San Martín es autorizado a viajar a Chile, no se lo releva del mando del Ejército
Me ha dicho un amigo que
San Martín ha hecho dimisión de su empleo y que pasa a Chile. Aquí no se compone el mundo. La guerra civil sigue en su mayor furor. En estos días hubo una cuchillería horrorosa en que las armas de Buenos Aires obtuvieron el triste triunfo. Pero están tan ocupados de estas pequeñeses que ni lo de Chile, ni de la Nueva Granada les ha hecho impresión. Carta de Miguel Zañartu a Ohiggins, Buenos Aires 7/1. (4,T6,190)
Si el Gobierno Supremo de estas Provincias no accedió a las continuas reclamaciones que VE indica en nota de 26 de diciembre, dejó siempre a su arbitrio la elección del temperamento, tiempo y medios que estimare oportuno al restablecimiento de su salud,
sin hacer lugar a la dimisión del mando del Ejército de los Andes, cuya organización y triunfos, son debidos a su celo, actividad, opinión y conocimiento militares. Estas mismas razones influyen hoy en la resolución de conceder a VE su
pase a los baños de Cauquenes, y cuidar exclusivamente de su convalecencia y entera reposición bajo aquella cálida, y con la investidura de Capitán General y en Jefe del citado Ejército, ya sea reunido o seccionado, en cuyo concepto deberá proveer lo conveniente en orden a su fomento, disciplina y demás, desde el punto dónde se hallase, pues así lo exige el buen servicio del Estado en cuyo obsequio ha prestado constantemente sus relevantes servicios. Oficio de Irigoyen a San Martín, Campo Directorial en Saladillo de Cepeda (Buenos Aires) 8/1. (1,T15,125)
El Cabildo de Santiago de Chile se prepara para recibir a San Martín
Exmo Señor; la reunión de VE al Seno de la Patria es siempre un acontecimiento tan plausible, que renovando en todos los hijos de Chile los inalterables sentimientos de amor y gratitud de que se hallan penetrados así al Libertador de la Nación, no pude menos que interesar a los Ciudadanos en dar un testimonio público de reconocimiento, por eso es que sería muy sencible a la Municipalidad que verificando a VE ocultamente su entrada esfraudase al vecindario de Santiago el gozo de este día, y el Cabildo de lograr la satisfacción a que se prepara de manifestar a VE en este acto los más cordiales sentimientos de respeto y amor, habiendo ya desde ahora dispuesto que una Diputación compuesta de dos de sus individuos se adelante a anticipar a VE nuestros votos para su felicidad que creemos íntimamente unida a la de la Patria. Sala Capitular, Santiago de Chile 12/1. (1,T15,128)
San Martín a cargo de la Expedición al Perú
Sería inútil tratar de probar la necesidad de expedicionar sobre el Perú cuando todos los amantes de la causa están convencidos, que de no hacerlo la suerte de la América está expuesta sino a sucumbir por lo menos a que se formen en su seno la más horrenda anarquía cerciorado de esa verdad,
me resuelvo a pesar del estado de mi salud a mandar la expedición que se proyecta bajo las condiciones siguientes que creo precisas para esperar un resultado favorable. El Ejército expedicionario se compondrá de 6000 hombres: 5.300 Infantes, 400 de Caballería y 300 Artilleros. 1 Tren completo de 24 piezas con la dotación que se designará. 1 Parque proporcionando a la tropa y objeto de sus operaciones. 1 Tren de Hospital. 1 Caja militar con aquella cantidad que se crea necesaria para 3 meses de sueldo. Borrador del Plan de Operaciones de San Martín, Santiago de Chile 15/1. (1,T15,129)
Comienza la evacuación de mujeres y niños en Perú
He mandado que el Pueyrredón proceda al Puerto de Chancay (norte de Lima), con el destino de traer a su bordo cuantas mujeres, niños y otras personas que se han embarcado en el Galvarino, pueda cargar, yo entiendo que esta gente llega a cerca de 200. Carta de Lord Chorcrane a San Martín, Huacho 20/1. (1,T15,132)
Buques españoles son apresados por la Escuadra Chilena
Ha dado fondo la fragata de guerra Lautaro, al mando del capitán de navío Guise, procedente de la costa de Guayaquil, que se separó del Señor Almirante hace 10 días [...] Dice el capitán que apresaron sobre Guayaquil a las fragatas
Begoña y Aguila que cargaron de madera; y que la fragata
Prueba no se pudo apresar; pero que aún permanecía en Guayaquil. Que el Galvarino debía cruzar dos meses más en la embocadura del río de Guayaquil. Capitanía del puerto de Valparaíso 19/1. (4,T13,270)
Son las 5 de la tarda y ha dado fondo el bergantín
Portillo, español, apresado por la fragata Ohiggins. Capitanía del Puerto de Valparaíso 26/1. (4,T13,276-282)
El bergantín español
Resolución, apresado en la bahía de Caracas por el corsario nacional Los Andes, ancló en Valparaíso el 2 del corriente. Gazeta Ministerial de Chile 2/2. (4,T13,285)
Belgrano y la herencia para su hija
La cuadra de tierra contenida en la donación que me hizo la Muy Ilustre Municipalidad y consta de los documentos antecedentes, con todo lo edificado en ella por mí, pertenece por derecho de heredad a mi hija Doña Manuela Monica del Corazón de Jesús, nacida el 4 de mayo de 1819 en esta Capital y bautizada el 7, siendo sus padrinos la Señora Doña Manuela Liendo y Don Celestino Liendo, hermanos y vecinos de la misma y para que conste lo firmo hoy 22 de enero de 1820 en la valerosa Tucumán, rogando a las Justicias Militares como a las civiles le dispensen toda justa protección. Testamento de Belgrano 22/1. (9, Protocolo 24, Serie C, año 1889)
San Martín es nombrado General en Jefe del Ejército Expedicionario
El Excelentísimo Señor Director Supremo del Estado a SE el Señor Capitán General con fecha 22 del que rige dice lo sigue: Excelentísimo Señor. Conforme al dictámen del Excelentísimo Senado, y en atención a las eminentes calidades que asisten a VE ha venido en nombrarlo como lo hago en efecto,
General en Jefe del Ejército Expedicionario, libertador del Perú, con la plenitud de facultades que competen a tan alta investidura pudiéndo VE por consecuencia abrir francamente en todo lo que directamente concierne a la verificación y progresos de esta empresa, que confía el Gobierno con las más íntima satisfacción al talento y demás virtudes militares que a VE caracterizan. Palacio Directoria de Santiago de Chile, 22/1. (1,T15,145)
Exmo Señor; Tengo el honor de volver a VE el oficio del Exmo Señor Director Supremo de la Nación (Ohiggins) en que a satisfacción del Ejército y de todo buen patriota le declara
General en Jefe del Ejército Expedicionario, se ha dado en reconocer a VE en la orden del día con el mayor placer, y a porfia serán los hijos de la Patria felices congratulándose con tan digno caudillo en que parece tiene el cielo depositado el Laurel de la inmortalidad para la emancipación de la América, y terror de los impios zarracenos. Oficio de Calderón a San Martín, Santiago de Chile 28/1. (1,T15,141)
Luzuriaga renuncia, el Cabildo y José Prudencio Bargas a cargo de Mendoza
Se dice que las Provincias de Mendoza, Córdoba, Tucumán, están en conmoción. La falta de comunicación no nos deja salir de la obscuridad, ni saber que hay de verdadero entre tanta fábula como se refiere por los descontentos de los Gobiernos. Carta de Miguel Zañartu a Ohiggins, Buenos Aires 19/1. (4,T6,192)
Por la penúltima comunicación de VS quedo enterado que por dimisión voluntaria del mando de esa Provincia, presentada ante este Ilustre Ayuntamiento por el coronel mayor Toribio de Luzuriaga, ha recaído aquel en VS con la sanción libre del Pueblo. Jamás me he engañado en las esperanzas que siempre me formé del benemérito Pueblo de Mendoza y, ahora más que nunca, confío que aun en medio de la más violenta
crisis que pueda preparar el interés seductor de la anarquía, los ciudadanos de ese Pueblo harán ver al mundo que si han sido un modelo de Patriotismo y subordinación por la fuerza de sus principios, también por los mismos, serán ahora el ejemplar más honorable del orden y del verdadero celo por la salvación del País. Oficio de San Martín al Cabildo de Mendoza, Cuartel General de Santiago de Chile 27/1. (1,T15,138-138)
San Juan se amotina, el Ejército de los Andes se queda en Mendoza
Instruído por el oficio de VS del 25, del aspecto que han tomado los negocios de esa Provincia, después de haber regresado la oportuna Diputación del Ilustre Cabildo de San Juan, y de las consecuencias que VS con razón teme de la soldadezca amotinada de aquel Pueblo, no me sería extraño un rompimiento desgraciado si VS revestido del espíritu de prudencia, moderación y patriotismo con que ha marcado hasta aquí sus pasos, no procurara por todos los medios evitar un encuentro con las tropas de San Juan, conservando el orden interior y una defensa vigorosa.
VS me asegura haberse dado cuenta al Exmo Supremo Director de la Nación de cuánto ha acaecido, y supuesto que según se ve por la contestación del Ilustre Cabildo de San Juan, ha comunicado éste a SE las medidas adoptadas después del movimiento del 9; la razón y el deber aconsejan esperar la decisión Suprema quienes creen se concilien los extremos que el espíritu de anarquía procura dividir.
Más entretanto con la presencia de la fuerza de Línea, no sólo protegerá las disposiciones de VS para mantener el orden de la Provincia a los vecinos pacíficos y honrados de ese Pueblo, sino que contendrá las pretensiones de los soldados amotinados de San Juan, ordeno con esta fecha al Comandante General de la Divsión de los Andes, coronel Rudecindo Alvarado, suspenda su marcha ordenada para ésta (Chile), y quede en esa Provincia interín varíen las amenazantes circunstancias del día, o que VS satisfecho de la seguridad de la Provincia de Mendoza crea inncesaria dicha fuerza, avisándomelo oportunamente para prevenir su regreso. El coronel Rudecindo Alvarado queda igualmente prevenido de conservar con VS la más cordial armonía, y yo no dudo que este Ilustre Ayuntamiento animado de los dignos sentimientos con que se ha distinguido en el período de la revolución, facilitará a la División de los Andes la asistencia y recursos que tan generosamente ha prestado siempre a los Guerreros de la Patria. Oficio de San Martín al Cabildo de Mendoza, Santiago de Chile 30/1. (1,T15,148-149)
La principales cabezas de revolución del Batallón de Cazadores fueron el excapitán Mendizabal, hijo de un zapatero de Montevideo y casado con una hermana del Gobernador de San Juan, cuya conducta desarreglada y continua embriaguez había obligado a echarlo del Ejército; el teniente Corro, natural de Salta; y el subteniente Murillo, de Buenos Aires; el primero y el último fueron pasados por las armas en el Perú, y el otro muerto violentamente en el Tucumán; dos españoles, cabezas de la sublevación de la fragata española La Trinidad, el uno subteniente y el otro Sargento Mayor del mismo Batallón de Cazadores tuvieron una parte muy activa en este acontecimiento y ambos fueron fusilados en Córdoba. Carta de San Martín a Miller. (Bruselas, 1827;1,T20,362)
San Martín preocupado por una invasión desde San Juan hacia Mendoza
Mi buen amigo; a la verdad yo no sé que contestar a su carta del 24, el incidente ocurrido en la Provincia y su actual situación, me han llenado de desconsuelo, en fin ya no hay otro arbitrio que el de remediar los males por los medios que sean posibles.
Alvarado debe permanecer en esa el tiempo preciso para evitar los males que amenazan a ese Pueblo pues estoy persuadido que en el momento que se separa con la fuerza de Línea,
Mendizabal cargará sobre Mendoza, pues su principal objeto será embotellar a toda la Provincia en anarquía.
No es mi opinión el que se rompan las hostilidades contra San Juan, esto sería aumentar los males; si los habitantes se interesan en el orden, el se restablecerá obrando con pulso.
¡ Que males a la causa general del País ! todos los elementos para la Gran Expedición se hallaban en el mejor estado, aún hay tiempo de remediar los males si el orden se restablece.
Si se ha admitido la renuncia de Dupuy (San Luis) mal semblante veo a las cosas.
En fin mi Amigo; mi partido está tomado, voy a hacer el último esfuerzo en beneficio de la América, si este no puede realizarse por la continuación de los desordenes y anarquía, abandonaré el País, pues mi alma no tiene un temple suficiente para presenciar su ruina.
En breves días ire a Cauquenes, todos los facultativos me aseguran mi total curación. Carta de San Martín a Godoy Cruz, Santiago de Chile 31/1. (1,T15,149-150)
Según comunicación que le hace el coronel mayor
Toribio de Luzuriaga al Comandante General del Parque, coronel Pedro Regalado de la Plaza, hay en las Barrancas (Maipú) a cargo del Decurión de aquel partido, carbón para la carga de 3 carretas; y siendo aquí de necesidad este artículo para los trabajos de la Armería del Estado, se ha de dignar VS librar providencia para que traiga a la mayor brevedad. Oficio de Bargas al Cabildo, Mendoza 1/2. (X,C749,D70)
Considerando conveniente prevenir a este vecindario de las señales que acreditan el verdadero caso de alarma general, y precaver así las que falsamente se suponen, con notable perjuicio e inquietud de las familias, he resuelto que en tal caso de alarma se enarbolara la
Bandera de la Patria sobre la Torre de San Francisco (Iglesia), y se dispararán 3 tiros de cañon consecutivos. A estas señales el Pueblo que concurriere a la Plaza, será este el punto de reunión; y con el aviso que VS se dignará impartirme se proveerá de las armas que necesite, o se crean más oportunas. Oficio de Bargas al Cabildo, Mendoza 1/2. (X,C749,D71)
En las actuales críticas circunstancias hallo de la más irreparable necesidad que al Comandante General de Caballería, teniente coronel Pedro José Campos, se le faciliten 50 caballos del mejor servicio, para que axilien en la avanzada que se halla a la parte del Camino de las Higuieras, a fin de que explore y registre los campos y senderos, por donde puede sobrevenirnos una invasión, y al mismo tiempo reconozca la dirección que ha tomado la parida amenzadora que asoma por aquel punto. Oficio de Bargas al Cabildo, Mendoza 3/2. (X,C749,D73)
Con esta misma fecha doy parte al Señor Coronel Comandante General de División, Rudecindo Alvarado, de lo que VS me previene en su nota de ayer, instruyéndole así mismo por un estado general del número y estados de los tropas de milicias de mi mando. Oficio de Bargas al Cabildo, Mendoza 3/2. (X,C749,D75)
Esta tarde ha llegado Francisco Domingo Oros enviado por Mendizabal, bajo del ostensible que viene a tratar asuntos de comercio con este Cabildo. Hemos acordado que mañana firmaremos un acuerdo secreto, en el cual se estipule por mi parte reconocer a Mendizabal como Teniente Gobernador de San Juan; que todos los que han sido promovidos a oficiales del Cuerpo, serán reconocido por VE como tales oficiales, que se publicará un indulto de VE a la tropa que pase a Chile. Ellos exigen de garante la firma de VE. Mendizabal, Corro y Murillo, se obligan a entregarme el batallón y armamentos de San Juan; ellos conducirán el Nº 1 donde VE guste (Chile); pero de ningún modo se sujetarán a Alvarado. Mañana a la noche o pasado mañana comunicaré a VE el resultado de todo. Carta del teniente coronel Domingo de Torres a San Martín, Mendoza 12/2. (1,T15,164-165)
Cochrane deja Talcachuano, Ohiggins y el bloqueo al Callao
El Lord Cochrane ha salido de Talcahuano hace seis dias, conduciendo 250 hombres escogidos de tropa, además de los pertenecientes a su fragata, con el objeto de sorprender la isla de Chiloé, atacando su capital, y de dirigirse al mismo efecto a Valdivia. A la fecha o ha acertado el golpe o ha sido rechazado. Lo primero es más seguro, porque se hallaba Chiloé en gran fragmentación, según se ha sabido por algunos pasajeros del bergantín de guerra Potrillo, que dicho Cochrane apresó en la boca de Valdivia. Si este suceso es favorable, concluyó la guerra del Sur y con ella la esperanza de Pezuela de volver a pisar nuestro territorio. Freire habrá hecho igualmente su entrada a los indios con 3.000 hombres de buenas tropas en dos divisiones, la primera mandada por él mismo, por San Pedro, y la segunda por los Angeles al mando del coronel Alcazar.
En este instante he dado la orden para que se apronte la escuadra y se dé a la vela en 5 días a continuar el
bloqueo al Callao, mientras se preparan los 6.000 hombrse expedicionarios que, a no ser el suceso de San Juan, antes de mes y medio hubiera estado todo pronto [...]
El general San Martín se mejora muy lentamente. Carta de Ohiggins a Miguel Zañartu, Santiago de Chile 1/2. (4,T6,307)
El Directorio y el Congreso son derrocados, Juan Pedro Aguirre Director Interino y Pueyrredón en una fragata inglesa
Feliz V que manda en un pueblo juicioso y feliz el pueblo que es mandado por V. No sé cómo empezar el detalle de las intrigas que se juegan en este país
corrompido en su política y moral. Todos los días pasan por mis ojos escenas que me asombran, y el resultado de todas ellas será inevitablemente la ruina del sistema. La cofradía no se entiende entre si y ya desconfían unos de otros. Todos
abominam a San Martín y no ven en él más que a un
enemigo de la Sociedad desde que se ha resistido a tomar parte en las guerras civiles, y ha impedido la marcha de sus tropas. A él le atribuyen la sublevación de los pueblos y si se aumentan las desgracias de este país, creo que lo quemarán en estatua. Los menos furiosos de los hermanos dicen, que cuando él hubiese tenido algunos resentimientos, o considerado necesaria la separación de algunos, o la disolución total del cuerpo, pudo haberse insinuado y obtenido, aprovechándose de la opinión que gozaba, sin exponer al país a tantos desastres. El Director Rondeau fue batido últimamente por la división de Ramírez, a las inmediaciones del Rosario, y antes de ayer ha llegado sin saber del resto de su ejército, porque los enemigos después de haber envuelto nuestra caballería, la persiguieron de tal modo que fueron inútiles los esfuerzos del general para unirse al resto de sus tropas [...] Cuando se supo aquí el movimiento de Mendoza, San Juan y el del ejército del Perú, hubo su especie de poblada que acobardó enteramente a los hermano. Tuvieron que nombrar precipitadamente substituto del Director. El nombramiento recayó en el alcalde de primer voto don Juan Pedro Aguirre, que es hermano; pero a pesar de esta calidad, no pudo dejar de mandar salir a Pueyrredón y Tagle, objetos principales del odio público. Su embarque a bordo de la fragata inglesa, aquietó un poco los espíritus y libertó sus vidas. Están notificados a salir del país hasta nueva orden. Carta de Miguel Zañartu a Ohiggins, Buenos Aires 5/2. (4,T6,193. Detalle de las acciones de Balcarce y Soler)
Para adquirir pues una luz clara, distinta que nos dé sin peligro de equivocarnos del principio que debemos partir a procurarnos por bien asequible, he estimado conveniente que el Secretario del Ejército de los Andes,
Dionisio Vizcarra, salga de esta a la mayor brevedad, como
Diputado. Oficio de San Martín al Cabildo de Mendoza, Cuartel General en Santiago de Chile 12/2. (X,C286,D119)
Mi apreciado General y amigo; son las 11 de la noche y acabo de saber ha recibido este Gobierno comunicación de Bustos (Juan Bautista, Gobernador de Córdoba),
invitando a la Provincia (Mendoza) a la Federación; yo conozco que aceptarla es casi preciso en las circunstancias que uno puede desconocer, y que de consiguiente yo no puedo menos que causar celos, temores y entorpecimientos, con la fuerza en este punto oponerme a ella no puedo porque no es fácil ni posible vencer la opinión general con la fuerza. Se asegura que Carrera está en Córdoba. Carta de Alvarado a San Martín, Luján (Mendoza) 14/2. (1,T15,168)
El voto general de la Nación ha sido oído al fin por el pueblo de Buenos Aires que bajo de la protección del Ejército Exterior, y de las armas federales ha
depuesto al Congreso y Directorio (Batalla de Cepeda 1/2), nombrando interinamente de goberndor y capitán general de la Provincia a Manuel de Sarratera, quien me pidió que devolviese los pliegos que el Excelentísimo Cabildo remitía a las Provincias, por cuya razón van los chasquis sin ellas. El 18 del corriente firmamos con el general Soler un armisticio por 3 días que seguramente será reemplazado por una paz imperturbable, que aleje de nosotros para siempre los días de sangre y amargura; en federación las Provincias, la Patria libre de monstruos será independiente y feliz. Oficio de Francisco Ramírez (Gobernador de Entre Ríos) al Cabildo de Mendoza, Cuartel General del Pilar 20/2. (1,T16,3)
El brigadier Soler (Miguel Estanislao) acaba de sublevarse con el Ejército (Exterior de Buenos Aires) de su mando, contra el Gobierno Supremo y Congreso; dice que sus sentimientos ya están identificados por la
Unión Federal. Bustos agrega a este Cabildo que se hallaba hecha la revolución en Buenos Aires; y se había nombrado de Gobernador Intendente a Miguel Irigoyen, también convida a Bustos a este Cabildo (Mendoza) se declare en contra de Buenos Aires y en favor de la Unión Federal. Aquí han llegado dos pliegos para VE uno del General en Jefe del Ejército Liberal (Bustos) y otro del General en Jefe de los entrerrianos (Francisco Ramírez); mañana los mandará el Cabildo. Carta de Torres a San Martín, Mendoza 27/2. (1,T15,182-183)
San Martín en las Termas de Cauquenes
Hoy he dado principio a los baños, veremos que tal me prueba. Hoy hace 8 días que ignoro absolutamente lo que pasa por ésa (Santiago de Chile). Diga Usted a Peña que no me acuerdo de él sino para molestarlo; por lo tanto que vea de mandarme un par de docenas de botellas de vino de Madeira y encajonadas de manera que no se rompan. Carta de San Martín a Guido, Cauquenes 28/2. (1,T20,75)
Muy Señor mío; su carta del 27 no ha podido menos que sorprenderme a lo sumo; en ella me trata Usted de sus servicios, incidentes particulares, disgustos personales con jefes del Ejército, desconcepto en que me había puesto Usted, y últimamente insultos contra su honor inferidos por el coronel Alvarado; concluye Usted su carta con decirme necesita Usted, reponer su salud sin decirme dónde ni cómo.
Creo que es suficiente tiempo el que Usted a permanecido a mi lado para haber conocido mi carácter y modo de pensar; por otra parte mi empleo no me permitía que si hubiera tenido la menor sospecha contra su conducta, no se la hubiera manifestado con la franqueza que me es genial; de consiguiente Usted en su carta hace suposiciones que no ha podido menos que serme desagradable; es la primer noticia que tengo de disgusto de un Jefe de División con su señor hermano; y por este estilo son las demás que Usted me relata; soy enemigo a todo lo que tiene aire de poca inseguridad, y que puede contribuir a alterar la armonía que siempre ha reinado entre las clases del Ejército; si Usted se ha sentido agraviado en su honor podía habérmelo reclamado oficialmente, como correspondía, y no formar su queja en una carta particular; en fin, Señor, a Usted le queda su derecho a salvo por los trámites de la ley, y no por medios que no me es justo dar oídos ni Usted practicarlos.
En cuanto lo que Usted me dice que no podrá servir en una carrera con rivales tan fuertes donde a cada hora puede ser víctima de sus caprichos, debo decirle que en particular puede hacer lo que guste; añadiéndole que no debo estarle muy reconocido a la injusticia que me hace suponiéndome incapaz de distribuir equitativamente la Justicia en este Ejército y sostener la razón del último de sus individuos.
Lo expuesto no me impide el ofrecer los respetos de este su más atento servidor. Carta de San Martín al teniente coronel Manuel Rojas, Cauquenes 3/3. (1,T16,4)
Cochrane regresa del Sur, el Ejército de los Andes en Rancagua
El Gobierno acaba de recibir noticias oficiales de la toma de la interesante plaza de Valdivia por el Almirante de la Escuadra Nacional, Lord Cochrane. Gazeta Ministerial de Chile 17/2. (4,T13,300-310)
El 24 fonderaron en Valparaíso los bergantines de guerra Galvarino y Pueyrredón, procedentes de la boca del río de Guayaquil con 32 días de navegación. Gazeta Ministerial de Chile 26/2. (4,T13,311)
Aunque ya tengo comunicada a VS la plausible noticia de la toma de Valdivia por el almirante Lord Cochrane, como es tan frecuente la interceptación de la correspondencia entre esta y Buenos Aires. Lord Cochrane se dirigió en seguida sobre Chiloé, de cuya empresa no sabemos todavía el resultado.
