San Martín arma un Campamento en Retes, Valle de Chancay

En este momento tengo la satisfacción de recibir las comunicaciones del Marqués de Torre Tagle, que acompaño en copia bajo los números 1 y 2, por no permitirme la premura del tiempo remitir las demás. Oficio de San Martín a José Ignacio Zenteno, Cuartel General en Retes 4/1. (4,T15,13. Es proclamada la independenci de Trujillo el 29/12/1820.)

Para que la felicidad de Usted sea completa, y mis deseos de complacerle se llenen, sólo falta sacar de Lima a mi señora, su esposa. Consuélese Usted mi amigo con la lisonjera idea de lo importante que es la continuación de Usted en el mando de Trujillo y con la esperanza que no pasará mucho tiempo sin que tenga el gusto de abrazar a Usted en Lima. Carta de San Martín a Torre Tagle, Retes (a 70 km al sur de Huaura y 90 km al norte de Lima) 5/1. (1,T20,406)

El dado de ésta es patriota decidido y como tal estoy informado que ha algunos servicios en Lima, y en algunas comisiones a que Usted le destinó. Él desea servir en el ejército y en esta virtud se lo recomiendo a Usted para que me haga la propuesta que crea conveniente y darle destino. Carta de San Martín a Torre Tagle, Retes 7/1. (1,T20,407)

No hay diablos que sean capaces de sacar al Virrey de sus fortificaciones de Aznapuquio, a pesar de haber estado mi caballería a 2 legua de Lima, el hambre lo hará salir, en el interín pienso irme pasado mañana o el otro con la Infantería a Huaura, dejando en este punto toda la Caballería y parte de la Artillería volante pues aquella línea me presenta más comodidaes y recursos para subsistir, pues todo este partido lo han arrazado los enemigos. Carta de San Martín a Torre Tagle, Retes 13/1. (1,T20,409)

El Gobierno de Francia interesado en comerciar con Sudamérica

El 13 del que corre entre 4 y 5 de la tarde del que corre fondearon en este Puerto el navío Coloso y fragata Galatea al mando de Pedro Jurien de La Graviere. Francia no teniendo establecimientos en América podría llevar no sólo los metales preciosos sino, también, otros frutos que las demás naciones no necesitan, de lo que resulta el recíproco interés. Oficio de Cruz a San Martín, Valparaíso 15/1. (4,T37,12)

San Martín regresa a Huaura

Si persiste el virrey Perzuela en su obstinación para provocarle a salir de su fuerte posición en Aznapuquio, así como por las escazes de recursos del Valle de Chancay, y con la mira de otros sucesos importantes, me he retirado a este punto en donde pudiera fijarse la época de la completa emancipación de América si los enemigos tienen la osadía de venir a atacarnos. Carta de San Martín a Torre Tagle. (1,T20,412)

Por fin, contra mi orden e intención, él paso a Trujillo; y en esta virtud y siendo algo peligroso por su sagacidad y carácter intrigante, conviene que Usted lo aleje de esa Intendencia. Al efecto yo le digo en esta fecha al expresado Ortega que reciba órdenes de Usted y puede Usted dárselas para que pase a Guayaquil o lo destine Usted a alguna de esas provincias interiores. Carta de San Martín a Torre Tagle, Huaura 19/1. (1,T20,412)

Cochrane con problemas operativos en Huacho

Lord Cochrane a llegado a Huacho después de haber buscado en vano a las fragatas enemigas hasta en la altura y puerto de Arica. Carta de San Martín a Torre Tagle, Huaura. (1,T20,414)

Tengo el honor de incluir a VE los papeles relativos a la Macedonia y Luisa, y de informarle que el bergantín Indian saldrá esta tarde para Valparaíso, si no hubiere incoveniente. Oficio de Cochrane a San Martín, Huacho 23/1. (1,T16,220)

Entregue el Cirujano Mayor los medicamentos los medicamentos que expresa la Lista que presenta al Cirujano de la fragata Ohiggins, bajo el correspondiente recibo: sal catártica 2 libras, opio en polvo 2 onzas, alcanfor 1 onza, nitro 6 onzas. Oficio de San Martín, Cuartel General de Huarua 23/1. (4,T37,16)

Tengo el honor de incluir a VE el estado del bergantín Pueyrredón, que me remitió su comandante después de haberse hecho a la vela; por éste verá VE que el Pueyrredón tiene solamente 30 hombres a bordo, excluyendo la tropa, lo que hace inverificable que trasborde de 20 a la Lautaro. La Ohiggins y la Independencia están tan escasas de gente, que apenas tiene lo necesario para la navegación. Oficio de Cochrane a San Martín, Huacho 24/1. (1,T16,221)

Los marineros que han cumplido el tiempo de enganchamiento han rogado que se le paguen sus haberes, y juzgo sea mi deber hacer presente a VE esta solicitud, porque el único modo de conservar su confianza, y que continúen en los servicios, es un puntual cumplimiento del trato hecho con ellos. Oficio de Cochrane a San Martín, Huacho 25/1. (1,T16,222)

La cantidad de medicina que VE se ha servido mandar entregar a la escuadra es sumamente inadecuado al objeto que me veo en la necesidad de proponer a VE dejar aquí los enfermos de la escuadra pues no hay cómo curarlos. Oficio de Cochrane a San Martín, Huacho 25/1. (1,T16,223)

Permítame VE informárle que no teniendo a bordo un real, me he visto obligado a cambiar 20 botijas de aguardiente por 500 libras de pintura, y otra por un barril de aceite, para la conservación de los buques de la escuadra. Oficio de Cochrane a San Martín, Huacho 26/1. (1,T16,223)

Quedo enterado de los motivos que han impedido a VS de comunicarme el Parte del último crucero que ha hecho la Escuadra; y espero tener la satisfacción de recibirlo luego que sus atenciones se lo permitan. Oficio de San Martín a Cochrane, Cuartel General de Huarua 26/1. (4,T37,19)

Mendoza y el comercio con Chile

Deseando este Gobierno restablecer el tráfico y relaciones comerciales de esa República con ese país, con fecha 19 de enero, he decretado lo siguiente: "Conviniendo al restablecimiento del tráfico de esta ciudad y relaciones de comercio con la República de Chile, la variación de la tarifa de derechos que ha regido hasta el presente en esta Aduana se observará en lo sucesivo la que sigue:"

1º) Todas las producciones así naturales como industriales de la República de Chile, que se introdujeren para el consumo o tránsito por esta ciudad, quedarán libres de derechos de entrada en los mismo términos que lo están por decreto del Supremo Gobierno de Chile, de 29 de setiembre del año pasado, las de Mendoza que se introducen en aquella República.

2º) Los efectos rigurosamente extranjeros que se introdujeren por aquella vía, se sujetarán al arancel de los de igual clase que se importan de Buenos Aires.

3º) El mismo arancel se observará con las producciones de las costas del Perú, entretanto los puntos de su origen conservan el carácter de enemigos.

4º) En los efectos de las últimas dos clases que se introdujeren de tránsito, quedará reducido a sólo un dos porciento, y un real de ciudad por fardo el 25 que pagaban anteriormente. Oficio de Tomás Godoy Cruz al Secretario de Estado en el Departamento de Gobierno de Chile, Mendoza 23/1. (4,T15,28-31)

San Martín rebautiza el buque Esmeralda

He resuelto, no dudando tener su aprobación que la fragata española denominada antes "Esmeralda", se llame fragata del estado de Chile "Valdivia"; cuyo nombre traerá también a la memoria los esfuerzos de quien la restauró el 3 de febrero de 1820. Cuartel General de Huaura 26/1. (4,T37,19)

Acabo de ser informado verbalmente por el capitán Carter del Araucano, que una fragata mercante Inglesa ha entrado al Callao por el boquerón protegida por lanchas cañoneras de aquel Puerto, y por los mismo botes de la Andromaca (buque de guerra inglés) quebrantando el bloqueo efectivo que sostenía el bergantín Araucano. Oficio de San Martín al Departamento de Guerra y Marina, Huaura 29/1. (4,T37,22)

En ejercicio de las facultades que me ha otorgado el Supremo Gobierno de Chile, he resuelto que la antigua fragata española Esmeralda sea bautizada Valdivia. Oficio de San Martín a Cochrane, Huaura 3/2. (4,T36,224)

Las Heras y su diario

Los negocios de oficio me urgen por una parte, y la breve salida del correo por otra. Así solo incluyo a V por ahora copia del diario de Heras, que es el mejor y más circunstanciado de cuantos hemos recibido en la última correspondencia del Perú. Carta de Joaquín de Echeverría a Miguel Zañartu, Santiago de Chile 1/2. (4,T6,331)

El bergantín Pacífico es enviado con provisiones desde Chile

Tengo el honor de acompañar a VS una razón de los víveres que van embarcados en el bergantín Pacífico para el sustento del Ejército Libertador: 92 barriles con carne salada y porotos, 609 zurrones de harina flor, 335 sacos de frijoles, 204 sacos de frangollo, 26 zurrones de cebo, 11 costales de grasa con 20 botellas de tinto, 225 sacos de galletas. Oficio de Cruz a Cochrane, Valparaíso 3/2. (4,T37,23)

San Martín mejora su salud, pero se complica la invasión a Lima

Aunque hace dos días me he levantado de la cama, de un fuerte ataque que he tenido, voy a contestar a usted aprovechando la salida de la Minerva que parte para esa mañana.
Mucho celebro que me da del buen estado del país; igualmente me es muy satisfactorio los viveres que dice que manda para la escuadra. ¡Ay! amigo mío, ahora he conocido que nada basta para estos hombres. Reses, botica, todas las maderas que traje con el ejército, todas las lonas y bienes, frutas, verduras; en fin, estoy loco y todo es preciso darlo para contentar estas gentes. Pueda usted calcular mi situación con ningún socorro y sólo dos pesos a cada soldado y dos tercios a cada oficial, que he dado este mes, me importan ... y pico de pesos; aquí no entra la subsistencia en gastos extraordinarios y secretos, ni la manutención de cuatrocientos más que arrastra el ejército, hospitales y otra infinidad de cosas que usted sabe que surgen. Créame usted de buena fe que algunas veces me encuentro desesperado, que he estado pronto a ir a atacar al enemigo y aventurar la suerte a una acción decisiva para salir cuanto antes de este infierno y descanzar de una vez; pero la consideración de que de la suerte de esta campaña pende el bien de tantas generaciones, me hace sufrir. Ya sabrá usted que cuando salí de Chile, mi fuerza total, incluso el número 2 y la compañía de maestranza, era de 3.872 hombres; en el día alcanza mi fuerza a 6.700.
El enemigo ha sido reforzado con cuatro batallones y tres escuadrones del Alto Perú; a pesar de esto, no creo salga de la ratonera de Lima a buscarme, tanto por la calidad de las tropas cuanto porque si se mueve, la mayor parte del ejército se le deserta. En fin, yo le tengo en Lima un medio bloqueo; le voy inundando de partidas patritotas que lo hostilizan y fatigan diariamente hasta llegar a una legua de la capital del Perú. Cada soldado sólo para comer, y mal, le cuesta al virrey cuatro reales diarios. Por aquí puede usted calcular si podrá sostenerse mucho tiempo y máxime teniendo todas las provincias del norte en insurrección, no contando con ninguna entrada y el Callao en un riguroso bloqueo. Carta de San Martín a Luis de la Cruz, Huaura 3/2. (4,T9,96)

Los Realistas se retiran de Chancay y se debilitan en Huamanga

No ocurre novedad de importancia para comunicar a Usted a excepción de la precipitada retirada que, sin motivo, hizo el enemigo de Chancay a los pocos días de haberlo ocupado. En la Sierra hemos obtenido una pequeña ventaja sobre la débil fuerza de Carratalá que se halla en Huamanga, habiendo batido los nuestros y hecho prisioneros unos 70 enemigos. Lord Cochrane ha dado la vela para continuar su crucero, y algo se puede esperar de su actividad e intrepidez. Carta de San Martín a Torre Tagle, Huaura 4/2. (1,T20,417)

Lima es abastecida desde el Interior por el bloqueo del Callao

Tengo el honor de incluir para vuestra información un oficio del capitán Forster del Independencia quien con el capitán del San Martín arregló para enviarla desde ese lugar con el objeto de interceptar buques relacionados con el Callao, los cuales siempre tocan los puertos del Sud para inteligencia para evitar el bloqueo de nuestra escuadra. He aprendido también que las provisiones están entrando dentro de Lima por el interior. Oficio de Cochrane a San Martín, a bordo de la fragata Ohiggins en Cerro Azul (Puerto a 125 km al sudoeste de Lima) 9/2. (1,T16,225)

