaba de confirmar el capitán Perez.
Recibo los parabienes de mi separación del Gobierno como la mejor prueba de la amistad y más grande don de la Provindencia. Sí, mi amigo, tantos años de lucha demandaban descansando y tiempo en atender a la propia conservación, amenazada del modo más alarmante. No puedo contar con otros fondos que Montalván y Cuiba, con que la generosidad del Gobierno del Perú y de mi mejor amigo habían recompensado mis servicios; pero aun este único recurso vacila, y los arrestos y desaires que he sufrido, después de haber dejado la Dirección de Chile, me prueban lo que en adelante deberé esperar de mi Patria. Bien que trece años de sacrificios y amarguras inauditas no los cambio por interés alguno, y sólo quedan dedicados al bien y general de la América.
Ha sido suspendido el arresto que sufrí en este puerto, sin otra satisfacción que negarme hasta el presente el permiso que he pedido para pasar a países extranjeros. No creo que los chilenos puedan abrigar ni por un solo momento la baja idea de acriminarme con imposturas para lavar la mancha de la falta de respeto a mi persona, ni menos de las obligaciones que me deben, hombres perversos, como hay en todas las sociedades del mundo, indudablemente conspiran contra mi honor y solapan el veneno con el pretexto de una residencia que jamás se ha ejecutado en el estado en jefe alguno superior, porque las leyes y constituciones publicadas hasta la fecha, los exceptúan conforme a la práctica general. Lo sano de mis intenciones y el feliz resultado de ellas, serán la mejor garantía de mis operaciones; de nada me acusa mi conciencia; ella siempre será tranquila al frente de la misma impostura y de los inicuos.
Rosita estaba en los umbrales de la muerte cuando tuve la precisión de separarme de la capital; sé que ella se halla muy mejorada, y que mi señora madre está muy buena.
Inglaterra será el país de mi residencia, sí, como es justo, se me concede permiso.
Recupere usted del todo su salud y sea cual fuere mi destino, siempre y hasta la muerte será su amigo eterno. Carta de Ohiggins a San Martín, Valparaíso 5/3. (4,T8,156)

Motivos

Yo no he recibido ninguna carta; pero hay una de Rodriguez dirigida a un amigo suyo en ésta y destinada, por cierto, a que yo la vea. Dice que es indudable el triunfo final de Prieto sobre Freire; pero que los pelucones están dudosos sobre la elección del Jefe Supremo. Eyzaguirre y su partido sostuvieron durante toda una noche que si bien era cierto que el nombre de Ohiggins era el único capaz de dar nueva vida a la República, sin embargo, todo hombre de ideas religiosas debía recordar la causa principal por la cual había sido removido en 1823; que si no había atacado directamente a la religión, había permitido la introducción de la masonería y había prestado protección decidida a los clubes nocturnos, causa de todos los daños; que en 1821 había estado a punto de entregar los fuertes de Valdivia a los ingleses por causas desconocidas, pero suficientes para levantar las mayores sospechas; y, finalmente, que a pesar de hallarse convencido de la honradez e integridad de Ohiggins, estos puntos eran demasiado graves para que no se considerara y se desengañara al público respecto a cuestiones de tanto interés. Carta de Ohiggins a Juan Thomas. (28/3/1829;4,T31,238)

García del Río y Paroissien son enjuiciados

Cuando por una parte no se oyen más que clamores contra el gobierno de Colombia por la desaprobación que se teme de su empréstito, y cuando la inquietud de los tenedores de sus obligaciones peruanas es tal, que han procedido judicialmente contra los Enviados don Juan García del Río y don Diego Paroissien, tratándolos de impostores y exigiéndoles la recisión del contrato, y la devolución de los pocos fondos que se han realizado. Carta de Antonio Irizarri al Ministro de Estado y Relaciones Exteriores de Chile, París 10/2. (4,T4,27)

San Martín no viaja a Buenos Aires y presagia que dejará América para siempre

Usted no puede figurarse la agitación en que me hallo con la falta de contestación a mis dos anteriores, y con las noticias que corren por ésta de su suerte, pues he visto cartas en que aseguran estar Usted con dos barras de grillos por orden de Freire. Yo no puedo ni podré jamás dar consenso a tal procedimiento, porque no cabe en mi imaginación que un militar bravo, use de conducta tal. En fin, mi amigo, yo escribo con igual data al general Freire sobre este particular, como un antiguo compañero de armas.
Cuanto valgo, lo poco que poseo, mi Chacra en ésta, que ya está habitable con alguna comodidad, están a su disposición. Véngase mi amigo, y apártese para siempre de poder hacer ingratos.
Mi salud sigue achacosa lo que me ha privado de marchar a Buenos Aires, por otra parte yo no sé qué partido tomar, pero si es cierto el tratamiento que se dice sufre Usted, juro, aunque sepa comer tierra, que abandonaré la América para siempre. Carta de San Martín a Ohiggins, Mendoza 1/3. (1,T20,264)

San Martín volverá a Chile si la Justicia se lo ordena

Se me asegura que el mismo día que Usted dejó el mando se remitió una partida para mi aprhención, creyéndome aún en el Cajón de San José (San José de Maipo, 50 km al sudeste de Santiago de Chile, por aquí entra San Martín a Tunuyán, Mendoza). No puedo creer semejante procedimiento, sin embargo desearía saberlo para presentarme en Santiago, aunque después me muriese y responder a los cargos que quieran hacerme. Dispense mi amigo, esta idea me tiene un poco acalorado. Posdata de una carta de San Martín a Ohiggins, Mendoza 1/3. (1,T20,264)

La Prensa Peruana dividida por San Martín

El estado de los negocios era efectivamente complicado, pero ya el horizonte principia a complicarse. Por separado remito a Usted algunos ejemplares de un papel público en contestación a varias imposturas publicadas en un libelo; hay en la prensa otro panfleto que hace al nombre de Usted toda justicia. Carta de Guido a San Martín, Lima 15/2. (1,T19,9)

El Ejército Libertador del Sur es derrotado en Moquehua

No halla lo angustiado de mi corazón expresiones con que poder manifestar su dolor; ni tampoco encuentra cómo anunciar a Usted el fatal e inesperado contraste que ha sufrido el desgraciado y benigno general en jefe Rudecindo Alvarado; el 21 del pasado enero, en las cercanías de Moquehua, sepulcro de la vencedoras armas de la Patria, de aquellas que al mando de Usted siempre supieron ser triunfantes y jamás se vieron tan llenas de confusión y de aquellas, digo que, aun cuando eran sorprendidas, siempre constantes y llenas de honor, hacían su retirada, sin desmoralizarse ni perder en el todo su organización y obediencia militar, esto es, la subordinación; pero que mucho se notase en algunos pocos soldados lo dicho, cuanto en los más jefes y oficialidad fu más notable con admiración y escándalo del paisanaje que lo observaba. Carta de Landa a San Martín, Lima 23/2. (1,T19,10)

El Presidente de la República (Perú) me ordena asegure a Usted que en el concepto del Gobierno, no ha tenido que sufrir el honor de Usted la menor mengua por las desgracias de la campaña del Sur; escasez de recursos, falta de movimiento que debió hacer el del centro (Ejército) y otras muchas han originado el contraste. Carta de Román Deheza a Alvarado; sin lugar, sin fecha. (1,T19,16)

San Martín quiere vender la Hacienda de los Barriales

Con motivo de hallarse próximo a viajar para la Capital de Buenos Aires, sin tener lugar para evacuar en ésta ciertos negocios que le ocurren, y por lo mismo serle preciso un encargado de su satisfacción, siéndolo Pedro Advincula Moyano ha deliberado conferirle amplias facultades al expresado fin, otorga que da tan amplio y general poder para enagenar las haciendas que tiene en el paraje de los Barriales distante de esta ciudad como 8 leguas. Son testigos: Angel Victorino Chaves, Pedro José Doncel y Clemente Cárdenas; certificado por el escribano José Manuel Pacheco, Mendoza 25/2. (X,EI,P187,18)

Urdininea organiza las tropas para marchar al Alto Perú

Apoderado por el coronel José María Perez de Urdininea (Gobernador de San Juan) para contratar y conducir todos los efectos necesarios para verificar la expedición al Perú (300 soldados), he creído un deber avisar a Usted que el empeños de Ambrosio Lezica me hace contar con todos ellos. La construcción del vestuario en el que se obra con apuro estará finalizada dentro de 15 días;el apresto del armamento que se ha hecho difícil por su escasez; otros útiles no menos necesarios se apuran en concluírlos, y precisamente en todo este mes podré marchar con el completo de todos los encargos que se me han hecho. Carta de José Mateo Bendeja (Comisionado por Urdininea) a San Martín, Buenos Aires 1/3. (1,T19,13)

Perú y Chile claman para que San Martín y las Provincias Unidas controlen el Alto Perú