Toda la división del
ejército auxiliar de los Andes está ya acantonada en Rancagua para formar ahí un campo de instrucción. Carta de Joaquín de Echeverría a Miguel Zañartu, Santiago de Chile 3/3. (4,T6,116. Ese mismo día le escribe a Antonio Irizarri: idem,T4,127)
El 7 del corriente ha dado fondo en Valparaíso la goleta Moctezuma, procedente de Chiloé y Talcahuano; conduce al intrépido almirante Lord Cochrane. Gazeta Ministerial de Chile 8/3. (4,T13,327. Cochrane describe las acciones.)
Antes de ayer fondeó en Valparaíso la goleta Moctesuma, que conduce a Lord Cochrane procedente de Chiloé [...] De este modo y asegurada la plaza y provincia de Valdivia, puede este Gobierno posesionarse de todo el archipiélago de Chiloé. Carta de Joaquín de Echeverría a Miguel Zañartu, 8/3. (4,T6,117)
El Lord Cochrane ha vuelto a
Valparaíso y, luego que se reúnan la Ohiggins, Independencia y Araucano, que vienen navegando de Valdivia, el Lautaro que debe conducir 1.000 hombres de Talcahuano, y el San Martín 800 de Coquimbo,
saldrá a un pequeño crucero sobre el Callao, a fin de ver si puede pillar fuera de dicho puerto algunos buques de guerra. Regresará a los dos meses para recibir la expedición. Carta de Ohiggins a Miguel Zañartu, Santiago de Chile 9/3. (4,T6,309)
Muere Ossorio y Bolivar se refuerza
Panamá- se ha confirmado la noticia de la muerte del General Ossorio en La Habana, de vómito prieto. Guayaquil- la fuerza del General Bolivar pasa ya de 6.000 hombres, y probablemente se repartirá hasta Popayán y la costa del Choco. Gazeta Ministerial de Chile 9/3. (4,T13,337)
Belgrano y San Martín en contra de una guerra civil
VE está en los antecedentes de que los santafecinos, capitaneados por su Gobernador
López, vinieron contra esta capital (Bs As) auxiliados por el Gobernador de Entre Ríos,
Ramirez, a quien asesoraba el turbulento
Carrera. El Director
Rondeau salió a batirlos con las fuerzas de esta ciudad, que consistiendo en infantería y despreciable caballería de milicia, no era adecuada para llenar los objetos de una guerra en que la amovilidad de los enemigos podría burlarse aún del ejército de Jerjes, no estando bien montado. Encargado el Director de esta desventaja, pidió la caballería de
San Martín, que estaba en Mendoza, y la de
Belgrano sobre el Tucumán. El primero se acercó a San Luis; el segundo a Córdoba, pero no pasaron adelante. San Martín, deseando probablemente no mancillar su gloria derramando sangre americana, hizo la falta notable en política (como probaré después) de no mandar un hombre.
Belgrano cayó gravemente enfermo y dejó el mando a su segundo, General Cruz. Con el ejemplo de
San Martín éste también empezó a retirarse. Por último quiso obedecer según parece, cuando su inmediato Bustos le da el golpe; lo separa del mando, lo arresta con los demás jefes de su opinión y niega la obediencia al Gobierno.
Rondeau queda solo; lo ataca
Ramírez y lo bate. Huye para la capital acompañado de pocos hombres. Su segundo,
Juan Ramón Balcarce salva la infantería y artillería y se acoge bajo los atrincheramientos de San Nicolás. Con las nuevas de esta derrota entró la confusión en la ciudad. Se nombra un Director Interino, cuyo nombramiento recayó en
Juan Pedro Aguirre. Este hace salir a
Soler de General en Jefe exterior, con mil y tantos hombres al puente de Marques, dejando en la ciudad, con el dictado de General interior al coronel mayor
Viamont. Oficio de Miguel Zañartu a Ohiggins, Buenos Aires 3/3. (4,T5,171)
San Martín recibe noticias de Sarratea, se firma el Tratado del Pilar
Esta polvareda ha sido tal cual yo me la esperaba, pero se ha salido de ella mejor de lo que podía presumirse. De todo lo que ha sucedido de Córdoba para la Cordillera usted debe hallarse más instruído que nosotros; aquí estamos bastante a oscuras, y hoy es el primer día que se empieza a franquear los canales de comunicaciones con el interior.
Usted observará por los papeles públicos que he andado de negociador de aquí a Luján, a la Capilla de Pilar (Tratado del Pilar firmado el 23/2 por Sarratea, Ramírez y López), y para remate de fiesta me han puesto encima la carga de gobernador de la Provincia. A la verdad que era preciso que el horizonte de los negocios públicos fuese tan turbio y borrascoso como lo es; para que el punto de honor lo oblige a uno a hacerse el Cordero Pascual. ¡ Qué estado de rentas, qué desquicio tan completo en todos los ramos de la Administración, y qué elementos de discordia ! Entre tanto aquí me tiene Usted sin fuerzas físicas ni morales, porque este cuerpo es un cascajo que se está desguarneciendo por todos lados.
En fin dígame Usted algo que me dé luz de lo que pasa en esa parte del mundo, de sus planes ulteriores, y de las relaciones en que quede ese Ejército con ese Gobierno o con éste, o en el que se engendre más adelante si es posible. Carta de Sarratea a San Martín, Buenos Aires 4/3. (1,T16,6)
Chile es estrella, Argentina se estrella
Deseo mucho saber lo que pasa por ese país (Chile), cuyo Gobierno hace honor a la América y brilla en la Europa, al paso que
Buenos Aires y las Provincias han caído en el mayor desprecio por su anarquía y poco juicio en sus habitantes. Aquí va a empezarse una nueva carrera y es totalmente perdido el
trabajo de 10 años. En ellos, lejos de aumentarse se ha disminuído el espíritu público; se han agotado los recursos, aumentado los odios y perdido lo más florido del territorio. Si en circunstancias tan lamentables atacan, como es probable, los españoles y el Ejército del Perú, debemos temer los resultados más funestos. Carta de Miguel Zañartu a Ohiggins, Buenos Aires 4/3. (4,T6,197)
Ya me hallo en mundo diverso de aquél a que fui enviado. Yo vine cerca del Gobierno supremo de las Provincias Unidas, y ahora, como por encargo mágico, me veo, no en la capital del Sud (Buenos Aires), sino en una provincia desvastada y desunida de las otras. Y lo más gracioso es que se ha separado contra derecho y contra su voluntad y solamente por la de
cuatro miserables que sin patentes de los demás pueblos pidieron a su nombre el desquiciamiento del Gobierno central. Pero mandaban apoyados de una fuerza victoriosa (aunque despreciable en sí), y así es que aunque en esos días había
protestado Mendoza no separarse de la capital, ellos la separaron de hecho, y Buenos Aires pasó por la vergüenza de darla por separada y de recibir la ley que le impusieron [...]. Este convencimiento presentó como un beneficio del cielo el allanamiento de los vencedores, y dio a
Carrera, mediador de la paz, una importancia cual V. no puede concebir. Vive en
casa de Sarratea disfrutando el cortejo y adulaciones de todo el pueblo; y tomando en los negocios una mano que muchos lo miran como un secreto gobernante [...] Sin embargo, este bicho (Carrera) se ha puesto en un pie que puede hacer mucho daño, y los más admirable es que la
casa de San Martín, como el bruto de Quintana y Escalada por destruir a Pueyrredón, que consideraban enemigo del general han contribuido al ensalzamiento de
Carrera, y son tan inocentes, o tan estúpidos, que lo consideran de buena fe. En días pasados se lisonjeaba la
suegra de San Martín de que Carrera había brindado por la salud de aquél, siendo así que yo sé por conducto seguro, que no lo llama por otros nombres que los de monstruo, cobarde, asesino, ladrón, etc. Ahora está trabajando para que vuelva
Alveara y se saldrá con ello, a pesar que para estos tiene que vencer la oposición de Soler. Carta de Miguel Zañartu a Ohiggins, Buenos Aires 4/3. (4,T6,198)
Diputados mendocinos y puntanos para la Federación, Buenos Aires se suma
He recibido comunicación del Cabildo de Mendoza y San Luis que me comunican han sido invitados por Buenos Aires para la remisión de un diputado facultado para tratar sobre la
federación y gobierno de las Provincias; me piden su parecer para resolver sobre este particular; hoy quedarán aceptados. Carta de San Martín a Guido, Cauquenes 3/3. (1,T20,76)
Me ha sido muy sensible de que VS
no remitiese su Diputado en compañía del señor Vizcarra; esto hubiera proporcionado las ventajas siguientes: 1) la de ver uniformada la opinión de esa Provincia (Mendoza) con la mía (Chile). 2) El interés que tanto VS como yo tomamos por la tranquilidad pública, seguridad del orden, y establecimiento de un Gobierno formado por la voluntad general de los Pueblos. 3) El que ambos hubieran promovido con más eficacia la
expedición al Perú, única que puede terminar con una guerra que nos destruye. En fin, a pesar de que ya no hay remedio a lo hecho, yo escribo al señor Vizacarra con igual data, para que todas sus operaciones sean consultadas con el Diputado de esa que elija ese Pueblo. Oficio de San Martín al Cabildo de Mendoza, Cauquenes 5/3. (X,C286,D124)
Incluyo a Usted las comunicaciones que he tenido de Mendoza; por ellas verá Usted que toda el teatro está mudado y que Buenos Aires entraba en la federación, en fin veremos que sale de toda esta tortilla. Carta de San Martín a Guido, Cauquenes 7/3. (1,T20,76)
Luzuriaga es insultado en San Luis, debe regresar a Mendoza
He sabido que para poner en seguridad la persona del coronel mayor Toribio de Luzuriaga, lo ha hecho VS regresar a
Los Barriales, para por este medio evitar los insultos que podía sufrir en San Luis. VS no ignora los enemigos que todo el que tiene la desgracia de mandar en estas circunstancias se acarrea, como lo verá VS practicamente cuando acabó su gobierno Toribio Luzuriaga está lleno de ellos, talvez la autoridad de VS y los mejores deseos de ese vecindario lo pueden poner a cubierto de sus émulos. Yo opino que transportado a este Estado se evitaban estas contingencias, VS se descargaba de un peso y yo quedaba responsable de que el expresado Coronel no volviera a la provincia de Cuyo, y sólo se pudiere transportar por mar a la de Buenos Aires, a menos de que todo tranquilizado, VS no le permitiere regresar por esa Provincia para dirigirse a la ya indicada. En esto me intereso y no dudo en conseguirlo. Oficio de San Martín al Cabildo de Mendoza, Cauquenes 6/3. (X,C286,D127)
La Provincia de San Juan sumida en el descontrol
El presente estado de San Juan es lastimoso; todos sus habitantes gimen bajo el temor de una soldadesca desenfrenada que los oprime; la milicia anda fugitiva, el Batallón reducido a 600 hombres se halla en el mayor desorden, su armamento deteriorado; sin municiones, Corro y Murillos peleados; y hace 8 días se batieron en el Pocito un destacamento de caballería contra otro de infantería del mismo cuerpo. Oficio de Torres a San Martín, Mendoza 6/3. (1,T16,9)
San Martín con problemas en el brazo derecho
Sigo regularmente a pesar de que el brazo derecho me tiene sumamente incomodado. Paroissien asegura que los buenos efectos los deberé sentir a los 15 días después de haber tomado los baños. Carta de San Martín a Guido, Cauquenes 7/3. (1,T20,77)
San Martín parte a Rancagua, luego a Santiago de Chile para preparar la Expedición al Perú
El sábado (11) me retiro para Rancagua en donde permaneceré lo preciso para pasar una revista al Ejército y enseguida pasar a ésa (Santiago de Chile) a ver si se pueden activar los aprestos de la expedición, o que me desengañen cuanto antes, pues según oficio que se me pasa con fecha del 3 se me avisa haber mandado suspender los trabajos de maestranza por toda la presente semana; esto me aburre como Usted no puede calcular. Dígale Usted a Peña que he recibido el vino que me ha remitido a lo que le doy mil gracias. Carta de San Martín a Guido, Cauquenes 7/3. (1,T20,77)
El Subteniente de Artillería, José Silva, conduce a ésa (Mendoza) a disposición de VS la artillería, municiones y juegos de armas que manifiesta la adjunta nota. Posdata: habiendo enfermado gravemente el oficial encargado de la conducción de las 2 piezas contenidas ha sido nombrado en su lugar el sargento de artillería Mario Balbuena el que marcha con el armero José Lescano (24/3). Oficio de San Martín al Cabildo de Mendoza, Cuartel General en Rancagua 15/3. (X,C286,D128)
Rivadavia es insoportable en Londres
El señor Rivadavia hace 6 largos años que está en Europa, y sólo ha aprendido a hablar y escribir un idioma, que ni es español, ni francés, ni inglés, ni cosa inteligible. Cuando hace mayor empeño en explicarse bien, entonces es cuando se vuelve más confuso y más obscuro. Después de haberle oído medio día, es necesario preguntarle ¿que es lo que ha querido decir? Es hombre que concibe las cosas de un modo muy raro; que las dice de un modo rarísimo; que es en extremo perezoso; que se tiene por
político consumado, y que sólo puede tenerse por un consumadísimo impolítico. Cuando habla de los Embajadores y Ministros europeos, los pinta como unos necios de primera marca, y cree que todos ellos ganarían mucho con saber lo que él sabe. Tiene cuatro frases favoritas, que aprendió en algún libro que por casualidad leyó, y son: "estar al nivel de las luces del siglo", "el serpenteo de la política", "el filosofísmo del tiempo" y la "imbecilidad de los europeos". No hay conversación que por trivial que sea, ni por corta, en la que no repita diez veces estas palabras, creyendo que con esto se recomienda como un ordador eminente. Su pereza le hace no visitar a nadie, ni dar un paso en favor de los negocios que tiene a su cargo. Hasta ahora jamás ha visto a este ministro, ni ha procurado verlo. Nunca ha tenido la tentación de hacer conocimiento con los personajes que pudieran abrirle el camino de las negociaciones; y cuando yo le propuse introducirlo al duque de Sussex, me contestó que no creía que pudiera servirle de algo este señor. Con todo esto, convidé a comer al secretario de su alteza real, y al mismo Rivadavia, con el objeto de que se conociesen en mi casa, y que así tuviese este hombre la facilidad de dirigirse a él cuando lo necesitase; pero entró en la mesa a sostener conversaciones tan pueriles, y a defender sus opiniones con tan poca finura y cortesía, que aquel caballero quedó muy disgustado de él, y me preguntó después, si eran del mismo temple los demás personajes de Buenos Aires. Después de esto, fue introducido por una persona, que conocía al célebre Bentham, a la casa de este sabio, y en la primera visita riñó con él, porque no se conformaban mucho sus principios políticos. Después fue llevado por los Enviados de Venezuela a comer a casa de Lord Calthorpe, y en la mesa misma, el primer día del conocimiento, usó de la misma grosería de que había usado en casa de Bentham. Dígame V ¿qué se debe espera de unos Enviados como éstos?. Lo cierto del caso es que si yo no le hubiera convidado a entrar en el proyecto del empréstito, y no se lo doy todo trabajado, ni aún con esto hubiera servido a su gobierno. El mayor trabajo que tengoen estas circunstancias, es el de no dar a conocer a estos señores el concepto que me merecen sus talentos, por lo cual me veo precisado a callar cuando me escriben o hablan sobre sus impertinencias, pues para responderles debidamente era preciso hacerles ver, que nada sabían de lo que pretenden saber. Así he consultado, de modo que se ve en mis oficios, guardar la buena armonía con ellos, sin dejar de apurarlos suavemente para que entren en mi proyecto, y no se contente, como hasta ahora, a esperar a que se les caiga la breva en la boca de puro madura. Carta de Antonio Irizarri a Ohiggins, Londres 14/3. (4,T4,274)
Carrera pergeña los asesinatos de San Martín, Pueyrredón, Ohiggins y Luzuriaga
Por momentos esperamos noticias de Buenos Aires; desde mi comunicación fecha 1º del corriente, no hemos sabido nada particular, sólo que hemos tenido la desgracia que el facineroso de Tagle y el tejedor Pueyrredón hayan fugado. Se refugiaron a bordo de la fragata inglesa a bordo. El 31 de enero los desterraron; y se nombró a Juan Pedro Aguirre de Director Interino; y después éste fue depuesto, y nombrado Sarratea de Capitán General. Esta mañana he tenido una entrevista secreta con Juan José Benavente; éste tuvo algunas conversaciones privadas con J.M.Carrera en Santa Fe. Me ha dicho que el citado Carrera está complotado con Bustos, para luego que se organice el Gobierno de Buenos Aires; recoger a todos los chilenos que se encuentran en las Provincias (que cree sean 2.000) formarán una División; y atacar a ese Reino por Coquimbo o Provincias del Sud; que tiene comunicación activa con Buenos Aires; y por la vía del Comandante del Rosario recibió 500 onzas de oro. Que ha introducido correspondencia en ese Reino, una vez por mar, y otras por esta ciudad (Mendoza) con pasaportes falsos, y de Pueyrredón que ya su plan será de sangre. Que mina sin cesar para
asesinar a VE, Ohiggins, Puerredón y Luzuriaga. Carta de Torres a San Martín, Mendoza 6/3. (1,T16,11)
Se informó VE de la alteración hecha en el Gobierno en favor de
Sarratea. Este individuo ocupó la silla por 10 días, al cabo de los cuales se conmovió el pueblo repentinamente con la llegada del General
Balcarce, quine reunió los votos generales. Se imputaba a Sarratea haber traicionado al país en haber dado a los montoneros 400 fusiles sin anuencia del pueblo ni de la Junta Electoral, en circunstancias de no haber abandonado éstos la Provincia corrido diez días, cuando debieron salir de ella según los tratados a las 48 horas. Concitó también el odio público la complicidad que le suponían con
Carrera en la venida de Alvear. El resultado fue que huyó para la montonera con todos sus satélites y
Balcarce quedó con el mando. Carta de Miguel Zañartu a Ohiggins, Buenos Aires 16/3. (4,T5,175)
Sarratea lo traiciona a Usted negramente. La amistad que tiene con Carrera no es de la naturaleza de aquellas que admiten interpretaciones. Su alianza es ofensiva y defensiva y cuantos enemigos tiene Carrera otros tantos lo son de Sarratea. A la unión santa que había entre estos gobiernos quieren hacer suceder una maquiavélica colocándose Carrera en Chile. La humillación de Buenos Aires llegó al extremo. Carrera con 400 hombres que le ha dado Sarratea puede imponer cuanto guste una contribución a la ciudad. El cojo Correa ha dado un golpe terrible a las tropas de Ramírez y esto puede mandar el orden de cosas. Si no hay expedición a Lima o se retarda en serio sería conveniente venir con agluna caballería a batir a Carrera a este lado porque sus principales dificultades para pasar las tiene en la Provincia de Mendoza que le es contraria y si él llega a dominarlas ha de poner ese país (Chile) en mil inquietudes. Ahora lleva sus tropas a Santa Fe, luego dice que las pasará a Córdoba donde espera agregar y aumentar su ejército durante el invierno. Rondeau, Viamonte, Rolón y otros varios permanecen escondidos o se han ido a Montevideo. Pinto y Terrada, echaron a muertos, y se han retirado al campo. Soler está de general en jefe; y amenazado de ser sustituído por Alvear (Carlos) quien tiene a su favor a Carrera, Sarratea y a la mayor parte de los oficiales. Carta de Zañartu a San Martín, Buenos Aires 23/3. (1,T16,32-33)
Pedro José Campos es Gobernador de la Provincia Autónoma de Mendoza
Mi estimado paisano y honorable general; logro la marcha del teniente coronel Domingo Torres para pasar a VE la correspondencia oficial, y para incluir esta particular, que dirijo como testimonio de un afecto, que afianzado mucho ha en mi, como uno de los de este país que han amado tan cordialmente a VE, me es y será siempre impresindible.
En la triste época que lamenta este pueblo, aislado en la desgraciada separación de todos, me ha cabido el
gobernarle por elección pública del vecindario. A un tiempo han desaparecídole con la unión general, todos los recursos, que lisonjeaban no ha mucho la expectativa más feliz, y si nunca pudo presentir un éxito tan infausto, e inconsecuencia de tantos sacrificios, ya hoy no cuenta más, que con VE le considere bajo los respetos de aquella adhesión que ha declarado siempre en su favor.
Por lo que hace a mi particular no debe VE creer que yo me diversifiqué del que he sido, ni que deje de antever en VE un iris, que aún desde la distancia para que yo pueda conducirme bien en lo crítico de las circunstancias presentes. Mándeme VE con la confianza que desea este su afectísimo paisano y servidor. Carta de Campos a San Martín, Mendoza 14/3. (1,T16,21)
La nota de VS de 15 del corriente, me manifiesta haber sido elegido el 8 del mismo, por la voluntad general del Pueblo de Mendoza por su Gobierno. Yo no dudo de los sentimientos de VS que contribuirá a su felicidad en las críticas circunstancias del día, y que el pueblo no tendrá que arrepentirse de su elección. Oficio de San Martín a Campos, Cuartel General en Santiago de Chile 24/3. (X,C286,D130)
Francisco de la Cruz despojado del mando del Ejército Auxiliar del Perú
¿Para qué cansar a Usted con relación de sucesos demasiado públicos y disgustantes? El resultado ha sido ya de quedar despojado del mando del Ejército del Perú; y obligado a venir hasta ésta a encontrar un asilo mientras no pueda pasar a mi casa; pero sin el de Usted yo no subsistir, porque no tengo de qué; he vendido la mayor parte de mi equipaje para costearme hasta aquí; tenga la bondad de franquearme alguna cantidad de dinero, bien sea por su préstamo particular de su bolsillo o un socorro de esa comisaría a cuenta de mi sueldo. Carta de Cruz a San Martín, Mendoza 14/3. (1,T16,32)
Mi querido amigo; con su apreciable del 28 pasado recibí la libranza de 200 pesos que tuvo la bondad de remitirme, y la que ha sido cubierta en el acto; doy por ello a Usted las más rendidas gracias y dejo al tiempo el acreditar mi reconocimient. Carta de Cruz a San Martín, Mendoza 10/4. (1,T16,76)
San Martín injuriado por los Ministros de Hacienda de Chile
Permítame VE hacerle presente que la información que dan los ministros tomada de los libros en donde se llevan constancia de las entradas y salidas del Estado, es suficiente por sí para los efectos que VE se propone, a que se agrega que en los primeros momentos de la restauración de Chile no hubo un ministerio separado para los negocios de Hacienda y que ya que tengo pleno conocimiento de todos los negocios del Estado, puedo asegurar y aseguro, que jamás ha tenido VE la menor intervención en ellos, mucho menos en materia pecuniaria. Por lo demás, Señor Excelentísimo no es de extrañar que VE en razón de vuestros distinguidos servicios, de su noble desinterés, de su moderación y virtudes, sea el blanco de los tiros de los facciosos, de los enemigos de la causa, y de los envidiosos, pero estas miserables arterias no merecen sino el más alto desprecio. La voz de los hombres sensatos, la de los patriotas beneméritos, la del Gobierno mismo se levantaría inmediatamente para reivindicar a VE de tan groseros ataques, si la opinión pública no tuviese tan fijada sobre la justicia que es debida al mérito de VE. Oficio de Ohiggins a San Martín, Santiago de Chile 24/3. (1,T16,36)
Chile está unido, las Provincias Unidas no
Viva la unión, que con ella somos libres. Unidos imponemos al enemigo. Gobierno español destestable. Santo y seña en el Cuartel General de Santiago de Chile en Rancagua 24 y 25/3. (1,T16,38)
Es nombrado el Cirujano Mayor del Ejército Libertador del Perú
En la orden general del día de hoy, se ha dado a conocer por cirujano mayor del Ejército Expedicionario Libertador del Perú a Santigo Deblin, como VE me ordena en nota 25. Oficio de Calderón a San Martín, 27/3. (1,T16,47)
José Miguel Carrera y Carlos Alvear huyen a Córdoba
Carrera, Ramírez y Alvear, escribe Soler, que huyen para Córdoba, con 400 hombres de que se compone la división que ha robado el primero, y cien del segundo. Acaso irán a solicitar la unión de Bustos. Carta de Miguel Zañartu a Ohiggins, Buenos Aires 31/3. (4,T6,206)
El Acta de Rancagua del 2 de Abril
El Congreso y Director Supremo de las Provincias Unidas no existen; de estas autoridades emanaban la mía de General en Jefe del Ejército de los Andes, y de consiguiente creo de mi deber y obligación el manifestarlo al cuerpo de oficiales del Ejército de los Andes, para que ellos por sí y bajo su espontánea voluntad nombren un General en Jefe que deba mandarlos y dirigirlos, y salvar por este medio los riesgos que amenazan a la libertad de América. Y se han de observar los siguientes artículos:
1º) El jefe más antiguo del Ejército de los Andes reunirá el Cuerpo de oficiales en un punto cómodo, y el más espacioso que se encuentre, dándo principio a la lectura de este manifiesto.