Desde nuestra salida de Huacho, hemos tenido vientos tan débiles y contrarios, con una corriente tan fuerte que nos empujaba hacia el norte, que hemos perdido 8 días antes de llegar a la latitud de San Lorenzo (isla), por donde pasamos a bastante distancia para no despertar sospechas. He desembarcado a los marineros de mi nave y de la San Martín y los puse a las órdenes del coronel Heres a quien VE tuvo a bien enviarme para hacerse cargo de las tropas. Hallase actualmente en Cañete (a 100 km al sudoeste de Lima) con 150 hombres. Oficio de Cochrane a San Martín, a bordo de la Ohiggins en Cerro Azul 10/2. (1,T16,230)

Por mis oficios verá Usted que hasta ahora no he podido emprender el golpe mortal que Usted había dispuesto contra el enemigo. Lima está, según me dice el señor Martín Herrera, en un estado muy deplorable. Este me parece será de mucha ventaja, introduciendo en Lima mucha discordia que lo que hasta ahora ha reinado en esta desgraciada capital. Oficio de Cochrane a San Martín, a bordo de la fragata Ohiggins ancalda en Cerro Azul 10/2. (1,T16,231)

Nada se ha hecho en razón de los débiles vientos y fuertes corrientes. Nunca he estado tan impaciente en mi vida. Si todas las tropas han estado tan enfermas estarán débiles como ratas en su llegada a la escena de la gloria. Esperando encontrarlo en Lima pronto. Oficio de Cochrane a San Martín, a bordo de la fraga Ohiggins en Cerro Azul 10/2. (1,T16,232)

Motín de Aznapuquio: Pezuela derrocado, José de la Serna es Virrey del Perú

El 28 del pasado Canterac y los de su facción depusieron a Pezuela del mando y se lo confirieron a La Serna, a quien tiene Usted de Virrey en el día. De modo que los que tan enemigos se manifiestan de los insurgentes, lo son ellos mismos ahora. Carta de San Martín a Torre Tagle, Huaura 9/2. (1,T20,418)

El prudente, ilustrado y desinteresado general La Serna que debiera regresar a España desde que se separó del mando del Ejército del Alto Perú, se quedó aquí a instancias del virrey Pezuela. El resultado fue intimarlo la separación absoluta del señor Pezuela, retirarse en el acto a su quinta de la Magdalena (en el Distrito Magadalena Vieja, luego Distrito de Pueblo Libre a 5 km al sudoeste de Lima), y embarcarse para la Península dentro de 30 días a dar cuenta de su conducta al Soberano. Con una paz verdaderamente octaviana se efectuó lo primero y lo segundo el 29 (enero) del pasado en la tarde. Hablar de la alegría que, los hombres de juicio manifestaron al ver al hombre de bien La Serna colocado en la Esquina de los Desamparados es nunca acabar. Informe de Martín Herrero, Lima 12/2. (1,T16,233-237)

El virrey Serna solicita una entrevista con San Martín

Circunstancias muy particulares y extraordinarias que Usted no ignorará, me han puesto a la cabeza de este Virreinato, cuyo cambio ha sido recibido del público con júbilo y entusiasmo. Creo no estaría de más tuviese una entrevista en Chancay, entre 2 jefes superiores del ejército de su mando con otros 2 del mío, por si se pudiese hallar un medio que concilie los intereses y concluya las desaveniencias entre españoles, americanos y europeos; lo que puede verificarse en el término de 24 horas. Oficio de Serna a San Martín, Lima 9/2. (4,T37,24)

En cumplimiento de la orden de VE de 15 del corriente, para que pasásemos a la hacienda de Torreblanca, donde debía tener lugar nuestra entrevista con dos jefes enemigos, marchamos a Huacho, y el 16 a la una y media de la tarde, salimos de aquel puerto a bordo del bergantín de guerra Pueyrredón, con dirección a Chancay, en el que anclamos a las 6 de la tarde del día siguiente. Inmediatamente seguimos al lugar de nuestro destino, y después de haber mandado retirar a Chancayllo todas las partidas avanzadas para dejar al pueblo de Chancay y sus suburbios como campo neutral, aguardamos el día convenido para la entrevista. A las 5 y media de la mañana del 19 se nos anunció que se acercaban los jefes enemigos, con una escolta de 22 hombres y estacionada ésta en Pasamayo, los coroneles Gerónimo Valdes, jefe del Estado Mayor, y Andrés Loriga, Comandante General de Caballería de Lima, nombrados para la entevista por parte del Exmo señor general Laserna, vinieron a nuestro alojamiento acompañados del oficial que habíamos destinado a este objeto. Era de esperar que después de los comedimientos recíprocos y de haber manifestado por nuestra parte la sinceridad con que VE aceptaba la invitación del general Laserna para buscar un medio conciliatorio que terminase los males de la guerra, los señores jefes sus comisionados, hiciesen alguna proposición consistente en tales principios, y la terminante y solemne protesta, repetida por VE en otras ocasiones, de no entrar en convenio alguno que no tuviese por base la indendencia política del Perú [...] Parte de Rudecindo Alvarado y Tomás Guido, remitido por San Martín a Ohiggins 23/2. (4,T15,133-136)

San Martín prohibe levantar el bloqueo del Callao

He tenido noticia que la fragata Miantinomio está próxima a llegar del puerto de Valparíso para el del Callao, conduciendo a su bordo los prisioneros que existían en Chile, y una considerable cantidad de harinas para introducir en el mercado de Lima en virtud de un permiso dado por el Supremo Gobierno (Chile). En esta virtud prevengo a VS que cualquiera que sean las órdenes que reciba del Gobierno de Chile con respecto a la Miantinomo, no permita que por pretexto alguno entre en el puerto del Callao. Oficio de San Martin a Cochrane, Huaura 9/2. (4,T37,26)

San Martín prohibe la salida de Pezuela de Lima

Tengo noticias de Lima que me aseguran se hallaba próximo a salir el bergantín Maipú, a cuyo bordo trataba de embarcarse el ex Virrey de Lima Joaquín de Pezuela con toda su familia para transportarse a Europa. En esta virtud, prevengo a VS redoble su vigilancia para impedir la salida de Pezuela. Oficio de San Martín a Cochrane, Huaura 9/2. (4,T37,27)

San Martín dicta el Reglamento Provisional

Que establece la demarcación del territorio que actualmente ocupa el Ejército Libertador del Perú, y la forma de administración que debe regir hasta que se construya una autoridad central por la voluntad de los pueblos libres. Encargado de restituir á esta vasta parte del Continente Americano su existencia y sus derechos, es un deber mío consultar sin restricción todos los medios capaces de contribuir a aquella grande obra. Aunque la victoria hiciese una estrecha alianza con mis armas, quedaría sin embargo un peligroso vacío en los empeños que he contraído, si no me anticipase a preparar los elementos de la reforma universal, que ni es posible perfeccionar en un día, ni es justo diferir enteramente bajo ningún pretexto. Los sucesos mas brillantes de la guerra, y las empresas mas gloriosas del genio de los hombres, no harían mas que excitar en los pueblos un sentimiento de admiración mezclado de zozobra, si no entreviesen por término de todas ellas la mejora de sus instituciones y la indemnización de sus actuales sacrificios. Entre el escollo de una reforma prematura, y el peligro de dejar intactos los abusos, hay un medio, cuya amplitud señalan las circunstancias del momento, y la gran ley de la necesidad. Cualesquiera que sean las dificultades que se presenten al adoptarlo, es preciso tener un grado de coraje superior á ellas, y hacer el bien con firmeza y con generosidad, para iniciar la importante obra que el tiempo consolidará mas adelante. Sobre estos principios, y a fin de atender los diversos objetos que en el nuevo orden de cosas hacen inevitable el cambiamiento de la administración, para no dejar en la incertidumbre y sin sistema las autoridades, y expuestos los derechos particulares á los riesgos de una jurisdicción indefinida, o a la falta absoluta de recursos que suplan las formas suprimidas por la necesidad : he resuelto establecer el siguiente Reglamento, usando de las facultades que en mi residen, y consultando el derecho que tienen los pueblos al establecimiento de aquellas reglas de que penden el orden y la seguridad general, el cual debe emanar en todas circunstancias de la suprema autoridad que existe de hecho, aun prescindiendo del derecho en que se funde: por tanto, y con la expresa calidad de provisorio, movido del interés público, y autorizado por esa imperiosa ley, que solo deja elección en los medios, y no en su objeto, declaro y establezco lo siguiente:

1. El territorio que actualmente se halla bajo la protección del Ejército Libertador, se dividirá en cuatro departamentos, comprendidos en estos términos: los partidos del Cercado de Trujillo, Lambayeque, Piura, Cajamarca, Huamachuco, Pataz y Chachapoyas, formarán el departamento de Trujillo con las doctrinas de su dependencia: los de Tarma, Jauja, Huancayo y Pasco, formarán el departamento de Huaylas, Cajatambo, Conchucos, Huamalies y Huanuco, formarán el departamento denominado de la Costa.

2. En cada seccion de estas, habrá un presidente de departamento: la residencia de los dos primeros será en Trujillo, y Tarma; la del tercero en Huaras, y la del cuarto en Huaura.

3. Los jefes de partido que antes se denominaban sub-delegados, se llamarán gobernadores, y ejercerán las mismas funciones de aquellos: en los pueblos de cada partido habrá un teniente gobernador que recibirá inmediatamente las órdenes del gobernador del partido y este del presidente del departamento.

4. Sus atribuciones serán las siguientes. Podrá proponer la creación de nuevos cuerpos de milicias, arreglar su economía interior, y hacer las propuestas de oficiales a la capitanía general.

5. Conocerá en todas las causas civiles y criminales que por derecho correspondían a los gobernadores intendentes en los mismos términos que hasta aquí, consultando el dictamen del asesor del departamento en los casos prevenidos por las leyes, y remitiéndolas para su aprobación al capitán general.

6. Conocerá exclusivamente en las causas de Hacienda, sujetándose al dictamen de su asesor en los asuntos contenciosos.

7. En cada departamento habrá un agente fiscal con quien de entenderán las instancias en que se interese el Erario público: también será de su resorte el promover la prosperidad y aumento de este ramo, y vigilar sobre la conducta de los empleados, entablar acciones contra ellos en caso necesario, e informar sobre las medidas que convenga tomar para el aumento y conservación de la riqueza pública.

8. De las sentencias pronunciadas por los presidentes de los departamentos en los asuntos contenciosos de Hacienda, habrá un grado de apelación al tribunal que se indicará luego.

9. En las causas civiles y criminales entre partes del fuero común, se observarán sin alteración las leyes y ordenanzas del Perú, con la sola diferencia de que los recursos que antes se dirigían a los llamados intendentes y subdelegados, se harán en lo sucesivo a los presidentes de los departamentos y gobernadores de los partidos.

10. Se establecerá una Cámara de Apelaciones en el departamento de Trujillo, compuesta de un presidente, dos vocales y un fiscal, que permanecerán en sus destinos mientras duren sus buenos servicios: en los actos oficiales tendrá el tratamiento de Excelencia.

11. Luego que se instale este tribunal, formará el reglamento para su método interior, que me remitirá para su aprobación, y propondrá los demás empleados subalternos que considere absolutamente necesarios para la expedición de los negocios.

12. Sus atribuciones serán las siguientes: Conocerá en todas las causas y casos que antes conocían las denominadas audiencias, con la sola restricción de no entender en las causas de mayor cuantía, reputándose por tal la que pase del valor de quince mil pesos, cuyo conocimiento se reserva a los tribunales que establezca el gobierno central que se forme en el Perú.

13. Las alzadas en las causas de Hacienda se llevarán de todos los departamentos a la junta superior de Hacienda, compuesta de la Cámara de Apelaciones, y dos ministros del Tesoro público: el fiscal de la cámara llenará las mismas funciones que hasta aquí.

14. Los recursos conocidos en el derecho por de injusticia notoria, se interpondrán a la Capitanía general, en atención a las circunstancias, y se decidirán por las leyes existentes con dictamen del auditor general.

15. Por regla general se establece que mientras duren las actuales circunstancias, todas las causas de infidencia, traición, espionaje, o atentando contra el orden autoridades constituidas, serán ptivativamente del conocimiento de la Capitanía General, a cuya disposición deberán remitirse los reos, con las correspondientes sumarias formadas por el juez del distrito para su decisión, conforme a las leyes.

16. El derecho del patronato queda reasumido en la Capitanía general, y el de vice-patronato en los presidentes de los departamentos.

17. La jurisdicción eclesiástica se administrará como hasta aquí, con estricta sujeción al derecho común canónico.

18. Todas las leyes, ordenanzas y reglamentos que no estén en oposición con los principios de libertad e independencia proclamados, con los decretos expedidos desde el 8 de Setiembre anterior, y con lo establecido en el presente, quedan en su fuerza y vigor, mientras no sean derogados, o abrogados por autoridad competente.

19. Todos los funcionarios públicos serán responsables a un juicio de residencia, que se seguirá por una comisión especial nombrada al efecto por la Capitanía general en los casos de gravedad y trascendencia.