Se me acaba de decir que es general el clamor de Lima por el regreso de Usted, y los que me escriben creen que si no lo hace se pierde todo el Perú. Yo estoy tan aturdido por todo, todo, que se me daría muy poco el que me tirasen un balazo. Cabrera se marchó sin avisármelo y se ha quedado una encomienda para Usted y Remedios. Carta de Rodriguez Peña a San Martín, Santiago de Chile 2/3. (1,T19,17)

Suponemos a Usted instruído del terrible contraste ocurrido en Moquehua al Ejército Libertador del Perú. Ninguno mejor que Usted conoce las circunstancias de aquel país y cuán sensible es esta desgracia; pero ella puede remediarse con ventajas si este mismo contraste reúne el espíritu de los pueblos aliados y le impele a dirigir sus esfuerzos sólo contra el enemigo común. Usted se ha impuesto tan sagradas obligacionescon respecto al Perú, que el juicio severo de los hombres presentes y de la posteridad olvidaría los inmensos servicios del Libertador del Perú y Chile para no perdonarle si rehúsa algún sacrificio dirigido a terminar su obra. Nada se presenta hoy tan necesario como que las Provincias de la antigua Unión tomen a su cargo auxiliar la Causa de la Independencia atacando a los españoles por el Alto Perú. Este Gobierno escribe al de Buenos Aires el oficio de que incluye a Usted copia. Reproduce lo mismo a los Gobernadores de Cuyo, Córdoba, Tucumán y Sala, y hallándose Usted en camino para Buenos Aires tenemos la más lisonjera esperanza del buen resultado de esta propuesta si Usted se encarga de dirigirla y sostenerla. Oficio del Ministerio de Estado y Relaciones Exteriores a San Martín, Santiago de Chile 4/3. (1,T19,17)

Ohiggins y su posible destierro en Inglaterra, Ramón Freire es Director Supremo

Recibo los parabienes por mi separación del Gobierno como la mejor prueba de la amistad. Sí, mi amigo, tantos años de lucha demandaban descanso y tiempo para atender a la propia conservación amenazada del modo más alarmante. No puedo contar con otros fondos que Montalbán (Quinta en el Valle de Cañete a 150 km al sur de Lima) y con que la generosidad del Gobierno del Perú y de mi mejor amigo habían recomensado mis servicios, pero aun este único recurso vacila, y los desaires y arrestos que he sufrido después de haber dejado la dirección de Chile me prueban lo que, en adelante, deberé esperar de mi Patria. Ha sido suspendido el arresto que sufrí en este puerto sin otra satisfacción que negarme hasta el presente el permiso que he pedido para pasar a países extranjeros. Inglaterra será el país de mi residencia si, como es justo, se me concede permiso. Recupere Usted del todo su salud y sea cual fuese mi destino siempre y hasta la muerte será su amigo eterno. Carta de Ohiggins a San Martín, Valparaíso 5/2. (1,T19,18)

Urdininea y Paz en Sumampa marchan al Alto Perú

La División de Dragones de San Juan se halla algún tiempo en este paraje, no ha podido pasar adelante por la falta de recursos, pero dentro de 6 días se moverá sobre Cachi. Yo, y mi segundo, coronel José María Paz, protestamos a Usted no desistir de nuestro empeño hasta concluir la destrucción del enemigo para ver libre y arreglada nuestra Patria. Carta de Urdininea a San Martín, Sumampa 9/3. (1,T19,21)

San Martín confirma que no volverá a Perú, Guido renuncia a su cargo en Lima

El largo período de 10 años de revolución y el conocimiento de los hombres que éste suministra me había hecho adquirir un estoicísmo ajeno a mi carácter; pero su carta del 9 me ha hecho conocer que mi alma es la misma con la que empecé la revolución; tal ha sido la impresión que me ha causado el contraste de Moquehua y la idea de la muerte de mis antiguos compañeros. Conozco los males que pueden sobrevenir al Perú; conozco como Usted dice la influencia que debe haber causado en Lima un contraste de esta naturaleza, pero no está en mis alcances el que yo los pueda remediar. Por otra parte ¿ cómo y de qué modo me presentaría en ésa sin ser llamado por el gobierno ? Y aun en esta caso el estado de mi salud no me lo permitiría sin exponerme a un peligro próximo; pero seamos claros, mi amigo, ¿ podrá presentarse el general San Martín en un país donde ha sido tratado con menos consideración que lo han hecho los mismos enemigos y sin que haya habido un solo habitante capaz de dar la cara en su defensa ? En este momento no soy dueño de mi y no puedo conformarme con la idea de que un hombre que ha dispuesto de la suerte de Estados opulentos se vea reducido a 31.000 pesos de capital... ¡ tachado de ladrón! ¡ Cuánto siento le tome de lleno esta trinquetada ! Hubiera deseado verlo tranquilo y establecido en ésta, lugar donde se goza de paz; asi es que hace 5 días había contratado tomar 60 cuadras muy cerca de mis terrenos con el objeto de que le sirvieran a Usted o a otro cualquier amigos; sobre esto puede Usted avisarme para adjudicársela en la inteligencia de que ya están labradas. Carta de San Martín a Guido, Mendoza 11/3. (1,T20,83)

San Martín emite un poder a Salvador Iglesias

Siéndole imprecindible el cobro de los sueldos que hasta el presente tiene devengados y en lo sucesivo devengará como tal Generalísimo en el Estado y República de Lima, le es igualmente inevitablemente en constituir un apoderado para el expresado fin y poniéndolo en ejecución, confiere todo su poder al sargento mayor de caballería Salvador Iglesias, residente en la expresada capital de Lima. Son testigos: Pedro José Doncel, Tomás Pacheco y Clemente Cárdenas; certificado por el escribano José Manuel Pacheco, Mendoza 20/3. (X,EI,P187,37)

San Martín quiere vender en Chile, Guido quiere comprar en Mendoza

En la última de Usted del 11 de marzo me dice haber contratado tomar 60 cuadras muy cerca de sus terrenos con el objeto de que sirviesen en el concepto de que ya están labradas. Este aviso ha llegado cuando yo pensaba buscar quien se hiciera cargo de comprarme y cuidar 100 cuadras de terreno en Mendoza, de suerte de que al recibo de esta carta no hubiese Usted adjudicado ya las otras 60 cuadras, le agradecería infinitamente me las transmitiese, librando su importe contra D.O. Lilyessalk en Santiago de Chile a quien con esta fecha prevenga cubra la letra de Usted sobre el particular. Carta de Guido a San Martín, Chorrillos (20 km al sur de Lima) 7/4. (1,T19,31)

Ante mi el Escribano y testigos: el Excelentísimo Señor General José de San Martín residente en esta Ciudad, que teniendo que liquidar y cancelar las cuentas que tiene pendientes en el Reino de Chile con Nicolás Peña, quien reside en aquella Ciudad, procedentes de la administración que dicho Peña ha tenido en la Hacienda de chacra llamada la Chilena, la que está a 2,5 leguas de la ciudad de Santiago de Chile así de la parte del Naciente (Este), cuya propiedad pertenece al otorgante, como así mismo arrendar o vender dicha Hacienda o lo que hallase por más conveniente según las intenciones privadas que al efecto daré, y no pudiendo por sí el otorgante apersonarse en dicha Capital por las atenciones que actualmente tiene se ve en la necesidad de dar y conferir su poder a una persona de su satisfacción y confianza, y que teniendo en Pedro Advincula Moyano, vecino de esta Ciudad y próximo a seguir viaje para la República de Chile, otorga por la presente que da y confiere todo su poder cumplido y tan bastante como por dicho se requiere. Firma: San Martín. Son testigos: Francisco Cárdenas y José Santander; certificado por el escribano Justo Moreno, Mendoza 2/4. (X,EI,P186,32)

Arenales renuncia al Ejército Libertador del Perú

El señor Peña me ha dicho que escribió a Usted mi arribo a Valparaíso y supongo le daría alguna idea dl motivo de mi separación del Ejército, del que desafortunadamente estuve encargado. Aquí el nuevo gobernante Freire se empeña en que me quede. Carta de Arenales a San Martín, Santiago de Chile 9/4. (1,T19,33)

Dije a Usted que pensaba irme derecho por San Juan, pero nuestra íntima amistad y el deseo de dar a Usted un abrazo me hacen violento el dejar de verlo. No Freire, pero muchos vecinos se empeñan en rehusar darme el pasaporte, creo conseguiré pasar y si puedo tocaré en Mendoza donde podamos vernos. Carta de Arenales a San Martín, Santiago de Chile 16/4. (1,T19,40)