2º) Reunidos todos, procederán a escribir su votación para general en jefe, en un papeleta, verificándolo uno a uno, la que depositarán en algún cajón o saco que se llevará al efecto.
3º) Finalizada esta votación, se pasará al escrutinio que deberán presenciar el jefe principal y capitán más antiguo de cada cuerpo; dicho escrutinio se hará a presencia de todos.
4º) Se prohibe toda discusión que pueda preparar el ánimo en favor de algún individuo.
5º) En el momento de concluirlo el escrutinio, se tirará un acta que acredite el nombramiento del elegido, la que firmarán todos los jefes y el oficial más antiguo por clase.
6º) En el momento de verificada la elección se dará a reconocer el nuevo nombrado por un bando solemne; y por un saludo de 15 cañonazos.
Estoy bien cerciorado del honor y patriotismo que adorna a todo oficial del Ejército de los Andes; sin embargo, como jefe que he sido de él, y como compañero, me tomo la libertad de recordarles, que de la último unión de nuestros sentimientos pende la libertad de la América del Sud.
A todos es bien conocido el estado deprorable de mi salud, éste me imposibilita el entregarme con la contracción que es indispensable en los trabajos que demanda el empleo, pero no ayudar con mis cortas luces y mi persona en cualquier situación en que me halle a mi Patria y compañeros. Oficio de San Martín a Las Heras, Santiago de Chile 26/3.
En la ciudad de Rancagua a dos de abril de mil ochocientos y veinte, reunidos todos los señores jefes y oficiales del Ejército de los Andes en la Casa del Estado Mayor. A presencia del señor coronel jefe del Estado Mayor del Ejército Expedicionario, y comandante general del mismo, se abrió un pliego rotulado para dicho señor y dirigido por su Excelencia el señor general en jefe, con expresión en el sobre de no romper el nema hasta no estar reunida toda la oficialidad y procediédose a su lectura por el señor comandante general; concluyó y se procedió a la votación según está prevenido para elegir nuevo jefe, en virtud de no existir el Gobierno que nombró al presente; y como en el mismo acto tomáse la palabra el señor coronel del Nº 8, Enrique Martínez, y expusiese, que no debía procederse a la votación por ser nulo el fundamento que para ello se daba de haber caducado la autoridad del señor general; fue preciso considerar esta objeción que al mismo tiempo reprodujeron los señores coroneles Mariano Necochea, Pedro Conde y Rudecindo Alvarado, proceder de la votación de los señores oficiales que unánimemente convinieron en lo mismo, quedando de consiguiente sentado como base y principio, que la autoridad que recibió el señor general para hacer la guerra a los españoles y adelantar la felicidad del país, no ha caducado, ni puede caducar, porque su origen que es la salud del pueblo, está inmudable. En esta inteligencia, si por algún accidente o circunstancia inesperada, faltase por muerto o enfermedad el actual, debe seguirse en la sucesión del mando el jefe que continúe en el próximo inmediato grado, del mismo Ejército de los Andes. Y para constancia lo firmaron un oficial más antiguo de cada clase en todos los cuerpos, y todos los siguientes jefes.
Batallón de Artillería: Manuel Herrera (Comandante), Francisco Díaz (Sargento Mayor), Eugenio Giraul (Capitán), José Olavarría (Teniente) e Hilarión Cabrera (Ayudante).
Granaderos a Caballo: Nicasio Ramallo (Comandante), Benjamín Viel (Comandante de Escuadrón), Juan Obrien (Sargento Mayor), Bernardino Escribano (Capitán), Pedro Ramos (Teniente) y Antonio Espinoza (Alférez).
Batallón Nº 7: Pedro Conde (Comandante), Cirilo Correa (Sargento Mayor), Félix Villota (Capitán) y Miguel Cortés (Teniente).
Batallón Nº 8: Enrique Martínez (Comandante), Manuel Nazar (Capitán), Niceto Vega (Teniente) y José del Castillo (Subteniente).
Batallón Nº 11: Román Antonio Deheza (Capitán Comandante Accidentes), José Nicolás Arriota (Capitán), Manuel Castro (Teniente) y José Ignacio Plaza (Subteniente).
Cazadores a Caballo: Mariano Necochea (Comandante), Rufino Guido (Sargento Mayor), Manuel José Soler (Capitán), Pedro Ramírez (Subteniente) y Manuel Lacruz (Alférez).
Estado Mayor General: Juan Gregorio de Las Heras (Jefe), Juan Paz del Castillo (2do Jefe), Rudecindo Alvarado (Coronel), Juan José Quesada (Teniente Coronel), Luciano Cuenca (Sargento Mayor), Francisco de Sales Guillermo (Ayudante Secretario), Javier Antonio Medina (Oficial Ordenanza) y Juan Andrés Delgado (Secretario).
El segundo jefe del Estado Mayor dispondrá se saque una copia autorizada de este Acta, que se me pasar para fines del servicio; y la original con los demás documentos relativos archívese para constancia en la oficina de su cargo. Firmado por Juan Gregorio de Las Heras.
Certifico que el 2 de abril a las 5 y media de la tarde abrió el pliego que contenía en presencia de todos los jefes y del Ejército a presencia del jefe del Estado Mayor y comandante general interino procedió a su lectura. Firamdo por: Juan Paz del Castillo. (1,T16,41-45. La Bandera de los Andes queda en Chile, en 1823 San Martín a su vuelta del Perú la reclama y el Presidente de Chile accede al pedido: 2,656)
Cochrane y la toma de Valdivia, contento en Chile
Comunican su gratitud al Vice-Almirante Thomas Cochrane, y a los oficiales de su mando, por la captura de las
fortalezas de Valdivia. Asimismo, desean obsequirle una hacienda en
Concepción otorgando condecoraciones y ascensos a los demás oficiales. Oficio del Senado de Chile a Ohiggins, Santiago de Chile 8/4. (4,T35,280)
Tendrás mucho gusto en saber que me va espléndidamente aquí y tengo espectativas para el futuro mejores que en el pasado, por cuanto ahora nos estamos
preparando en serio para la invasión del Perú. Carta de Cochrane a su hermano, Valparaíso 10/4. (4,T35,282)
Belgrano escribe su última carta
Mi muy estimado cumpa. Nada se de la familia desde que sali de esa; no he podido escribir, por mis males, y porque ademas, las incomodidades del camino no me lo han permitido; ya hoy me hallo con algun mas descanso y podre repetir lograr esta satisfaccion, si mis enfermedades siguen con el alivio que ahora, pues he logrado tener algunas mas fuerzas, apetito y sueño. Me he encontrado con el Pais en revolucion, nadie sin embargo se (roto) se va tranquilizando con las buenas disposiciones de nues- (roto) Provincia. A mi cuma digale V. muchas cosas y que no dejen de darme noticias de mi Ahijadita:V. puede figurarse cuanto debe interesarme su salud y bienestar por todos aspectos. Expresiones mil a Doña Pepa, a Prudencio, recibiendolas V. con el afecto de la a[mistad] de su affmo. Carta de Belgrano a Celestino Liendo, Costa de San Isidro 9/4. (Archivo de Andrea Belgrano, Suc. Mario C. Belgrano)
Es desbaratado un complot contra San Martín en Chile
Por eso es, que cuando se ha descubierto la conspiración que debía reventar la noche del 8 del presente, y cuando se ha creído que el proyecto de los malvados podría dirigirse contra la apreciable persona de VE, esta municipalidad ha encontrado un nuevo motivo de satisfacción en mirar continuar incólumes los días del hombre grande que destinado por el Cielo para fijar el destino de la América, interesa cuanto le toca los más tiernos cuidados. Oficio del Cabildo a San Martín, Santiago de Chile 10/4. (1,T16,75)
Carlos de Alvear al frente de una revolución, Sarratea solicita su renuncia
Ayer domingo, se ha pasado sin revolución, y esto es un fenómeno. A la de Juan Ramón Balcarce ha sucedido otra presidida por Alvear, a quien suponíamos en la Bahía (Brasil), y el día 26 del pasado apareció en el cuartel de los Aguerridos con toda la guarnición sublevada que lo había aclamado por su general. El 26 a las 9 o 10 de la mañana me dirigí al Cabildo a hacer dimisión del cargo de Gobernador visto que no gobernaba sino que era gobernado. El Cabildo que se hallaba dispuesto a hacer lo mismo por su parte rehusó admitir la renuncia, me propuso que ambas autoridades hiciesen causa común y corriesen una misma suerte. Carta de Sarratea a San Martín, Buenos Aires 10/4. (1,T16,76-77)
San Martín presenta su renuncia por falta de apoyo de Ohiggins
Decidido a hacer cuanto genero de sacrificios caben en lo humano en favor de la libertad de la América del Sud me puse en marcha desde Mendoza en el estado de salud que a VE consta sin más objeto que la de verificar la expedición al Perú. A mi arribo a esta quedé con VE en que en todo abril o más tardar en mayo podría realizarse, pero los aprestos para dicha expedición poco han adelantado. En estas circunstancias ruego a VE que si el numerario para los gastos de la enunciada expedición no se haya reunido en el término de 15 días de la fecha, se servirá VE nombrar otro general que se encargue de ella, pues el estado deprorable de mi salud no me permite continuar por más tiempo. Oficio de San Martín a Ohiggins, Santiago de Chile 13/4. (1,T16,84)
Exmo Señor; dentro de 15 días como solicita VE por su honorable nota de ayer ha protestado el Señor Director Supremo que se hallará colectada la parte que del empréstito de 300 mil pesos mandado a exigir para realizar la expedición ha correspondido exhibir a los vecinos de esta Capital. Las providencias a este respecto se agistan del modo más eficaz ejecutivo, pero si ellas no son aún bastantes SE ofrece por sí mismo hacer en persona su recolección. Carta de Zenteno a San Martín, Santiago de Chile 14/4. (1,T16,86-87)
Lord Cochrane se queja ante San Martín
Veo claramente que muy poco se adelantará la expedición si VE no viene aquí para aprontar lo necesario para la embarcación de la tropa. Pipería no hay; ni suficientes víveres; y ningún esfuerzo se hace para comprarles. Carta de Lord Cochrane a San Martín, Valparaíso 15/4. (1,T16,88)
¡Ignoro que piensa hacer el Gobierno, porque el plan que estaba tratado, con la entera aprobación suya, me parece estar enteramente cambiado! He preparado los transportes y los buques de guerra para 2.000 tropas y se quieren mandar más, será preciso buscar o comprar embarcaciones; faltan muchos para una expedición de 4.000: piperías, botes, víveres, fogones y aún todo se necesita. Carta de Lord Cochrane a San Martín, Valparaíso 24/4. (1,T16,90)
Los Realistas del Norte avanzan sobre Salta
Ayer a la noche he recibido el oficio de VS del 17, en que me transcribe la comunicación del señor
Güemes dirigida desde Castañares al Muy Ilustre Cabildo de
Salta, dando un concepto seguro del avance del enemigo común sobre aquella provincia. Rindo a VS las gracias, y le suplico que con la mayor diligencia posible, quiera informarme de todas las noticias relativas del interés público que llegare a adquirir. Es adjunto un pliego de oficio para el Señor Gobernador de Tucumán, y conviene infinito a la causa general, que sea remitido con la mayor diligencia, lo que también suplico a VS muy particularmente. Oficio de San Martín a Campos (Gobernador de Mendoza), Cuartel General en Santiago de Chile 29/4. (X,C286,D132)
San Martín envía a Domingo Torres a Mendoza por amenazas de Carrera
Queda en mi poder la copia de la carta que VS me incluye, relativas a las disposiciones de José Miguel Carrera en la Provincia de Buenos Aires con el designio de propagar la anarquía, vengarse de sus enemigos y perturbar el orden de este país; en consecuencia yo reclamo con esta fehca al Gobierno y Cabildo de Buenos Aires, los deberes que estrechan la autoridad y poder de ambas magistraturas a frustrar los planes de ese aventurero. En precaución de estos males, el Gobierno Supremo de este Estado (Chile) envía un Diputado ante VS para combinar la defensa de esta Provincia, y yo mirando la suerte de Cuyo como un objeto digno de mis mayores esfuerzos, remito al teniente coronel Torres, a fin de que acercándose a VS le instruya de mis intenciones y arregle por lo que a mí toca, los medios de poner a cubierto la independencia y seguridad de ese territorio, para lo cual estarán prontas las fuerzas de mi mando. Carta de San Martín a Campos (Gobernador de Mendoza), Santiago de Chile 14/4. (1,T16,85)
El 22 llegamos a esta ciudad (Mendoza); su gobernador nos ha recibido con atención. El semblante de las cosas se asoma favorable a nuestros designios. No dudo que Cuyo se esforzará en detener la marcha de los perturbadores; y según las últimas noticias Córdoba está decidida a escarmentarlos. Santa Fe vacila en su decisión. Según se me ha instruído, Correa (partidario de Buenos Aires) se ha apoderado de la fuerza de Entre Ríos; y ha expelido al general Ramírez de aquella provincia. Este sólo conserva 200 hombres con los que acompaña a Carrera y Alvear. Los desgraciados sucesos del 25 y 26, han producido un favorable sacudimiento en la población de Buenos Aires; así se ve que Sarratea está obrando con energía y decisión. El correo y otros individuos que han venido de Buenos Aires, me aseguran que al retirarse Carrera y Alvear al arroyo de Pavón, han arrasado con toda la campaña que han atravesado. El comandante Colman (de Luján), Bernales de Pergamino y el coronel Vidal con más de 1.000 hombres que estaban en San Nicolás, se proponían reunirse con Soler y French. La fuerza de los dos corífeos ascendera a 700 hombres, su posición es en el arroyo Pavón. Bustos tiene fuerza en el Faile Muerto para cubrir el territorio de Córdoba. Aquí se trata de reunir en toda esta semana un
Cuerpo Legislativo (de Provincia) compuesto de un diputado de esta ciudad que lo es el Dr Güiraldes (Lorenzo), otro de San Luis que ya está aquí, llamado Jimenez; y para el viernes se espera el de San Juan, Juan Godoy. Luego que se reúnan trataremos con ellos. San Luis está estrechamente unido a este Gobierno, pero San Juan vacila; mucho más cuando Carrera no se ha descuiado en comunicarse con Corro. La fuerza del Batallón asciende a 600; sufre mucha deserción; pero con los prisioneros de guerra han conservado algo de número. La Rioja ha enviado su diputado a San Luis para federarse a esta provincia y hacerse respetar de Córdoba; que ha reconocido la independencia de aquel mismo pueblo. Carta de Torres a San Martín, Mendoza 20/4. (1,T16,88-89)
Acabo de recibir un chasque de San Juan, en que me avisa haber sido descubierta una revolución, que lo principal del pueblo iban a poner ejecución el sábado a la noche. Todo estaba pronto, pero un oficial de guardia se arrepintió, y una hora antes los delato a Corro y Murillo,Laprida, Carril y otros quedan presos. Mendizabal fue tomado vestido de mujer. Falló el golpe. Carta de Torres a San Martín, Mendoza 25/4. (1,T16,90)
Bolivar le comunica a Ohiggins la creación de Colombia y Venezuela
Tengo el honor de dirigirme a VE por
la primera vez y con la satisfacción de presentarle los preciosos documentos de la insurrección del ejército español contra Fernando VII, que deseo lleguen a VE por esta vía, antes por ninguna otra [...] Tengo también la honra de comunicar a VE la
creación de la República de Colombia, que el Congreso General ha decretado. La Ley fundamental de Colombia, es la acta de su creación. La
Constitución de Venezuela, cuyo proyecto me atreví a someter al Congreso, es otro documento que ofrezco a VE para que en medio de sus altas ocupaciones le eche la vista, y sepa el pueblo chileno por qué sistema se rigen sus hermanos de Colombia [...] Un ejército de Colombia marcha sobre
Quito, al mando del señor general Manuel Valdes, con ordenes de cooperar activamente con los ejércitos de Chile y Buenos Aires contra Lima [...] Se halla el Gobierno y el pueblo de Colombia altamente satisfecho de los sentimientos verdaderamente americanos que dirigen la conducta del Gobierno chileno y de sus
agentes en Inglaterra. Oficio de Simón Bolivar a Ohiggins, Campo libertador de San Cristóbal 2/5. (4,T15,12)
San Martín es nombrado General en Jefe del Ejército Libertador del Perú
Por cuanto teniendo en consideración los importantes y memorables servicios que el brigadier general José de San Martín ha contraído en favor de la Nación por medio de las gloriosas batallas que en su defensa y emancipación han ocurrido desde el fausto y grandioso día de su restauración debida en gran parte a la serie de grandiosos sucesos concebidos por su pericia, virtudes y conocimientos. Y habiéndose cifrado en su benemérita persona las esperanzas y votos del Gobierno y de la República para la superior dirección del Ejército Libertador del Perú, bien convencidos de que en este eminente encargo desplegará con toda energía y celo patriótico que le caracterizan las mismas relevantes calidades que hicieron su nombre temible a los enemigos en los combates sangrientos que ha empeñado y decidido. Vengo en conferirle el de
General en Jefe de dicho Ejército Libertador del Perú con el sueldo de 12.000 pesos anuales. Palacio Directorial de Santiago de Chile 6/5. (1,T16,92)
San Martín solicita un buque para comisiones secretas en Perú
Según lo ha solicitado VE por su nota de 13, dirigida al Director Supremo, de que se ponga a su disposición un buque velero con el destino de llevar comisiones secretas al Perú, comunico de orden suprema, lo conveniente al señor comandante en jefe de la escuadra a efecto de que la
goleta Moctezuma sea entregada a VE o a la persona que tenga a bien elegir para que se entregue del mando de dicho buque con absoluta independencia de la escuadra. Oficio de Zenteno a San Martín, Santiago de Chile 15/5. (1,T16,93)
Luzuriaga es indagado por la Justicia de Mendoza
Tengo el honor de incluir a VS la adjunta copia de la carta certificada por los Jefes del Ejército de los Andes. Un General de ese Estado reclama de la integridad de VS una justificación plena sobre las dos cartas que Juan Ramírez de Arellano, dice haberse interceptado al exgobernador Toribio de Luzuriaga, y que el resultado de la investigación se dé al público y a mi conocimiento. Nadie como VS, que es el representante de ese Pueblo, puede esclarecer el hecho que se refiere con respecto a esta acusación. Oficio de San Martín al Cabildo de Mendoza, Cuartel General en Santiago de Chile 22/5. (X,C286,D134)
Manuel Belgrano dicta su testamento
En el nombre de Dios y con su santa gracia amén. Sea notorio como yo, Dn. Manuel Belgrano, natural de esta ciudad, brigadier de los ejércitos de las Provincias Unidas en Sud América, hijo legítimo de Dn. Domingo Belgrano y Peri, y Da. María Josefa González, difuntos: estando enfermo de la (enfermedad) que Dios Nuestro Señor se ha servido darme, pero por su infinita misericordia en mi sano y entero juicio, temeroso de la infalible muerte a toda criatura e incertidumbre de su hora, para que no me asalte sin tener arregladas las cosas concernientes al descargo de mi conciencia y bien de mi alma, he dispuesto ordenar este mi testamento, creyendo ante todas cosas como firmemente creo en el alto misterio de la Santísima Trinidad, Padre, Hijo y Espíritu Santo, tres personas distintas y un solo Dios verdadero, y en todos los demás misterios y sacramentos que tiene, cree y enseña nuestra Santa Madre Iglesia Católica Apostólica Romana, bajo cuya verdadera fe y creencia he vivido y protesto vivir y morir como católico y fiel cristiano que soy, tomando por mi intercesora y abogada a la Serenísima Reina de los Angeles María Santísima, madre de Dios y Señora nuestra, a su amante esposo el señor San José, al Angel de mi Guarda, santo de mi nombre y devoción y demás de la corte celestial, bajo de cuya protección y divino auxilio otorgo mi testamento en la forma siguiente:
1. Primeramente encomiendo mi alma a Dios Nuestro Señor, que la crió de la nada, y el cuerpo mando a la tierra de que fue formado, y cuando su Divina Majestad se digne llevar mi alma de la presente vida a la eterna, ordeno que dicho mi cuerpo, amortajado con el hábito del patriarca Santo Domingo, sea sepultado en el panteón que mi casa tiene en dicho convento, dejando la forma del entierro, sufragios y demás funerales a disposición de mi albacea.
2. Ordeno se dé a las mandas forzosas y acostumbradas a dos reales con que las separo de mis bienes.
3. Declaro: Que soy de estado soltero, y que no tengo ascendiente ni descendiente.
4. Declaro: Que debo a Dn. Manuel de Aguirre, vecino de esta ciudad, dieciocho onzas de oro sellado, y al Estado seiscientos pesos, que se compensará en el ajuste de mi cuenta de sueldos, y de veinticuatro onzas que ordeno se cobre por mi albacea, y presté en el Paraguay al Dr. Dn. Vicente Anastasio de Echevarría, para la compra de una mulata – Cuarenta onzas de que me es deudor el brigadier Dn. Cornelio Saavedra, por una sillería que le presté cuando lo hicieron Director; dieciséis onzas que suplí para la Fiesta del Agrifoni en el Fuerte, y otras varias datas: tres mil pesos que me debe mi sobrino Dn. Julián Espinosa por varios suplementos que le he hecho.
5. Para guardar, cumplir y ejecutar este mi testamento, nombro por mi albacea a mi legítimo hermano el Dor. D. Domingo Estanislao Belgrano, dignidad de chantre de esta Santa Iglesia Catedral, al cual respecto a que no tengo heredero ninguno forzoso ascendiente ni descendiente, le instituyo y nombro de todos mis acciones y Dros. presentes y futuros. Por el presente revoco y anulo todos los demás testamentos, codicilos, poderes para testar, memorias, u otra cualesquiera otra disposición testamentaria que antes de ésta haya hecho u otorgado por escrito de palabra, o en otra forma para que nada valga, ni haga fe en juicio, ni fuera de él excepto este testamento en que declaro ser en todo cumplida mi última voluntad en la vía y forma que más haya lugar en Dro. En cuyo testimonio lo otorgo así ante el infrascrito escribano público del número de esta ciudad de la Santísima Trinidad, puerto de Santa María de Buenos Aires, a veinticinco de mayo de mil ochocientos veinte.
Y el otorgante a quien yo dho. escribano doy fe conozco, y de hallarse al parecer en su sano y cabal juicio, según su concertado razonar, así lo otorgo y firmo, siendo testigos llamados y rogados don José Ramón Mila de la Roca, Dn. Juan Pablo Sáenz Valiente, y Dn. Manuel Díaz, vecinos. M. Belgrano (firma). Narciso de Iranzuaga (firma) Escribano Público. (3)
San Martín en Valparaíso
Ayer, mañana tuve la última sesión con Cochrane, y a pesar de que él inculca en que la expedición de 4.000 hombres es embarazosa, le hecho ver que es indispensable hacer se verifique, pues así lo requieren las circunstancias e intereses de la América. Oficio de San Martín, Valparaíso 28/5. (4,A1,304)
San Martín solicita tropas al Ejército Auxiliar del Perú
Siendo ya forsozo inevitablemente el que marchen todas las fuerzas que corresponden a la Patria
hacia el Perú a abrir la Campaña, que no puede dejar de ser la última, según nuestras circunstancias y las del enemigo común. Yo invito a VS a nombre de la Patria para que determine sin más demora la marcha de las de su mando, que no hagan falta a la conservación del orden y seguridad de esa Provincia. Oficio de San Martín a Bustos (Gobernador de Córdoba y General en Jefe del Ejército Auxiliar del Perú), Cuartel General en Santiago de Chile 9/6. (X,C286,D135)
Moyano vende la esclava de San Martín
Pedro Advíncula Moyano dijo que como apoderado del Excelentísimo Señor José de San Martín, General en Jefe del Ejército de los Andes, vende por el tenor de la presente y en la forma que mejor lugar tenga en derecho a Manuel Peralta, una
mulata esclava llamada Jesús, como de edad de 30 años; y se la vende en cantidad de 160 $, que confiesa tener recibidos a su entera satisfacción en dinero efectivo. Son testigos: José Vicente Videla y Santiago Miranda. Certificado por el escribano Cristóbal Barcala, Mendoza 13/6. (X,P178,87-89)
San Martín se traslada a Valparaíso, la Expedición al Perú casi lista
Mi querido amigo; con su apreciable del 3 he recibido la que Usted me incluye de Buenos Aires. Ella detalla completamente la verdadera situación de aquel desgraciado pueblo, lo peor es que no veo al horizonte de nuestro Estado la menor esperanza de despejarse; sea de esto lo que fuere, ello es preciso trabajar para que los españoles no sean los terceros en discordia y se aprovechen de nuestras disenciones.