20. Por un decreto particular se establecerán los sueldos que deban gozar todos los empleados de nueva creación, y los distintivos correspondientes al rango de los magistrados de un pueblo libre.

Dado en el Cuartel General de Huaura a 12 de Febrero de 1821. 2º de la Libertad del Perú, y 4º aniversario de la batalla de Chacabuco. José de San Martín. Bernardo de Monteagudo, Secretario de Guerra y Marina. Juan García del Río, Secretario de Gobierno y Hacienda. (1,T16,237-241 y 4,T15,108-114: Reglamento para Esclavos)

El comandante Andrés Santa Cruz deserta del Ejército Español

Santa Cruz se condujo con alguna inconsistencia y esto ha sido causa de que no se le hubiese dado aún colación. Pero mediante la recomendación de Usted y no dudando que a su lado pueda adelantar mucho (Trujillo), se lo remitiré luego que se restablezca de las tercianas de que hace días adolece y hecho por Teniente Coronel efectivo. Carta de San Martín a Torre Tagle, Huaura 13/2. (1,T20,423)

Cochrane en la Bahía del Callao

Tengo el honor de hacerle conocer para información de SE el capitán general que el buque bajo mi comando llegó a esta bahía hoy habiendo partido con Lord Cochrane el 12 último desde Cerro Azul. Oficio de Forster a Monteagudo, a bordo de la Indendencia en Huacho 16/2. (1,T16,244)

Temo que la llegada de la Moctezuma con cargamento de provisiones, por licencia del Gobierno de Chile, levanta el bloqueo de jure a todos los neutrales, como de facto le ha inutilizado para la pronta reducción de Lima. Oficio de Cochrane a San Martín, a bordo de la Ohiggins en Callao 16/2. (1,T16,245)

El comandante del Parlamentario (buque) ha vuelto del Callao, y me ha informado que el enemigo acabó de enviar 1.000 tropas y 300 de caballería en busca de los artilleros de la marina que desembarcaron a Cerro Azul. Es por ahora impracticable hacer alguna tentativa sobre el Castillo. Oficio de Cochrane a San Martín, a bordo de la Ohiggins en Callao 16/2. (1,T16,246)

La provisión de carne salada existente a bordo de los buques de la escuadra. Me parece que el charqui produce escorbuto y otras enfermedades, cuando se consume sin ser acompañado de frutas o legumbres. Oficio de Cochrane a Monteagudo, a bordo de la Ohiggins en Callao 16/2. (1,T16,247)

José de Torre Tagle es nombrado Presidente del Departamento de Trujillo

Por cuanto atendiendo a los méritos y servicios del Mariscal de Campo Marqués de Torre Tagle he venido en nombrarle Presidente del Departamento de Trujillo. Interín se erija en las Provincias del Perú una Autoridad Central. Firman: San Martín y Monteagudo, Huaura 21/2. (1,T20,428)

Cochrane indignado con el Gobierno Chileno, San Martín se reúne con Serna

He escrito pública y privadamente al general (San Martín) en relación al decreto del Castillo. Estoy muy apenado por este fracaso y, más aun, ya que las provisiones para las tropas de Fernando (Rey) y todo Lima han llegado de Chile con licencia. No tengo palabras para expresar mi asombro ante un proceder tan extraño. ¿ A dónde llegará esto ? Confienso que empiezo a dudar si todo este conflicto será coronado por el éxito, a menos que el enemigo. Nuestro bloqueo es ahora hasta el fin; por lo que no es permitido a un beligerante usar los derechos de guerra como medios para llevar a cabo su exclusivo comercio en su propio beneficio. Oficio de Cochrane a Monteagudo, a bordo de la Ohiggins en Callao 16/2. (1,T16,250)

Por la adjunta copia de carta se impondrá Usted de la invitación que me ha hecho La Serna; y, aunque yo no me prometo resultado alguno de la entrevista que en ella me propone, con todo he creído político el acceder a ella y han salido los coroneles Alvarado (Rudecindo) y Guido (Tomás) para conferenciar mañana con los otros jefes que me nombrase La Serna. Del éxito avisaré a Usted oportunamente. Oficio de San Martín a Cochrane, Huaura 17/2. (4,T37,31)

Quedo enterado de todas las comunicaciones de VS que he recibido por el bergantín Pacífico y por la goleta Moctezuma, en cuyo virtud prevengo a VS que, dejando el bloqueo establecido con los demás buques de la Escuadra, venga al puerto de Huacho para que en, vista de las circunstancias últimamente ocurridas, combinemos un plan de operaciones definitivamente y se hagan todos los arreglos que exija el bien del servicio con más facilidad y menos dilación. Si antes de recibir esta orden no ha salido del Callao el transporte Argentina (buque), dispondrá VS siga las aguas de la Ohiggins. Con respecto a la tropa, que tomó a su bordo la fragata Valdivia, disponga VS se trasborde de la Ohiggins para que venga a reunirse el Ejército, quedando aquella en el bloqueo hasta el regreso de VS. Oficio de San Martín a Cochrane, Huarua 18/2. (4,T37,34)

Con mucha ansiedad estoy en espera de informaciones suyas. Espero sinceramente que sean tan favorables como las que recibí en Ancón cuando estaba en una incertidumbre análoga. La Miantinomo viene de Valparaíso con permiso del Gobierno (Chile) para introducirse al Callao un cargamento de trigo; es preciso impedirlo a todo trance, pues sería una ruina el que en las circunstancias que admitiese este ejemplo. Oficio de San Martín a Cochrane, Huaura 21/2. (4,T36,225)

Urgiendo el arreglo definitivo de las operaciones posteriores de la campaña, el que no puede realizarse sin que me ponga de acuerdo con VS sobre los varios objetos que es preciso consultar, prevengo a VS que, sin demora, venga al puerto de Huacho, pues todo se halla pendiente del plan que VS combine conmigo para los movimientos de la Escuadra y del que deba adoptar el Ejército en las actuales circunstancias. Oficio de San Martín a Cochrane, Huaura 28/2. (4,T37,41)

Tengo la honra de acompañar a VS bajo las letras A hasta la D, las comunicaciones que he recibido del general Laserna, después de la deposición del Virrey Pezuela por la fuerza armada, junto con mis contestaciones, y parte de los coroneles Rudecindo Alvarado y Tomás Guido, a quienes comisioné para la entrevista con los jefes nombrados por aquel general. Oficio de San Martín a José Ignacio Zenteno, Cuartel General en Huaura 3/3. (4,T15,130-136. Partes A, B, C y D, entrevista en Chancay en la Hacienda de Torreblanca)

San Martín una semana enfermo

Mi salud está sumamente abatida. Antes de ayer me levanté despues de 7 días de cama, creo con evidencia que si continúo así pronto dare la tierra. Carta de San Martín a Ohiggins 3/3. (4,A1,308)

San Martín y los trofeos de guerra

Tengo el honor de incluir a VS para conocimiento del Supremo Director de ese Estado, copia del oficio en que el Comandante General de Armas de la provincia de Guayaquil, puso en manos del coronel Tomás Guido la bandera del batallón de granaderos de reserva [...] La bandera fue conducida por dicho coronel y ha sido colocada en el depósito de los trofeos militares recogidos hasta ahora en la campaña. Oficio de San Martín a José Ignacio Zenteno, Cuartel General en Huaura 4/3. (4,T15,136)

En Trujillo, Borgoño regresa a Huaura y Freire con mala conducta

Visto lo que Usted me expone acerca de Borgoño y creyendo por tanto conveniente que pase a continuar sus servicios en el ejército, prevengo de oficio que venga al Cuartel General con este objeto y para reemplazar su falta pienso destinar al teniente coronel Luis Urdanete. Ruiz queda arrestado y le enviaré a Chile en primera oportunidad, considero prudente su separación de estos países. En cuanto a Freire, me mantengo en observación de su conducta y con arreglo a ella procederé en adelante. Carta de San Martín a Torre Tagle, Huaura 11/3. (1,T20,435)

Cochrane en Huacho recibe el nombramiento de Su Excelencia

Siendo importante que las necesidades de los buques de la escuadra sean inmeditamente satisfechas, me permito por intermedio de usted, informar al general y comandante en jefe que las naves San Martín, Valdivia y Ohiggins, acaban de anclar aquí y piden leña, víveres frescos, lo mismo que limones y naranjas en gran cantidad para combatir la disposición a las afecciones escorbúticas que se están manifestando ahora. Oficio de Cochrane a San Martín, Huacho 9/3. (1,T16,261)

El continuo deterioro que padecen los botes y la pipería de la escuadra por la dificultad de hacer la aguada en este puerto; le aseguro, que si tenemos que repetir la aguada del modo como hasta ahora, no quedará lancha, bote, ni pipa útil. Oficio de Cochrane a San Martín, Huacho 12/3. (1,T16,265)

Tengo el honor de inlcuir a VE los papeles del bergantín Pacífico, que aunque sería mi deber remitir dicho buque a Chile para confiscación por carecer de la necesaria patente de navegación, me abstengo de hacerlo por no desear perjudicar a ninguno que pertenezca al Estado de Chile, pero tengo que suplicar a VE que informe al gobierno de la República, que de ningún modo deberá salir un buque nacional sin una patente permanente además de las licencias del comercio de cabotaje. Oficio de Cochrane a San Martín, a bordo de la fragata Valdivia en Huacho 13/3. (1,T16,265)

No hay novedad particular, a excepción de la salida de la Escuadra para continuar el bloqueo del Callao y hostilizar a los enemigos por la parte del Sur de la Capital. Carta de San Martín a Torre Tagle, Huaura 16/3. (1,T20,439)

VE como vicealmirante se halla paralelo a un Teniente General del Ejército y, por consiguiente, en posesión del tratamiento de Excelencia y demás prerrogativas que le concede la Ordenanza Naval. En esta virtud me ordena el Señor Director Supremo le avise a VE para su conocimiento, y que se sirva comunicarlo en la Orden General de la Escuadra. Oficio de Zenteno a Cochrane, Santiago de Chile 23/3. (4,T37,51)

El padre de Remedios con úlcera

Don Antonio José de Escalada, gravemente enfermo de una úlcera cancerosa, no encuentra entre todos los recursos de la medicina uno que, en la opinión de los médicos, sea bastante poderoso para curarle. Carta de Miguel Zañartu a Ohiggins, Buenos Aires 14/3. (4,T6,243)

Los Comerciantes limeños preocupados por la falta de acción de San Martín

En Lima convenían todos los partidos en que el plan de campaña, adoptado por SE el general en jefe (San Martín), era sumamente sabio; y que hasta cierta fecha había sido ejecutado con la mayor habilidad. Hasta la llegada de Ricafort (Mariano, General Realista en la Sierra) todos los españoles inteligentes, incluso La Serna, creían firmemente que Ustedes se apoderarían de Liman en el momento que tuviesen por conveniente atacarlos. La venida de Ricafort, la colocación de La Serna en lugar de Pezuela y otras ventajas imaginarias los entusiasmaron de tal modo que ya se consideraban capaces para defenderse en Aznapuquio en caso de ser atacados. En una palabra, es mucho más conveniente para el país que las tropas se mantengan en Aznapuquio, que el que vayan a desolar el interior. Carta de Tomás Gutrie a García del Río, Huacho 20/3. (1,T17,1)

San Martín mejora su salud y Cochrane regresa al Callao, Carrera asola las Provincias Unidas

No es poca suerte el haberse Usted librado del fuerte ataque de sangre que me anuncia en su apreciable del 4 (7 días en cama;T17,30). Miguel Carrera que fue dejado a su arbitrio en las fronteras de Buenos Aires entre los indios, ha podido rehacerse a atacar las tropas de Bustos cerca del Río Cuarto (Córdoba) donde fue éste derrotado, la mayor parte de los soldados de este se pasaron a la montonera; enseguida derrotó la División de puntanos que salió a oponérsele. Dicen que se dirigía a la Punta de San Luis. El Gobierno de Mendoza dirige sus clamores a mi para que lo auxilie, en efecto, mañana salen para el Portillo 200 Granaderos de la Guardia de Honor, 20 artilleros con 2 piezas de artillería y 70 soldados de la Guardia Directorial. Carta de Ohiggins a San Martín, Santiago de Chile 23/3. (1,T17,7 y 4,T8,125)

Yo padezco aquí frecuentemente por este mal temperamento, pero siempre ansioso de manifestarle cuánto le ama su afectísimo paisano y amigo. Carta de San Martín a Torre Tagle, Huaura 26/3. (1,T20,443)

San Martín preocupado por barcos mercantes que entran al Callao

La facilidad con que han entrado al Callao varios buques mercantes cargados de provisiones, sin embargo, el bloqueo. Que se halla encargado de sostener el capitán Forster, ha llamado mi atención seriamente hacia un objeto de tanta importancia, y con esta fecha le dirijo el oficio que acompaño en copia. Oficio de San Martín a Cochrane, Huaura 2/4. (4,T37,53)