Ohiggins cerca de definir su destierro, felicita al Director Supremo Freire

Después de 20 días de encierro en la obscuridad, por inflamación alarmante de la vista, puedo hoy gozar de la luz para tener la complacencia de saludarlo y saludar a mi patria por la acertada elección que se ha hecho en V, para que la dirija en el caos de dificultades en que se encuentra. Carta de Ohiggins a Ramón Freire, Valparaíso 2/4. (4,T31,59)

No me es dado ya tomar más parte. Un pago igual al que recibieron de sus Repúblicas Aníbal y Scipion, me ha separado del mando. Nada me ha afectado, sino el modo, porque yo deseaba descargarme de él. Mi vida ha sido más gustosa en el campo del honor; mi corazón no es amasado para mecerse en la política insidiosa con que puede sostenerse un Estado enfermo de envidia, de partidos y facciones. Carta de Ohiggins a Simón Bolivar, Valparaíso 10/4. (4,T31,60)

Tengo entendido que el día que me separé del mando salió una partida de tropa para el Portillo, pero no puedo persuadirme fuese con el objeto de interceptar a Usted su marcha a Mendoza. No encuentro otro partido que hacer mi viaje por México y si se proporciona un país barato para vivir como se pueda hasta que la suerte sea más propicia, indudablemente que si al Perú le cabe la que los esfuerzos de Usted le dejó gozando, me sobrarán recursos en las haciendas que la generosidad y la amistad señaló a mis servicios. Suplico a Usted reserve la especie del viaje de México, pues que no habiendo obtenido mi licencia y pudiéndome pagar algunas cantidades que se me adeudan, pasaría a Iglaterra y ojalá entonces hiciera Usted lo mismo para descansar siquiera en la amistad. Antes de 8 días podré decir a Usted decisivamente la resolución que tome sobre mi futuro destino. Carta de Ohiggins a San Martín, Valparaíso 10/4. (1,T19,36)

El Gobierno del Perú llama a Bolivar

Yo me permitiré en esta espera de anuncia a SE la llegada del general Simón Bolivar, llamado por el Perú a consecuencia del revés de Moquehua. Comienzan a arribar a este puerto los primeros buques cargados de tropa que él había ofrecido sin esperar el pedido del Perú. Hay 10.000 hombres que se proponen hacerlos venir aquí, 6.000 comenzaron a desembarcar y los 4.000 restantes vendrán a reunirse junto a sus hermanos cuando hayan abandonado sus guarniciones para ponerse en marcha. Si SE desciende con las fuerzas que la madre patria puede proveer; yo no dudo que la segunda entrevista de dos grandes hombres no sea en el Cuzco después de haber liberado el país ocupado por una horda de bandidos. Riva Aguero hasta el momento mantiene y sostiene de la mejor manera las riendas del Gobierno político y las fuerza militares esperan para moverse a Bolivar; la escuadra de Chile, Colombia y Perú, no son más que una bajo las órdenes del contralmirante Guise. Carta de Salvador Soyer a San Martín, Callao 10/4. (1,T19,37)

San Martín no consigue comprador de su chacra en Chile

Usted sabe vendí a Peña, a 4 años de plazo, la chacra que tengo en esa, como no había traído de Lima más que 120 onzas contando con este dinero, giré contra su apoderado Walker 2.000 pesos y ni siquiera me contesta. Trato últimamente de redondear mis asuntos para marchar a Buenos Aires y pagar algunos gastos en ésta y le digo para cuándo podré girar contra él los 22.000 pesos que me restaba del valor de la chacra, su contestación ha sido, serle imposible pagarmepor el estado de sus negocios, y que sólo me devolverá la chacra bajo las transacciones del honor y la amistad. Calcule Usted el trastorno de que esto se me sigue, la imposibilidad de poder realizar en el estado en que se halla Chile la venta de esta finca; así es que para no perderla mando un sujeto a ésa para que la reciba, y ver si puede venderla en lo que quieran dar. Ah, la salud sigue regular, aunque la fatiga no se me quiere quitar, pero ésta no aumenta. Carta de San Martín a Ohiggins, Mendoza 10/4. (1,T20,265)

Tomás Guido y la biografía de San Martín

Si sus apuntes pasan a mis manos los uniré a los míos, los conservaré como un tesoro, y algún día si un hado infeliz no trastorna mis miras, presentaré aunque con pluma débil, la vida de un americano del sur... Escribiendo a Usted no me es permitido otro nombre... Talentos superiores se emplearán en pulir mis tareas y la posteridad recibirá lecciones importantes. Ofrezca Usted, amigo mío, este último triubto a la Patria. Carta de Guido a San Martín, Chorrillos 11/4. (1,T19,39)

San Martín y su receta para el dolor de muelas

Raíz de pelitre............. 1/2 (Margarita)
Simiente linaza............ 1/2 (Semilla de Lino)
Dormideras.................. 1/2 (Amapola o Planta del Opio)
Cáscara de Granada.... (Fruta)
Romero....................... (Yerba silvestre)

Todo pisado y puesto a cocer en dos botellas de vino blanco y dejarlo cocer hasta que medie media se aparta, se cuela y se guarda en botellas, 3 o 4 veces al día se toman buches.

Polvo de dientes

Raíz de romera hecha carbón, apagado en vinagre y pasado por tamiz.

Receta de San Martín a Bernardo Vera, Mendoza 28/4. (1,T19,40)

San Martín en problema con su chacra en Chile

Jamás me persuadí tener que pleitar por intereses y mucho menos que esta litis fuera con mi amigo Nicolás Rodriguez Peña; los documentos que presentará Usted a mi apoderado Pedro Nuñez, sargento mayor de estas milicias, lo pondrán al corriente. Carta de San Martín a Bernardo Vera, Mendoza 28/4. (1,T19,40)

San Martín vive en una casa prestada

Estoy viviendo de prestado (casa en Ciudad de Mendoza), pero tengo 12 leguas de ésta (Barriales) una chacra llena de comodidades para su familia, de la que pueden disponer como gusten. Carta de San Martín a Ohiggins, Mendoza 28/4. (1,T20,268)

Freire convoca un próximo Congreso para dejar el mando de Chile

Protesto a Usted con toda la franqueza de nuestra amistad, que éste es el sacrificio más grande que puedo tributar a mi Patria (Chile), siéndome sólo soportable la esperanza de que puedo dejar el mando a la reunión del Congreso. Sobre ello trabajo con calor, y muy en breve se expedirá la convocatoria. Carta de Freire a San Martín, Santiago de Chile 29/4. (1,T19,41)

San Martín en viaje a Buenos Aires a ver a Remedios es intimado a regresar

¿Ignora Usted por ventura que en el año 23 cuando por ceder a las instancias de mi mujer a venir a darle el último adiós, resolví en mayo venir a Buenos Aires, se apostaron partidas en el camino para prenderme como a un facineroso, lo que no realizaron por el piadoso aviso que se me dio por un individuo de la misma administración?. Carta de San Martín a Guido. (Montevideo 6/4/1829;1,T20,118)

San Martín emite un poder a Agustín Bardel

Por el presente otorga y confiere poder amplio y general a Agustín Bardel, vecino de esta Ciudad, y hoy residente en la República de Chile, para que a su nombre y representando a su misma persona se presente ante el Excelentísimo Director Supremo y demás autoridades de aquella República, pidiendo y reclamando todas las gracias y justicias que a su derecho corresponden para que se encargue del manejo y arreglo de todos los negocios que tiene allí. Son testigos del acto: Pedro José Doncel, Clemente Cárdenas y Tomás Pacheco. Firmado por: San Martín y el escribano José Manuel Pacheco, Mendoza 28/5. (X,EI,P187,78)

San Martín en juicio con Rodriguez Peña por su chacra en Chile

Me es muy sensible no poder servir a quien estimo tanto la primera vez que me ocupa. No tengo práctica en el derecho y no debo exponer los intereses de quien recibo tanta confianza. Además, atendiendo sólo a la escritura o contrato, hallo, pues, que Peña puso 8.000 pesos y su industria, cuando más le corresponden 2 cosechas o la mitad de los productos de 4 años. Yo no alcanza cómo Peña tuviese la finca no en arrendamiento, no comprada sin que San Martín perciba utilidad alguna de dicha finca, aun al menos el arrendamiento. ¿ Qué necesidad tenía dicho señor de 8.000 pesos ? Sin embargo, el contrato nada dice sobre el percibimiento de productos, ni sobre el título con que debía percibirlo Peña. Habla dicho señor de cantidad de pesos de Cambell, pero yo no puedo decir sobre esto y otras cosas sin instrucciones. En fin, yo sé que entre el otro árbitro y yo no puede haber ajustes, y siendo todos los 3 señores Peña, el general y el árbitro mis amigos, ni soy imparcial, ni me atrevo a decidir, y más estando distante San Martín. Por lo mismo rehúso el nombramiento de tercero en discordia. Carta de Camilo Henriquez a San Martín, Santiago de Chile 14/5. (1,T19,42)