Pasado mañana salgo para Valparaíso para
embarcarme a las costas del Perú; el ejército lo verificará el 30. Esta jornada va a decidir nuestra suerte; ella me cuesta bastantes fatigas, y las que me esperan en el curso de la campaña, pero serán todas bien empleadas si se consigue el objeto de todos, mi amigo, es decir que bien sea la suerte próspera, o adversa, me despido de Usted para siempre, pues he tomado la firme resolución de abandonar mi país; si soy feliz como espero en la empresa, me quedará el consuelo de dejar a la Patria sin enemigos exteriores, y de haber hecho en su favor cuanto ha estado en mis alcances por su felicidad.
Hágame Usted el gusto de ofrecer mis sinceros respetos al señor su padre, y creer que en cualquier destino que la suerte me ponga, será uno de sus mejores amigos. Carta de San Martín a Godoy Cruz, Santiago de Chile 16/6. (1,T16,94)
De suprema orden tengo la satisfacción de comunicar a VS que el lunes 18 del corriente partirá SE a Valparaíso, con el único objeto de acelerar la salida de la
Expedición Libertador del Perú, por lo que sólo le acompañará el señor Ministro de Guerra y Marina, quedando aquí encargados del despacho de Gobierno y Hacienda los Ministros de los respectivos departamentos, como sus Delegados.
La expedición es la mayor y mejor que se ha visto en América en tiempo de revolución. El ejército y la marina están abundantemente equipados y provistos de armamento, pertrechos, municiones y víveres, todo debido al inimitable entusiasmo y generosidad de los chilenos, que se han esforzado en sus sacrificios de un modo que parece increíble a las apuradas circunstancias causadas por una guerra tan larga como obstinada.
Dará la vela la escuadra del 6 al 7 de julio a más tardar.
La respetable fuerza que conduce, la bella disposición de la marina y ejército, la que se hallan los pueblos del Perú para recibirnos como a sus hermanos y libertadores, según recientes y seguras noticias que hemos recibido; todo, en fin, presagia un resultado decisivo y glorioso a favor de la libertad americana [...] Carta de Joaquín de Echeverría a Miguel Zañartu, Santiago de Chile 17/6. (4,T6,121)
Una esclava para el Colegio de Mendoza
Antonia Corbalán y Lima vende al Señor Prelado de la Santa Iglesia Catedral de Córdoba, Lorenzo Güiraldes, actual Rector del Colegio de esta ciudad,
una multatilla su esclava llamada Magdalena como de edad de 18 años; que va con el peligro de hallarse actualmente dicha esclava embarazada, de que está impuesto el comprador. Cerficiado por el escribano Cristóbal Barcala, Mendoza 17/6. (X,P178,89)
Blanco Encalada es Jefe interino
El 13 del corriente ha sido nombrado Jefe interino del Estado Mayor General, el coronel general Manuel Blanco Encalada. Gazeta Ministerial de Chile 17/6. (4,T13,475)
Alvarez Condarco recibe instrucciones para Irizarri en Londres
Tengo la honra de acompañar a VS abierto el oficio que con esta fecha se pasa por la Secretaría de mi cargo a don José Antonio Alvarez Condarco, para que después de instruído VS de él lo haga llegar a sus manos. Oficio de Joaquín de Echeverría a Antonio Irizarri, Santiago de Chile 18/6. (4,T4,136)
Manuel Belgrano muere en Buenos Aires
Fallece el 20 de junio a las 7 horas. Le practicaron la autopsia y lo embalsamaron los doctores Joseph Redhead y Juan Sullivan. De acuerdo a su deseo fue amortajado con el hábito domínico y enterrado en el atrio de la Iglesia de Santo Domingo. El patólogo Sullivan señalaba que sacó gran cantidad de agua; que encontró un tumor duro en el epigastrio derecho; el hígado aumentado en volumen, al igual que el bazo; los riñones desorganizados, los pulmones colapsados, el corazón hipertrofiado. La descripción parece coincidir con el diagnóstico de un carcinoma hepatocelular; un tumor de gran tamaño, con nódulos en la superficie, tejido duro por la cirrosis portal que suele asociarse; ictericia y ascitis. (3)
Güemes y la retirada del Ejército Español de Salta
El engaño de estos bárbaros halagaba mi intención; porque
habiendome insinuado el Señor General San Martín sobre su próxima expedición a los puertos intermedios y que convenía por esta parte llamarles la atención y conservarla con entretenidas, me propuse dejarlos llegar sin mayores dificultades [...] Oficio de Güemes al Gobernador Intendente de Córdoba, Salta 22/6. (4,T14,53-59. Detalle de las acciones)
San Martín es injuriado desde Mendoza
Exmo Señor; hasta el momento de recibir su nota oficial de 16, por conducto del ayudante mayor de plaza, José Rosauro García, no tenía antecedente alguno este Cabildo (Mendoza) de la anterior citada fecha 22 de mayo, sobre el mismo objeto, y adquirida noticia de que sobra la mesa de la Administración de Correos se hallaba un pliego cerrado, rotulado a esta corporación, se ocurrió por él en la fecha de hoy; impuesta de su contenido ha visto con horror el de la carta en copia que la acompaña. Ella comprende en verdad imposturas tan groseras, como ajenas de la acreditada conducta y nobles sentimientos que adornan y caracteriza a VE.
Pero puede VE descansar en el eficaz empeño que ejercerá esta Municipalidad, en esclarecer, y patentizar la negra imputación indicada, a raíz de vindicarle cuanto antes de un modo público, de la atroz injuria que se le ha inferido. Y aún que hoy no se halla aquí el cobarde alevoso calumniante, se tiene noticia que intenta regresar de Buenos Aires a este destino a uno a colocarse. Oficio del Cabildo a San Martín, Mendoza 23/6. (1,T16,95)
Exmo Señor; me sirve de la mejor satisfacción, que Usted quede asegurado que aún antes de recibir sus honorables notas de 9 y 16 (a que tengo el honor de contestar) había ya dispuesto mi marcha a la Provincia de Salta con la tropa de mi mando. Para esta resolución no necesitaba otra invitación ni estímulo que mi propio honor, y el sumo interés que tomo por la felicidad de la Nación; y sin más principio que éste, establecí relaciones con el Diputado del Gobierno de Chile (Tomás Guido), y he combinado con el general del Ejército Auxiliar del Perú. Con todo acepto gustosísimo las generosas ofertas de VE, y le prometo por lo más delicado de mi honor, que el primero de julio inmediato realizaré mi marcha, si los auxilios que me franquean la generosa provincia de Cuyo, están prontos, y que sólo la podré retardar, cuanto éstos retarden.
VE debe contar desde este mismo momento con todo lo que dependa de mí en obsequio de la común felicidad y con mi amistad, consideraciones y respeto a la persona de VE, así como el que, el sacrificio de mi propia existencia será poco para llenar mi existencia. Ofrezco a VE iguales sentimientos de parte de los señores oficiales y tropa, que se ha encargado a mi dirección, y todos contamos con que el éxito de su expedición será igual a las muchas glorias que ha sabido VE proporcionar a la Patria. Carta de Francisco del Corro a San Martín, Cuartel en marcha de San Juan 25/6. (1,T16,96)
San Martín ordena se le remita la imprenta
Nada se ha hecho sobre los billetes y quisiera hablase Usted con Linch, para que se decidiese sobre este particular. La imprenta es preciso que venga para no vernos apurados en los últimos días y poderla embarcar con reposo. Carta de San Martín a Guido, Valparaíso 28/6. (1,T20,78)
San Martín se organiza para embarcarse al Perú, Bolivar no entra en Quito
A nuestra vista trataremos sobre escribir a Bolivar. Para el 15 por parte de la escuadra y Ejército estaremos listos y Solar me asegura que con los 30 mil pesos que se les han librado estarán igualmente prontos los transportes; todo está tomando mucha actividad y yo estoy dispuesto a dejarlo todo con tal de marchar. Diga Usted a Las Heras que el Nº 7 está pronto a marchar a primera orden y que al efecto tengan pedidas las cabalgaduras de carga y silla. Usted debe estar aquí a más tardar para el 12; a cuyo efecto tomará Usted sus medidas en inteligencia que para el 19 todos debemos estar listos para poner el pie a bordo. Carta de San Martín a Guido, Valparaíso 1/7. (1,T20,79)
Sirva de gobierno que para el 26 sin falta marcho; arregle Usted sus cosas y véngase cuanto antes. Sarratea está haciendo una notable falta y sin él todo se paraliza. Dígale a Lemos que remita todo lo que tiene del Ejército para hacer el embarque sin confusión. Iré al nombramiento de García, pero será hecho por mí, pues verificada por el Gobierno pues sería una cosa no bien mirada; sin embargo hablaré hoy al amigo Ohiggins, el que está ya conmigo de acuerdo sobre el particular y García no tiene que hacer más que venirse para extenderle su despacho y quedar corriente. Carta de San Martín a Guido, Valparaíso 4/7. (1,T20,80)
Admita Usted las propuestas sobre los billetes pero no cierre del todo trato alguno hasta avisarme pues se lo espera a Sarratea para ver otras proposiciones que se hacen en ésta. Repito mi encargo de la
imprenta y que venga rabiando. Sarratea hace notabilísima falta para los transportes y por lo que respecta a escuadra estaba toda lista para fines de la semana entrante.
No es cierta la entrada de Bolivar en Quito. Carta de San Martín a Guido, Valparaíso 7/7. (1,T20,81)
El Rey y el Parlamento Británico prohiben a sus súbditos alistarse al servicio extranjero
He recibido el ejemplar impreso que incluye de la ley promulgada por este Gobierno con aprobación de las dos Cámaras del Parlamento prohibiendo a sus súbditos el alistamiento al servicio extranjero, y que se equipen y armen buques para fines hostiles en todos los dominios de su Majestad sin su Real permiso bajo las penas que se prescriben, sin que dicha ley comprenda a los que hayan empleádose en dicho servicio, antes de su publicación.
Desde luego haré de ella el uso conveniente, según permitan las circunstancias circulándola en este distrito de mi mando traducida a nuestro idioma; y lo participo a VE ofreciéndome a su disposición. Oficio del virrey Pezuela al Duque de San Carlos, Lima 8/7. (1,T16,96-97)
Lord Cochrane renuncia al mando de la Escuadra Naval
Se informa que Lord Cochrane, contreñido por el ilibeal tratamiento del Gobierno, se ha visto finalmente obligado a renunciar al mando que una política celosa le impide ya conservar con honor hacia sí mismo o en beneficio del Estado. Se solicita que todos aquellos que se sientan ligados a SS (Su Señoría) y estén concientes de la medida en que el honor, la seguridad y el interés, no sólo de la Marina sino del Estado de Chile, dependen de que él continue en el mando, se reunan hoy a bordo de la Independencia, a la una, con el fin de considerar los pasos que fuere más conveniente dar. Fragata Ohiggins, Valparaíso 19/7. (4,T36,104)
SE el Supremo Director, me ordena decir a VS que si persiste en renunciar al mando de la escuadra, que ha sido honrada con la insignia de VS, causa del temor y del desaliento de nuestros enemigos y de la gloria de los verdaderos americanos, o si el gobierno la admitiese, sería sin duda éste un día de duelo universal en el Nuevo Mundo. El gobierno, por consiguiente, en nombre de la Nación, devuelve a VS sus despachos, rogándole los acepte para el bien de la sagrada causa, a la que se ha dedicado VS con toda su alma. Carta de Zenteno a Lord Cochrane, Valparaíso 20/7. (4,T36,107)
Proclama de San Martín a los habitantes de las Provincias del Río de la Plata
Compatriotas: se acerca el momento, en que debo seguir el destino que me llama; voy a emprender la grande obra de dar la libertad al Perú. Mas antes de mi partida, quiero deciros algunas verdades, que sentiría las acabéis de conocer por experiencia. También os manifestaré las quejas que tengo, no de los hombres imparciales, y bien intencionados cuya opinión me ha consolado siempre, sino de algunos, que, conocen poco sus propios intereses, y los de su país, porque al fin, la calumnia, como todos los crímenes, no es sino obra de la ignorancia y del discernimiento pervertido.
Vuestra situación no admite disimulo, diez años de constantes sacrificios, sirven hoy de trofeo a la anarquía; la gloria de haberlos hecho, es mi pesar actual, cuando se considera su poco fruto. Habéis trabajado un principio con vuestras propias manos, y acostumbrados a su vista, ninguna sensación de horror es capaz de deteneros.
El genio del mal os ha inspirado el delirio de la federación; esta palabra está llena de muertes y no significa sino ruina y devastación. Yo apelo sobre esto, a vuestra propia experiencia, y os ruegos que escuchéis con franqueza de ánimo la opinión de un general que os ama, y que nada espera de vosotros. Yo tengo motivos para conocer vuestra situación, porque en los dos ejército que he mandado, me han sido precisos averiguar el estado político de las provincias que dependían de mi. Pensar en establecer el gobierno federativo, en un país casi desierto lleno de celos y antipatías locales, escaso de saber y de experiencia en los negocios públicos, desprovistos de rentas para hacer frente a los gastos del Gobierno General, fuera de los que demandan la lista civil de cada Estado. Es un plan cuyos peligros no permiten infatuarse, ni aún con el placer efímero que causan siempre las ilusiones de la novedad.
Compatriotas; Yo os hablo con la franqueza de un soldado. Si dóciles a la experiencia de diez años de conflictos, no dais a vuestros deseos una dirección más prudente, temo que cansados de la anarquía, suspiréis al fin por la opresión, y recibáis el yugo del primer aventurero feliz que se presente, quien lejos de fijar vuestros destinos, no hará más que prolongar más vuestra incertidumbre.
Voy ahora a manifestar las quejas que tengo, no porque el silencio sea una prueba difícil para mis sentimientos, sino porque yo no debo dejar en perplejidad a los hombres de bien ni puedo abandonar eternamente a la posteridad el juicio de mi conducta, calumniada por hombres, en quien la gratitud algún día recobrará sus derechos.
Yo servía en el ejército español en 1811 veinte años de honrado servicios, me habían traído alguna consideración, sin embargo de ser americano; supe la revolución de mi país, y al abandonar mi fortuna y mis esperanzas, sólo sentía no tener más que sacrificar al deseo de contribuir a la libertad de mi patria, llegué a Buenos Aires a principios de 1812 y desde entonces me consagré a la causa de América; sus enemigos podrán decir si mis servicios fueron útiles.
En 1814 me hallaba de gobernador en Mendoza, la pérdida de este país, dejaba en peligro la provincia de mi mando, yo la puse luego en estado de defensa, hasta que llegase el tiempo de tomar la ofensiva. Mis recursos eran escasos y apenás tenía un embrión de ejército, pero conocía la buena voluntad de los cuyanos, y emprendí formarlo bajo un plan que hiciese ver hasta qué grado puede apurarse la economía para llevar al cabo las grandes empresas.
En 1817 el ejército de los Andes está ya organizado. Abrí la campaña de Chile y el 12 de febrero mis soldados recibieron el premio de su constancia. Yo conocí que desde este momento excitaría celos mi fortuna, y me esforcé aunque sin frutos a calmarlos, con moderación y desinterés.
Todos saben que después de la batalla de Chacabuco, me hallé dueños de cuanto puede dar el entusiasmo a un vencedor, el pueblo chileno quiso acreditarme su generosidad ofreciéndome todo lo que es capaz de lisonjear al hombre, el mismo es testigo del aprecio con que recibí sus ofertas y de la firma con que rehusé admitirlas.
Sin embargo de esto, la calumnia trabajaba contra mí, con una perfecta actividad, pero buscaba las tinieblas, porque no podía existir delante de la luz. Hasta el mes de enero próximo pasado, el general San Martín merecía el concepto público en las provincias que formaban la unión, y sólo después de haber formado la anarquía, ha entrado en el cálculo de mis enemigos el calumniarme sin disfraz y recurrir sobre mi nombre los improperios más exagerados.
Pero yo tengo derecho a preguntarles; ¿ qué misterio de inequidad ha habido en esperar la época del desorden para denigrar mi opinión ? ¿ cómo son conciliables las suposiciones de aquellos con la conducta del Gobierno de Chile y la del Ejército de los Andes ? El primero de acuerdo con el Senado y voto del pueblo, me ha nombrado jefe de las fuerzas expedicionarias y el segundo me reeligió por su general en el mes de marzo, cuando trastornada la autoridad en las Provincias Unidas la autoridad central, renuncié al mando que había recibido de ellas, para que el ejército acantonado entonces en Rancagua nombrase al jefe a quien quisiera voluntariamente obedecer.
Si tal ha sido la conducta de los que han observado de cerca mis acciones, no es posible explicar la de aquellos que me calumnian desde lejos, sino corriendo el velo que oculta sus sentimientos y miras. Protesto el que me aflije el pensar en ellas, no por lo que toca a mi persona, sino por los males que amenazan a los pueblos que se hallan bajo su influencia.
Compatriotas; yo os dejo con el profundo sentimiento que causa la perspectiva de vuestras desgracias; vosotros me habéis recriminado aun de no haber contribuido a aumentarlas, porque éste habría sido el resultado, si yo hubiese tomado una parte activa en la guerra contra los federalistas; mi ejército era el único que conservaba su moral y lo exponía a perderla, abriendo una campaña que en el que el ejemplo de la licencia armase mis tropas contra el orden. En tal caso, era preciso renuncia la empresa de libertar el Perú y suponiendo que la suerte de las armas me hubiese sido favorable en la guerra civil, yo habría tenido que llorar la victoria con los mismos vencidos. No, el general San Martín jamás derramará la sangre de sus compatriotas y sólo desenvainará la espada contra los enemigos de la independencia de Sud América.
En fin, a nombre de vuestros propios intereses, os ruego que aprendáis a distinguir los que trabajan por vuestra salud, de los que meditan vuestra ruina; no os expongáis a que los hombres de bien os abandonen al consejo de los ambiciosos; la firmeza de las almas virtuosas no llega hacia el extremo de sufrir, que los malvados sean puestos a nivel con ellas y ¡ desgraciado el pueblo donde se forma impunemente tan escandaloso paralelo !
¡ Provincias del Río de la Plata ! El día más celebre de nuestra revolución está próximo a amanecer; voy a dar la última respuesta a mis calumniadores; yo no puedo hacer más que comprometer mi existencia y honor por la causa de mi país; y sea cual fuere mi suerte en la campaña del Perú, probaré que desde que volví a mi patria, su independencia ha sido el único pensamiento que me ha ocupado; y que no he tenido más ambición que la de merecer el odio de los ingratos y el aprecio de los hombres virtuosos. José de San Martín, Cuartel General de Valparaíso 22/7. (1,T16,98-101)
San Martín quiere zarpar el 29 de Julio
Tengo el honor de acusar a VS el recibo de su nota de ayer en que transcribe el estado en que se hallan los transportes y la necesidad de activar más sus aprestos. En su consecuencia he dado parte al Supremo Director del Estado, quien ha dispuesto prevenir a los empresarios que para el Sábado siguiente deben estar listos los dichos transportes para dar a la vela. Oficio de San Martín a Lord Cochrane, Valparaíso 22/7. (4,T36,111)
Los masones pactan con Carrera y Alvear
Usted esté cierto de que toda la máquina la mueven los portugueses, que ellos son los que secretamente atizan la discordia, auxilian a Carrera y Alvear, y a todos los
enemigos del orden establecido. Los
masones todos casi están en esta combinación, y el infante Julián Alvarez es el primero como Venerable; sigue Diaz Vélez, que fue el instrumento inmediato de que se sirvió toda la
Logia para infundir el miedo al Congreso y demás hombres débiles. Yo creo que todos los
masones están convenidos a vengar la muerte de
Luis Carrera, que era hermano. Carta de Miguel Zañartu a Ohiggins, Montevideo 23/7. (4,T6,211)
Los anarquistas son derrotados en Mendoza
Tengo el honor de anunciar a VE la total destrucción de los anarquistas de estas provincias, que parece se había puesto de acuerdo para consumar la obra de sus atentados en el mes presente. Mientras José Miguel Carrera en unión de Carlos Alvear y el Gobernador de Santa Fe atacaban vivamente a Buenos Aires para sacar de allí auxilios que le facilitasen la empresa de envolver igualmente a ese Estado en los mismos horrores [...] Carta de Tomás Godoy Cruz al Director Supremo de Chile, Mendoza 13/8. (4,T14,23-25; detalle de las acciones)
San Martín ordena distribuir las tropas en la Escuadra Naval
Tengo el honor de incluir a VS la adjunta Lista de los Oficiales del Ejército de mi mando para que VS se sirva destinarlos a la Escuadra de su mando, avisándome en que buques van para prevenirles sus embarques. Oficio de San Martín a Lord Cochrane, Valparaíso 15/8. (4,T36,131)
San Martín es General en Jefe del Ejército y Escuadra Naval
El objeto de la presente expedición es extraer al Perú de la odiosa servidumbre de España, elevarlo al rango de una Potencia libre y Soberana y concluir, por este medio, la grandiosa obra de la Independencia Continental de Sur América. El Capitán General de Ejército,
José de San Martín, es el Jefe a quien el Gobierno y la República han confiado la exclusiva dirección de las operaciones de esta grande empresa; a fin de que las Fuerzas Expedicionarias de mar y tierra para obrar combinadas y simultáneamente reciban un sólo impulso comunicados por el consejo y determinación del General en Jefe. En este concepto tengo la satisfacción de prevenir a VS por toda instrucción, que desde el momento que zarparon de Valparaíso la Escuadra y Transportes expedicionarios, obrará VS con las fuerzas marítimas de su mando precisa y necesariamente en consecuencia del plan que le ministrare el General San Martín, tanto sobre el punto de desembarco, como respecto de los movimientos y operaciones sucesivas que VS debe hacer con la Escuadra; de suerte que no podrá VS por sí mismo obrar con el todo o con parte de los buques de guerra de su dependencia, sino que observará absolutamente la línea de conducta que, respecto de las operaciones de la Escuadra, trazare y fuere trazando el General, según que este lo creyere conveniente.
Es fuera de caso recomendar a VS con todo encarecimiento, la más exacta observancia de ésta mi resolución bajo toda especie de responsabilidad. Relevantes pruebas ha dado VS que su conducta militar no sigue otro rumbo sino aquel que le indica el Gobierno y me lisonjeo de que VS, consecuente siempre a sus principios, se presentará a la gratitud de la Amércia como el héroe de su Libertad. Palacio Directorial en Valparaíso, 19/8. (4,T36,134-135)
Y el gran día llegó, San Martín y los obstáculos que tuvo que sortear
Parecían incalculables los
obstáculos inmontables que se presentaban para realizar la expedición al Perú. El
Gobierno de Chile, sin numerario, ni crédito.
El ejército amenazado de una pronta disolución por falta de medios para sostenerlo.
El Gobierno de Buenos Aires disuelto, no dejaban la menor esperanza de auxilio alguno, y
la anarquía en sus provincias se habían hecho sentir en el Ejército de los Andes por la sublevación y pérdida del Batallón de Cazadores, fuerte de 1.072 plazas, como por la deserción escandalosa que expermientaban los demás cuerpos del mismo ejército, efecto de las sugestiones de los anarquistas; todo lo que hacía más difícil la situación. El
partido de los Carrera, activo y emprendedor, ocupaba la atención del Gobierno con conspiraciones repetidas, distrayéndolo del principal objeto cual era la expedición. La
escuadra dividida entre los partidos de Guise y Cochrane, y éste último para que la expedición no pasase los 1.200 hombres.