Los cañones de la Ohiggins que se habían pasado a la Valdivia han sido trasbordados otra vez a la Ohiggins, y estos dos buques han quedado en Pisco al auxilio de la tropa, con órdenes de cooperar con el teniente coronel Miller (Guillermo); yo bajé a ésta para averiguar cómo habían entrado algunos buques neutrales a ese puerto, y tengo que informar a VE que una de las causas ha sido el haber tenido el Galvarino que abandonar el bloqueo por hallarse sin agua, sin leña, aunque hacía pocos días que este bergantín había salido de Chancay, donde pudo haberse abastecido de todo. Oficio de Cochrane a San Martín, Callao 3/4. (1,T17,14)

Cochrane desembarca tropas en Pisco, luego vuelve al Callao

Tengo la satisfacción de informar a VE que a los 7 días de nuestra partida de Huacho, la tropa destinada a bloquear el camino del Sur fue desembarcada en Pisco en la noche y entró al pueblo al día siguiente, haciéndose de 300 caballos, ganado vacuno y mulas, que han sido útiles para cargar vino, frutas y otros necesarios para los buques. El estado favorable del viento me indujo principalmente a desembarcar primero en Pisco, sabiendo que podíamos en todo tiempo caer en la costa que media entre éste y Lima. Luego después me dirigí a Cerro Azul con un destacamento, para arriar el ganado de este valle hacia Pisco, pero la mucha marejada impidió el desembarco, juntamente con las noticias que recibí por el Potrillo (buque) al día siguiente de mi arribo, que 1.000 hombres había pasado por Chilca destinados a oponerse a nuestras operaciones, esto me hizo regresar a Paracas de donde despaché el destacamento a reunirse a la División, juntamente con la tropa de artillería de la Ohiggins y Valdivia. Tengo el honor de incluir a VE una nota del capitán Videla (José) al teniente coronel Miller, detallando una escaramuza que tuvo con un cuerpo de Húsares enemigo que había bajado del Alto Perú. La fuerza enviada de Lima ha llegado a Cañete, y dudo si pasará más adelante; otro cuerpo de 1.000 hombres ha ido por el camino de la Sierra, y estoy informado que éste ha sido reforzado con otro destacamento que ha salido de Lima. Oficio de Cochrane a San Martín, a bordo del navío San Martín en Callao 3/4. (1,T17,16)

Habiéndome dirigido a Pisco con el San Martín, Ohiggins y la Valdivia de acuerdo con SE, el general en jefe de las fuerzas, quedaron en el bloqueo de este Puerto la Independencia, Galvarino y Araucano; pero aunque el Galvarino había venido pocos días antes de Chancay, se hallaba sin agua, ni leña, debido al criminal descuido del capitán Spry, por cuyo motivo tuvo que bajar a Huacho a surtirse, y el Araucano, habiendo salido en caza de una goleta que había salido de éste, valida de la niebla, la que siguió 3 días de bajada; salió la Independencia a la caza, cuando lograron entrar por el boquerón la General Brown cargada de harina y otros efectos, una fragata inglesa en lastre y un bergantín, y escapó el Maipú que se dice haberse dirigido a Europa. Oficio de Cochrane a Monteagudo, Callao 6/4. (1,T17,24)

Desde la fecha de mis últimas comunicaciones el ejército ha permanecido en las mismas posiciones que antes, y tanto por el considerable número de enfermos, como por la estación, que como he observado a VS otras veces, es un obstáculo a todo movimiento en este país, no he intentado más operaciones que la de mandar a bordo de la Escuadra, 500 hombres de las mejores tropas al mando del teniente coronel Miller, para hostilizar al enemigo por el Sur de Lima, aprovechándose de las incalculables ventajas que produce la movilidad de la Escuadra. Hasta aquí el resultado ha llenado mis deseos; el teniente coronel Miller, desembarcó en Pisco en la noche del 21 del próximo pasado y en la madrugada del 22 logró reunir 300 caballos, igual número de cabezas de ganado vacuno, carneros y algunas mulas. Los habitantes le recibieron con el mayor entusiasmo cansados de las injusticias que han sufrido desde que el ejército salió de aquel pueblo. Por la premura del tiempo, no incluyo a VS el parte del capitán Videla sobre un encuentro que tuvo con un cuerpo de húsares del enemigo, fuerte de 80 hombres que se dirigía al pueblo bajo de Chincha el 26 de marzo, al que puso en completa derrota con 43 infantes que tenía a sus ordenes, matándole 6 soldados, a más de un gran número de heridos que quedaron en esta ocasión fue notable el coraje del teniente Saura, y más que todo la cobardía del enemigo, que cargado con una fuerza de infantería, tan inferior en número, fue completamente batido. El capitán Aramburo, de granaderos a caballo, aunque montó con actividad lo que tenía a su mando, y persiguió hasta 3 cuartos de legua del pueblo al enemigo, no pudo alcanzarlos por el mal estado en que se hallaban sus caballos. El vicealmirante de la Escuadra, después de haber dirigido aquel movimiento, regresó al Callao en el navío San Martín, dejando en la bahía de Pisco las fragatas Ohiggins y Esmeralda, para proteger la división del teniente coronel Miller. Tengo motivos para esperar que hasta la fecha habrá hecho notables progresos, pues la calidad de aquella fuerza, y de los jefes que la mandan, son ventajas que dan derecho a la confianza. Por la correspondencia que he recibido de Trujillo, he sido informado que la goleta Sacramento, que salió del Callao para Panamá con la de España y algunos caudales, arribó a Paita, después de haberse sublevado su tripulación, dirigida pro el contramaestre que tuvo el coraje de emprender un proyecto concebido de antemano, y que debe producirnos ventajas incalculables. Oficio de San Martín a José Ignacio Zenteno, Cuartel General en Huarua 6/4. (4,T15,137)

Quedo impuesto por comunicación de VS del 3, del desembarco de las tropas en Pisco y de los primeros felices ensayos que ha hecho aquella División al mando del teniente coronel Miller, según demuestra el parte de 26 de marzo sobre el encuentro del capitán Videla en el pueblo de Chincha baja. Oficio de San Martín a Cochrane, Huarua 7/4. (4,T37,57)

Tuve el honor de informar a VE que había apresurado mi venida de Pisco al Callao para investigar las circunstancias relativas al escape y entrada de varios buques al Callao; incluyo ahora una carta del capitán Forster, juntamente con una copia de parte del Diario de la Independencia explicando cómo aconteció. Oficio de Cochrane a San Martín, a la vela en el San Martín 14/4. (1,T17,26)

Lima desguarnecida, Cochrane insta a San Martín a invadir

Toda la tropa ha salido de Lima menos la Concordia (buque), y unos 1.500 hombres son los únicos en el Callao exceptuando los reclutas. Ahora es el tiempo de dar al enemigo el golpe mortal; con 4.000 tropas responderé con mi cabeza, desembarcando en Chorrillos (30 km al sur de Lima), estará Usted en Lima 4 horas después. Si se resuelve Usted sobre esta medida en el interín, bajaré con el San Martín mañana o el día después; y acompañaré a Usted a Chorrillos, o vería a Usted con la caballería en Lima, si se me permite acompañar a estas por tierra. Estas nuevas he recibido del vigia de San Lorenzo de navíos pescadores de Pucusano (42 km al sur de Chorrillo), y de aquí; como igualmente de los oficiales de la Andrómaca. No se necesita más que presentarse para que la Capital del Perú caiga en su poder. En los hospitales hay cerca de 2.000 enfermos padeciendo fiebres epidémicas. Oficio de Cochrane a San Martín, a bordo del navío San Martín en Callao 8/4. (1,T17,17)

San Martín y opio para las tropas

Me hacen mucha falta para el Ejército 2 onzas de opio y estimaré a Usted me las facilite y remita por extraordinario. Carta de San Martín a Torre Tagle, Huaura 10/4. (1,T20,450)

El bloqueo a Lima complicado por falta de víveres, dinero y mantenimiento en los buques

Está en camino de Valparaíso acá, una fragata, la Bahía Marchant con una cantidad de leña y caballería a bordo, ropa para la marinería, hilo de velas. Si una cantidad suficiente de estos artículos no se compran, expondrá Usted a SE que los buques y tripulaciones de la Escuadra, se pondrán en un estado de imposibilidad de continuar en el bloqueo. Oficio de Cochrane a Monteagudo, Callao 5/4. (1,T17,20)

La Independencia ha perdido una de sus anclas y el San Martín ha perdido una hoy, esto se debe a que los cables están totalmente podridos y de ninguna confianza para la seguridad de los buques. Oficio de Cochrane a Monteagudo, Callao 6/4. (1,T17,22)

Las velas del Ohiggins y San Martín, están deterioradas y podridas. Estos dos buques no han tenido una vela nueva en los últimos 3 años y, en todo servicio, los buques de guerra tienen a lo menos un juego cada año. Oficio de Cochrane a Monteagudo, Callao 6/4. (1,T17,23)

El San Martín, la Ohiggins y la Valdivia han sido pagados, y los demas buques quedan por pagarse. Carta de Cochrane a Monteagudo, en el San Martín a la vela 14/4. (1,T17,29)

Hace cerca de 8 meses que salió la Escuadra de Chile, desde entonces las tripulaciones no han tenido más refresco que carne, y el escorbuto a empezado a afectarlos, debido a la falta de vegetales y fruta, como también de ropa para conservar el aseo que es tan esencial a la salud. Carta de Cochrane a San Martín, a bordo del San Martín 14/4. (1,T17,29)

San Martín recibe noticias de Mendoza y de su familia en Buenos Aires

Mi amable general; mi amigo, mi subsistencia, y mi todo; no encuentro voces que expresar como yo quisiera la extensión de mi reconocimiento a las repetidas finezas de Usted; pero si puedo asegurarle que mi gratitud será eterna.

Si mis cartas no han padecido extravío como me temo, Usted habrá visto que no he faltado ni a la amistad ni a la franqueza a que la generosidad de Usted me invitaba; pero como nunca hubieren tenido determinación para hacer uso de la cantidad que la bondad que Usted me asigna, me determiné entrar en las monjas por parecerme que con aquella medida lo conciliaba todo, no ser tan gravosa a la amistad de Usted pues siempre contaba con ella, esconder ya mi impresentable figura, ser en algún modo útil a las niñas que allí se educan y pensar en la eternidad, pues a la verdad sería la mayor de las desgracias terminar infeliz después de una vida tan insípida como la que yo llevo. Usted me hace justicia en creer no era un principio de orgullo el que me decidía a tomar aquella resolución, bien conoce Usted que aunque hubiese tenido un gran fondo de él la revolución de América la hubiese extinguido.

Luego que nos veamos enteramente libres de los enemigos del orden se hará en la casita de los Barriales todo lo que Usted desea, más antes no es posible. Tenemos a Carrera en las inmediaciones de San Luis. Han salido 300 Cívicos en persecución de estos nuevos vándalos al mando del coronel Dominguez y de Miguel Villanueva, el primero dicen es muy torpe, al segunda Usted ya lo conoce, no sé lo que sucederá, ni a uno ni a otro lo creo decidido por el orden; aquí por una fatalidad incomprensible los más de los que tiene bienes disienten o directamente desean la anarquía, y los que no los tienen, el orden; nuestro Gobernador (Tomás Godoy Cruz) es demasiado bondadoso, si le pudiéramos inocular una buena dosis de firmeza y pillería, permítame Usted esta palabra, quedaría excelente, más en el día los buenos no lo respetan y los malos lo desprecian, es demasiado confiado y así salimos de un riesgo y entramos en otro y siempre escapamos de milagro.

Dice Usted que tiene flema para hacer la guerra a los limeños porque es muy viejo, no solo no lo es Usted, sino que es de necesidad que no lo sea, aún le queda a Usted quehacer para concluir la obra empezada, y ya sabe Usted lo que decía con los aprietos que la fortuna haría como las damas que no gustaban de viejos. Sé por los que llegan de Buenos Aires de su familia de Usted, Escalada siempre achacoso, pero la Remeditos mejorada y nutrida, la Merceditas graciosa, crecida y con toda la viveza de su padre, me dicen que va a la misa de muy andaluza y que tiene muchas facilidades para aprender cuanto le enseñan; que lee bastante bien.