Luzuriaga dona su hacienda al Colegio de Mendoza

Ante mi el Escribano Público y testigos: los Señores del Muy Ilustre Cabildo, Justicia y Regimiento de esta Ciudad, me pasaron un boleto cuyo tenor a la letra es como sigue. El escribano interino Justo Moreno procede a extender en su registro de instrumentos públicos, escritura de venta en favor de Juan Agustín Moyano, de la Hacienda que donó Toribio Luzuriaga al Colegio de esta Ciudad, la que se ubica en la Villa Nueva de los Barriales, cuya venta la hace el Ilustre Cabildo, como patrón del referido Colegio, con todo lo en ella plantado y edificado en cantidad de 650 $ a serlo reducible al 5% anual; la que se compone de 100 cuadras de terreno en la forma siguiente: tiene de frente al camino principal 2 cuadras, y de fondo al Norte tiene este frente 20 cuadras y a las 8 cuadras 70 varas, contando del frente al camino principal hacia el Norte forma un martillo, cuyo martillo de 5 cuadras 70 varas al Poniente, y de fondo al Norte 11 cuadras 80 varas, que están corridas con las 2 cuadras del frente principal que giran para el fondo de Sud a Norte, componen 7 cuadras 70 varas de Naciente a Poniente donde está formado el martillo, que todas hacen el número de 100 cuadras; y linda dicha Hacienda por el Sud con el camino principal, y el martillo de 5 cuadras 70 varas que gira al Poniente, linda con terrenos de la Villa por el Naciente con calle de por medio y terrenos de Juan Antonio Moyano y Trinidad Ponce, y por el Norte con calle de por medio y terrenos de Antonia Corbalán y Fermín Galigniana, y por el Poniente con terrenos de María Jesús Esquibel; añadiendo Usted las demás cláusulas de estilo para su mejor seguridad y fineza. Mendoza, 7/5: José Clemente Benegas, Manuel Lemos, Manuel Silva Buenaventura Aragón, Ignacio Videla, José Videla, Domingo Justo Silva. Bajo cuyas prevenciones del preincerto boleto dijeron los referidos Señores del Ilustre Cabildo, que por el tenor de la presente otorgan que venden a Juan Agustín Moyano de este vecindario la referida Hacienda. Son testigos: Francisco Cárdenas y Silvestre Videla. Certificado por el escribano Justo Moreno, Mendoza 31/5. (X,P186,59)

San Martín y el Senado de Chile enfrentados por falso testimonio

Es en mi poder un impreso publicado en esa Capital el que se encabeza del modo siguiente: "El Ministro Plenipotenciario de Chile, cerca del Gobierno del Perú, cree conveniente publicar el siguiente documento. Instrucciones que debe observar el Ejército Libertador del Perú". Siguen las instrucciones en 25 artículos firmadas por los señores que componían el 1er Senado de Chile de 23 de junio de 1820. El que suscribe protesta no haber recibido ni éstas ni de ningún otro género del Gobierno de Chile, ni del de las Provincias Unidas, a menos de no tenerse por tales las orden de marchar con 3.800 bravos de ambos Estados a libertar a sus hermanos del Perú. Si Usted se sirve insertar en su periódico esta exposición se lo agradeceré su atento servidor. "De los Gobiernos de Chile y Provincias Unidas marchan con 3.800 bravos de ambos Estados a libertar a sus hermanos del Perú". Es la única instrucción que se me ha dado. Carta de San Martín al Editor del Correo Mercantil de la Capital del Perú, Mendoza 1/6. (1,T19,43)

Iglesias recupera pertenencias de San Martín, Enrique Martínez renuncia al Ejército

He traído conmigo el resto del ramillete que Usted me ha encargado; las flechas de los indios, un juego de café, todas las bandejas que han dejado que son 14, el baúl del resto de los libros, 12 panes de azúcar de la fina, y el espejo que quedó en la Magdalena. Todo está a disposición de Usted cuando me lo ordene. He sabido en esta por Borgoño que Enrique Martínez hizo su renuncia de general del Ejército, que en Lima aun seguirán los partidos, que aguardaban a Bolivar con el resto del Ejército hasta el número de 6.000 hombres. Carta de Salvador Iglesias a San Martín, Santiago de Chile 2/6. (1,T19,45)

San Martín disgustado con Alvarez Condarco

Tuve noticia de Condarco todo el contenido de su carta se reduce a justificarse de sus compromisos con el buque de vapor, sólo la existencia de este malvado podía pagar haber comprometido a dos hombres de bien (San Martín y Ohiggins). Sí, yo protesto a Usted arrancársela. Carta de San Martín a Ohiggins, Mendoza 10/6. (1,T20,269)

La Villa Nueva de Barriales es Villa Nueva de San Martín

A solicitud de los vecinos de la Villa Nueva en los Barriales que el Gobierno se complace en denominarla Villa Nueva de San Martín, para que se le dé la forma permanente que deba tener, se da comisión a los señores juez subdelegado de ella, Agustín y sargento mayor Pedro Advíncula Moyano, a efecto de que levanten un plancito de su delineación y lo presenten al Gobierno para aprovecharlo. Este será necesariamente el resultado si, como se previene a los encargados, consultan los conocimientos y buen gusto de quien tomar el nombre la fundación, y si ella merece en esta parte la protección de la ilustre persona que se lo da. Carta de Pedro Molina (Gobernador de Mendoza) a San Martín, Mendoza 3/6. (1,T19,46)

Con el mayor placer contribuiré con mis cortos conocimientos a la delineación de la Villa Nueva que VS me honra denominándola de San Martín. Nadie más interesado en su fomento que el mismo que la ha destinado a pasar el resto de sus días. Quiera el destino que cada momento se me proporcionen ocaciones de manifestar a este honorable pueblo mi eterna gratitud. Sírvase VS a admitir mi más alta consideración y agradecimiento. Carta de San Martín a Pedro Molina, Mendoza 4/6. (X,C286,D143)

San Martín y su Molino

Que habiendo observado el buen comportamiento que al parecer guardara su sirviente Pedro Cabrera en la ciudad de Lima a fin de estimularlo más a él se hizo un documento de donación del Molino de propiedad de SE (San Martín); y que se ubica en el paraje de Los Barriales de esta ciudad; bajo la condición que por espacio de 1 año había de cuidar con la mayor hombría de bien del manejo de una casa que SE tiene en Lima, la que le entregó adherezada y dejó a su cuidado; pero que siendo avisado desde la misma ciudad con toda certidumbre que el expresado Cabrera en vez de agradecer el beneficio insinuado, no sólo no lo ha hecho sino que ha olvidado enteramente de todo y de la condición arriba expresada ha mudado de comportamiento entregándose a toda clase de vicios, como son el de la embriaguez, amancebamiento y otros, y que en lugar de cuidar y atender la casa que le quedó encargada ha dilapidado varias especies de intereses que en ella se hallaba. Otorga que revoca e invalidad por las insinuadas causas la referida donación y da por cancelada la escritura que formalizó. Mendoza 16/6. (1,T19,47. El 14/6 San Martín se presenta ante el escribano José Manuel Pacheco y le retira la propiedad a Cabrera;X,EI,P187,86)

El Ejército Español al mando de Canterac ocupa Lima

El Ejército Español en número de 7.000 hombres descendió en Jauja y ha ocupado a Lima el 19 del corriente. Canterac intimó a la Capital que sería incendiada en el término de 24 hs si no se le entregaban 300.000 pesos, el valor de 3.000 fusiles, 40.000 varas de paño y 40.000 varas de brin. Nuestro Ejército en la fuerza de 6.000 hombres se ha replegado a estas fortalezas y el de los enemigos se ha situado al Norte en la legua apoyando su izquierda en el cerro en la vigía. Hasta ahora no se ha disparado un tiro de fusil. El Congreso (cuyo Presidente Pedemonte, con otros miembros quedaron en Lima para servir a Canterac) se reunió en este lugar de confusión y ha depuesto a Riva Aguero (Presidente), depositando el absoluto mando militar en el general Sucre y el político provisionalmente en Valdivieso. Una diputación en el mismo Congreso salió en busca del general Bolivar. Carta de Guido a San Martín, Callao 24/6. (1,T19,48)

San Martín recibe pocas noticias de Remedios

Al día siguiente de mi llegada estuve en casa de Remedios, a quien no pude ver ni he visto en 6 o 7 veces que he estado para saber de su salud, sintiendo en mi corazón no poder anunciar a Usted nada favorable. He conocido a la chiquita (Merceditas) con placer por ser hija de Usted, de quien no puede negarse por su parecer, es muy graciosa y bonita, ella me mira como el amigo de su papá y compañero, y siempre que voy viene a buscarme. Carta de Blanco (Encalada) a San Martín, Buenos Aires 30/6. (1,T19,51)