Ohiggins amenazado de la facción Carrerina, sólo se desprendía de las peores tropas para expedicionar, quedándose de las mejores y de más confianza para la conservación de el orden en Chile. El
ejército patriota del Alto Perú se había disuelto, y por consiguiente, la mayor parte de las fuerzas que los españoles mantenían en él quedaban disponibles para engrosar las del Bajo, como lo verificaron. En fin, el general Miller es un testigo ocular del mal estado en que salieron la
Escuadra y transportes, como de la calidad de la tropa; a pesar de todo no quedaba otro recurso que cerrar los ojos al porvenir transportando la
guerra al Perú, pues en Chile era normalmente imposible exisitir 6 meses más sin disolver enteramente las tropas por falta de auxilio con qué sostenerlas. Carta de San Martín a Miller. (Bruselas, 1827;1,T20,382-383)
San Martín se despide de su amada MendozaYa se vencieron por fin las dificultades. Mañana da a la vela la Expedición Libertadora del Perú, que va a mercerce este nombre a toda costa. Como un individuo de ese vecindario, yo me despido de VS su representante porque
la amo; felicitando a esa Corporación respetable de haber recobrado su autoridad vulnerada y de haber elegido libremente para Gobierno un ciudadano que conoce los bienes de la unión y del orden; y los límites de una libertad racional. Si la Patria afirma sus derechos, yo volveré a Mendoza, a ser útil con todas mis posibilidades a mis conciudadanos, y a vivir con ellos hermanablemente. Entretanto yo les deseo, la concordia, la benevolencia recíproca, y la sabiduría para conducirse del modo más conveniente a nuestra regeneración política. Dios guíe a VS muchos años, Cuartel General de Valparaíso 19/8. (X,C286,D138)
El Ejército, la Escuadra Naval y los Transportes zarpan de Valparaíso
En este momento
zarpa de este puerto la Expedición Libertadora del Perú, y no permitiendo las graves atenciones, que rodean al Gobierno, dar ahora los detalles sobre la composición de la fuerza y elementos de guerra de que consta [...] Oficio de Ohiggins al Director Delegado del Departamento de Gobierno, Valparaíso 20/8. (4,T14,27)
Desde el 25 del actual mes de agosto, deben considerarse en estado riguroso de bloqueo por la Escuadra de Chile, y lo están efectivamente, en virtud de las ordenes dadas al Comandante en jefe de ella, Vicealmirante Lord Cochrane,
todos los puertos y fortalezas del mar Pacífico, que están situados entre los paralelos 2º 12' y 21º 48' Latitud Sur, es decir la línea de la costa desde
Iquique hasta Guayaquil inclusive. Por consiguiente queda prohibido penetrarla a todo buque, de cualquier nación que fuere, o procediere. Palacio Dictatorial en Valparaíso, Ohiggins y Zenteno 20/8. (4,T14,27-30)
Barómetro del Termómetro de Mendoza (sin lugar, sin fecha)
Señor Editor. Devuelvo los doce números y un parte del
Termómetro de Mendoza (Diario), que he leído muchas veces, y por eso detenido el tiempo que demandaba el placer que me ha dado, y que tácitamente me permitía el desdén con que V los mira... (4,T14,33-35)
La Escuadra Naval se completa en Coquimbo
Con singular placer recibo la suya de
23 de agosto, fechada a bordo de la Ohiggins a la vela al frente de Coquimbo (Chile), a la que contesto, celebrando infinito la reunión de todos los transportes que navegan con viento tan fresco y favorable como se debía esperar. Carta de Ohiggins a Lord Cochrane, Santiago de Chile 4/9. (4,T36,147)
Ohiggins regresa a Santiago de Chile
Jamás ha salido SE de ella durante su gobierno, sino para grandes servicios a la Patria, y su vuelta siempre fue conocida después de estar ya en su palacio, por ser contra su genio la pompa de una entrada pública. Desde el 20 de agosto último, en que avisó de Valparaíso la salida de la Expedición Libertadora del Perú, manifestó el pueblo sus deseos de acompañarlo en su entrada, por reconocimiento al autor y ejecutor de esa grande obra de América [...] Gazeta Ministerial de Chile, Santiago de Chile 9/9. (4,T14,49)
El Ejército Libertador del Perú desembarca en el Puerto de Paracas a 200 km al sur de Lima
El Ejército debe estar pronto a desembargar en el momento que se le dé la orden por el signo establecido de las banderas. Los cuerpos que primero deben desembarcar son el Nº 11, 2 y 7, 4 piezas de artillería de montaña con los correspondientes artilleros de los Andes y 50 granaderos a caballo. Para el desembarco todo soldado debe llevar en su mochila 2 días de víveres y secos, su caramañola llena de agua. El punto de desembarco será indicado por el bote del Jefe del Estado Mayor que llevará un gallardete nacional a popa. El valor, orden y disciplina, el reto unido, que tanto han brillado en otras ocaciones se herán distinguir, más que nunca, en esta jornada. Oficio de Las Heras a Cochrane, a bordo de la fragata San Martín a la altura de Pisco (Perú) 7/9. (4,T36,149-151)
Disponga VS desembarque inmediatamente el Ejército y que
marche al pueblo de Pisco (Perú), con órdenes de entrar en él esta tarde y si no pudiese verificarlo antes en la noche lo ejecute mañana temprano. Si hubiesen venido algunos enfermos a bordo del Aguila, cuide VS pasen luego al hospital y que se tomen medidas para prevenir el contagio hasta nueva orden mía. Oficio de San Martín a Juan Pascual del Castillo, a bordo de la goleta Moctezuma 8/9. (4,T36,122)
Primer día de la Libertad del Perú, Cuartel General en Pisco
SOLDADOS DEL EJÉRCITO LIBERTADOR: ya hemos llegado al lugar de nuestro destino y sólo falta que el valor consume la obra de la constancia; pero acordáos que vuestro gran deber es consolar a la América, y que no venís a hacer conquistas, sino a liberar los pueblos que han gemido 300 años bajo este bárbaro derecho. Los
peruanos son nuestros hermanos y amigos; abrazadlos como a tales y respetad sus derechos como respetásteis los de los chilenos después de la batalla de Chacabuco [...] Arenga de San Martín,
Cuartel General del Ejército Libertador en Pisco 8/9. (4,T14,209)
Encargado de promover y afinanzar la libertad del Perú, es un debe mío poner en práctica todos los medios que puedan contribuir al logro de tan importante objeto, no menos que el hacer una declaración formal del espíritu que me anima en esta empresa [...] Entretanto, como el cambio necesario que produce este nuevo orden de cosas exige que las personas encargadas de funciones administrativas sean dignas de la confianza pública, y capaces de cooperar al fin propuesto, por tanto, decreto: [...] Cuartel General del Ejército Libertador del Perú en Pisco, a 8/9.
Primer día de la Libertad del Perú. José de San Martín. Juan García del Río, Secretario de Gobierno. (4,T14,210-211)
COMPATRIOTAS. La nación española al fin ha recibido el impulso irresistible de las luces del siglo, ha conocido que sus leyes eran insuficientes para hacerla feliz, y que sus antiguas instituciones no podían encontrar ninguna garantía contra los abusos del poder [...] Oficio de San Martín al Pueblo Peruano, Cuartel General del Ejército Libertador en Pisco, 8/9.
Primer día de la Libertad del Perú. (4,T14,210-214. En ninguna de las tres proclamas San Martín dice "El Perú es, desde este momento, libre e independiente por la voluntad general de los pueblos y por la justicia de su causa que Dios defiende")
Movimientos del Ejército Libertador en Pisco
Salió la expedición; a la fecha habrá ya desembarcado en las inmediaciones de Pisco y tal vez haya hecho una llamada falsa por Arica [...]
No solo el crédito del Estado queda empeñado, sino es el mío, último recurso que pude hacer valer con los extranjeros en dos meses cinco días que me ocupé en Valparaíso hasta tener la satisfacción de ver salir el día de mi santo (20 de agosto) la escuadra surtida como la mejor de su número, y un ejército que en su alegría y algazara lleva demostrada la victoria. Va
equipado con tres vestuarios, 100 mil pesos de caja militar, pertrechos y demás útiles para 5 años y víveres para 6 meses. Carta de Ohiggins a Miguel Zañartu, Santiago de Chile 9/9. (4,T6,309)
Es muy urgente que VS disponga luego se remitan por mar al pueblo de Pisco las raciones en víveres correspondientes a 1.500 hombres para 4 días. Oficio de San Martín a Cochrane, a bordo de la goleta Moctezuma 9/9. (4,T36,151)
Inmediatamente que recibí la honorable comunicación de VE fecha hoy, las participé por señales a los buques de guerra, haciendo el punto de reunión para las tropas Pisco. Hallándome más contiguo a la población que los demás buques, he dado las órdenes necesarias para que los víveres se desembarquen de esta fragata (Ohiggins), para el pronto socorro de las tropas. Oficio de Cochrane a San Martín, Bahía de Pisco 9/9. (1,T16,114)
Son las
siete y cuarto de la noche y voy a desembarcar aquí (Pisco). Descanso en que Usted no se olvidará en la aguada y en que los transportes se aproximen a tierra.
Aguada especialmente debe ser nuestro primer objeto. Oficio de San Martín a Cochrane, a bordo de la goleta Moctezuma 11/9. (4,T36,152)
Tengo hecha las prevenciones convenientes para que la tropa en la playa se socorra con agua, sin necesidad de proveerse de la que existe a bordo. Oficio de Luzuriaga a Cochrane, a bordo de la fragata San Martín 11/9. (4,T36,153)
Quedo impuesto de haber tenido VS a bien disponer que los artífices de la Maestranza y Artillería se trasborden de la Perla a la Minerva. Oficio de Luzuriaga a Cochrane, a bordo de la fragata San Martín 11/9. (4,T36,153)
Para evitar los desordenes, se ejecutan echando a la mar por los soldados en la playa las canoas de los pescadores y destruyendo las redes. Oficio de Luzuriaga a Cochrane, a bordo de la fragata San Martín 11/9. (4,T36,153)
Se hallan en tierra en el punto de desembarco a disposición del capitán Délano (Pablo Délano, capitán del Minerva), los 50 hombres pedidos por VS y está prevenido el capitán de artillería Luis Beltrán a presentarse a VS. Oficio de Luzuriaga a Cochrane, a bordo de la fragata San Martín 11/9. (4,T36,154)
Por noticias recibidas anoche y confirmadas esta mañana, sabemos que
avanzan fuerzas de Lima sobre este Puerto, debiendo hallarse hoy a 6 leguas de distancia si ha continuado su marcha desde Cañete; en esta virtud creo inoportuna la salida de la escuadra por ahora hasta que, por las medidas que he tomado, obliguemos al enemigo a decidir sus movimientos, sobre lo que avisaré a VS inmediatamente suspendiendo, entre tanto, la salida de la escuadra. Oficio de San Martín a Cochrane, Cuartel General en Pisco 12/9. (4,T36,154)
Paroissien lleva la correspondencia para Chile y aunque supongo que Usted habra´tomado todas las precauciones posible para la seguridad de la Rebeca (buque); considerando la inmensa trascendencia que podría ella tener sobre nuestra suerte, si por algún accidente cayese en poder del enemigo, me permitirá Usted encarecerle la necesidad de tomar las más atinadas para prevenir todo accidente poniendo su tripulación a bordo del buque que va a Coquimbo y, a más, enviando alguna tropa de la Artillería de los Andes para el caso de iniciarse otro imprevisto. Si Usted no estuviese bien satisfecho de las precauciones que pueden tomarse en el Rebeca, yo estoy dispuesto a manda el Luque (buque), a pesar de la falta que nos hace, con tal de remover todo peligro; a la penetración de Usted no puede ocultarse que,
conteniendo esta correspondencia todo nuestro plan de campaña y otros detalles secretos, sería una ruina su extravío. Tengo noticias reservadas de que el enemigo, fuerte de 3.500 hombres, se halla situado de escalones desde Lurín hasta Cañete y que trata de acopiar caballada y situarlas en distintas posiciones hasta acá; el coronel Alvarado está en observación de sus movimientos. Quimper (Manuel Quimper, Comandante Realista a cargo de las costas del Sur del Perú) se halla en Palca 24 leguas de Ica y el 11, a la noche, salió una División al mando del teniente coronel Rojas (Manuel Patricio Rojas Argerich). Según las medidas que ha tomado Arenales (Juan Antonio Alvarez de Arenales, Jefe de la División de la Sierra), cree que esta operación tendrá buen lucero. Ha sido preciso dar aquel paso, porque clamaba el pueblo temeroso de ser atacado por Quimper, luego que saliese Arenales. De todos modos, si Rojas no logra sorprenderlos, al menos los obligará a retirarse a Arequipa, dejándo desiertos intermedios que defiendan a Ica con el apoyo de una fuerza que será fácil organizar. Reservado:
el Ejército se embarcará a los 3 días de esta fecha. Un día antes pasaré a ver a Usted para ponernos de acuerdo. Oficio de San Martín a Cochrane, Pisco 14/9. (4,T36,155)
Ayer escribí a Usted manifestándole la conformidad de mis ideas, con las que se sirvió indicarme. Si Usted por sus intenciones no pudiere venir a tierra, espero su aviso para ir a embarcarme a bordo de la Moctezuma y pasar a la Ohiggins para que
tengamos una conferencia que es necesaria. Oficio de San Martín a Cochrane, Pisco 17/9. (4,T36,156)
Acaba de avisárseme que la División enemiga llegada de Cañete, no pasa de 700 hombres y, por lo tanto, puede Usted salir al crucero prevenido con tal que su separación no pase de 4 días. Ruego a VS prevenga al capitán Délano que una
Bandera Blanca en el fuerte (Cuartel General) es la señal convenida para que aproxime los transportes al embarcadero y demás necesario para el
embarco de las tropas. Oficio de San Martín a Cochrane, Pisco 17/9. (4,T36,157)
Pezuela se comunica con San Martín
Que el 14 del mes pasado (setiembre) llegó a este Cuartel General el oficial parlamentario Cleto Escudero, subteniente del Ejército Real, conduciendo un oficio del Virrey del Perú. Por la copia que incluyo a VS marca num 1, se instruirá a SE de la invitación que se me hizo para entrar en una negociación. Oficio de San Martín al Ministro de Estado en el Departamento de Gobierno de Chile, Cuartel General en Pisco 13/10. (4,T14,161-163. Son 23 oficios; son transcriptos: 1, 5, 6, 7, 9, 10, 11, 12, 13, 14, 15, 16, 17, 18, 19, 20, 21 y 22; diputados Tomas Guido y Juan García del Río por San Martín y Condel del Villar de Fuente y Dionisio Capaz por Pezuela: Armisticio de Miraflores 28/9)
Los objetivos del plan ideado por San Martín
El plan del general San Martín al desembarcar en Pisco, tuvo por principales objetos:
1º. De apoderarse de los esclavos para aumentar el ejército, lo que no pudo verificarse sino en muy pequeña parte por haber faltado el buque que conducía los caballos dio tiempo a los amos de las haciendas a retirar sus esclavos.
2º. Remitir como se verificó una División con el objeto de insurreccionar el país y venir por las Sierras a ligar sus operaciones por el Norte de Lima con el cuerpo principal del ejército y en esta situación obrar según los sucesos de la campaña y la insurrección de los pueblos lo exigiesen, pero nunca entró en el cálculo del general San Martín con las fuerzas de que se componía el ejército y el estado de su disciplina ya corrompida por las revoluciones de las Provincias Unidas y los partidos de Chile atacar a viva fuerza la Capital del Perú. Carta de San Martín a Miller. (Bruselas, 1827;1,T20,354)
San Martín y los esclavos
Por cuanto al tiempo de de proteger la libertad de los
esclavos en el Perú, no ha sido nunca mi intención atentar a la propiedad de sus amos, y sí sólo amparar a los que voluntariamente quieren tomar las armas en defensa de la Patria. Por tanto, he resuelto declarar lo que sigue:
1º Todos los propietarios de esclavos, que hayan tomado servicio en el Ejército Libertador, o en su ausencia los mayordomos, pueden acudir al Jefe de mi Estado Mayor General, quien les dará un documento en virtud del cual tendrán derecho dichos propietarios a ser reintegrados del valor equitativo de los esclavos, luego que se establezca en el Perú un Gobierno Nacional.
2º En el Estado Mayor General se llevará una razón exacta de los documentos que se expidieren, numerándolos y tomando otras precauciones para evitar cualquier fraude. Bando de San Martín, Cuartel General de Pisco 20/9. (4,T14,214)
San Martín y la propiedad privada
Por cuanto las
familias y habitantes pacíficos de este vecindario se vieron precisados por la fuerza a abandonar sus hogares, en los momentos mismo que se presentó el Ejército Libertador, cuyas intenciones y objetos han sido y serán siempre la conservación del orden y prosperidad de los pueblos. Por tanto, y a fin de dar una nueva garantía a todos los vecinos que hasta hoy permanecen ausentes de sus casas; ordeno y mando lo siguiente:
1º Todo vecino o habitante de esta ciudad y su distrito, podrá restablecerse al seno de su familia bajo la seguridad de que sus personas serán respetadas, y el menor atentado contra ellas se castigará conforme a los bandos anteriores.
2º Todo vecino o habitante tiene derecho a reclamar cualquiera de sus propiedades en el momento que se presente, o a ser indemnizado por ellas, siempre que se hayan destinado al servicio del ejército.
3º Ningún individuo es ni puede graduarse delincuente por la conducta que haya observado antes de la llegada del Ejército Libertador; pero toda agresión contra el orden, disciplina y seguridad del ejército será castigada en lo sucesivo conforme a las circunstancias y trascendencia. Bando de San Martín, Cuartel General del Ejército Libertador en Pisco 22/9. (4,T14,214-215)
Armisticio celebrado en Miraflores el 26 de Setiembre
Los SS diputados para negociar un advenimiento pacífico entre las tropas del mando del Exmo Señor Capitán General José de San Martín y las del Exmo Señor Virrey del Perú, a saber:
Por parte del Exmo Señor José de San Martín, Capitán General, los SS coronel Tomás Guido y Juan García del Río, Secretario de Gobierno; y
A nombre del Exmo Señor Joaquín de la Pezuela, Virrey del Perú, los SS Conde del Villar de Fuente, coronel de ejército, y Dionisio Capaz, teniente de navio.
Después de haber canjeado y reconocido sus plenos poderes, convinieron en los artículos siguientes:
1º Como paso y medida indispensable para el mejor resultado de cualquiera negociación que se entable, se suspenderá todo acto de hostilidad por mar y tierra, por una y otra parte, durante el término de ocho días, contados desde la fecha.
2º El ejército al mando del Exmo Señor José de San Martín tendrá por límites, al N el Valle de Chincha hasta el pueblo alto de ese nombre; por la parte del S, el Carrizal en el Valle de Hoyas; y por la del E, la Hacienda de Bernales, en el de Chunchanga. El ejército del N de Lima ocupará el Valle de Cañete, quedando por este lado como campo neutral entre las avanzadas de uno y otro ejército el desierto que media desde el alto que llaman de Herbae hasta los confines del pueblo alto de Chincha.
3º Si desgraciadamente no se ajustase algún convenio pacífico entre las dos partes contratantes, no podrán renovarse las hostilidades por ninguna de ellas, sino pasadas 24 horas después de la notificación.
4º Desde la hora y momento que sea firmado este armisticio, se devolverán todas las presas que se hicieron en las costas del Perú los buques de guerra y corsarios marítimos de una y otra parte, durante el término del presente armisticio.
5º Todo lo que hubiere sido tomado de las propiedades de los Valles que ha ocupado el ejército al mando del Exmo Señor José de San Martín, quedará su valor sujeto al resultado de las negociaciones; y desde la hora en que se firme este armisticio, serán respetadas y conservadas íntegramente, sin que se tome otra cosa de ellas que lo necesario para la subsistencia del ejército, por sus justos precios.
6º El Exmo Señor José de San Martín y el Exmo Señor Joaquín de la Pezuela, expedirán inmediatamente sus órdenes a los jefes de mar y tierra para el fiel cumplimiento de lo estipulado en los artículos precedentes.
7º El presente armisticio será ratificado por el Exmo Señor José de San Martín, dentro del término de tres días, y por el Exmo Señor Virrey dentro del de seis horas.
Fecho en el pueblo de Miraflores, a 26 de setiembre de 1820, a las cinco de la tarde. Tomás Guido. Juan García del Río. El Conde del Villar de Fuente. Dionisio Capaz. Hipólito Unanue, Secretario. (4,T14,178)
Pezuela y el Armisticio
Estaba por lo mismo tratando de enviar al instante comisionados cerca del gobierno de Chile, cuando la llegada del general San Martín a las playas de Pisco al frente de la expedición tantas veces anunciada me obligó a variar por lo pronto de idea y dirigirme a él invitándole a una negociación. El resultado fue él mandarme sus Diputados (Diputado Tomás Guido y Secretario de Hacienda y Gobierno Juan García del Río) que después de haber conferenciado los míos (Conde de Villar de Fuente y Dionicio Capaz) por unos días en el inmediato pueblo de Miraflores (10 km al sur de Lima) no han concluído nada en lo sustancial por haber expuesto aquellos que sus poderes no alcanzaban a la aceptación de las proposiciones y en consecuencia han regresado a su cuartel general en solicitud del consentimiento o explicación de su jefe (San Martín). Carta del virrey Pezuela a Juan Ramírez (Jefe del Ejército del Alto Perú), Lima 5/10. (1,T16,117. Exposición de los diputados: 181-194)
San Martín ordena al Ejército embarcarse en la Escuadra Naval
En este momento marcho a verme con el capitán Délano a fin de que,
hoy mismo, pase todo el Convoy al Oeste del Puerto de Paracas (10 km al sur de Pisco); pues es de necesidad de que así sea para el embarque del ejército y los planes que me propongo pues, según noticias, el enemigo se adelanta en fuerzas. Yo espero que Usted se sirva fondear en dicho puerto y en términos que, con los fuegos de los buques, puedan proteger el embarco en caso necesario. Si Usted llega a tiempo a Paracas, tendrá el gusto de hablarle su amigo. Oficio de San Martín a Cochrane, Pisco 6/10. (4,T36,160)
Cuyo libre de impuestos
No sería esta República, ni consiguiente a sus principios liberales, ni a sus mismos sentimientos, no los manifestase en favor de las
Provincias Unidas del Río de la Plata, a cuyos sacrificios se debe la recuperación de nuestra libertad. Por tanto, y mientras se acuerda lo que pueda ser de provecho a todos en general, he venido en conceder, como por el presente concedo y declaro que
todos los frutos, así naturales como industriales, de la
Provincia de Cuyo, queden libres de los derechos de entrada en la República de Chile, y de los de retroversión a su origen por falta de venta, sea cual fuera la naturaleza de los derechos, sujetándose en las negociaciones ulteriores a los reglamentos y ordenes vigentes. Los de la misma clase que se llevasen de la República de Chile a Cuyo para sus usos y consumos, sólo adeudarán el de
alcabala, que por la ley paga el vendedor dentro de la República. Ohiggins 7/10. (4,T14,79)
Arenales en Chunchanga marcha sobre Ica
Son las doce del día, y ya se nos ha reunido la primera partida de cargamento y la artillería. Trato de dejar escoltados esto intereses en esta casa (Casa de Vernales) con un piquete, de los soldados y oficiales que han llegado fatigados y algo enfermos, para que con el descanso se pongan en aptitud de seguir; y con consideración a que los enemigos no nos sientan si no nos han sentido, nos esforzamos a salir esta tarde, y avanzar en toda la noche sobre Ica, con el designio acordado. Oficio de Arenales a San Martín, Chunchanga 5/10. (1,T16,126)
Verdaderamente el ponerme en marcha a seguir, para el destino mediato; pero a este paso creo que Usted convendrá en que muy a pesar mío no puedo verificarlo por no habérseme reunido el cargamento de la División, ni en todo, ni en parte. Oficio de Arenales a San Martín, Ica 8/10. (1,T16,128)
Quedo advertido de cuanto Usted se refiere se sirve significarme en su estimable del 8, acerca de haber reforzado su caballería los enemigos, y de que debe regresar Necochea (Mariano) con su cuerpo, dejando aquí 50 hombres por ahora como se ha efectuado quedando dicho coronel por enfermo hasta su reposición. Oficio de Arenales a San Martín, Ica 10/10. (1,T16,130)
De cualquier modo, es de recelarse que saliendo yo de aquí intente Quimper volver sobre este pueblo como temen sus vecinos y ya lloran nuestra ausencia; pero por lo mismo trato de alejarlo, obligándolo a meterse en las grandes travesías del tránsito para Arequipa, o tomarlo por su espalda si es que se resuelve a volver por los lados de Huamanga para Lima. Oficio de Arenales a San Martín, Ica 11/10. (1,T16,133)
El objetivo de la División mandada a Ica no fue otro que el de completar los cuerpos con la recluta que se sacase de aquella Provincia, como se verificó; el general Tristán en las instrucciones que se le dieron no sólo tenía la orden terminante y positiva de no comprometer acción alguna con el enemigo aunque fuese superior en el duplo de la fuerza, pues su objeto era sólo el de aumentar y organizar su División, sino de retirarse a la menor noticia que tuviese de los enemgios. Carta de San Martín a Miller. (Bruselas, 1827;1,T20,354)
Fracasa el armisticio pactado en la Conferencia de Miraflores
Habiéndose cumplido el término del armisticio celebrado por mis Diputados cerca del Virrey de Lima y, habiéndose también el regreso de éstos, sin concluir tratado alguno, lo noticio a VS para que, en su inteligencia, pueda continuar las hostilidades contra dicho Virrey de Lima y sus súbditos. Oficio de San Martín a Cochrane, Pisco 9/10. (4,T36,161)
Guayaquil proclama su independencia de España
La
revolución de Guayaquil verificada el 9 del pasado, luego que supieron la llegada del Ejército Libertador a estas costas, ha asegurado de un modo indudable las operaciones del ejército que VE me ha confiado. El gobernador de aquella ciudad y 11 individuos entre jefes y oficiales, me han sido remitidos por aquellos buenos patriotas, los que he canjeado por nuestros prisioneros que gemían en Casa-Matas. El 6, a la una de la tarde, fue
tomada la fragata de guerra Esmeralda a el abordaje por los botes de la Escuadra, mandados en persona por el Lord Cochrane. Oficio de San Martín a Ohiggins, Navío San Martín en el puerto de Ancón 9/11. (4,T14,249. Cochrane es herido por una bala de fusil en el muslo derecho.)