Cuídese Usted en cuanto lo permita la campaña, primero que tengamos el gusto de volverlo a ver pues sólo su presencia puede consolidar la tranquilidad y el orden en estos países. Tiene el honor de decirse su amiga la más obligada y más hallarse reconocida en la vida. Carta de María Josefa Morales de los Ríos a San Martin, Mendoza 13/4. (1,T17,25-26)

San Martín en Huacho se comunica con Serna

Con esta fecha escribo al Sr La Serna para que permita a Usted y su familia salir de esta ciudad para Trujillo con el equipaje que exige su calidad. Carta de San Martín a la Marquesa de Torre Tagle, Huacho 15/4. (1,T20,450)

San Martín en Huaura prepara el embarque de la tropa

De oficio aseguro a Usted que se le remitirán con la posible brevedad 100 hombres para contribuir a repeler la expedición contra Piura, de cuya venida todavía dudo. Hago aquel esfuerzo precisamente en circunstancias en que voy a moverme con el Ejército por mar. Carta de San Martín a Torre Tagle, Huaura 19/4. (1,T20,452)

Cochrane en Paracas y Pisco con tropa enferma

Remitiré los enfermos con la posible brevedad, pero ojalá hubiese un transporte para este destino; porque a bordo los buques de guerra podrán producir un contagio. Desde que estamos por acá ha habido tanta marejada que no hemos podido desembarcar en Cerro Azul. Sabemos con evidencia la entrada de Huacho y nada en Lima estos últimos días. Y temo mucho que nuestras fuerzas en tierra y mar no serán capaces de prevenir los recursos que tiene el enemigo para sostenerse en Lima, aunque no con abundancia. Carta de Cochrane a San Martín, a bordo del San Martín en Paracas 17/4. (1,T17,32)

No es mía la culpa del regreso de la Meantinomo, ni menos el que condujese 1.700 fanegas de trigo sin otra clase de víveres, sino es de 0-0 (Logia Lautaro). Carta de Ohiggins a San Martín, Santiago de Chile 17/4. (1,T17,30)

Conduce la Valdivia soldados enfermos, que no pueden curarse aquí por falta de medicamentos, especialmente de quina, y en adelante los que enfermasen tendrán que perecer por esta falta en la Escuadra. Carta de Cochrane a San Martín, a bordo del San Martín en Bahía de Pisco 18/4. (1,T17,36)

Los buques destinados al bloqueo del Callao, e igualamente los que están aquí, se hallan sin leña, así espero que mandará VE que lo que hubiere en la playa de Huacho y lo que pueda colectarse se entregue a la Valdivia. Carta de Cochrane a San Martín, Bahía de Pisco 18/4. (1,T17,37)

Desde ayer se ha traído de Pisco 25 enfermos; además de los que dejó la Valdivia por no poder acomodar a bordo todo el número que había, y los facultativos me aseguran que no pueden cortar la enfermedad en su principio ni curarla en su progreso. Carta de Cochrane a San Martín, Bahía de Pisco 19/4. (1,T17,38)

Varios buques que con sus cargamentos son de buena fe neutrales, han sido examinados por los de la Escuadra; les he permitido bajar a los puertos que están en posesión del Ejército Libertador. Carta de Cochrane a San Martín, Bahía de Pisco 19/4. (1,T17,39)

Estando obligados primero por el terrible oleaje en la costa del Cerro Azul, y que tendremos como causa adicional, la enfermedad; 175 hombres además de un tercio de los oficiales, incluso Miller, están impedidos de moverse, no teniendo medicinas. En un día o dos, moveré las restantes tropas por esto, si el mar está lo suficientemente calmo para desembarcarlas en el Cerro Azul, y si el enemigo no es allí demasiado fuerte para nosotros. Oficio de Cochrane a Monteagudo, Bahía de Pisco 19/4. (1,T17,40)

Instrucciones para Arenales en su segunda incursión por las Sierras

La División del general Arenales se retiró de la Sierra por una orden equivocada dada por el coronel Alvarado que se hallaba en Palpa con la Caballería, cuando el general en jefe (San Martín) tuvo conocimiento de esta orden mandó al general Arenales suspender su marcha, mas ya había pasado la Cordillera y su División se hallaba en un estado deplorable, tanto por las fatigas de la campaña como las enfermedades, lo que imposibilitó a dicho general repasar la cordillera. Carta de San Martín a Miller. (Bruselas, 1827;1,T20,354)

Emprenderá su marcha con los cuerpos de este Ejército compuesto de los batallones Numancia, Nº 7, Cazadores, Regimiento de Granaderos a Caballo, 2 piezas y 16 artilleros, cuya fuerza total asciende a 2.116 hombres, y unirse a los 600 hombres que tiene el coronel Gamarra (Agustin Gamarra, Realista pasado a las filas Patriotas, Coronel del Batallón Cazadores del Perú). Su objetivo principal marchar sobre las Divisiones de Valdés y Ricafort y destruírlas. Deberá cubrir la provincia de Jauja y cubrir las quebradas de San Mateo, Huarochiri y principales avenidas de Lima. Con el resto de la División intentará insurreccionar los partidos de Huamanga y Huancavélica; y abrir su comunicación con Ica y la División que está en Pisco o con mi Ejército que talvez se establecerá en este último punto. En caso de un suceso desgraciado se replegará por Cajatambo a la provincia de Huailas, su capital Huaras. La fuerza que queda aquí se replegará sobre el río Barranca, la infantería a Huailas y la caballería a Huarmey; igualmente deberán verificar su retirada a los puntos indicados si la División de la Sierra ha sufrido algún contraste capaz de no ser reparado en Pasco y que la obligen a retirarse a la ya citada provincia de Huailas. Reunidos en caso de contraste la división de la Sierra y la de Huaura pueden hacerse firmes en Huaras, y mantener sus comunicaciones con Trujillo y la costa. José de San Martín, Huaura 20/4. (1,T17,41-43)

Cochrane deja la Bahía de Pisco

Estamos en este momento para hacernos a la vela con todos los soldados capaces de moverse, los demás quedan protegidos por la Ohiggins, y en ella bajarán a Huacho. Miller está muy repuesto y espero que en pocos días que estamos en el mar, que la terciana (fiebre) desaparecerá enteramente. Carta de Cochrane a San Martín, a la vela en el San Martín en Bahía de Pisco 21/4. (1,T17,43)

San Martín no entiende a Bolivar

A V admirará el armisticio de Bolivar; él se hallaba en Santa Fe el 10 de diciembre, y me avisa marcha sobre Quito; para mi es un enigma tanto este armisticio con los españoles como el plan de sus operaciones. Para esclarecer estas dudas sale pasado mañana un comisionado a encontrarlo, y ver cuál es el objeto que él se propone, y si conviene con las instrucciones que V me tiene dadas, combinar nuestras operaciones. Carta de San Martín a Ohiggins, Huaura 21/4. (4,A1,308)

Instrucciones para Borgoño al mando de la División de Huaura

Instrucciones que deberá observar por el tiempo de mi ausencia José Manuel Borgoño. La División de Huaura se compone de los Batallones 11 y 2 de Cazadores a Caballo y Húsares, resto de artillería con 2 piezas de montaña. El objeto de sus operaciones es mantener una estricta defensiva, cubriendo si le es posible con sus avanzadas el punto de Chancay; su caballada la situará en Huacho y su infantería en Supe y Barranca, los hospitales en Patilvica, igualmente que la maestranza y el parque. Si fuese atacado en fuerzas superiores se repelgará a Pativilca; si el enemigo sigue avanzando hará retirar el parque, maestranza e infantería a Huaras y la caballería a Huarmey. Si el enemigo avanza inutilizará o quemará todos los trigos que se hallan en Huacho y Supe. Si viese excesivo el número de cargas que tiene el parque, embarcará en los buques que quedarán en el puerto de Supe las municiones y demás pertrechos. Con los indios de Huacho, si le es posible concluir la fortificación del cerro y cabeza del puente. En caso de tener que emprender la retirada avisará por un buque al bloqueo del Callao la venida de los enemigos, pasarán a Salinas en donde esperarán. Hará que todos los ganados de Huaura y Huacho se retiren a Supe o Pativilca, para que los enemigos no se aprovechen de nada. Si el general Arenales fuese batido queda encargado de avisar al comandante general de Huaura y retirarse a la provincia de Huaylas, desde cuyo punto abrirá comunicaciones con Trujillo. Mantendrá las comunicaciones con el comandante general de la Sierra, los presidentes de Trujillo, Huaylas, Guayaquil y partidas de Huarochiri y Asunción. José de San Martín, Huaura 22/4. (1,T17,48-51)

Monteagudo informa que el convoy deja Salinas

Mientras marcha a su destino la división del General Arenales, he creído conveniente embarcar ésta compuesta de los Batallones 4 y 5 y seis piezas de montaña, en la que salgo con el Jefe del Estado Mayor dejando a cargo del Comandante General de Artillería la tercera división que forman los Batallones 2 y 11 con los escuadrones de Cazadores a caballo y Húsares de la Escolta. Esta división se establecerá entre Supe y Barranca con los Hospitales el Parque y la Maestranza. El capitán Raulet queda en Chancay con una fuerte partida de observación y la Caballería de Huacho. Pasado mañana daré la vela de Salinas con rumbo a barlovento. Oficio de San Martín a José Ignacio Zenteno, Cuartel General en Huarua 23/4. (4,T15,166)

Tengo la honra de participar a VS que esta mañana zarpó para su destino de la rada de Salinas el convoy que transporta la división el Ejército. Oficio de Bernardo Monteagudo (Auditor del Ejército Libertador) a José Miguel Zenteno, Huaura 28/4. (4,T15,167)

Pueyrredón vuelve a Buenos Aires

Don Juan Martín Pueyrredón se ha restituído ya a su casa; y ha sido preciso que este Gobierno lo reclame de los portugueses para que le concediesen su permiso; tal es el ascendiente que tienen sobre ellos los partidos anárquicos que se han refugiado en Montevideo. Pero estos trabajos han hecho honra a Pueyrredón, porque han desmentido públicamente las calumnias con que sus enemigos lo cargaron cuando el malvado Sarratea (Manuel) lo presentó como complotado de los portugueses. Carta de Miguel Zañartu a Ohiggins, Buenos Aires 26/4. (4,T6,246)

Ohiggins anticipa la reunión entre San Martín y Bolivar

Bolivar viene marchando para Quito después de haber celebrado con Morillo un armisticio de 6 meses.
Acompaño a V los boletínes del ejército del Perú que han venido a mis manos. Se me asegura que Bolivar ha pedido a San Martín una conferencia, aunque sea en cualquiera de los ángulos del Perú. Carta de Ohiggins a Miguel Zañartu, Santiago de Chile 5/5. (4,T6,312)

Bolivar y el Congreso General de Colombia

Habiendo el señor Libertador (Bolivar) nombrado en 4 de abril vicepresidente de la República al general de división Antonio Nariño, con especial encargo de instalar el Congreso, removiendo todos los obstáculos que pudieran oponerse, SE se presentó el 27 en esta villa a cumplir con tan importante encargo. Los diputados fueron convocados para el día 6 de mayo. Una comisión compuesta de los señores Félix Restrepo, Francisco Pereira, Vicente Azuero, Miguel Zárraga y Prudencio Lanz fue encargada de la calificación de los poderes. Hecha la calificación, llegó el día deseado, el día grande de Colombia. Reunidos los representates de la Nación en la iglesia, y hechas las preces de costumbre, se congregaron en la sala destinada a la instalación. El vicepresidente pronunció su discurso inaugural, sencillo, pero del caso, y lleno de principios luminosos. Concluído el discurso, procedió al gran acto de la instalación; los representantes prestaron el correspodiente juramento; se nombró presidente del cuerpo a Félix Restrepo, vicepresidente a Fernando Peñalver y secretarios a Francisco Soto y Miguel Santa María. El Congreso de Colombia (22 provincias;T18,265) quedó instalado, llenados los deseos del Libertador, y los votos de la Nación cumplidos. Villa del Rosario de Cúcuta 8/5. (1,T18,263; ver y leer: 4,T29,98-103)

Cochrane en Arica, Miller y sus tropas desembarcan

Tengo la complacencia de informar a VS que la circunstancia accidental de habernos venido a Arica (50 km al sur de Lima), ha proporcionado el medio de conseguir de la fragata inglesa Admiral Cockburn, todos los cables, jarcias y lonas que se necesitan en la Escuadra, y celebro el poder añadir que el total se ha obtenido sin que el Gobierno de Chile tenga que sufrir desembolso alguno de su cuenta. Carta de Cochrane a San Martín, a bordo del San Martín en Arica 11/5. (1,T17,58)

La posesión permanente de este puerto sería muy importante, pero como VE no podrá destacar del Ejército la fuerza necesaria habrá que abandonarlo al enemigo. Este puerto es ahora el receptáculo de todo el comercio del Perú; de aquí se abastece el Potosí y todo el interior. Me persuado que el teniente coronel Miller estará ya en Tacna, el sargento mayor Soler ha subido la Quebrada de Arica en persecusión del enemigo fugitivo. Hemos hallado aquí tres bergantines pequeños y una goleta con bandera española y acabo de saber de dos más que están a sotavento, que mandaré a asegurar. Carta de Cochrane a San Martín, Arica 11/5. (1,T17,59)

Armisticio de Punchauca el 23 de Mayo

Convencidos de que una suspensión temporal de hostilidades es necesaria para fijar las bases de la negociación, y celebrar un armisticio, durante el cual se proceda a conciliar las actuales desavenencias ente el gobierno español y los independientes de esta parte de América; convienen que todo acto hostil queda suspendido por una y otra parte contratante, durante el término de 20 días contados en que se ha notificado el presente armisticio. Punchauca (10 km al oeste de Lima) 23/5 a las 5 de la tarde. (4,T37,73. Armisticio completo: 4,T15,195-196)

Base preliminar de la negociación propuesta por San Martín

1. Reconocimiento de la independencia del Perú como Nación Soberana.
2. Formar una Junta Gubernativa compuesta por 3 sujetos que serían elegidos; uno por el Virrey; otro, por el general San Martín; y el tercero, por la Capital; cuya Junta en unión de un diputado por cada provincia se encargaría de la formación provisoria de una constitución hasta la reunión del Congreso General.
3. Nombrar dos Comisionados; uno por el Virrey; y otro, por el general San Martín; para pasar a España a participar la independencia del Perú e invitar al Rey a nombrar un infante de su dinastía para coronarse en el Perú jurando antes admitir la constitución que se le presentase.