Rivadavia y el Ejército de los Andes

Decreto. Artículo Único. Queda el gobierno autorizado para admitir y declarar por parte del ejército permanente de la provincia a la división que bajo la denominación de los Andes auxilia actualmente al estado del Perú. Rivadavia, Buenos Aires 4/7. (10,T12,N34,396)

Urdininea en Tucumán retrocede a Santiago del Estero

La última carta de Usted que me entregó monseñor Dara ha hecho existir la División de Operaciones del Perú encargada a mi cuidado. Marcho mañana para la provincia de Santiago a buscar caballos y la primera remesa de vestuarios. Carta de Urdininea a San Martín, Tucumán 12/7. (1,T19,59)

San Martín soluciona un litigo en Barriales

Ante mi el Escribano Público y testigos; comparece presente José Ahumada vecino de la Villa Nueva de los Barriales, con un boleto cuyo tenor a la letra es como sigue: Sírvase extender una escritura de la tierra que ocupa la acequia del molino de el Excelentísimo Señor José de San Martín cambio que le hago a dicho Señor por un cerco que se obliga hacerme en mi pertenencia en todo el largo que ocupa dicha acequia, y para que conste lo firmo en el Rodeo de Moyano a 8/7 a ruego de José Ahumada Laureano Godoy. Bajo cuyas prevenciones contenidas en el preinserto boleto dijo el referido José Ahumada que otorga por el tenor de la presente que cede al Excelentísimo Señor Don José de San Martín todo el terreno que es de la propiedad del otorgante que ocupa la acequia que surte de agua el Molino de dicho Señor en la Villa Nueva como queda hecha relación en el preinsertado boleto; y en virtud de que dicho Señor General queda allanado a todo cuanto queda expresado firma también esta escritura; y a que habrá por firme y valedero todo cuanto queda relacionado en esta ecritura, obligó su persona y bienes habidos y por haber el principal otorgante añadiéndole fuerza a fuerza y contrato a contrato, en cuya virtud dio poder a las justicias que puedan y deban en esta causa conocer para que a su cumplimiento lo competan y apremien por todo rigor de derecho, vía breve y ejecutiva. Y como por sentencia definitiva de juez competente pasada en autoridad de cosa juzgada y consentida que por tal lo recibe, sobre que renunció todas las leyes, fueros y privilegios a su favor y defensa general que lo prohibe y derecho de ella; en cuyo testimonio el otorgante a quien yo el presente Escribano doy fe conozco hace 20 años, otorgó y no firmó porque dijo no sabía, lo hizo a su ruego uno de los testigos que lo fueron presentes: Pedro Advíncula Moyano y Francisco Cárdenas, de que doy fe. Firmado por San Martín y certificado por el escribano Justo Moreno, Mendoza 14/7. (X,P186,79)

Ohiggins deja Chile y parte a Lima

Mañana parto para Lima con mi familia a buscarme un conducto seguro para Inglaterra. Luego que llegue al Callao escribiré a Usted más largamente y diré la ruta que resuelva tomar. Recibi su apreciable del 10 de junio y como mi equipaje está a bordo no puedo tener la lupa para entenderle y contestarle. He quedado con el amigo Solar, que se halla aquí, en que él entregará a Usted los 12 cajones de cigarros habanos y la mitad de otra. Reciba Usted un millón de expresiones de madre y Rosita. Carta de Ohiggins a San Martín, Valparaíso 15/7. (1,T19,60 y 4,T8,159)

El Gobierno Peruano no le permite salir a Enrique Martinez

Martínez solicita permiso de este Gobierno para pasar con el cuadro de sus oficiales y pequeño resto del ejército de Buenos Aires y se me asegura le es negado, temiendo que tal vez que avivase por donde pasa. Carta de Rivadeneira a San Martín, Santiago de Chile 26/7. (1,T19,63)

San Martín dona tierras a Tomás Guido

José de San Martín residente en ésta y digo: que por el mucho afecto que le profeso al general de brigada Tomás Guido, de 50 cuadras de propiedad de tierra de la propiedad del otorgante las que citan en la Villa Nueva de San Martín, con todas sus entradas y salidas, aguas, usos, costumbres, derechos y servidumbres cuantas dichas tierras tengan y haber deban así de hecho, como así de derecho, libres de censo, hipoteca, tributo, memoria, capellanía, vínculo, Patronato, señorío, ni otra obigación especial, ni general; y por la misma razón desde hoy en adelante y para siempre se desapodera el otorgante se desapodera el otorgante, desiste y aparta de si el derecho de propiedad y señorío que a dichas tierras tiene y le pertenece porque todo lo transfiere en el mencionado general Tomás Guido. Ante mi Justo Moreno (Escribano Público), Testigos: José Santander y Alejandro Castillo, Mendoza 29/7. Nota: Agregado con letra de Guido y Spano. La propiedad a que se refiere el documento anterior ha sido conservada por la familia del general Guido (1,T19,67)

Ante mi el Escribano Público y testigos; el Excelentísimo Señor General José de San Martín residente en ésta, dijo: que por el mucho afecto que le profesa al General Tomás Guido como asímismo la buena armonía con que se ha conducido en todo el tiempo que han sido compañeros de armas y deseando en algún modo manifestarle el buen afecto que le profesa de su libre y espontánea voluntad, sin apremio, dolo, ni fuerza alguna, cierto y sabedor de lo que en este caso le pertenece, otorga en la forma que mejor haga lugar en derecho, que hace gracia y donación pura, mera, perfecta e irrevocable, de las que el derecho llama intervivos y partes presentes al referido Tomás Guido, sus descendientes y sucesores, de 50 cuadras de tierra de propiedad del otorgante, las que están en la Villa Nueva de San Martín. Firmado por San Martín y certificado por el escribano Justo Moreno, Mendoza 29/7. (X,P186,84)

Ohiggins llega al Callao y se aloja en la casa de San Martín

El ciudadano Bernardo Ohiggins tiene la honrosa complacencia de tributar inmediatamente el homenaje de su más profundo respeto a SE el señor Presidente de la República del Perú y suplicarle con la protesta de su mayor consideración que se digne concederle el permiso suficiente para residir de paso en el territorio del Perú mientras se transporta a Panamá. Carta de Ohiggins al Presidente del Perú, a bordo de la corbeta de S.M.B. Fly al ancla en el Callao 25/7. (4,T31,65. El viaje de Valparaiso al Callao duró 7 días: idem,67)

Las cartas para el Correo Mercantil ya están entregadas, ellas saldrán en el primer papel que salga, pues están empezando a componer las imprentas que se han podido salvar con la entrada de los enemigos en esta Capital. La moneda la dejaron inservible (Casa de la Moneda). La Magdalena y la Casa de Jesús María; no han dejado nada en ellas absolutamente; doña Fermina (tía de Tomás Guido) pudo recorger y guardar antes de la entrada de aquéllos las 2 mesas con espejos, la alfombra de la sala y varias frioleras. Bernardo Ohiggins ha llegado al Callao anteayer con su familia, irá a vivir a la Casa de Jesús María con conocimiento del Gobierno que actualmente es Torre Tagle (Presidente Interino del Perú), este sé que se halla sentido con Usted porque no le ha escrito Usted ninguna carta. ¡ Qué clamor hay en esta ciudad por la falta de Usted ! La mayor parte lo desean con ansia, mi venida les hace consentir que Usted puede regresar a ésta algún día y mucho más en las presentes circunstancias. Deseo saber si yo debo hacerme cargo de la Casa de Jesús María, pues está desocupada, y yo tengo las llaves de ella y en este caso, que debo hacer. Carta de Salvador Iglesias a San Martín, Lima 28/7. (1,T19,65)

Había pensado pasar con mi familia en La Magdalena, pero habiéndola dejado el enemigo sin puertas, ventanas y muy mal tratada, nos hemos venido a ésta, su casa en la que ha vivido (1,T19,86), y gastó sus buenos pesos en componerla y en fornituras y muebles, que en la mayor parte han sido robados con excepción de algunas sillas y mesas, aunque Iglesias trabaja para recogerlos de donde se encuentran. Me aseguran se reúnen infinidad de firmas solicitando la venida de Usted, me dicen pasan de 2.000. Se encuentra aquí el general Valdés al mando de algunas tropas de Colombia, que con las del Río de la Plata que manda Martínez (Enrique), componen un cuerpo de 2.500 hombres, y podrían hacer servicios importantes si inmediatamente se moviesen a incomodar al enemigo por el interior. Ya habrá mandado a Usted el amigo Solar la mitad de los cajones de cigarros, según quedé de acuerdo con él antes de mi partida de Valparaíso, debiendo remitirme a mi la otra mitad. El general Bolivar ha derrotado a los Partujos el 12 del pasado (Batalla de Ibarra 17/7). Carta de Ohiggins a San Martín, Lima 9/8. (1,T19,68)