He resuelto que mi primer ayudante de campo, coronel Tomás Guido, siga mañana para aquella ciudad a cumplimentar a su Gobierno por lo heroico e importante de una insurrección, que acelerá sin duda el día de la libertad del Perú. Oficio de San Martín a Joaquín de Echeverría (Ministro de Gobierno de Chile), a bordo del navío General San Martín en Ancón 9/11. (4,T14,250)
Al amanecer del día 9 brilló para nosotros la aurora de la libertad. El pueblo unido a las tropas de esta plaza, han proclamado la independencia de esta provincia. Este plaucible acontecimiento tanto tiempo ha suspirado por todos los buenos vecinos de esta ciudad, se ha verificado con tal orden, que ni una sola gota de sangre ha salpicado el estanarte de la libertad. Oficio del Ayuntamiento de Guayaquil a San Martín 10/10. (4,T14,251)
Tengo el honor de anunciar a VE que la suerte me ha proporcionado dar a la Patria un día de Gloria. En la madrugada del día 9 con todas las tropas de esta guarnición y auxiliado de este patriótico vecindario, he procedido a tomar los cuarteles y puntos fuertes de la plaza; a deponer las autoridades y jefes militares y de establecer, provisoriamente, un Gobierno que lleve adelante un sistema conforme a los sentimientos y bien general de la América. Oficio de Gregorio Escobedo a Cochrane, Guayaquil 10/10. (4,T36,164)
Remedios va a fiestas, pero sólo baila con San Martín
Luego que supe la
salida de la brillante expedición al Perú di en mi casa un
baile soberbio a que concurrió lo más escogido de la ciudad. La dignidad, la abundancia y el gustó correspondió en lo posible al pelnipotenciario de un Gobierno tan grande. Aunque la
cena fue a la 1 de la noche, las
señoras me honraron hasta el día siguiente a las 7 de la mañana, sin que fuesen necesarias instancias para detenerlas. La
señora de San Martín, que por la calidad de estar su
esposo en campaña, concurrió sólo al
aposento con otras que también tenían algún motivo particular para no presentarse en la
sala, me ofreció mayor lucimiento, porque se les sirvió en la misma pieza un Deser compelto, al grado de haber creído ellas ser el principal de la función que, para entonces (como dicen en Mendoza) no se había tocado, ni disminuído en cosa alguna. El Gobierno de Chile fue el asunto principal de los
brindis. Cuando venga noticia favorable de Lima
repetiré la función, aunque tenga que correr después para Chile por no poder vivir en este país.
Los amigos de Usted y míos (Logia) en este país están reducidos a corto número. Excluya usted de la vista a Diaz Velez, Alvarez, Oliden, Lezica y también a Pinto y a Aguirre, entre los restantes muchos merecerán el título por indulgencia y con mil restricciones [...]
Carrera, después del último suceso, no figura y no es temible. Carta de Miguel Zañartu a Ohiggins, Buenos Aires 11/10. (4,T6,220)
Estados Unidos reconoce la independencia de América del Sur
Reciba VE y esa digna República la plausible noticia de haber sido
reconocida su independencia y la de los demás países libres de la América del Sur por los Estados Unidos del Norte. El Embajador que en consecuencia de este acto, ha sido nombrado con residencia en Buenos Aires, Mr Toods, se esperaba por momentos con la fragata Constelación, que lo traía a su bordo. Por el mismo conducto se sabe que los independientes de Caracas y Venezuela han derrotado completamente los restos de los españoles residentes en aquellos lugares. Yo me congratulo como corresponde de un suceso por el que hemos suspirado tantos años y que, sin duda alguna, ha fijado la suerte de la América del Sur. Carta de Tomás Godoy Cruz a Ohiggins, Mendoza 11/10. (4,T14,101)
La independencia de Buenos Aires, Venezuela y Chile, ha sido reconocida por los Estados Unidos. La fragata Constelación de 50 cañones se espera por momentos. El embajador Mr Toods de Kentucky, y el Secretario de la Legación, Mr Mariano, hijo de Caracas, vienen en dicha fragata, y el Cónsul coronel Forbes. Los independientes de Venezuela y Cartagena han derrotado completamente los restos de los españoles residentes en aquellos lugares y el Gobernador ha escapado a la Isla de Cuba con 200.000 pesos. El bergantín americano de Nueva York, capitán Hyerdcard, llegado a Montevideo, y que salió el 10 de julio, trae estas noticias. Gaceta de Buenos Aires, transcripta en la Gazeta Ministerial de Chile 21/10. (4,T14,106)
Partes de San Martín al Ministro de Guerra y Marina de Chile
Parte Nº 1Desde la altura de
Coquimbo tuve la honra de participar a VS para conocimiento de SE el Supremo Director, el feliz arribo del convoy a aquel punto, y la reunión del bergantín de guerra Araucano y el transporte Minerva, que tenía a su bordo el batallón Nº 2. Seguimos nuestro viaje el 25 con vientos favorables hasta la noche del 28 al 29, en que sin ser contrarios refrescaron demasiado, precisándonos a tomar precauciones que no bastaron a evitar la separación del transporte Aguila.
El 1 de setiembre dispuso el Vicealmirante de la Escuadra que el bergantín Araucano fuese en demanda del Aguila al 2º punto de reunión y la escoltase hasta el 3º. En aquella noche se separó también el convoy el transporte Libertad, cuya falta notamos en la mañana del 4.
El 6 avistamos la costa de la
Nasca, y el 7 a mediodía entró el convoy por el canal de S.
Callán a la bahía de
Paraca, tres leguas al sur de
Pisco, adonde fondeó a las 6 de la tarde. Inmediatamente di orden para que todos los cuerpos del Ejército se preparasen a desembarcar al día siguiente.
En la mañana del 8 desembarcó la 1º división al mando del Mayor General Las Heras, compuesta de los batallones 2, 7 y 11, con dos piezas de montaña y 50 granaderos a caballo. A las 2,30 de la tarde se puso en marcha para
Pisco. El enemigo observaba nuestro movimiento con 80 cabalos que nunca se alejaron más de cuatro millas de la ciudad, siguiendo siempre por el camino de la playa; algunos cañonazos de la goleta Moctezuma los pusieron luego en dispersión y a las 4 de la tarde se replegaron sobre el pueblo.
La circunstancia de ser el terreno muy arenoso, impidió que la división llegase a
Pisco hasta las 7 de la noche, por la lentitud inevitable de su marcha. El Mayor General mandó a hacer alto a tiro de fusil, mientras se reconocía la ciudad, que se halló enteramente desierta y saqueada por el enemigo; en seguida tomó posesión de ella y se situó en la plaza hasta el día siguiente, que se acuarteló la división.
Desde el 8 hasta el 11 los demás cuerpos del Ejército y en este último día tuve la satisfacción de ver entrar al Aguila con el bergantín Araucano, cuya falta dejaba un vacío notable en los elementos de esta compañía. El 12 establecí mi
Cuartel General en Pisco y mandé se avanzasen algunas partidas de caballería, sobre
Caucato y Chincha, con el principal objeto de recolectar ganado y cabalgaduras para facilitar mis operaciones; a los pocos días tuve ya montados los dos regimientos de caballería a pesar de las anticipadas medidas del enemigo.
El 13 mandé que una división compuesta del batallón Nº 5 y 50 granaderos al mando del Coronel Mayor Juan Antonio Albarez de Arenales, marchara a la gran hacienda de
Caucato, legua y media al norte de
Pisco; el 14 quedó situada en aquel punto y los destacamentos de granaderos corrieron al valle de
Chincha con el mismo objeto que antes. En este día se hizo también un reconocimiento sobre
Ica por los capitanes Aldao y Lavalle; y al siguiente entró en la bahía el transporte Libertad.
El 19 dispuse que el batallón 11 y el regimiento de granaderos a caballo fuese a relevar al Nº 5; el 22 avanzaron los granaderos y ocuparon los pueblos de
Chincha alta y baja; en este día entró el bergantín María Elena, procedente de Valparaíso.
El 23 pasé a reconocer en persona el Valle de
Chincha; en el pueblo bajo estaban situados dos escuadrones de granaderos a caballo y uno de los mismos en el alto. Los naturales mostraban la mejor disposición en favor de nuestra santa causa y las quejas de las recientes vejaciones que había sufrido al retirarse el enemigo, estaban acompañadas de un resentimiento bien marcado. Di varias ordenes al coronel de granaderos y regresé al Cuartel General.
Las Escuadra había salido días antes a practicar un reconocimiento entre la punta de la
Nasca y la altura del Callao, por haberse avistado enfrente de este puerto las fragatas Esmeralda y Venganza. Es probable que ellas hubiesen aumentado nuestras fuerzas navales si la prevensión de Lord Cochrane no le hubiese determinado a volver al puerto, para no dejar sin protección los transportes, en el caso que el enemigo intentase dar un golpe de mano. Sin esto, la Escuadra habría continuado su caza, aunque parece que el enemigo no está inclinado a observar de cerca las maniobras. El 25 regresó el Vicealmirante y en el mismo día entraron las fragatas Hércules y la balandra cañonera.
El 26 de ajustó una suspensión de armas en
Miraflores, que duró hasta el 4 del actual; de todos sus incidentes y objeto doy cuenta a SE por el Ministerio de Gobierno. Las hostilidades se renovaron el 6; en este día mandé que marchase sobre
Ica una división compuesta de los batallones Nº 2 de Chile y 11 de los Andes, con 50 granadereos a Caballo, 30 cazadores de mi escolta y 2 piezas de campaña al mando del Coronel Mayor Arenales y su segundo, Teniente Coronel Manuel Rojas. El bergantín Galvarino, que había quedado en comisión, se reunió al convoy en este día, trayendo consigo una goleta apresada en la altura de
Ilo, la que he dispuesto se remita a
Lima, en conformidad del artículo 4º del armisticio que feneció, respecto de haber sido apresada durante su término.
El 7 recibí parte del Coronel Mayor Arenales de haber ocupado a
Ica en la madrugada del 6. Del resultado de esta operación se instruirá VS por las copias 2 y 3, y según los avisos que tengo hoy continúa su marcha para su destino. Nuestras avanzadas por la parte del norte llegan hasta las inmediaciones de
Cañete.
El aspecto general de todos los negocios es el más lisonjero y me atrevo a asegura a VS con bastante confianza, que dentro de tres meses el Ejército Libertador habrá concluido su campaña, y el pueblo de Chile tendrá la satisfacción de ver llegar sus heroicos esfuerzos llenando así los derechos que tienen a la consideración de que es digno. Todo lo cual espero que VS se sirva elevarlo al conocimiento del Supremo Director de la República, tan inmediatamente interesados en estos sucesos. Oficio de San Martín a José Ignacio Zenteno, Cuartel General en Pisco 13/10. (4,T14,140-143)
Parte Nº 2Con fecha de ayer, desde
Chunchanga insinué a VE del modo que había llegado allí la división de mi mando y la marcha que emprendía para este punto, desconfiando poder llegar en término acordado, por las razones que apunté. Sin embargo pudo avanzar la tropa hasta las chácaras inmediatas de este pueblo al amanecer del día de hoy. Dispuse la entrada directamente a él (por no haber otro camino, ni senda, que un camino entre montes y heredades) con una compañía de cazadores, infantes enancados por los de caballería y los batallones de infantería en seguida, sin haber encontrado obstáculo alguno hasta esta plaza, donde se me ratificó la noticia que antes tuve de haber fugado los enemigos en la misma noche, tomandos su dirección por
Palpa hacia la Nasca. Con este reconocimiento hice descansar la tropa que venia demasiado fatigada, así como los caballos, y después de reconocer esta circunferencia, trato de reunir algunas cabalgaduras para que salga esta tarde el cuerpo de cazadores a caballo, o la parte de él que se pueda montar bien a seguir en alguna distancia por el rumbo que tomaron los dichos enemigos, a fin de averiguar lo conveniente, proteger la desersión y evitar en algún modo la saca de recursos. El Cabildo, los Prelados y la parte del vecindario que no había salido, han manifestado alegría con nuestra entrada, saliendo a recibirnos a extramuros. Parece que en lo general tienen buena disposición estas gentes. Procuraré adquirir nociones más formales y sobre todo instruiré a VE oportunamente. Oficio de Juan Antonio Alvarez de Arenales a San Martín, Ica 6/10. (4,T14,143)
Parte Nº 3En mi anterior última comunicación instruí a VE lo acaecido hasta aquella fecha, referente a mi entrada a este pueblo, y demás ocurrido hasta entonces; dije que iban a salir los cazadores a caballo en persecución de los enemigos que fugaron de aquí, y en efecto, marchó el Teniente Coronel Rufino Guido con su escuadrón, considerando que una mayor fuerza sería menos movible, para la rapidez que exigía el designio. Marchó, según informa, casi toda la noche del día 6, hasta llegar a tocar la pampa de
Guallarú, cuya extensión es de catorce a dieciseis leguas sin agua, ni recurso alguno, hasta llegar a
Palpa, y se regresó en concepto de haber seguido los fugitivos su corrida por aquel rumbo. El y muchas otras personas informan que el comandante Quimper y el Conde de Montemar, habían perdido mucha parte de la tropa que llevaban antes de llegar a la nominada pampa. Se van presentando ya algunos milicanos y espero que vayan cayendo los demás con sus armas, sobre que tengo tomadas las providencias conducentes para su reunión. Después tenemos noticias que los expresados Quimper, Conde y algunos otros de la comitiva se determinaron a variar de rumbo con el designio de retrogradar por las faldas de la
Sierra como para Lima. Algunos creen que separándose de las tropas y otros opinan que con ellas. Con este respecto he avanzado espías para adquirir mejor conocimiento y está pronta una fuerza ligera de caballería para en cualquiera de los dos casos (si fuese cierto) salir a cortarlos en pasos precisos por donde deben transitar en distancia de ocho a doce leguas. También se nos informa con referencia a comunicaciones del Virrey de Lima, recibidas por Quimper, que aquél remitía a éste un cargamento de artillería y municiones, que debe venir por encima de
Guaitará e igualmente he tomado medidas sobre estos puntos. El comandante Ricarfort había oficiado al referido Quimper con fecha 19 de setiembre último desde
Arequipa, que trataba de reunir las fuerzas de su mando destacadas en varios puntos, para venir a este pueblo en cumplimiento de orden del Virrey y se asegura al mismo tiempo que Ricafort debía salir por aquí o desde la
Nasca con dirección a Huamanga a reunir tropas y reforzarse por aquellos pueblos. Sobre estos datos, por si ambos o alguno se pusiese en práctica, tengo formado mi plan para obrar respectivamente como mejor me convenga, deseando que en cualquiera de ellos podamos lograr la proporción de avistarnos con aquel caribe, no perdiendo nunca de vista lo que urge mi movimiento al destino acordado. He dispuesto que el Coronel Necochea se retire con su cuerpo para ese Cuartel General según VE lo previene; y si acaso no sale tan inmediatamente será por hallarse algo enfermo de una puntada en un costado que según los síntomas creemos no será de consideración el accidente. Signifiqué a VE la disposición que manifestó este pueblo por su Cabildo, cura y prelados a la entrada de la división; después, especialmente el Alcalde de primer voto Juan José de Salas, ha acreditado su decidida adhesión a nuestro sistema y una loable actividad de toda clase de servicios en cuanto ha ocurrido. Con este conocimiento y el de que reúne todos los votos, en general de las personas patriotas a su favor, lo he nombrado por Gobernador de esta ciudad y lo que comprende. Aún no se ha verificado el Cabildo Abierto, porque esperaba se reuniese mayor porción del vecindario, como ya se ha logrado con la restitución de las familias que habían salido emigrando y desistiendo del designio en cuanto llegaron a desengañarse de la comportación de nuestras tropas. Se efectuará muy pronto con arreglo a las advertencias de VE. Se ha encontrado en distintas partes de ese pueblo (una de ellas un pozo) porción considerable de armamento de chispa, y de corte, con no menos cantidad de pólvora, algunas balas, piedras y fornituras, lo que he entregado al dicho Gobernador con el interesante fin de que arme y disponga la fuerza posible para poderse sostener en mi ausencia, haciendo obedecer y respetar su autoridad. Oficio de José Antonio Alvarez de Arenales a San Martín, Ica 8/10. (4,T14,144. Parte 4 y 5: T14,222-224)
Primeras victorias del Ejército Libertador, San Martín y la Escuadra Naval a Lima
Como los enemigos, con la poca fuerza que le ha quedado, se detuvieron en
Palpa, distante 24 leguas de aquí ha clamado este vecindario se envíe una fuerza capaz de destruírlos; despaché anteayer los dos piquetes de caballería de la División, con los 50 hombres de cazadores a caballo que quedaron aquí, y las dos compañias infantes de Ancas, con caballos de diestros todos al
comando de Rojas. La salida de la dicha fuerza se verificó antenoche a las 3 con la mayor cautela, reserva y precaución; debió ir a descansar ayer como lo ha hecho a las 8 leguas de aquí para emprender anoche la marcha por una pampa limpia que sigue sin agua de 14 leguas, y con buenos baqueanos para tomar un camino excusado de 3 leguas antes de llegar a Palpa, a efectos de sorprender y tomar a los enemigos. Espías que antes yo había despachado me aseguran que los enemigos estaban allí muy faltos de bestias y con ánimo de seguir hoy o mañana para
Nazca; donde desde antes tenían adelantado un cargamento. El coronel Necochea ha padecido mucho más de lo que al principio se creyó por los síntomas de su accidente. Carta de
Arenales a San Martín, Ica 13/10. (1,T16,139)
Tengo la complacencia de informar a Usted que los transportes están en sus respectivos lugares, en cuanto permite el agua que respectivamente calan; y situados de tal modo, que no dudo que 2 horas serán suficientes para embarcar todo el ejército si estuviese frente en la playa, teniendo nosotros 14 lanchas, independientes de las que se hallan en Pisco, en las cuales se puede embarcarcar 1.000 hombres en cada viaje. He varado la fragata Ohiggins sobre el fango, a ver si se podía remediar de algún modo la avería, que no me queda duda ya es más arriba de lo que yo pensaba, así siento decir que no ha surtido el efecto que deseaba; he hecho que los buzos bajen pero nada se ha podido investigar, por estar todo el cobre completo, temo por consiguiente que tendremos que seguir con las bombas, hasta que las circunstancias permitan tome Usted a Guayaquil. Oficio de Cochrane a San Martín, a bordo de la fragata Ohiggins 13/10. (1,T16,141)
Por los últimos 8 días, no ha habido remisión de ganado para la escuadra y al preguntar hoy en tierra si se nos pudiese dar para los enfermos, se me contestó que no había ahí y que en el hospital estaban comiendo charqui. Pienso mudar la escuadra mañana, para disciplinar la gente en el ejercicio de cañon y maniobra, de lo que estamos muy necesitados. Oficio de Cochrane a San Martín, a bordo de la fragata Ohiggins 14/10. (1,T16,142)
Arenales ha roto su movimiento por la sierra con 1.000 hombres de todas armas; él debe ponerse a caballo sobre
Jauja, y comunicarse conmigo por el norte, quitando los recursos a
Lima. Yo debo reembarcarme con el ejército dentro de 2 o 3 días a atacar el
norte de Lima, ponerme en comunicación con Arenales, sublevar las provincias de
Huaylas, Huánuco y Conchucos, de cuya decisión estoy perfectamente persuadido. Mi objeto en este movimiento es el de, por la insurrección general de la sierra,
bloquear a Lima por hambre y obligar a Pezuela a una capitulación, sin desatender al mismo tiempo el aumento del Ejército y la subyugación de la Intendencia de
Trujillos. Casi puedo asegurar, amigo mío, que este plan tendrá los mejores resultados, y que si se verifica, como espero,
Lima estará en nuestro poder a los 3 meses de la fecha. Carta de San Martín a Ohiggins, Pisco 14/10. (4,A1,304)
Felicitémonos mutuamente por el resultado más ventajoso que ha tenido nuestra Expedición y cuyas ventajas vamos a tocarlas muy pronto en las operaciones sucesivas de las campañas que vamos a emprender. La tropa se ha enriquecido cual nunca, pues posee un botín de mucho valor. He reservado más de 20 cargas de pañete y de diferentes generos para que Usted los reparta en esta División. Llevo más de 300 animales entre caballos y mulas, bastantes reses, negros cuyos amos han fugado; todas las familias de Pisco, Laurín,
Ico y Palpa. Mañana a las 8 debe reunirse este vecindario para elegir una autoridad y renunciar a la
domincación del Rey. Con la política que Usted me aconsejó, ningún habitante ha fugado de aquí y a todos he encontrado en la mejor disposición hacia nosotros. Oficio de Rojas a Arenales, 15/10. (4,T36,175)
Volado estoy con la dilación del suceso de la dicha subdivisión cuando al paso que he repetido a Rojas muy urgentemente las prevenciones para el pronto regreso, sólo por noticias sé, que iba persiguiendo a los enemigos sobre ellos por Nazca antes de ayer tarde; y llevándolos dispersos y derrotados en confusión. Salió ayer el coronel Necochea y le seguirán los 50 cazadores en cuanto lleguen aquí. Carta de Arenales a San Martín, Ica 16/10. (1,T16,144)
Tengo el placer de anunciar a Usted que acabo de recibir Parte de Arenales, en el que me acompaña el del teniente coronel Rojas que ha derrotado completamente a Quimper en el pueblo de Nazca, sin que hayan escapado más que éste y Campoamesis, a quienes perseguía el capitán Lavalle (80 prisioneros con 6 oficiales). Oficio de San Martín a Cochrane, Pisco 17/10. (4,T36,175)
A Usted dije en mi anterior que esperaba a Rojas con la Subdivisión, que debía llegar ayer para sin más dilación arrancar de aquí. En efecto llegó anoche con la infantería y granaderos y llegó hoy el cargamento pero no el piquete de cazadores a caballo. A pesar de todo, tengo pensado partir de aquí mañana aunque sea tarde, anticipando orden a Suarez para que me siga, dejando el encargo a este Gobernador para de recibir el cargamento y remitirlo a Usted con la mayor aceleración. El capitán Brandsen sale mañana de madrugada con el resto de los 30 cazadores. Ha llegado también el capitán Aldao (José Félix) y el cargamento de armas y municiones que Usted despacha a este Gobierno. Me es tan sensible como Usted puede considerar la muerte del Dr Jonte. Carta de Arenales a San Martín, Ica 19/10. (1,T16,146)
La estimable de Usted fecha de ayer, en contestación a la mía referente al suceso victorioso en Nazca, honra demasiado a la tropa a quien se debe aquel resultado; pero mucho más a mi, que no merezco cuanto se me favorece. Al partir le daré el último adiós por esta nuestra presente separación, y si para entonces puede advertir determinadamente
cuándo será su reembarque (entre pocos días más o menos) y el punto en que piensa desembarcar, me servirá de gobierno, y será muy del caso, para dirigirle mis ulteriores comunicaciones. Carta de Arenales a San Martín, Ica 20/10. (1,T16,147)
Dejo al comandante del Nº 11 Deheza y al capitán Lavalle por enfermos; y dejo 15 soldados del Batallón Nº 2 y 18 del Nº 11, incapaces de poder seguir la división por el estado de sus accidentes, los que quedan son encargados al comandante Francisco Bermúdez. Suarez dejó en Nazca las municiones tomadas al enemigo en
Acarí. En este momento recibo la estimable de Usted fecha de hoy, en que se sirve advertirme el término que tiene meditado para su movimiento al designio para la primera tentativa, y el punto de su desembarque en caso de no sufrir efecto aquella. Dios quiera que sí, pero de cualquier modo parto esta noche, y llevo el conocimiento de sus insinuadas advertencias, para arreglar mis pasos y operaciones. Carta de Arenales a San Martín, Ica 20/10. (1,T16,149)
El Municipio de Ica declara su Independencia de España
Teniendo a la vista la muy apreciable carta de VE del 17 del corriente, diré en su contestación que ya está
jurada la independencia con mucha solemnidad y satisfacción general del pueblo, como oficialmente se ha comunicado a esa Superioridad y consta de Acta celebrada al intento, que aunque solo se circunscribe a la Corporación Municipal, se extendió a la corta porción del pueblo, que en aquel acto se pudo congregar, porque la emigración de vecinos no permitió más por entonces.