Las demás propuestas se reducían a las posiciones que ambos ejércitos debían ocupar. El general La Serna convino en la conferencia en un todo con estas propuestas, más a los dos días escribió al general San Martín diciéndole que había consultado a los jefes de su ejército se habían negado a admitirlos. El general San Martín, que conocía bien a fondo la política de gabinete de Madrid, estaba bien persuadido que él no aprobaría jamás este tratado, pero como su principal objeto era de comprometer a los jefes españoles como de hecho lo quedaban, habiendo reconocido la independencia, no tenían otro partido que tomar que el de unir su suerte a la de la causa de América. Carta de San Martín a Miller. (Bruselas, 1827;1,T20,360-361)

Miller y sus tropas toman varias ciudades, Cochrane en Ilo

Desde Miravé informé a VS del buen éxito obtenido por nuestra pequeña divión el 21 del corriente, y que era mi designio aprovecharme de las ventajas obtenidas. Sin pérdida de instantes proseguí mi marcha con la rapidez que permitía la exhaustés en que se hallaba mi tropa, dejando aquellos que por cansancio, o enfermedad no podían seguir, al cuidado de los habitantes patriotas; y después de una marcha continuada de 40 leguas desde Sama llegué a esta plaza a las 7 de la mañana donde pocas horas antes habían llegado 60 hombres de caballería enemiga que por haber traído otro camino distinto ignoraban mi proximidad. Estaban apenas empezando a ensillar sus caballos cuando el Capitán Suarez los cargó con 12 hombres arrojándolos de la plaza, siguiéndose el resto de los granaderos y cazadores a caballo mandados por el Mayor Soler que les dio alcance derrotando completamente los fugitivos, matándoles un oficial y 13 hombres. El Coronel Sierra fue hecho prisionero juntamente con 4 oficiales y 30 particulares, huyendo el resto a los montes perseguidos por los habitantes, y muy pocos podrían escaparse. Carta de Guillermo Miller a Lord Cochrane, Moquegua 23/5. (4,T15,182)

Se ha sostenido valerosamente el honor del Ejército Libertador por la División que VE tuvo a bien poner a mis órdenes el teniente coronel Miller con los bravos oficiales y soldados bajo su mando. Ha batido y totalmente desecho la fuerza enemiga, destinada a oponerse a la marcha de la Libertad e Independencia del Sur. Carta de Cochrane a San Martín, a bordo del San Martín 28/5. (1,T17,70)

Tomamos Arica el 11, y habiendo fugado el batallón, fue seguido por nuestra tropa hasta las cordilleras. Tacna nos recibió como sus libertadores. Moquegua solicitó nuestra protección. La tropa enemiga en Mirabé fue alcanzada, batida y derrotada. Carta de Cochrane a San Martín, Ilo (10 km al sur de Arica) 28/5. (1,T17,74)

Tengo la incomparable complacencia de incluir a VE el parte del coronel Miller que en este momento he recibido, anunciándome el total aniquilamiento de las 3 fuerzas reunidas en Arequipa, Puno y La Paz, justamente con excelente disposición que manifiesta toda clase de gentes a la causa. Ya no hay formaque que impida la marcha de la Independencia; todo lo que necesitamos es armas; reclutas y dinero tenemos. Oficio de Cochrane a San Martín, Ilo 29/5. (1,T17,77)

La disposición de todo el país es muy favorable (Perú) excepto los habitantes de Arica, que se componen de los dependientes de aduana, contrabandistas y personas que subsisten de privilegios exclusivos; todos los demás son adictos a la libertad e independencia. He retirado todos los cañones y pertrechos militares del Fuerte de Arica, como igualmente todos los buques, botes y balzas, e intimado a todos los habitantes de Arica que si no mudan de conducta, que echando el Morro dentro del Puerto quedará cerrado para siempre. Carta de Cochrane a San Martín, a bordo del San Martín. (1,T17,93)

Güemes envía tropas a La Paz, los Aborígenes de Atacama con San Martín

Fui destinado comandante general de esta provincia de La Paz (Bolivia) por el general Martín Güemes. Después de un camino dilatado de 200 leguas desde Salta arribe el 18 de febrero, logré organizar una División de 200 plazas de infantería y 100 de caballería, colocando de mi 2do Comandante de los Infantes a Mariano Mendizábal. El enemigo en número de 600 cargó sobre mi el 2 de abril forzando mi defensa sin tiempo, los fugué y eexpulse con pérdida de 100 hombres que tuvieron. A pocos días 3 Divisiones se conspiraron, pero pude resistirles e imponerles respeto y se sitúan en Palca al frente de mi División. Los terrenos que amparan las armas de la Nación fiados a mi mando son el partido de Ayopaya (Provincia de Cochabamba), la mitad de Sicasica (Provincia de La Paz) y el primer pueblo de Yungas (Provincia de Chulumani). Oficio del coronel José Manuel Lanza a San Martín, Inquicivi (500 km al sureste de La Paz, Bolivia) 31/5. (1,T17,86)

Acabo de saber que los indios se han levantado en Atacama y vienen a juntarse con nosotros. Si no está Usted en Lima ya, espero que lo que se sabe en Lima de estas ocurrencias, hará que los enemigos en ésa desesperarán para acompañar a los españoles que están por acá. Ya estamos seguros que durante el invierno nada puede venir de España a molestarnos. Carta de Cochrane a San Martín, Ilo 4/6. (1,T17,106)

El coronel Miller se halla en la Rinconada (límite Perú-Bolivia) distante 6 leguas de Moquehua. Se ha escrito al coronel Lamar que tiene una fuerza respetable cerca de Oruro y espero su contestación, comunicándome su avance sobre ese punto. Del coronel Landa (Tomás) espero mucho por su determinada adhesión y entusiasmada actividad. El brigadier Portacarrero con quien estuve en Ilo me asegura que todos los indios del interior están ya revolucionados. Que las provincias del Sur han abrazado finalmente lo que VE ha venido a ofrecerles. Oficio de Cochrane a San Martín, Ilo 4/6. (1,T17,107)

San Martín confunde a los Realistas al atacar por Arica y no por Ancón

Por las comunicaciones de Usted al Ministerio de Guerra veo el nuevo plan de operaciones que Usted ha adoptado, temo mucho que la empresa de Arica los haya talvez desconcertado, creyendo Usted que la División de Miller y el Lord Cochrane estuviesen más inmediatos a Ancón. La provincia de Concepción (sur de Chile) continúa con tranquilidad. Oficio de Ohiggins a San Martín, Santiago de Chile 5/6. (1,T17,108)

Las Limeñas preparan sus ropas de gala en espera de San Martín

Los Godos más característicos solicitan reconciliarse con vehementes deseos y ahora me persuado que reunidos los sentimientos de absoluta necesidad que les impele, podrá este pueblo sacudir el yugo que sufre o sucumbir al hambre y peste que se avanza. Sólo las señoras mujeres se emplean solamente en prevenirse de buenos trajes patriotas para hacer su comparsa en la entrada que momentáneamente se espera ver del Ejército y Jefe Libertador tan deseado y a pesar de no haberse avenido aún no se puede soportar más la miseria. Este Gobierno ha mandado con la mayor energía que recojan cuantos víveres se puede. Ricafort mandó por su equipaje a Huancavélica. Carta de un Espía a San Martín. (1,T17,109)

San Martín en la Bahía de Chorrillos

Pasa a bordo en la goleta Moctezuma comisionado por mí a hablar al excelentísimo señor José de San Martín, el señor coronel jefe del Estado Mayor General del Ejército, Jerónimo Valdes, acompañado del comandante de escuadrón Andrés García Camba. Pasaporte del virrey Serna a San Martín, Lima 5/6. (1,T17,111)

En vista de lo que de parte de Usted me han informado el coronel Valdés y el comandante Camba, estoy tratando de un proyecto en que me lisonjeo convendrá Usted; y para que sus diputados y los míos puedan tener comunicación con Usted por Miraflores, es preciso me remita un pase para la falúa que debe situarse en aquel punto, pues el que tuvo Usted la bondad de dar ayer a Valdés, se perdió. Carta de Serna a San Martín, Lima 6/6. (1,T17,112)

Los Realistas pergeñan el asesinato de San Martín en Miraflores

Querido patriotas, toda la ciudad está en convulsión, los enemigos de la Patria no quieren reconciliación. Me aseguraron que ayer por la tarde, en el café de Botegones oficiales godos, profirieron en alta voz que ya era tiempo de asesinar a San Martín, viniendo a Miraflores y todos los diputados. Carta de un Espía. (1,T17,112)

Acabamos de saber que tratan de sorprender al señor general San Martín apoderándose de la goleta en que está embarcado. Que las fragatas Prueba y Venganza (Realistas) se encaminen a Chorrillos y se echen sobre la goleta de San Martín. Carta del Agente Secreto 180.7 15/6. (1,T17,132)

El Cabildo de Chorrillos a favor de San Martín

El Cabildo del pueblo de Chorrillos no tiene palabras cómo poder manifestar a VE; el júbilo que le asiste al mirarlo tan inmediato de él. Oficio del Cabildo a San Martín, Chorrillos (40 km al sur de Lima y 15 km al sur de Miraflores) 6/6. (1,T17,113)

Cochrane enfermo en Mollendo

He recibido en Mollendo (Arequipa) una Gaceta de Lima que contiene el armisticio celebrado por Usted y el Gobierno de Lima, el que acabó hoy a las 5 de la tarde. He sabido también que he recibido correspondencia de Usted para mi en tierra y aunque he tocado dos veces en Mollendo, no la he recibido hasta ahora. La enfermedad que me ha molestado bastante por acá se ha transformado en terciana (fiebre tifoidea), que me aflige bastante, pero espero que no durará mucho. Carta de Cochrane a San Martín, a bordo del San Martín 12/6. (1,T17,122)

Señor Gobernador. Va a dar fondo el bergantín inglés Catalina, cuyos papeles lo justifican, su capitán Roberto Ramsay procedente de Moyendo con 10 días de navegación. Su cargamento el mismo que tomó en Valparaíso: trae despachos para el Señor Comodoro, y da por noticia que Lord Cochrane ha tomado a Moyendo el 18 de junio. Oficio de Luis de la Cruz al Joaquín de Echeverría, Valparaíso 10/7. (4,T15,194)

Primera Prórroga del Armisticio de Punchauca, Conferencia en Miraflores

El armisticio celebrado en Punchauca el 23 de mayo entre los diputados de José de la Serna y José de San Martín se prorroga por espacio de 12 días contados desde la hora de notificación del presente y en los mismo términos comprendidos en aquel. El presente armisticio será ratificado por ambos Generales en el término de 6 horas. Miraflores 12/6. (1,T17,120)

Acompaño a VS, en copia certificada, el armisticio últimamente celebrado por los diputados nombrados al efecto, de cuyo exacto cumplimiento espero imparta la orden respectiva al jefe que mande la División del Ejército. Oficio de San Martín a Cochrane, a bordo de la goleta Moctezuma en Chorrillos 13/6. (4,T37,90)

Los Realistas y un Rey Inca para bloquear a San Martín

Me aseguran que el último plan al último caso, es retirarse al Alto Perú y proclamar un descendiente de los Incas como rey; a éste, se le agregarán con seguridad los indios, cuya multitud y renacer el vivo deseo a que aspiran desde la conquista, hará una firme y segura oposición a San Martín y a todo su Ejército. Carta del Espía 180 a Fernando Lopez, 23/6. (1,T17,150)

San Martín recuperado luego de un mes postrado en cama

Monteagudo quedó encargado de dar a Usted todos los avisos de las ocurrencias de nuestra campaña le habrá comentado los sucesos ocurridos. Por otra parte, a mi me era imposible tanto porque el infernal reumatismo me ha tenido postrado más de 1 mes como por mis atenciones que han sido infinitas. Carta de San Martín a Ohiggins, a bordo de la goleta Moctezuma en Callao 26/6. (1,T20,246)