San Martín invita a Guido a venir a Mendoza

Contesto a su carta del 21 de mayo con el acuse de recibo de recibo de Valdivieso y copia de la contestacion a Luna Pizarro (Presidente del Congreso del Perú) a quien escribo en este correo dándole las gracias por los favores que me ha dispensado. Ha hecho Usted muy bien en abrir el pliego que iba para Iglesias, para Usted no puedo tener nada reservado. Ignorando el paso que había dado Usted en mi favor sobre la casa de La Magdalena, di orden a Iglesias para que la pusiese a disposición del Gobierno. Usted se entenderá con él sobre este particular. Es una negra impostura la de haber yo asegurado que Usted y Alvarado (el general) habían tenido parte en la deposición de Monteagudo. En los primeros días de mi convalecencia me habló Ohiggins sobre este particular, diciéndome se había escrito que Alvarado tenía la principal parte en aquel suceso. Le contesté que no me constaba, pero sí creía podía haberlo evitado (no por consideración a Monteagudo, pero por las consecuencias) respecto tenía la fuerza en su mano. Nada se habló de Usted ni yo he estado en Chile en ninguna reunión, pues a los 3 días de mi llegada me ataco mi enfermedad y no salí del conventillo después más que para venir a ésta (Mendoza). Arcos me hablo en aquel tiempo sobre esto mismo añadiéndome se escribía de Lima que Usted era uno de los que aseguraba había tenido parte en el suceso; le contesté no era cierto, y que a pesar de la fuerte enemistad de ambos había sabido con placer la conducta que había observado. No veo a Chile en disposición de que Usted permanezca en él. Si Usted quiere venirse mi casa en la Villa Nueva (de San Martín) es bastante cómoda para la familia, pues en esta vivo de prestado (casa prestada en Ciudad de Mendoza). Carta de San Martín a Guido, Mendoza 31/7. (1,T20,86-87)

Tomás Guido compra más tierras en Barriales

Agradezco a Usted la compra que ha practicado de 100 cuadras de terreno para mí. Más, hace 1 mes que tuve contestación de Olof Lilyesallk en Santiago de Chile avisándome estar pronto a cubrir la letra que Usted girase por el valor de aquellas tierras. Carta de Guido a San Martín, Lima 17/8. (1,T19,70)

San Martín y sus propiedades en Perú

Yo contaba con que la casa de La Magdalena habría sido para esta digna familia un cuerpo de reserva para hacer frente a los contrastes de la revolución. Consiguiente a la recomendación con que dejó Usted a mi tía la chacra, se dio el paso de que he informado a Usted de consultar al Gobierno la propiedad de la finca para que en caso de que se considerase del general San Martín se expediesen los títulos. Riva Agüero pasó al Congreso este asunto con la más esforzada recomendación, mediando para que la resolución no se ciña a la finca solamente. El Congreso nombró una comisión para que prestase dictamen, y en este estado se aproximaron los enemigos y todo quedó suspendido. Carta de Guido a San Martín, Lima 17/8. (1,T19,71)

Remedios muere en Buenos Aires, San Martín emite un poder a Manuel Escalada

En tres de agosto de mil ochocientos y veinte y tres murió María Remedios Escalada, natural de esta Ciudad, de 25 años de edad, casada con el General Don José de San Martín, habiendo recibido todos los Sacramentos, sepultóse en el Cementerio del Norte; y por verdad lo firmo: Doctor Julián Segundo de Agüero. Acta de Defunción, Buenos Aires 3/8. (1,T1,411)

Temo que al llegar ésta ya no exista Remedios, según la carta de Usted y otras que he visto confirmando su mal estado, es bien doloroso que hubiese desaparecido tan temprano. Usted me indica que en tal caso pasará a Buenos Aires a buscar a la hijita, más con la franqueza que Usted me permite yo opinaría demorarse su viaje porque no habiendo partido a la Capital inmediatamente a su arribo a Mendoza creo sería prudente dar algún tiempo más, sin perjuicio de que venga Merceditas al lado de Madame Ruiz (María Josefa Morales de los Ríos), cuyo consejo y respetos ciertamente le serán muy útiles. Carta de Guido a San Martín, Lima 17/8. (1,T19,71)

Ya sabíamos el ruinoso estado de salud de misia doña Remedios, así vienen los golpes a los hombres que sus virtudes debían alejar, pero somos mortales y es preciso sufrir. ¡ Qué verdad es la que Usted dice de que sabe cómo se encuentran mujeres en abundancia pero muy difícil hallar una amiga !. Carta de José Ribadeneira a San Martín, Santiago de Chile 24/8. (1,T19,74)

Que por cuanto tiene que apersonarse en la Capital de Buenos Aires a fin de percibir los bienes que por fallecimiento de su esposa María Remedio Escalada le corresponden al otorgante, como asímismo asegurar los que corresponden a su hija legítima Mercedes de San Martín, y no pudiendo por ahora hacerse presente en aquella Capital, ha determinado recomendar este asunto a su hermano político el coronel Manuel de Escalada. Firmado por San Martín y el escribano José Manuel Pacheco, Mendoza 29/8. (X,EI,P187,125)

En su apreciable de 20 del último (agosto) me comunica la muerte de su esposa, me es muy sensible haya Usted perdido una amiga irreparable por sus virtudes, y Usted, para sobrellevar un dolor de este tamaño, habrá puesto en ejercicio la moral que inspira una sana filosofía; deseo a Usted conformidad y una tranquilidad digna de sus luces. Carta de José Ribadeneira a San Martín, Santiago de Chile 8/9. (1,T19,87)

Acta de Defunción

Don Antonio Rasore, Cura Rector de la Parroquia de la Catedral al Norte certifica que en el libro 3 de defunciones al folio 189, se halla la siguiente partida: "En tres de agosto de mil ochocientos veinte y tres: murió D. María Remedios Escalada, natural de esta ciudad, de 25 años de edad, casada con el Señor General Don José de San Martín; habiendo recibido todos los Sacramentos; Sepultose en el Cementerio del Norte (Recoleta); y por señal de verdad lo firmo": Concuerda con su original del que doy fe en Buenos Aires a 27/1/1896. Antonio Rasore. (Y,Sucesiones 8380)

San Martín desiste de vender la Hacienda en Uspallata

He sentido mucho si hubiese vendido la hacienda de Uspallata, pues su situación en el camino y en los planos de la cordillera con imagen del Aconcagua la harían más apreciable. Estoy resuelto a hacerle a Usted una visita cuando se abra la cordillera, que la deseo mucho, y entonces daré un paseo a Los Barriales, con eso veo si puedo formar allí un establecimiento para pasar mis últimos días en descanso, y con la satisfacción de estar cerca de Usted, que es lo que quiero y apetezco. Por ahora me hallo aquí destinado a la Guerra de Armas y en la Comisión preparatoria del Ejército Expedicionario. Carta de Luis de la Cruz a San Martín, Santiago de Chile 26/8. (1,T19,78. Pedro Molina compra la Hacienda de Uspallata a fray Manuel Moreira de la Orden de los Predicadores el 6/2/1823 en 1.000 $;X,EI,P187,2)

Ohiggins en Lima, se instala el Congreso en Chile

Ya sabrá usted que el señor don Bernardo se embarcó con su familia para Lima el 18 de julio; llegó al Callao cuando ya el enemigo había dejado la capital; fue bien recibido por los extranjeros y el gobierno que lo ocupaba por delegación de Sucre que había sido nombrado de presidente por los restos del congreso, el marques de Torre Tagle, éste le instaba no se moviese de allí, pues sólo quería dejar la familia, y él marcharse para Panamá.
El 12 de éste se instaló aquí el Congreso. Han salido buenos diputados en la mayor parte según la aptitud de los pueblos. El general Freire salió al día siguiente que fue en el que entregó el mando, sin embargo que se le nombró interinamente para que continuase su salida fue a las dos de la tarde sin que nadie lo supiera; al día siguiente le mandó alcanzar el congreso con la orden que no se alejase y paró en Rancagua, su marcha era con destino a su hacienda en Concepción. A los seis días fue electo en propiedad director, designándole tres años de gobierno.
Desde que entró la junta de gobierno que sucedió a don Bernardo a que se pidiesen reclutas, ya están viniendo; pero se desertan los más y también de los soldados veteranos. No han habido medios que los contengan. Tienen un terror pánico al Perú. Extracto de una carta de Luis de la Cruz a San Martín, Santiago de Chile 26/8. (4,T9,93)

Buenos Aires no presta apoyo a Urdininea

Este Gobierno está resuelto a continuar de todos modos los medios pacíficos y a no tomar parte en la guerra, pero yo pienso dirigirme a los gobiernos de Tucumán y Salta para que, sin perjuicio de la convención, presten sus auxilios a Urdininea para que pueda obrar en combinación con Santa Cruz (Andrés) y asegurar las provincias del Alto Perú. Carta de Blanco Encalada a San Martín, Buenos Aires 29/8. (1,T19,81)