No se trata en el Acta del Pueblo, como porque VE ordenó que la jura se generalizase en los términos prevenidos, ha sido forzoso dar lugar a que el vecindario se reintegre, y que el coronel Arenales tenga ocación y desahogo para intervenir en la función. Todos está ya resuelto y acordado a propósito; y no se ha verificado hoy, porque a nuestro coronel le fue indispensable diferirlo para el día de mañana, en que sin duda se hará del modo indicado, y luego se dará cuenta a VE con testimonio de esta nueva Acta.
Queda alojado en mi casa el caballero Bermúdez, cuyas aptitudes y carácter sostenido me llenan de satisfacción, como creo lo esté él en orden a mi trato familiar y consideraciones con que lo miro. Y no dudo que con su auxilio y completa derrota de Quimper, quedemos en seguridad, mientras que VE pasa a la capital a atacar al virrey.
No hay que dar cuidado siempre nuestra cooperación a la justa causa de la independencia, que sostendremos con energía, unión y constancia, como VE quiere y se necesita desde luego para triunfar. Nada más tengo que decir a VE, pues que sabe mis buenas disposiciones, y la alta consideración con que difiere a su voluntad su afectísimo reconocido servidor. Carta de Juan José de Sala (Alcalde de Ica) a San Martín,
Ica 20/10. (1,T16,149-150)
San Martín y la Bandera del Perú
EL EXCM SR DON JOSÉ DE SAN MARTÍN, CAPITÁN GENERAL Y EN JEFE DEL EJÉRCITO LIBERTADOR DEL PERÚ, GRAN OFICIAL DE LA LEGIÓN DE MÉRITO DE CHILE &c. &c. &c.
Por cuanto es incompatible con la independencia del Perú la conservación de los símbolos que recuerdan el dilatado tiempo de su opresión.
Por tanto, he venido a decretar y decreto lo siguiente:
1. Se adoptará por bandera nacional del país una seda o lienzo de ocho pies de largo y seis de ancho, dividida por líneas diagonales en cuatro campos, blancos los dos de los extremos superior e inferior, y encarnados los laterales, con una corona de laurel ovalada y dentro de ella un sol, saliendo por detrás de las sierras escarpadas que se elevan sobre un mar tranquilo.
2. El escudo puede ser pintado, o bordado, pero conservando cada objeto sus colores: a saber, las coronas de laurel ha de ser verde y atada en su parte inferior con una cinta de color de oro, azul la parte superior que representa el firmamento, amarillo el sol y sus rayos, las montañas de un color pardo oscuro, y el mar entre azul y verde.
3. Todos los habitantes de las Provincias del Perú que están bajo la protección del Ejército Libertador usarán como escarapela nacional, una bicolor de blanco y encarnado: el primero en la parte inferior y el segundo en la superior.
4. Lo dispuesto en los dos artículos anteriores sólo tendrá fuerza y vigor, hasta que se establezca en el Perú un Gobierno General por la voluntad libre de sus habitantes.
Dado en el Cuartel General del Ejército Libertador del Perú en Pisco a 21 de octubre de 1820. José de San Martín. Juan García del Río.
San Martín parte a Lima
Hoy damos a la vela, y dentro de dos días estaremos sobre Lima. Veremos si se hace alguna cosa de provecho. Si algo ocurriere avisaré sin perdida de momento. No se ha perdido el tiempo que hemos estado en
Pisco; mis relaciones en
Lima las he asegurado en términos que el día menos pensado pueda darle un mal rato al Virrey. Carta de San Martín a Ohiggins, Pisco 25/10. (4,A1,305)
San Martín en Ancón al norte de Lima, Cochrane en la Bahía del Callao
Si yo hubiese de atender tan sólo a mis deseos personales, uniformes siempre en propender a cuanto pueda influir a la cesasión de la guerra, facilitando los medios de inteligencia, no me sería dificil renunciar a un título que a la verdad no es de importancia para el triunfo de las armas [...] Oficio Nº 3 de San Martín a Pezuela, Ancón 31/10. (4,T14,351)
Hallándose fuera del Callao las fragatas Prueba y Esmeralda, me parece que sería conveniente que Usted continuase el bloqueo de ese puerto con los buques que ahora tiene a sus órdenes, para procurar interceptar las referidas fragatas a su regreso. Esto no me impediría, de modo alguno, proseguir mis operaciones porque este navío, junto con los bergantines Galvarino y Araucano y con la goleta Moctezuma, creo sería suficiente para frustrar cualquier empresa de los buques enemigos que actualmente faltan del Callao. Oficio de San Martín a Cochrane, a bordo del navío San Martín en Ancón 31/10. (4,T36,181)
Urgiendo ya los momentos para
dar inicio a mis operaciones, es necesario que, inmediatamente después de recibir VS este oficio, se dirija VS a este puerto con los 3 buques que están a sus órdenes para que, además de extraer de ellos todo lo perteneciente al ejército, pueda yo conferenciar con VS sobre asuntos de tanta importancia. Oficio de San Martín a Cochrane, a bordo del navío San Martín en Ancón 1/11. (4,T36,183)
He reconocido completamente el estado de la bahía del Callao, todo está en el mejor estado, y mañana daré el golpe, y después de mañana, me pondré en compañia de VE. Carta de Cochrane a San Martín, a bordo de la fragata Ohiggins 3/11. (1,T16,160)
El Ejército salió de
Pisco el 23 de octubre a la bahía de seguridad. El Mayor General Las Heras se puso a la cabeza de las columnas para dirigir su marcha. El batallón nº 5 quedó en el Cuartel General con 50 cazadores de la Escolta. El 24 se embarcó SE el General en Jefe (San Martín), y toda la tropa que quedó en
Pisco marchó a unirse al ejército. La operación de embarque se concluyó en la tarde de este día; el
26 dio la vela el convoy tomando el rumbro del NO.
El 29 se avistó la
isla de San Lorenzo, y a la tarde fonderon la Escuadra y los transportes en frente de la
bahía del Callao. El navío San Martín con otros buques de guerra y todos los transportes dieron la vela el 30 con dirección a
Ancón, quedando el resto de la escuadra con ordenes de cruzar enfrente del Callao. Antes de separarse el
General en Jefe y el Vicealmirante de la escuadra, acordaron la ejecución de un proyecto memorable, capaz de sorprender a la misma intrepidez y de eternizar por sí solo la historia de la Expedición Libertadora del Perú.
Desde el 31 se trabajó con incesante actividad a bordo de la escuadra para preparar los elementos necesarios a la gran empresa de abordar la
fragata Esmeralda, bajo los fuegos del Callao y agragarla a las fuerzas navales destinadas a establecer la libertad del Pacífico.
El 1º se reunieron a bordo de la Ohiggins los capitanes Forster y Guise, y el Vicealmirante los instruyó del dispositivo del ataque, y dio las ordenes que cada uno debía cumplir. Todos los soldados de marina y las tripulaciones de las fragatas Ohiggins, Independencia y Lautaro se ofrecieron con ardor como voluntarios para esta empresa. Pero era preciso que los valientes se dividiesen, y que unos marchasen al
Callao, mientras otros quedaban para mantener el bloqueo: 240 voluntarios se destinaron a aquel objeto, y su ardor suplía el número de los que por un orden regular exigía la ejecución de aquella empresa. El mando occidental de la Escuadra quedó a cargo del capitán Forster, a quien el almirante dio las disposiciones convenientes para todo evento.
A las 11 y 5 de la noche se separaron del costado de la Ohiggins 14 botes en dos divisiones, la primera al mando del capitán Gorsbie, compuesta de los botes y lanchas de la fragata almirante y la segunda, al del capitán Guise, foramda de los botes de la Independencia y Lautaro. El Lord Cochrane dispuso que se ejercitasen en la oscuridad de esta noche, para realizar el plan en la siguiente [...]
A las 10 de la noche del 5 se dirigieron al
Callao, las dos divisiones en la misma forma de antes; llegaron al fondeadero a las 12, y vencieron el primer obstáculo que les oponían la línea de lanchas cañoneras, a quienes el almirante, puesto a la cabeza de las divisiones, intimó, silencio o muerte. El pavor no dejó al enemigo otro partido que el de la obediencia, y nuestras fuerzas abordaron por babor y estribor a un mismo tiempo a la
fragata Esmeralda.
SE el General en Jefe (San Martín) esperaba en
Ancón la noticia de este gran suceso, y el 6, a la tarde, recibió el parte del Lord Cochrane, que mandó desde el Callao el bergantín Araucano a este propósito. Oficio y Proclama de Cochrane, a bordo de la Ohiggins 5/11. (4,T14,268-271)
Si V no puede prescindir de los deberes de su ministerio público y tiene una voluntad superior que observar en todas sus operaciones, yo tengo igualmente obligaciones que llenar, y dependo de un Gobierno Supremo, cuyas determinaciones dirigen todos mis pasos [...] Oficio Nº 5 de San Martín a Pezuela, Ancón 5/11. (4,T14,355)
San Martín zarpa rumbo a Huacho al norte de Ancón
Con concepto a la desigualdad que se nota en la graduación de los oficiales prisioneros de una y otra parte, me ha parecido conveniente indicar a V que estableciésemos un convenio que sirviera de regla en el canje presente. Oficio Nº 7 de San Martín a Pezuela, Ancón 9/11. (4,T14,357)
Señor Bernardo Ohiggins; mi amigo amado, estamos dando la vela para el puerto de Guacho (Puerto a 100 km al norte de Ancón), de cuyo punto partirán mis operaciones. Oficialmente digo a Usted nuestros sucesos; que no pueden ser más grandes, ni más prósperos; Dios nos ayuda, porque la causa de la América es suya. Esta es mi confianza. Usted puede calcular cual es el campo que se abre en la presente campaña; pero el poder español caerá irremediablemente más pronto de lo que pensamos. En la Esmeralda (buque) se han encontrado entre otras cosas 350 rollos de jarcia, capaces de vestir a la Escuadra y convoy por 2 años. Al día siguiente de la toma de la Esmeralda y cañoneras, desembarcó un bote con un oficial y 12 hombres de la fragata de guerra Americana, y todos fueron muertos por el populacho del Callao, suponiendo que nos habían ayudado en la empresa. Nada sé de Arenales, pero el va progresando sin duda alguna, porque el Virrey no ha sacado un solo hombre de Lima. Lo mismo digo de Ica, en cuya ciudad habrá a esta fecha una División de 1.200 hombres hostilizando por aquella parte. Guido y Luzuriaga marchan hoy a Guayaquil. El 1º en clase de Diputado de Ejército; y el 2º a mandar las tropas, por haberme pedido sus enviados les remitiere un oficial de graduación que mandase sus fuerzas. Antes de 15 días me pondré en contacto con dicho Guayaquil a cuyo efecto voy a tomar posesión de la Intendencia de Trujillo, de la que pienso sacar la subsistencia para el Ejército. Sería muy conveniente que Usted preparase algunas cosas, fuerzas y armamentos para Intermedios (Puertos). Los dos comisionados que marchan en el Lugre (bote pequeño), manifestarán a Usted la necesidad de estas medidas. Desde Guacho escribiré a Usted por el Lugre con todos los detalles necesarios, que la premura del tiempo no me permite ahora. El Ejército sigue sin novedad; él será pronto acrecentado con un tercio más del número que sacó. Adiós amigo querido, talvez en otra comunicación anunciaré a Usted una victoria completa. Copia de un oficio de San Martín a Ohiggins, Puerto de Ancón 9/11. (X,C286,D140)
Mendoza y el Embajador de EE.UU
El Señor Gobernador de Mendoza dice con fecha 11 de noviembre: Por cartas particulares que he recibido de personas respetables (de Bs As), estaba ya en el Janeiro la legación de Estados Unidos. También se hallaban allí dos buques de guerra franceses, cuyos objetivos se ignoraban. Gazeta Ministerial de Chile 18/11. (4,T14,199)
San Martín en Huacho, Cochrane complicado en el Callao
La importancia del Servicio que ha hecho VS a la Patria en la toma de la fragata de guerra española la Esmeralda y el modo brillante como VS mismo condujo a los bravos de su mando en tan noble empresa en la noche memorable del 5 ha aumentado los títulos que los servicios anteriores de VS le daban a consideración del Gobierno, a la gratitud de todos los que se interesan por la causa y el aprecio que profeso a VS. Oficio de San Martín a Cochrane, a bordo del navío San Martín en Huacho 10/11. (14,T36,186)
Las acciones para obtener el dominio del Pacífico, hasta ahora han sido frustrados principalmente por la enorme fuerza de las baterías del Callao, que nos llevan a un ataque abierto, sobre la fuerza naval del enemigo, impracticable para cualquier clase o número de barcos de guerra. Habiendo examinado cuidadosamente las baterías, barcos de guerra y cañoneras en este puerto, quedé convencido que el buque insignia español Esmeralda, podría ser capturado. Consecuentemente di órdenes a los capitanes de la Independencia y el Lautaro para preparar sus botes. Al día siguiente, un número de voluntarios, incluyendo los capitanes Forster, Guise y Crosbie, ofrecieron sus servicios. Todo estuvo listo la noche del 4 de noviembre y la noche del 5 fue elegida para el ataque; nuestra fuerza completa fue lanzada enseguida a abordar la Esmeralda, cayendo sobre la cubierta en la que el enemigo fue derrotado después de una obstinada resistencia. Carta de Cochrane a San Martín, a bordo de la fragata Ohiggins 14/11. (1,T16,167-168)
Con esta fecha escribo al Gobierno de Chile para que con arreglo al número y clase de oficiales que V me ha remitido en la fragata Maintinomo, y a la base en que hemos convenido para el
canje de prisioneros siempre que no los haya de igual graduación, envíen V a los que corresponden [...] Oficio Nª 9 de San Martín a Pezuela, Huacho 17/11. (4,T14,363)
Por el telégrafo comuniqué a V desde
Ancón, la importante noticia de la insurrección de
Guayaquil, y la toma de la Esmeralda. Desde entonces hemos estado en este punto 600 hombres de caballería, todos ellos a dos caballos cada uno; y hoy mismo se repliega el ejército a
Supe, con la mira de llamar al enemigo que ha avanzado sobre
Chancay, y parece venir dispuesto en busca nuestra, porque conoce que la opinión pública está tan decidida por nosotros, que él pierde mucho en la demora. En efecto, el patriotismo es muy grande en todos estos pueblos; el entusiasmo aumenta, la timidez se disminuye; y espero un pronto y feliz resultado en la campaña, bien sea que el enemigo se atreva a venir hasta aquí, en donde queda mi caballería, o bien que me dé tiempo para reforzar mi Ejército y obrar en combinación con la división de Arenales. De ésta no he tenido noticias directas; pero por las noticias recibidas de
Lima se asegura su entrada en
Huamanga y Huancavélica y su marcha sobre Jauja. También se habla, aunque no positivamente, de una revolución que ha habido en
Pasco, en la que han degollado a los españoles. Carta de San Martín a Ohiggins, Huacho 18/11. (4,A1,306)
Jamás creí, que llegase a este extremo la barbarie de los que se jactan de pertenecer a la Monarquía Constitucional de España; pero asegurado ya del hecho por las noticias que he recibido, me veo forzado por la ley de retialiación, a declarar, que desde el momento que se derrame una sola gota de sangre por la arbitrariedad o venganza, todo
español quedará fuera de la ley, y donde quiera que sea aprehendido, será pasado por las armas. Proclama de San Martín a los españoles europeos, Cuartel General en Huacho 19/11. (4,T14,327)
San Martín en Huaura al sur de Supe, reclama por el trato a prisioneros
Cuando reclamé a V sobre el maltrato que nuestros prisioneros recibían en Casas Matas, indiqué también que sólo daba este paso para advertirle que abusaban de su confianza las personas a quienes habían comunicado sus ordenes sobre ellos, y pedir se aliviase su suerte en lo sucesivo. Oficio Nº 11 de San Martín a Pezuela, Huaura 22/11. (4,T14,367)
San Martín en Supe al norte de Huacho, Cochrane reclama el navío San Martín
He observado con dolor, que a pesar de la solemne promesa que os he hecho anteriormente, muchos habéis abandonado vuestras propiedades y familias desde mi llegada a estas costas; y si la experiencia de los que han probado la religiosidad de mi palabra, no basta para convencer a los demás de la franqueza y lenidad de mis sentimientos, repito por tercera y última vez:
1º) Todo español europeo, que no emigre de su domicilio, donde quiera que lleguen las armas de mi mando, será inviolablemente respetado en su persona y bienes, sin hacer mención de su opinión privada, ni de su conducta anterior.
2º) Todo español europeo deberá prestar juramento ante la primera autoridad del pueblo de su residencia, de no ofender directa o indirectamente la causa de nuestra independencia; y este juramento quedará archivado en sus respectivos pueblos.
3º) Todo español europeo que en lo sucesivo emigrase del punto donde se halle, al acercarse mi ejército, incurrirá en la pena de confiscación de bienes. Proclama de San Martín a los españoles europeos, Cuartel General en Supe 20/11. (4,T14,327)
Por cuanto la libertad del Perú exige que se aumente el ejército de mi mando. Por tanto, invito a los
habitantes solteros de todas las provincias que lo componen, a alistarse en las filas de los bravos destinados a asegurar la independencia de este país; y declaro, que desde el momento que las armas de la Patria hayan redimido a la ciudad de Lima de su actual opresión, cesarán sus servicios, y podrán retirarse libremente a sus casas con las recompensas corresponientes a ellos [...] Proclama de San Martín, Supe 21/11. (4,T14,325)
Adjunta encontrará VS la base que propuse y aceptó el Virrey de Lima para el canje de prisioneros cuando hubiere desigualdad en las graduaciones y es la que rige actualmente. Oficio de San Martín a Cochrane,
Cuartel General de Supe (50 km al norte de Huacho) 23/11. (4,T36,199)
De resultas del movimiento popular que ha habido en Cajatambo (150 km al Nordeste de Supe) para proclamar su libertad e independencia política, fue detenido en aquel pueblo el Ayudante de campo de Usted, Capitán don Domingo Ulloa y remitido a mi disposición con la correspondencia que conducía. Examinada ésta, se encontraron entre ellas la de Usted para mi señora, la Marquesa de Torre Tagle, las mismas que sin ser leídas he tenido la satisfacción de dirigir a la expresada señora bajo cubierta del Virrey de Lima, por medio de un parlamentario que para asuntos públicos le mando hoy mismo.
El mencionado Capitán me ha dicho que iba encargado por Usted para conducir a Trujillo a mi señora, la Marquesa; y con este motivo me tomo la libertad de escribirle ofreciendo que puede pasar cunado guste, bajo la seguridad de que lejos de ser molestada en lo más mínimo, será escoltada hasta que llegue a su destino del modo más respetuoso y como corresponde a su rango.
Me basta saber que el Capitán Ulloa merece a Usted algunas consideraciones para que yo le permita pasar a Lima dentro de pocos días, pues repito a Usted que deseo se me proporcionen ocasiones de manifestar a Usted que soy su más atento seguro servidor. Carta de San Martín a José Bernardo de Tagle (Marqués de Torre Tagle); Supe (35 Km al Norte de Huaura) 27/11. (1,T20,391-392)
Habiendo pasado copia a VS de la reclamación que hice al Virrey de Lima con fecha 29 del pasado, he creído conveniente dirigir a VS como tengo la honra de hacerlo, la contestación que recibí, para conocimiento de SE. Oficio de San Martín a Joaquín de Echeverría, Cuartel General en Supe 28/11. (4,T14,341)
Desde
Pisco tuve la honra de informar a VS con fecha 19 (octubre) del pasado, que el ejército quedaba pronto a embarcarse, y que nuestros primeros ensayos habían ya establecido el crédito de las armas libertadoras en aquella costa.
El 24 se hallaba todo listo para dar vela, y al día siguiente tomamos el rumbo NO. El 26 y 27 permanecimos enfrente del
Cerro Azul, con la idea de amenazar un destacamento por aquella costa, y dar tiempo entretanto que se organizase la división de
Ica. El 29 llegó todo reunido el convoy a la
Isla de San Lorenzo, y fondeó en una doble línea enfrente del
Callao, donde quedó el Vicealmirante con cuatro buques de la Escuadra dirigiéndose el convoy con los restantes el 30 a la
bahía de Ancón.
El 31 mandé desembarcar 50 hombres de infantería y 20 caballos, a las ordenes del teniente Rosales, para observar el camino de
Chancay a Lima. En la misma mañana, se presentó a reconocer el puerto un escuadrón del enemigo.
El 1º de noviembre hizo su descubierta el teniente Ronlet hasta
Copacabana, tres leguas de
Lima, donde se hallaban situadas algunas fuerzas del enemigo y continuó observando su retaguardia; yo reconocí la posición y mandé desembarcar 40 caballos más a las ordenes del capitán Brandsen, y dos compañías de infantería al mando de los capitanes Crespo y Suárez, encargando al mayor Reyes el mando de esta pequeña división para que marchase sobre
Chancay.
El 8 se tuvo noticia que una división enemiga había pasado durante la noche y se había situado sobre
Chancay; yo (San Martín) había salido para el Callao en aquella mañana, y el mayor general dio ordenes para que desembarcase el batallón nº 4, a fin de proteger la división del mayor Reyes; el 9 regresé y supe que el enemigo no había logrado su objeto.
Reembarcado el nº 4, mandé que el convoy diese la vela el 9 y en una singladura llegamos a
Huacho, donde recibí del mayor Reyes el parte que acompaño en copia; esta pequeña acción ha infundido mucho sobre la moral de los enemigos, y ha llenado de entusiamo nuestros soldados. En la tarde del 10 desembarcaron los batallones 4 y 7 con 50 granaderos a caballo, y el 11 continuaron esta operación otros cuerpos del ejército con todos los caballos y mulas de carga que estaban a bordo.
El 12 volvió a Supe la división de Reyes, acabó de desembarcar el ejército y mandé que el teniente coronel Dalve fuese a hacer un reconocimiento militar de
Huaura y Supe.
El 14 mandé se construyesen 3 reductos sobre las alturas que dominan el
puerto de Huacho para su defensa, y un muelle para la comodidad del desembarco; aquellos trabajos se suspendieron el 13, y el muelle quedó concluído como se deseaba.
Nada pureba la buena disposición de estos habitantes, como la prontitud que he montado mi caballería, a pesar de las medidas exterminadoras que antes de mi arribo había tomado del Virrey.
A los seis días de mi llegada a este puerto, los regimientos de granaderos y cazadores estaban a dos caballos por hombre; entonces dispuse que saliesen sobre
Chancay 40 cazadores de mi escolta, que regresaron el 17 con la noticia de haber hecho un movimiento el enemigo a ocupar aquella posición con una fuerza de dos a tres mil hombres.
Sin demora mandé que toda la infantería del ejército marchase a
Supe, a las ordenes del mayor general Las Heras, el regimiento de granaderos a caballo a
Huaura, debiendo permanecer en
Huacho el de cazadores. Después de dar las ordenes convenientes,
marché a Huaura el 18 y el 19 llegué a Supe.