Arenales vuelve a apoderarse de las Sierras, San Martín demora las negociaciones

Arenales volvió a apoderarse de la Sierra con suceso, cuyo movimiento unidos a los del convoy, hizo hacer variar al enemigo todo el plan de su campaña. Las negociaciones entabladas hicieron suspender la continuación. Estas han seguido hasta hoy demorándolas por mi parte, con dos objetos 1º dar tiempo a Arenales que repusiese los hombres y caballos de su División, que habían sufrido en el paso de la cordillera lo que Usted no puede calcular, especialmente por las nevadas y falta de abrigo en el pobre soldado; 2º ver si se reponían mis enfermos (contando con la llegada de las medicinas) cuyo número no baja de 2.200 hombres. Lo primero lo he conseguido con la ventaja de haber aumentado Arenales su división con 600 hombres y, aunque lo segundo no se ha realizado, sin embargo con mayor cuidado en los hospitales y salida del ejército de Huaura la mortalidad no ha sido tan notable. Carta de San Martín a Ohiggins, a bordo de la Moctezuma en Callao 26/6. (1,T20,247)

San Martín rompe con el Armisticio

Voyme a hacer a la vela para unirme al Ejército embarcado y venir a atacar a las tropas de Lima, desembarcando en Ancón para este efecto; los enemigos exigen condiciones humillantes y poco seguras para la base de nuestra independencia. Las hostilidades quedan rotas desde el día de pasado mañana; la opinión de todos los habitantes y aún las de su mismo ejército está por nosotros; este conjunto de circunstancias me hacen asegurar a VE que la capital del Perú estará libre en mes y medio desde la fecha a más tardar. Carta de San Martín a Cochrane, a bordo de la goleta Moctezuma en Callao 26/6. (4,T37,99)

En este estado he vuelto a romper las hotilidades por mi parte. Diré a Usted las razones que me han impulsado a este duro paso. Los enemigos como base principal debían entregarme el castillo Real Felipe, con las demás fortificaciones adyacentes. La fuerza marítima que viniese de la Península, debía regresar a España al mes de su llegada a estas costas. Toda la parte del norte desde Chancay, inclusa la península de Maynas quedaba en mi poder. Para la independencia de América era ventajoso este Partido, pues de mi no se exigía más que un armisticio por 16 meses, y que se envíasen diputados, para tratar con el gobierno español la independencia del Perú, Chile y Buenos Aires. Yo no ignoro que con el Callao y la opinión del país, en 16 meses el Perú era libre. Que con los recursos del territorio que me quedaban, podía con economía mantener el ejército; pero ¿ y la Escuadra ? ¿ Cómo se la remito a Chile, cuando sé que no tiene Usted un sólo peso con qué pagarla ? Yo no podía sostenerla en en este intervalo, y de consiguiente su disolución era positiva, perdiendo Chile por este motivo sus esfuerzos, y toda la América del Sur la responsabilidad y seguridad que le da esta fuerza naval. En este caso, y por otras razones que expondré a Usted me he decidido a la continuación de la guerra más feroz y destructura que han conocido los vivientes, no por las balas ni trabajos, sino por la insalubridad de estas infames costas, especialmente desde que llegó el ejército, pues no hay memoria de tantas enfermedades como en esta época. Me he decidido por la guerra, por la situación del enemigo. Él tiene igual o mayor número de enfermos que nuestro ejército, aunque mejor medicinados, pero peor alimentados. Tienen menos dinero en proporción de sus gastos que nosotros. Su ejército minado en favor de la causa pasándose a nuestras banderas. El hambre los acosa, y no les queda otro recurso que retirarse al Cuzco para prolongar la guerra, como tengo notica es el plan que se proponen. Es cierto que ellos me clavarán la artillería, destruirán parte de las rectificaciones, pero todo esto se repara pronto. Por otra parte, la esperanza de la Escuadra está fundada en las promesas que les tengo hechas, y con el armisticio no podría cumplirlas. Carta de San Martín a Ohiggins, a bordo de la Moctezuma en Callao 26/6. (1,T20,247-248)

Hemos roto con los enemigos. Ellos nos entregaban el Callao, pero, hoy, estaban sin medios con qué subsistir y nos pedían condiciones, que no los he creído concecuentes; en fin ya se acabaron los armisticios y ya no nos quedan más recursos que las bayonetas. Su Ejército está minado, se nos pasan 50 tras 50; el hambre acosa a todo el enemigo y su plan es el de retirarse con todo su Ejército al Cuzco. Nos abandonan la Capital del Perú si por consiguiente sin dinero y sin recursos son perdidos. Arenales ha hecho una buena campaña en la Sierra. Nuestras guerrillas en número de 1.200 hombres están bloqueando a Lima a distancia de legua y media; en fin, repito que el Perú puede afirmarse que es nuestro y que la campaña ha concluído. Carta de San Martín a Cochrane, a bordo de la goleta Moctezuma en Callao 26/6. (4,T37,101)

Con la muerte de Güemes el 17 de junio, los planes de San Martín se complican

Se me acaba de avisar que Güemes ha concluído un armisticio (14/7) con Ramírez (Realista). De este modo los enemigos pueden desprenderse de más fuerzas contra mí. Carta de San Martín a Ohiggins, a bordo de la Moctezuma en Callao 26/6. (1,T20,248)

Por la adjunta copia se impondrá VE que las desaveniencias entre las provincias de Salta y Tucumán han dado lugar a que el enemigo se apodere de la primera de éstas. Ignoro hasta la fecha en qué número haya entrado a Salta. Oficio del gobernador Tomás Godoy Cruz a Ohiggins, Mendoza 4/7. (4,T15,229)

Bolivar envía tropas a San Martín

Que a mediados del mes próximo pasado llegó a Guayaquil el General de Brigada Sucre procedente del Chocó con parte de su división de 2.000 de la República de Colombia, y que inmediatamente mandó un parlamentario a Quito anunciando el pronto rompimiento de las hostilidades que se corría allí al mismo tiempo que su división debía abril la campaña sobre Quito a principios de julio próximo, unidas a las fuerzas del Estado de Guayaquil. Carta de Luis de la Cruz (Gobernador de Valparaíso) por comentarios de Antonio Arcos al Ministro de Estado de Chile, Valparaíso 20/6. (4,T15,186)

Estoy más tranquilo por la suerte de Guayaquil habiendo recibido ya un refuerzo de 500 hombres de Bolivar y mil más que esperan atacar a Quito. Creo, el resultado será favorable. Carta de San Martín a Ohiggins, a bordo de la Moctezuma en Callao 26/6. (1,T20,249)

San Martín regresa a Huacho a preparar la invasión a Lima

Al cabo se han roto las hostilidades con los enemigos y es preciso rompernos los cuernos con ellos, no han querido entrar por transacción alguna, pasado mañana vuelvo a marchar con el Ejército a Lancón (Ancón) en mis operaciones sobre Lima, estoy seguro de la victoria y que en 2 años a más tardar la Capital del Perú será libre. Mándeme Usted arroz y demás artículos que Usted crea conveniente para el Ejército, pues yo acabo de llegar y no sé que hay en los depósitos. Esté Usted pronto para venir cuanto antes en el momento que le avise, dejando el mando de esa Provincia a un sujeto que además de ser patriota tenga algún influjo en ellos, esto es en el caso de entrar en la Capital. Carta de San Martín a Torre Tagle, Huacho 27/6. (1,T20,454)

Por los impresos que incluyo se puede hacer callar a los discolos que suscitan especies desagradables. En ellos verán que el coronel Miller sigue felizmente sus empresas por la parte meridional de Lima, y que pronto ocupará Arequipa; que por la parte del norte está verdaderamente sitiada la capital del Perú, obstruyéndoles nuestras fuerzas por la costa y por la sierra hasta sus mismas puertas los conductos de las provisiones de boca y demás auxilios de que carecen los enemigos; que nuestra fuerza se extiende hasta estar en contacto con Guayaquil; que de este punto marchará en julio un ejército a recuperar el departamento de Quito, suceso que decidirá quizá, sin duda, de la rendición de Lima. Pd: Incluyo también el Pacificador del Perú, periódico nuevo del Ejército Libertador. Carta de Ohiggins a Miguel Zañartu, Santiago de Chile 30/6. (4,T6,313)

El plazo del Armisticio termina, Cochrane solicita instrucciones a San Martín

Fui honrado en el día de ayer con la apreciable comunicación de VE tocante a la prórroga del armisticio, y no perdí momento en hacerme a la vela en el navío en orden a recibir instrucciones de VE tocante a la continuación de hostilidades en las Provincias del Sur si las negociaciones no terminasen como VE tanto desea. Nada falta ahora sino el auxilio de armas para efectuar la instantánea libertad de estas importantes provincias, donde está organizado al rompimiento de la negociación para un levantamiento general de los habitantes, al mismo tiempo que la fuerza a las órdenes del comandante Miller (4 veces mayor a la de su número original) ocupará toda la atención de la fuerza militar y disponible del enemigo. He dejado 3 bergantines y varios buques menores tripulados, si el comandante Miller tuviere por conveniente hacer algún movimiento por mar. Carta de Cochrane a San Martín, a bordo del San Martín 2/7. (1,T17,163)

Cochrane recibe pertrechos para la Escuadra Naval

Los ardientes deseos de VE relativos a la adquisición de cables, jarcia y lonas para la Escuadra y ropa para la tripulación, han sido felizmente llenados. Carta de Cochrane a San Martín, desde el San Martín a la vela 2/7. (1,T17,165)

San Martín en la bahía del Callao

Por mis proclamas públicas, he manifestado al Perú, y he presentado ante el género humano mis votos por la prosperidad y libertad de este país; mis acciones no han desmentido hasta ahora mis promesas porque traicionaría mis sentimientos; y me congratulo que VE Ilustrísima, haya tenido lugar de observar la especial protección que he tributado a nuestra santa religión, a los templos y sus ministros. Oficio de San Martín al Arzobispo de Lima, a bordo de la goleta Sacramento en la bahía del Callao 6/7. (4,T15,258; el Arzobispo la contesta 259)

De oficio digo a Usted que los enemigos han abandonado la capital de Lima y que se retiran a la Sierra. Cuidado, cuidado y cuidado; si tratan de batirlo a Usted con fuerzas superiores, repliéguese Usted a Lima, en donde estaré del 10 al 11 y mañana deben tomar posesión de ella Balaud y Villar, con las partidas de su mando. Lo prevengo a Usted para que instruído de todo no trepide en los movimientos. La fortuna nos protege, y espero que luego tendrá el gusto de verlo. Oficio de San Martín a Arenales, goleta Sacramento en el puerto del Callao 6/7. (Y,Sala 7,Legajo 2573)

El Ejército va marchando y, como dije a Usted, están mañana a la tarde sobre el Callao; pasado mañana podrá hacer la intimidación como lo tengo prevenido. Téngame Usted siempre 2 canoas, frente al montón de trigo, permanentes para poderme comunicar con Usted. Marcha la Moctezuma, la que deberá estar pronta para hacer su marcha a Valparaíso dentro de 2 o 3 días a más tardar. Diga Usted a mis diputados (Tomás Guido, José Miguel del Río y José Ignacio de la Rosa) que acaben cuanto antes las negociaciones y que se vengan porque los necesito mucho. Carta de San Martín a Las Heras, Bahía de Ancón 10/7. (4,T37,106)

Son las 3 de la tarde y el enemigo está echando a pique sus buques y temo que volarán quizá esta noche los castillos, pues hemos visto saliendo del pueblo muchísimas bestias cargadas y gente. Venga mi general con la tropa que haya para salvar esta plaza que importa más que Lima. Carta de Cochrane a San Martín, a bordo del San Martín en el Callao 10/7. (1,T17,168)

Ayer he tenido comunicaciones del general Arenales, el que me dice que el coronel Alvarado ha derrotado a Carratala y va en seguimiento de los que han podido escapar. Hágame Usted el gusto de comunicar esta noticia a mis Diputados y a los Jefes de los buques de su mando. Oficio de San Martín a Cochrane, Goleta Sacramento 11/7. (4,T37,106)

El Ejército está acabando de desembarcar ahora que son las 7 de la mañana. Mañana a las 3 de la tarde estará sobre el Callao. Sírvale a Usted de Gobierno para que el 13 por la mañana, a las 9 de ella, haga Usted la intimación que le tengo dicho. El general Las Heras está prevenido de hacerle a Usted la señal indicada en el montón de trigo. Estoy sin poderme mover por haberme cargado el reumatismo en la pierna derecha, que espero que para mañana estaré mejor de ella. Carta de San Martín a Cochrane, Ancón 11/7. (4,T37,107)

El primer teniente de la corbeta inglesa me dice que la gente del Callao (Realistas) está en el mayor desorden, que han sacado cuanto había en los buques y metido toda la pipería llena de agua a los castillos y quedan ya con bastante, pero opina que no resistirán una demostración de ataque. Carta de Cochrane a San Martín, a bordo del Potrillo en Callao 11/7. (1,T17,171)