La Convensión celebrada por este Gobierno (4/7 en Buenos Aires) con los diputados de España, debe estimarse por nula y de ningún valor, por cuanto los liberales a esta fecha habrán concluído su carrera; agregándose que había concluído el ministerio que dio a los diputados los poderes, que son bien limitados. Carta de Ambrocio Lezica a San Martín, Buenos Aires 30/8. (1,T19,82)

Enrique Martínez sigue al frente del Ejército de los Andes

Que el general Martínez salió con el Ejército de los Andes a recibirlos, este ejército tiene hoy como 2.000 plazas. Carta de Rivadeneira a San Martín, Santiago de Chile 8/9. (1,T19,88)

San Martín y su opinión sobre la caída de Lima

Contesto a sus cartas de 24 de junio y 19 de julio; nada me ha sorprendido la entrada del enemigo a la Capital, ni su evacuación; lo que si me ha llenado de admiración es el nombramiento de Torre Tagle; Dios proteja al Perú con todo su poder, pues en manos de este hombre no lo aseguro a un 90. Estando escribiendo ésta, llega la noticia de la disolución del Congreso por Riva Agüero. Éste y Tagle, ¡ cómo se avendrán ! Yo creo que todo el poder del Ser Supremo no es suficiente a libertar ese desgraciado país; solo Bolivar, apoyado en la fuerza puede remediarlo. Carta de San Martín a Guido, Mendoza 14/9. (1,T20,88)

Bolivar desembarca en el Callao, entra en Lima y conoce a Ohiggins

Bolivar ha llegado a ésta (Lima) el 2 del presente, el pueblo no ha demostrado en sus vivas mucha alegría. El 4 despachó Bolivar a Galdame donde Riva Agúero, en compañía del coronel Urdañeta, intimándole la remisión de las tropas a ésta que tiene en el Norte y amenazándole que si no lo verifica cargará sobre él y que donde quiera que lo pille lo pasará por las armas. Carta de Salvador Iglesias a San Martín, Lima 8/9. (1,T19,86)

El 1 del corriente llegó del Callao el general Bolivar, desde 15 días antes, como habrá visto Usted en los papeles públicos, el Congreso se había vuelto a reunir en la Capital con la mayor parte de sus miembros, y después de proscripto Riva Aguero, Torre Tagle había sido nombrado por aclamación Presidente de la República, así, el general Bolivar halló establecido constitucionalmente el Gobierno del Perú y en ejercicio la representación nacional del Perú. El general Ohiggins ha merecido las mayores distinciones del general Bolivar. Ayer se dio a este señor un gran convite en el palacio, y en el primer brindis hizo a Usted y a Ohiggins la justicia que sería crueldad olvidar. Carta de Guido a San Martín, Lima 10/9. (1,T19,90)

San Martín ya piensa en su exilio en Europa

Hace mucho tiempo que conozco la situación crítica de Usted porque es el blanco en que van a estrellarse todos los intereses, acaso se habría evitado mucho si Usted hubiese marchado a Buenos Aires luego que llegó a Cuyo, porque yo no puedo creer que una entrevista de Usted con Rivadavia dejase de disipar todas la nubes que levantan el calor de las pasiones y que se ven más negras a la distancia; sin embargo, mucho se avanzará para su sosiego si Usted sigue a aquella Capital, esto es, con el designio de marchar a Europa. Si medito sobre lo que interesa a la tranquilidad personal de Usted, no trepido en opinar que 2 años de Europa le darían a gustar de un reposo que por mucho tiempo no será fácil hallar en América; pero sin poderme convencer aún que Usted no exista para su Patria, considero su ausencia un gran mal atendido el estaño del país y muy especialmente el del Perú. Carta de Guido a San Martín, Lima 1/10. (1,T19,97-98)

Hemos tenido el placer de saber por mi excelentísimo Eugenio su feliz arribo a ésa, aunque por otra parte, no es de poco disgusto la noticia que corre en ésta con bastante generalidad de que Usted marcha a mediados del entrante a países extranjeros; sentimos esta ausencia pero le deseamos en todo el mejor acierto y felicidad. Adjunto a Usted los documentos en copia que me remitió el comandante de los Llanos, Facundo Quiroga. Carta de Manuel Corvalán a San Martín, Mendoza 29/12. (1,T19,132)

Los verdaderos motivos

Mi separación voluntaria del Perú parecía me ponía a cubierto de toda sospecha de ambicionar nada sobre las desunidas provincia del Plata. Confinado en mi hacienda de Mendoza, y sin más relaciones que con algunos de sus vecinos que venían a visitarme, nada de esto bastó para tranquilizar la desconfiada administración de Buenos Aires; ella me cercó de espías; mi correspondencia era abierta con grosería; los papeles ministeriales hablaban de un plan para formar un gobierno militar bajo la dirección de un soldado afortunado, etc, etc; en fin, yo vi claramente me era imposible vivir tranquilo en mi patria interin la exaltación de las pasiones no se calmase, y ésta certidumbre fue la que me decidió a pasar a Europa. Carta de San Martín a Ohiggins, Bruselas (Octubre 1827; 4,T9,41)

San Martín espera a Guido y reflexiona sobre su prima Remedios

Me invita Usted a que pase a la chacra de Villa Nueva, y no me habla de mis tierras, yo he contado con la compra de las 50 cuadras que Usted me avisó estaban compradas, y con igual número que había tenido la bondad de encargarse de procurarme. Si algún inconveniente ha frustrado esta adquisición estimaría a Usted me avisase para recomendarlo a otro con menos ocupaciones que las suyas. ¿ Qué diré a Usted de la desgraciada Remedios ? Creo que si hubiera sido esa joven más metódicas en sus curaciones habría excusado a Usted el disgusto en perder una amiga; la vista de mi tía Tomasa (madre de Remedios) a aumentar los malos ratos a Usted porque con ella se renuevan las llagas. Voy a dar nuevos pasos para la adquisición de los título de la casa de Pueblo Libre sin que Usted se comprometa en lo más mínimo. La familia del general Ohiggins continúa viviendo en la casa de Jesús María. Este amigo hace una vida privada y con muy buena acogida en el país. Carta de Guido a San Martín, Lima 1/10. (1,T19,97)

San Martín y los dichos del periódico El Amigo del País

Con mi pariente, Bernardo Luna, le remito el periódico de Mendoza intitulado "El amigo del país"; en él a golpe de ojo descubrí lo que semina en aquel país para ganar la opinión y apostrofar la de la presente administración, y esto es nada para lo que se proyecta y combina para arruinar la fortuna de Usted. Mendoza, San Juan, Catamarca, Santiago del Estero y el coronel Urdininea en Tucumán mueven los resortes para darles el golpe y esperan se les proporcionen la coyuntura para realizarlo; las líneas y los planes están tirados por el protector (San Martín) de la ambición que, impaciente, no se puede tolerar sobre el imperio de los hombres, y así es que Usted debe estar bien precaviso y no dejarse lisonjear con promesas. Tenga Usted mucho cuidado con los envíados de Mendoza y San Juan y muy a la mira los movimientos de Ruro en Catamarca. Lo que más le interesa al general San Martín es reponer a los Doria que son materias dispuestas para recibir la forma que les quiere dar y llenar el centro de sus ideas. Carta de Francisco Antonio Ortiz de Ocampo a Facundo Quiroga, Córdoba 22/8. (1,T19,135)