El enemigo se mantuvo en
Chancay hasta el 12, en que se puso en marcha para
Sayán, diez leguas al E de
Huaura. Con esta noticia se disponía el coronel Alvarado a hacer un movimiento sobre él con toda la caballería, más habiendo retrogradado de la mitad del camino suspendió el suyo nuestra caballería.
El 27 lo emprendió de nuevo sobre
Chancay; el enemigo en posición, un batallón de infantería ocupaba la altura y tapiales inmediatos a
Chancay y dos escuadrones de caballería cubrían su retaguardia en un terreno inaccesible a nuestra caballería. Después de haber permanecido casi a tiro de fusil, sin que el enemigo osase probar fortuna, mandó el coronel Alvarado que se retirase la división por el camino de
Sayán a donde llegó ayer a la mañana. Oficio de San Martín a José Ignacio Zenteno, Supe 29/11. (4,T14,316. Sigue el parte de Cochrane del 14/11.)
Conforme a los deseos que VS ha manifestado de que se le remita el navío San Martín, he mandado que se haga a la vela para ponerse a las órdenes de VS a quien hago presente que, con la separación de este buque y mediante la gran escasez de tripulación en que se halla el Lautaro, queda expuesto el convoy a un accidente desgraciado en caso de aparecerse las fragatas enemigas en el puerto de Huacho. Oficio de San Martín a Cochrane, Supe 29/11. (4,T36,203)
Las ciudades peruanas apoyan a San Martín y se revelan al Rey
Desde que desembarcó en las costas del Perú el Ejército Libertador se ha desplegado en todas partes el amor de sus pueblos a su independencia.
Ica, Huamanga y Huancavélica, han proclamado libremente su separación solemne del Rey de España;
Juauja, protegida por la fuerte División del coronel Arenales, ha seguido aquel ejemplo;
Conchuchos y Huamalíes, Cajatambo y Huailas han dado riendas a su patriotismo, tanto tiempo reprimido por la presencia de la fuerza opresora. En
Pasco no se contentaron con sacudir el yugo, sino que contra mi inclinación ejercieron una venganza severa, quitando la vida a los españoles que habían allí. Usted sabrá que
Caima y Huarmey han quebrantado también sus cadenas y cometido algunos excesos que aunque sencibles, son ciertamente inevitables en una conmoción popular y el tránsito repentino a un nuevo orden de cosas. En
Lima, todos los pueblos del Perú han hecho ver que no podían sobrellevar más tiemo el cetro de bronce con que los han regido los españoles, ni el sistema degrandante que siguió durante 300 años el Gabinete de Madrid. El momento de cumplirse este deseo de los peruanos se aproxima cada día más. La toma de la fragata Esmeralda bajo las baterías del Callao ha decidido de tal modo la balanza marítima en mi favor, que no queda el menor obstáculo para la realización de mis planes. En semejante situación, aislada la provincia del mando de Usted, abandonada a sí misma a la insurrección de de
Guayaquil y por la posición de mi ejército ¿Será prudente sacrificarse Usted y sacrificar a los habitantes de
Trujillo por intereses ajenos, y aún contrarios a los suyos? Repito a Usted, que no es mi ánimo alucinar ni intimidar, sí sólo propender a una unión entre nosotros, que me parece puede efectuarse salvando el honor y los compromisos públicos de Usted y consultando los intereses y felicidad de esos dignos habitantes. Carta de San Martín al marqués José Bernardo de Torre Tagle (Gobernador de Trujillo al norte de Lima), Supe sin día mes de noviembre. (1,T20,389)
Usted me da la plausible noticia de los pueblos que se han decidido por nuestro justo sistema, por si no ha llegado a la suya le comunica que
Cuenca y Loja lo están ya y que estoy tomando medidas conducentes a los mismo en este Departamento. Carta de San Martín a Torre Tagle, 2/12. (1,T20,395)
Las Provincias Unidas apoyan a San Martín, Tomás Godoy Cruz es Gobernador de Mendoza
Las favorables noticias desde Pisco del general del Ejército Libertador y la de nuestra armonía y cordialidad, me imponen el amable deber de rendirle mil enhorabuenas con la más fina voluntad, y de asegurarle apetece multiplicada ocasión de manifestar los quilates de su ley y buena fe, en obsequio de tan gloriosa provincia, como del digno jefe que la regenta. Carta de Estanislado Lopez (Gobernador de Santa Fe) a Godoy Cruz, Rosario 4/12. (1,T16,184)
El Batallón de Numancia deserta, San Martín va rodeando Lima
Tengo la satisfacción de incluir a VS copia del oficio que he recibido esta mañana del coronel Tomás Heres, que tuvo el coraje y la lealtad de dirigir el Batallón de Numancia (Realista) el 2 del presente, en que se unió al Ejército Libertador. Su fuerza consiste en 800 plazas. Bajo el Nº 2 encontrará VS el parte del coronel Arenales sobre el buen éxito de sus operaciones y, el Nº 3, se refiere a la
ocupación en Huaras (nordeste de Supe) por el Batallón Nº 5. Espero que la campaña se terminará bien pronto. Oficio de San Martín a Cochrane, Supe 4/12. (4,T36,212)
La heróica lealtad del Batallón de Numancia es digna de todo el aprecio y admiración del Ejército. Como la última prueba de mi aprecio y confianza en sus sentimientos; la Bandera del Ejército Libertador se remitirá al Batallón de Numancia y quedará depositada en él mientras dure la campaña. Orden del día de San Martín, Supe 4/12. (4,T36,209 y 4,T14,292-308)
No veo distante el día en que nuestras armas ocupen la Capital de Lima y se establezca un Gobierno Supremo por los Pueblos Libres del Perú. Creo de necesidad adoptar una medida general de acuerdo con VS mientras dure la imposibilidad de remitir a Chile los buques apresados o de juzgarlos conoforme a derecho de gente. Debe servir de base al pronunciamiento final; luego que se haya situado en
Huaura el Cuartel General (80 km al sur de Supe y a 150 km al norte de Lima). Oficio de San Martín a Cochrane, Supe 4/12. (4,T36,209)
San Martín en Supe, se prepara para ir a Huaura
Desde el 29 del pasado (noviembre), en que comuniqué a VS el detalle de las operaciones del ejército posteriores a mi salida de Pisco, los grandes acontecimientos se han sucedido con una increíble rapidez. La tentativa que hizo el coronel Alvarado (Rudecindo) el 27, presentándose delante del enemigo con toda su cabellería para apoyar la desersión del
batallón de Numancia, no tuvo entonces el éxito deseado, como instruyo separadamente a VS. La única ventaja que resultó de aquel movimiento fue obligar al enemigo a que se retirase a
Palpa, pasando a ocupar nuestra caballereía la hacienda de
Retes, dos leguas de
Chancay.
Varios oficiales y soldados de Numancia se unieron a nuestras tropas al retirarse el enemigo; y el primero de este mes se presentaron al coronel Alvarado dos de aquel mismo cuerpo, a pedirle de parte del capitán de granaderos que mandase cerca de
Palpa alguna fuerza de caballería para apoyar el designio meditado, que por accidentes imprevistos se había frustrado el 27. Inmediatamente mandó el coronel Alvarado un escuadrón de granaderos que apenas se presentó tuvo la satisfacción de ver cumplido su objeto; el
batallón de Numancia con toda su fuerza, que asciende a 800 plazas, fuera de la música,
se pasó a nuestras filas con una intrepidez que sólo es propia del pecho de los leales. El 3, a la una de la tarde, se presentó el batallón al coronel Alvarado en la hacienda de
Retes, y en la madrugada del 4 tuve el inexplicable placer de recibir las comunicaciones que van desde el Nº 1 al 3. Esta noticia ha redoblado la fuerza efectiva y moral del ejército, y yo he creído un deber mío al heroico batallón de Numancia las gracias de que se instruirá VS por la orden del día que acompaño bajo el número 4. Al benemérito capitán de cazadores graduado de teniente coronel, don Tomás Heres, le he mandado extender el despacho de coronel efectivo del mismo cuerpo, previniéndole que haga las propuestas de los demás jefes y oficiales que merezcan su confianza y dándole las gracias a que se ha hecho acreedor por una empresa, que a más de economizar la sangre del ejército libertador, prueba hasta dónde llega el imperio de la opinión pública. Los números 5 y 6 contienen mis comunicaciones al coronel de Numancia.
He dado orden al capitán Spray que dé inmediatamente la vela con las tropas de los más veleros para recibir a su bordo en
Chancay al batallón de Numancia y conducirlo a
Huacho, considerando el estado de fatiga y desnudez en que se haya después de tan continuas y penosas marchas.
Naturalmente he llamado la atención de VS a las importantes noticias que recibí ayer; pero aún hay dos acontecimientos, que aunque no sean de tanta magnitud, aumentarán la satisfacción de SE el Director Supremo, cuando vea que la victoria ha hecho una estrecha alianza con nuestras armas. El 3 por la mañana recibí por el conducto del coronel Alvarado los oficios 7 y 8 que le había dirigido desde
Jauja el coronel mayor Arenales, suponiéndole en la dirección de
Pasco, por noticias que probablemente tuvo del movimiento que intenté, y de que desistí por los motivos que he expuesto en otra comunicación. Enterado de las posiciones que ocupa y de las ventajas que le ofrece la localidad de aquel terreno, le he dado orden que se mantenga en ellos, adelantando cuando pueda sus movimientos en la seguridad de que en todo caso se halla en aptitud de ser protegido. Ayer he sido informado aunque no oficialmente, que dos compañías de línea que se hallaban en
Tarma se pasaron también al coronel mayor Arenales, cuyas fuerzas quedaban a 5 leguas de la división de ORelly. Espero por momentos la noticia de un nuevo triunfo que si se verifica, quedará
concluida la campaña antes de un mes.
A las pocas horas que recibí las comunicacione del coronel mayor Arenales, llegó a mis manos la del teniente coronel Uriondo, sobre la entrada del batallón Nº 5 a
Huaras, con los demás importantes pormenores de que instruirán a VS los números 9 y 10. En consecuencia de tan grandes y memorables sucesos, ayer di orden al ejército para que se pusiese en marcha a ocupar la margen derecha del
río Huaura, y reglar posteriormente mi plan de operaciones según las circunstancias que se presenten. Aún espero que antes de la salida del Lugre tendré la satisfacción de comunicar a VS resultados que añadan nuevas glorias al ejército de mi mando, y dobles probabilidades en favor de la causa de nuestra independencia. Oficio de San Martín a José Ignacio Zenteno, Cuartel General en Supe 5/12. (4,T14,294)
Tengo la honra de acompañar a VS para conocimiento de SE bajo los números 1 a 11, en copia, todos los oficios que forman la correspondencia que ha habido entre el Virrey de Lima y yo, desde la
negociación de Miraflores. Oficio de San Martín a Joaquín de Echeverría, Cuartel General en Supe 5/12. (4,T14,348. Siguen los 11 oficios.)
Arenales entra en Huamanga
Parece que la Providencia ha querido también presentarnos, al mismo tiempo de saberla, la entrada del coronel Arenales a
Huamanga (sureste de Lima) y la revolución en Guayaquil. Oficio de Cruz a Cochrane, Valparaíso 5/12. (4,T36,212)
Tengo el honor ahora de acompañarle la Extraordinaria de este día, en que se noticia la entrada del coronel mayor Arenales a Guamanga, y copia del parte del general Freire en que comunica el exterminio total de los salvajes y restos de tropas españolas que infestaban las provincias del sur. Carta de Joaquín de Echeverría a Miguel Zañartu, Santiago de Chile 5/12. (4,T6,131)
La Logia se restablece en Buenos Aires
La Sociedad se ha restablecido con exclusión de muchos que han sido o traidores o débiles. Entre los primeros están Juan Pedro Aguirre, Julián Alvarez, Oliden y Pedro Lezica. De los segundos, que aún están por clasificarse solemnemente, son Manuel Pinto, Rondeau y Matías Irigoyen. Pueyrredón ha sido muy consecuente a sus compromisos, a pesar de todo lo que V. haya oído de San Martín.
Si Carrera llega a Concepción (Chile), póngale V. espías a Prevost. Carta de Miguel Zañartu a Ohiggins, Buenos Aires 7/12. (4,T6,224)
Los movimientos de San Martín confunden al virrey Pezuela
San Martín, ente muy ridículo ya, se trasladó de Lancón a Chancay, de aquí a Huaura, Supe y Pavivilca. Volvió otra vez a Chancay, y en la fecha se halla en Huaura. El coronel Valdés con 3.000 hombres se acercó allá se le presentó ocasión de batirse; pero desconfiado de su vanguardia que la formaba el batallón de Numancia, replegó a Chancay, en cuya jornada, supo que fueron justos sus temores pues se había pasado al enemigo el Numancia (Combate de Chancay 25/11, Rudecindo Alvarado y Juan Pascual Pringles). Informe de Martín Herrero desde Lima. (1,T16,234)
San Martín en el Cuartel General de Huaura, insta a la ciudad de Trujillo a rendirse
Por la Moctezuma escribí a Usted el domingo pasado. Después nada a sucedido de nuevo. Yo me pongo en marcha para Vilcahuara (132 km al sur de Huara y a 10 km al oeste de Lima) en cuyas inmediaciones pienso situar los batallones. Si ocurriera algo en particular lo informaré a Usted sin pérdida de tiempo. Oficio de San Martín a Cochrane, Huaura (80 km al sur de Supe y a 40 km al este de Huacho) 6/12. (4,T36,214)
Estoy esperando por momentos el que la división de Arenales bata a la de O'Reilly que remitió el Virrey en su contra; si esto se consigue se puede asegurar, entraré en Lima en todo el presente mes. Deseo con ansia la conclusión de esta campaña, mi salud cada día se resiente de un trabajo que a cualquiera otro más robusto agobiaría; en fin, seguiremos hasta más no poder. Qué campo, mi querido amigo, a la América para ser feliz; pero temo que nosotros lo echemos a perder por nuestra falta de juicio, como ha sucedido en las Provincias Unidas. Carta de San Martín a Ohiggins, Huaura 8/12. (4,A1,307)
Por el Luque (buque) remito a Usted 200 cargas en leña para el servicio de la Escuadra y tengo, también, dadas órdenes para que se acopien todos los refrescos que la estación permite encontrar. Oficio de San Martín a Cochrane, Huaura 9/12. (4,T36,217)
El Batallón de Numancia ha dado a la causa de la tiranía un golpe mortal abandonándola todo él la noche del 2 del corriente para incorporarse a mis filas. Carta de San Martín a Torre Tagle, Huaura 12/12. (1,T20,399)
Los sucesos de esta campaña han sido extraordinariamente felices, pero ninguno tan brillante ni más trascendental a mis ulteriores operaciones, que la completa
derrota del general ORelly en el cerro de Pasco, por los esfuerzos, y el valor del benemérito coronel mayor
Juan Antonio Alvarez de Arenales, con los demás jefes, oficiales y tropa que forman la división de su mando [...] Oficio de San Martín a José Ignacio Zenteno, Cuartel General en Huaura 21/12. (4,T14,370-381. Hay 3 oficios de Arenales con detalle de la acción; es tomado prisionero
Andres de Santa Cruz.)
Cochrane deja el Callao, Forster al mando
El comandante de la escuadra partió de esta bahía anoche en la Ohiggins acompañado de la Esmeralda y el Araucano y creo que su intención es navegar a la isla de San Lorenzo (frente a las costas del Callao), esperando caer sobre las fragatas enemigas. Oficio de Carlos Forster (Capitán de la fragata San Martín) a San Martín, Callao 8/12. (1,T16,187)
El virrey Pezuela acorralado en Lima
Ya hablo a Usted de oficio sobre el estado de este país con la invasión de los enemigos de Chile, y a pesar de cuanto allí digo, son más los peligros que me rodean. El tal San Martín sin comprometer una acción formal, ha adoptado el plan más conveniente sin dudas a sus fines.
La seducción se va propagando rápidamente, y el desfallecimiento de los pocos buenos deja reducida la causa de la nación a un corto número de defensores. Aguardo con ansia la llegada de los navíos de Cádiz, porque es preciso desengañarse ya de que el imperio del mar es lo único que puede salvar a la América. Carta del virrey Pezuela al Conde de Casa Flores, Lima 10/12. (1,T16,193)
La Batalla de Pasco el 6 de Diciembre
Para consolidar más la opinión de los pueblos a favor de la causa de América y completar el desaliento de sus enemigos, he recibido hoy mismo la noticia de la victoria que la División del mando del coronel mayor Juan Antonio Arenales obtuvo el 6 del corriente en el Cerro de Pasco sobre la del brigadier OReilly, destinado con 1.300 hombres por el Virrey para oponerse a los progresos de esa libertad santa porque tanto suspiranban los habitantes de la Sierra. El triunfo ha sido tan completo que sin exagerar nada puedo decir a Usted que toda la fuerza enemiga que no quedó en el campo de batalla, ha sido hecha prisionera con inclusión de su jefe de Estado Mayor, general Sanchez, y 25 oficiales más, escapando con inminente riesgo el brigadier OReilly, casi solo. Carta de San Martín a Torre Tagle, Huaura 12/12. (1,T20,399)
El Gobierno de Norteamérica interesado en comerciar con Sudamérica
Ayer llegó un buque de Chile con la noticia de que por cartas de Estados Unidos se aseguraba que este Gobierno había reconocido la independencia de Chile y Río de la Plata, y que la fragata norteamericana Constelación se hallaba en el Janeiro con comisionados del Presidente Monroe para celebrar tratados de Amistad y Comercio con nuestras autoridades. Carta de San Martín a Torre Tagle, Huaura 14/12. (1,T20,401)
San Martín se prepara para dejar Huaura
Los dos acontecimientos de Numancia y OReilly, junto con el estado de la opinión pública en Lima, me impelen hacer un movimiento sobre aquella Capital, como pienso verificarlo avanzando el Cuartel General dentro de 3 días. Por este motivo, y teniendo toda mi caballería situada en Chancay, no me es posible remitir los 200 hombres de esta Arma que me pide, pero para el mejor logro de sus planes doy con esta fecha órdenes terminantes al sargento mayor Juan Franco para que tenga a disposción de Usted los 120 hombres de infantería de línea escogidos que manda en Santa y además todas las milicias de aquellos pueblos. Carta de San Martín a Torre Tagle, Huaura 14/12. (1,T18,401)
Andrés Santa Cruz deserta del Ejército Español
No son estos los únicos oficiales que han abjurado de sus errores políticos. Entre los que fueron tomados en el
Cerro de Pasco, y se especifícan en la nómina nº 6, han resuelto combatir en nuestras filas por la sagrada causa de la independencia de América, don
Andrés Santa Cruz, N.Arescurenaga, Benito Ruiz [...] Oficio de San Martín a Pezuela, Huaura 15/12. (4,T15,7)
Buenos Aires vitorea a San Martín y Chile, Remedios festeja
Llegó anoche a las 9 de ella, o para hablar con más justicia, cerca de esa hora, me impuse de las comunicaciones que trajo García un poco más temprano. Cada renglón que leía me iba anegando en un placer que llegó a su colmo, cuando ví que los
sucesos de Concepción (sur de Chile) dejaban ya gozar puros los grandes, los inefables de Lima. En esos instantes se iluminó mi casa de un modo que llamó la atención pública. Mandé al gobernador sustituto Balcarce la correspondencia que le pertenecía, y empecé a satisfacer la justa ansiedad de un inmenso pueblo que ocupaba mi casa y la calle. A los pocos momentos me llegaron las músicas de todos los regimientos que se alternaron hasta las 3 de la mañana, y la música italiana. A esa hora empezó el Fuerte sus salvas y las iglesias un repique general. Yo hice quemar cuantos cohetes habían en las pulperías y más de 100 cartuchos que tenía en mi casa desde el 6 de octubre. La locura de mi calle se extendió pronto por toda la ciudad, y ya no se oía en los intervalos que dejaba el fuego más que vivas al Gobierno de Chile,
al general San Martín, al ejército y aun a mi, que tanto como eso se prodigaron. A pesar de la reserva que V. me encargaba sobre Concepción, no la guardé ni debía guardarla, pues la prohibición de V. se fundaba en la ignorancia de aquellos tristes acontecimientos; y nada había aquí más sabido que las cartas de los extranjeros, en tanto grado que la dirección de Carrera fue consencuencia de tal noticia [...]
Anoche no he dormido, como debe V. suponer, porque después de la borrachera que tuve en mi casa, me fui con todas las músicas e inmenso pueblo a cumplir con madama
Remedios el encargo de V. Agradeció mucho la visita. A más de las ceremonias del día, esta noche he estado también de etiqueta en el teatro, donde se representó una graciosa pantomima bien desempeñada, figurando el
desembarco de San Martín con mil incidentes graciosos que duraron hasta las doce de la noche [...]
PD: Se me olvidaba decir a V que por la pantomima de esta noche vino el Director del teatro a consultarme si podría hacer tremolar también la bandera bicolor (Argentina). Mi contestación fue que si trataban de acercar la reperesentación a la realidad, debían sólo poner la de Chile, como se hizo. Este espectáculo dejó notar en los semblantes varias impresiones que noté, pero que se dulcificaban con el simulacro de San Martín, cuya aparición me esmeré en celebrar. Cuando he dicho que he publicado las victorias de Concepción, no crea V. que por la prensa. Esto sería una imprudencia, porque haría ver a las naciones que estamos en anarquía. Lejos de hacerlo, he suplicado al Gobierno de aquí que imite en esta parte la política juiciosa de V. Carta de Miguel Zañartu a Ohiggins, Buenos Aires 21/12. (4,T6,228)
El virrey Pezuela quiere negociar con San Martín
Todo va bien y cada día se asegura más y más la libertad del Perú; yo me voy con pies de plomo sin querer comprometer una acción general, pues mi plan es bloquear a Pezuela. Él pierde cada día en la moral de su ejército; se mina sin saber; su deserción crece, y yo aumento mis fuerzas progresivamente, la insurrección corre por todas partes como el rayo y estoy esperando la de Trujillo, con cuyo Gobernador, el Marqués de Torre Tagle, estoy de acuerdo. En fin, con paciencia y sin precipitarse, todo el Perú será libre en breve tiempo. Carta de San Martín a Ohiggins, Huaura 23/12. (4,A1,307)
El Virrey me ha oficiado con fecha 14, precisamente cuando acaba de recibir la noticia de la derrota y prisión de OReilly invitándome a nuevas negociaciones mediante a haber recibido de su corte facultades más amplias que con las que se hallaba al tiempo de las conferencias de Miraflores. Le he contestado que se explique en términos más positivos, pues estoy pronto a entrar en todo avenimiento que tenga por base la independencia del Perú. Mañana se mueve el Ejército para Chancay. Con este motivo me hallo escaso de tiempo. Carta de San Martín a Torre Tagle, Huaura 23/12. (1,T20,403)
Trujillo declara su independencia de España
El Marques de Torre-Tagle, gobernador político y militar de la provincia de Trujillo, a los habitantes del pueblo N. Llegó por fin el venturoso día en que los ilustres habitantes de Truxillos sacudiesen el vergonzoso yugo de la tiranía española, y proclamasen con excesivo entusiasmo la gloriosa independencia [...] Proclama del Marques de Torre Tagle, Trujillo 29/12. (4,T15,15)
Bibliografía
1) Instituto Nacional Sanmartiniano. Documentos para la Historia del Libertador General San Martín, Tomos (T) 1 al 20.
2) Espejo, Gerónimo. El Paso de los Andes.
3) Instituto Nacional Belgraniano. Documentos para la Historia del General Don Manuel Belgrano, Tomo (T) 1 al 7.
4) Instituto Ohigginiano. Archivo de Don Bernardo de Ohiggins, Tomos (T) 1 al 37.
5) Documentos para la Historia de la Bandera Argentina (2001), Guillermo Palomo y Valentín Espinosa.
6) Actas Capitulares de Mendoza, Tomo (T) 1 al 4.
7) El Redactor de la Asamblea 1813-1815.
8) Espinosa, José María. Memorias de Gervasio Antonio de Posadas.
9) Archivo Histórico de Tucumán.
10) Revista de la Biblioteca Nacional de Buenos Aires, Tomos (T) 1 al 25.
11) Registro Oficial y Nacional de la República Argentina.
12) Senado de la Nación Argentina, Biblioteca de Mayo, Tomos (T) 1 al 19.
13) Diario Los Andes.
X) Archivo General de la Provincia de Mendoza: Época Colonial e Independiente (EC,EI), Carpetas y Documentos (C,D), Protocolos (P).
Y) Archivo General de la Nación Argentina: Documentos Escritos.
Z) Archivo Nacional de Chile.