Como siempre me he considerado el último de mis conciudadanos, he vivido siempre separado de cumplimientos, y de todo trato de etiqueta; por este motivo no he visitado ni tratado a Usted a su llegada de Chile, pero ahora que el Amigo del País (periódico de Mendoza) me ha comprometido hasta el extremo que se ve en su calumnioso periódico Nº 50, me veo precisado a hacerlo para dar a Usted una satisfacción que creo necesaria por dos motivos. Primero, porque siendo un ministro del altar no puedo allegarme a él sin satisfacer primero a todo aquel que yo juzgue resentido conmigo. Segundo, para que este resentimiento no tenga trascendencia a mi familia que nada tiene que ver con mi opinión.
En mi alocusión a la sala sobre el mensaje del Gobierno no sólo no he nombrado a Usted por su nombre, pero ni aún por su empleo como lo podré probar con toda la sala. Cuando he traído a colación la indemnización solicitada por el Dr Sosa, ha sido con motivo de una proposición del secretario de Gobierno en que pretendía hacer ver que los sindicatos de godos hacían los mayores esfuerzos para colocarse en los empleos. Como se dejaba ver que esto lo decía con respecto a los que suponía en la sala, tomé la palabra y le contesté en estos o semejantes términos. ¿ Cómo podrá probar el secretario tal proposición, cuando hace pocos días un representante (no tengo embarazo en nombrarlo, el Dr Sosa) se ha presentado a la sala no escondiéndose sino acusándose de sindicado ? ¿ Esto es ambición a los empleos ? Si la hubiera tenido, se hubiera aprovechado de la inadvertencia de los representantes, y sin hablar palabra se hubiera recibido de su cargo.
En estas circunstancias no creo haber vulnerado el honor de Usted, tratándolo de tirano (expresión que tampoco he vertido); lo que pretendí únicamente fue volver por el honor de un representante, de un hombre que estimo. Si la amistad y la sensibilidad son un delito, confieso que habré sido culpable pero nunca un murmurador bajo de Usted ni de nadie.
Si Usted desconfía de mi ingenuidad, y desea justificativos más claros, mande el próximo martes a la barra un sujeto de su confianza y allí verá muy en claro desmentidas las calumnias de dicho periódico.
Usted tendrá la bondad de disimularme la confianza que me he tomado de escribirle antes de visitarle; no lo he hecho, creyendo que mi presencia le sería a Usted enfadosa por los siniestros informes que acaso le habrán hecho de mí, por esto he creído más conveniente hacerme preceder de la satisfacción que yendo personalmente debía darle.
Con esta ocación, tengo el honor de ofrecer a Usted las más altas consideraciones de veneración y de respeto que jamás ha pretendido defraudarle. Carta del capellán Juan Agustín Sosa a San Martín, Mendoza 13/10. (1,T19,103)

Se complica el empréstito al Perú

Cuando teníamos fundadas esperanzas de poder arreglar de un modo favorable lo relativo al empréstito del Perú, recibimos hoy, junto con la noticia de la ocupación de Lima por las tropas españolas, el aviso que da el agente del señor Kinder de haber girado contra éste, y a favor de varios comerciantes, la cantidad de más de un millón de pesos. Carta de José García del Río y Diego Paroissien a Antonio Irizarri, Londres 6/10. (4,T4,64)

El Gobierno Peruano no gira los sueldos a San Martín

He hablado con Unanue, actual Ministro de Hacienda, suplicándole que si en Chile tiene el Perú algún dinero, podría darse una libranza, y que a Usted no se le pagaba un real hace 13 meses, quedón en hacer todo lo posible a este objeto, si se verifica y me dan la libranza pienso ir a Chile yo personalmente a cobrar el dinero y conducircelo hasta ésa (Mendoza). Remito la adjunta de Bolivar, éste me ha dicho que ha tenido mucho gusto de haber visto su vida pública escrita y que, aunque trataban algunos de sus enemigos que no se diera a la luz, él habría hecho algo para que no se ocultara. Yo sé lo contrario por una expresión que he oído. Carta de Iglesias a San Martín, Lima 27/10. (1,T19,106)

El Gobierno Chileno por orden de San Martín envía una Expedición al Perú

La expedición que V me indica debía zarpar inmediatamente de Valparaíso, no debe perder un instante, bien que con la venida de V al puerto no se habrá perdido un solo momento; convendría engrosarla, porque lo enemigos se han hecho de fuerzas considerables y disminuídose las nuestras con la desgraciada dispersión de Santa Cruz. Carta de Ohiggins a Ramón Freire, Lima 24/10. (4,T31,68)

Siento mucho que el catarro no me permita llevarle personalmente la adjunta que devuelvo. Como se consigna que venga la escudra en el estado que el desgraciado Chile se encuentra, será una prueba tan clara como la luz que nos alumbra de la decisión de la inconstante fortuna en favor de VE y de la independencia de la América. Carta de Ohiggins a Bolivar, Noviembre. (4,T31,69)

La expedición del Perú salió de Valparaíso el 15 del último pasado. Va equipada de cuanto puede desear, al mando de excelentes oficiales, y su fuerza no baja de 2.500 hombres. Sólo siento que la división intestina que sufre aquel país pueda dar lugar a que se paralicen las operaciones. Si no llega este caso y los peruanos se penetran de sus verdaderos intereses, yo creo que la campañava a ser la más gloriosa y a desaparecer muy en breve la dominación española de aquel territorio. Carta de Ramón Freire (Director Supremo) a San Martín, Santiago de Chile 4/11. (1,T19,115)

Soler en Portugal por la libertad de Uruguay

Martín Rodríguez - Bernardino Rivadavia, comisionan al Brigradier General don Miguel Estanislao Soler, para negociar con los generales brasileños y portugueses, la libertad de la Provincia Oriental. (10,T10,N29,245)

San Martín gusta de jugar ajedrez

El cajón de las armas contiene lo que sigue: 2 carabinas con funda, 2 carabinas sin funda, 2 floretes con funda, 2 cajitas chicas, 1 caja de escopetas, 1 jaquet con sus dados, 1 portacazas tejido, 1 espada, 1 sable, 2 polvorines, varias semillas sueltas, 4 atados de hilo acarreto. Las semillas las sacó Nuñez y las tiene guardadas. Va en el cajón una cajita con las piezas de jugar ajedrez que se encontró en él, aunque no estaba en el inventario. Dos alfombras de felpa de las doce que reza el inventario van también para ajustar mejor las armas. Inventario de San Martín. (1,T19,140)

San Martín en Rosario, Estanislao López le pide que no vaya a Buenos Aires

No he recibido la carta que me dice Usted le ha dicho el Dr Tagle me ha escrito, en ella parece duda Usted de los planes que él ha dicho a Usted ha formado la pasada Aministración (Rivadavia) contra este malhechor y enemigo de la América (San Martín). No amigo mío, no debe Usted dudar un sólo momento, afortunadamente una piadosa alma de la misma administración me avisó a tiempo (Dios se lo pague) y esto me sirvió para precaverme - más diré a Usted que después de haber pasado el chubasco y a mi regreso a Buenos Aires para embarcarme a Europa, López en el Rosario (Santa Fe) me conjuró no entrase en la capital argentina ¡ más aquí de Don Quijote ! yo creí que era de mi honor el no retroceder y al fin esta arriesgona me salió bien, porque como tengo a Usted dicho bien a nuestra vista o bien si muero antes que Usted (que Dios no lo permita) sabrá cosas tan grandes y de tal tamaño que estoy seguro que abrirá tamaña boca; dejemos esto porque mi bilis comienza a ponerse en movimiento. Carta de San Martín a Guido. (Bruselas 8/4/1828;1,T20,108)

San Martín en Buenos Aires

El 4 de diciembre llegaba a la ciudad, según publicaba el periódico El Argos en su número 99 del 11 de diciembre.

El Ejército de los Andes en Lima

El estado de la letra D demuestra la que existe en esta República (tropas en Perú) a la que debe unirse 3 batallones de Infantería y 1 Regimiento de Caballería de la División que estuvo a las órdenes del ex Presidente Riva Agüero, cuyo número no bajará de 2.000 hombres, pero no debo ocultar que la Capital (Lima), no hallándose guarnecida sino por la División de los Andes, será tomada por el general Canterac el día que quiera invadirla con el ejército de su mando. Carta de Enrique Martínez al Ministro de Gobierno y Relaciones Exteriores de Buenos Aires, Lima 6/12. (1,T19,121)

La Expedición Chilena regresa del Perú

Se dice que la expedición de Chile regresó a Valparaíso por el mal estado del Perú, bien que Usted estará mejor informado de estos negocios. Carta de Manuel Corvalán a San Martín, Mendoza 29/12. (1,T19,133)

Bibliografía

1) Instituto Nacional Sanmartiniano. Documentos para la Historia del Libertador General San Martín, Tomos (T) 1 al 20.
2) Espejo, Gerónimo. El Paso de los Andes.
3) Instituto Nacional Belgraniano. Documentos para la Historia del General Don Manuel Belgrano, Tomo (T) 1 al 7.
4) Instituto Ohigginiano. Archivo de Don Bernardo de Ohiggins, Tomos (T) 1 al 37.
5) Documentos para la Historia de la Bandera Argentina (2001), Guillermo Palomo y Valentín Espinosa.
6) Actas Capitulares de Mendoza, Tomo (T) 1 al 4.
7) El Redactor de la Asamblea 1813-1815.
8) Espinosa, José María. Memorias de Gervasio Antonio de Posadas.
9) Archivo Histórico de Tucumán.
10) Revista de la Biblioteca Nacional de Buenos Aires, Tomos (T) 1 al 25.
11) Registro Oficial y Nacional de la República Argentina.
12) Senado de la Nación Argentina, Biblioteca de Mayo, Tomos (T) 1 al 19.
13) Diario Los Andes.
X) Archivo General de la Provincia de Mendoza: Época Colonial e Independiente (EC,EI), Carpetas y Documentos (C,D), Protocolos (P).
Y) Archivo General de la Nación Argentina: Documentos Escritos.
Z) Archivo Nacional de Chile.