Arenales en Huancayo con problemas con Agustín Gamarra

Supuesto que las tropas de Usted entendían en el bloqueo sobre El Callao y supuestas las advertencias que me hace del 11 y 2 (Batallón), sería sumamente conveniente que todas las partidas de guerrillas se recostacen sobre mí por Yaule (Yauli a 100 km al nordeste de Lima), y en tal caso, emprenderé una guerra distinta que la que en el día puedo hacer para llamar la atención por diversas partes de los enemigos y confundirlos para que se vayan destruyendo sin poder reponerse como deben necesitar. Carta de Arenales a San Martín, Huancayo (a 100 km al este de Lima) 12/7. (1,T17,173)

Gamarra me ha pedido licencia para verlo a Usted a pretexto de informarle vengan tropas a reforzarnos. Bien me hago cargo de que su principal interés es desahogarse contra mí y contra algunos otros, pero bien seguro de mi conducta y comportamiento, nada me importa que diga lo que quiera. Carta de Arenales a San Martín, Huancayo 12/7. (1,T17,174)

El Ejército Libertador entra en Lima el 12 de Julio, San Martín lo hace de incógnito

Los vivas y aclamaciones del inmenso gentío de ambos sexos y de todas clases que le seguían por las calles, aun viniendo de incógnito, eran solamente efusiones de alegría exaltada al ver logrado el deseo universal de nuestra independencia, tiránicamente reprimida por tanto tiempo; también se manifestaban con ellas las dulces impresiones de afectuoso reconocimiento, que en todos los corazones había excitado con la presencia de este héroe (San Martin) singular el recuerdo de sus benéficas virtudes. Extracto de una reseña del Americano de Lima en la Gaceta de Lima del 18/7. (4,T15,284-288)

La entrada en la Capital de las Tropas del Ejército del Excelentísimo Señor José de San Martín ha dictado la necesidad de algunas justas medidas de precaución, tomadas en el puerto sin extenderlas a los buques de propiedad particular, sin consideración al estado de la negociación pendiente y al espíritu de moderación que me dirige de acuerdo con el Señor Comandante General de Marina. Oficio de Cochrane a Monteagudo, Plaza del Real Felipe del Callao 13/7. (4,T37,108)

Aunque no he tenido el gusto de ver letra de Usted, mi hermana María Josefa me ha escrito el cariñoso recibimiento que Usted le hizo y su promesa de que en breve me verá en esa ciudad, a donde me he orientado por conductos particulares que entró Usted el 12 con aplauso universal. Carta de Bernardo de Torre Tagle a San Martín, Trujillo 28/7. (1,T17,204)

Ayer noche entró en esta capital una gruesa división de la caballería, que compone una pequeña parte de la fuerza del EJERCITO LIBERTADOR. Un gentío inmenso lleno de entusiasmo precedía su marcha, y poblaba el aire con los gritos de VIVA LA PATRIA, VIVA LA LIBERTAD, VIVA EL GENERAL SAN MARTIN [...] Carta de S.S.S. 180 (4,T15,260)

Deseando proporcionar cuanto antes sea posible la felicidad del Perú, me es indispensable consultar la voluntad de los pueblos, para esto espero, que VE convoque una junta general de vecinos honrados, que representando el común de los habitantes de esta capital, expresen si la opinión general se haya decidida por la independencia. Para no dilatar este feliz instante, parece que VE podría elegir, en el día aquellas personas de conocida probidad, luces y patriotismo, cuyo voto me servirá de norte para proceder a la Jura de la Independencia, o a ejecutar lo que determine la referida Junta, pues mis intenciones no son dirigidas a otro fin, que a favorecer la prosperidad de la América. Oficio de San Martín al Ayuntamiento, Lima 14/7. (4,T15,262)

Con arreglo al oficio de VE recibido en este momento, se queda haciendo la elección de las personas de probidad, luces y patriotismo, que unidas en el día de mañana, expresen espontáneamente su voluntad por la independencia. Oficio de la Sala Capitular a San Martín, Lima 14/7. (4,T15,263)

Por la adjunta acta que en copia certificada se acompaña a VE, se manifiesta la decidida adhesión de los que componen esta capital, a que se proceda a la Jura de la Independencia. Oficio de la Sala Capitular a San Martín, Lima 15/7. (4,T15,263. Acta del Cabildo: 264-266 y dicurso: 270-273)

San Martín en la Legua

Informado de la escasez que hay en la capital de harinas, y del excesivo precio a que se vende el pan; he resuelto permitir que se desembarquen por los Chorrillos dos mil fanegas de trigo, libre de todos derechos. Oficio de San Martín al Ayuntamiento de Lima, Cuartel General en la Legua 15/7.

La Gaceta de Gobierno de Lima Independiente

Jamás vio Lima, ni en el estado de su anterior esclavitud era posible que viese día tan solemne y tan plausible como el de ayer, en que la reunión de sus vecinos en cabildo abierto, y la declaración pública de la voluntad universal le hizo advertir que entraba por la primera vez en el ejercicio de los derechos de un pueblo independiente y libre. ¡DIA 15 DE JULIO DE 1827!... Día memorable que fija la época de la regeneración del Perú; más bien diremos, la de su existencia... Gaceta de Gobierno de Lima Independiente 16/7. (4,T15,260)

Los limeños firman el Acta de la Independencia

Por la estrechez de tiempo no fue posible que todos los habitantes de esta capital, deseosos de expresar su voluntad por la independencia del Perú; lo hiciesen firmando en el mismo día el Acta de aquel Cabildo. A cuyo efecto se halla esta franca desde esta fecha en la secretaría de este Ayuntamiento, desde las ocho de la mañana hasta las seis de la tarde por el término de cuatro días. Sala Capitular, Lima 17/7. (4,T15,284)

Ohiggins y las falsas acusaciones contra Güemes, el sur de Chile amenazado por los Realistas

No puede ser cierto el armisticio de Güemes con Olañeta (Pedro Antonio Olañeta, Jefe Realista), las desgracias del primero se las demostrarán los papeles adjuntos. Yo no puedo persuadirme se haya pasado al enemigo como indica el gobernador de Tucumán. Aseguro a Usted nada ha sentido la entrada del enemigo en Salta, puede contribuir mucho a la unión de su pueblo con la provincia de Tucumán, y lo que es más, se alejan esas fuerzas del Perú que pudieron haber incomodado a Usted. Quintanilla se prepara en Chile para invadir a Valdivia, y Osorio, Benavidez y Busardo para volver a sus correrías en la provincia de Concepción, a pesar de todo lo dicho acerca de la tranquilidad que reina en ésta. Muy sensible me ha sido la muerte de nuestro amigo Conde (Pedro, muerto el 26/5/1821 con 36 años en Sayán al este de Huacho). Carta de Ohiggins a San Martín, Santiago de Chile 19/7. (1,T17,175)

San Martín le avisa a Ohiggins de la caída de Lima

Al fin con paciencia y movimientos hemos reducido a los enemigos a que abandonen la capital de los Pizarro. No puede Ud calcular el grado de entusiasmo de estas gentes. El es en proporción de la horrible tiranía que han ejercido los españoles. Carta de San Martín a Ohiggins, Lima 19/7. (4,A1,309)

El 10 del presente tomó posesión el Ejército de mi mando de esta capital; sus habitantes en proporción de la opresión que han sufrido, han demostrado, de un modo inequívoco que pertenecían a la clase de hombres libres [...] El enemigo sigue en fuga para la Sierra perseguido por nuestra Caballería y varias partidas que lo acosan; su desersión ha sido inmensa a pesar de las precauciones que han tomado para evitarla. El Ejército de mi mando va correspondiendo a la confianza que VE puso en él, y los sacrificios del benemérito Chile no han sido inútiles por la libertad que ha proporcionado a sus hermanos del Perú. El Castillo del Callao, en el que han dejado como unos 800 hombres de guarnición, se halla sitiado por mar y tierra etrechamente; espero en breves días su pronta rendición. Carta de San Martín a Ohiggins, Cuartel General en Lima 19/7. (4,T15,250-251)

Las banderas tomadas por los enemigos en Rancagua, que pertenecían a ese Estado, han sido vueltas a tomar por nuestras armas, y habiendo resuelto enviarlas a VE por conducto de uno de los jefes dependientes de ese Gobierno, las he entregado al Coronel de artillería José Manuel Borgoño sujeto de la mayor consideración por sus recomendables circunstancias para que las remita a disposición de VE. Oficio de San Martín a Ohiggins, Lima 21/7. (4,T15,251)

Por orden el Exmo Señor Capitán General don José de San Martín, tengo el honor de remitir a VE las cuatro banderas que he sacado de la iglesia de Santo Domingo de esta capital, y que el General Osorio apresó en Rancagua poco antes de la desgraciada ocupación de ese país por los enemigos de la América. Oficio de Borgoño a Ohiggins, Lima 21/7. (4,T15,251)

Guayaquil cae, van por Quito

Por las últimas comunicaciones de Guayaquil de 14 de junio último que ha recibido el Exmo Sr Capitán General José de San Martín, se sabe que las tropas auxiliares de Colombia van llegando sucesivamente a aquella Provincia, y que estaban ya mil hombres en el cuartel del Morro. Se esperaban todos los transportes en que debía venir el resto de tropas. La fragata Fanni estaba destinada para conducir el batallón de Albion. Muy pronto debía abrirse la campaña contra los opresores de Quito; y desaparecerán en los beneméritos pueblos de aquel departamento las últimas reliquias del poder español. Gaceta de Gobierno de Lima Independiente 21/7, Año 2º de la libertad del Perú y 1º de la de Lima. (4,T15,269)

Arenales y Necochea a la caza de Serna y Canterac

Mis últimos movimientos han sido y son con el principal designio de buscar a La Serna y batirlo antes que se una con Canterac, pero sus marchas y contramarchas confunden mis medidas. El ha sido rechazado por las montoneras de Omás para Ayaviri, y aunque los comandantes de esas montoneras me dicen que retrogradaban para Cañete me parece improbable; me parece más probable que La Serna tome el camino de Huarochiri para salir a esta parte. Canterac queda por los lados de Huancavélica con Carratalá como amagando a entrar a esta provincia, pero hasta ahora no se han animado a avanzar, sea porque esperan la reunión con La Serna o que se aporxime su combinación o sea porque tampoco está muy en aptitud para buscar camorra. Carta de Arenales a Necochea, Cachicachi 20/7. (1,T17,181)

He recibido su estimable del 15 y en ella veo lo que informa Necochea desde Bujama. Con este conocimiento adquirido igualmente por las partes de comandantes de los naturales de Yauyos que han estado por Ayarivi en los altos donde sale el camino de Omas en que también se me aseguraba que La Serna por aquella dirección debía caer precisamente a esta parte, hice mi movimiento ayer desde Jauja con el doble ojeto de evitar que pudiensen estrecharme las 2 Divisiones enemigas ganando yo el punto de la Oroya que tengo hoy a 5 leguas desde éste para San Mateo; de batir a dicho La Serna se viera probabilidad con el éxito o retirarme en caso contrario con seguridad. De cualquier modo hago hoy alto en este punto por esperar a Rudecindo (Alvarado) que quedó en Jauja. Mi tropa está muy buena, aunque desnuda, y con 100 enfermos no gravemente; pero si acaso Usted la necesitara para rendir el Callao sírvase avisármelo para ponerme en determinada marcha. Carta de Arenales a San Martín, Cachicachi 20/7. (1,T17,182)

San Martín y Cochrane tienen un entredicho en Lima

Temo demasiado que si VE permite que se le quejen los oficiales de la Escuadra como a un juez de apelación de mis decisiones fundadas como son en todos los hechos necesarios sobre que se puede formar una opinión, que esa autoridad que todavía existe en mi, sin embargo, del golpe que recibió en Valparaíso, se desmoronará hasta sus cimientos los que lamentaría más por VE que por ningún interés que yo tengo excepto el de una naturaleza pública. No tengo parcialidades privadas, ningunas amistades personales, ningún interés en promover oficiales, excepto aqué fundado en su mérito; ni me acompañan disgustos, ni animosidades que gratificar, sino los que se originan en la ignorancia, perversidad o mala conducta de los que están a mis órdenes y si algo se me ha imputado, espero que VE tenga la bondad de citar a su presencia las partes y darme de este modo una oportunidad para descubrir la verdad. VE está muy cierto que no falta oficiales despedidos que podrían llamarse para este fin. Oficio de Cochrane a San Martín, Lima 20/7. (1,T17,184)

No he podido leer sin sorpresa el oficio de VE del 20. Jamás he tenido intervención en lo económico y, aún en sus movimientos y dirección, VE ha obrado poco menos que con independendiente no obstante de hallarse facultado por el Gobierno Supremo de Chile para disponer de la fuerza marítima como conviniese a las operaciones en la campaña. La persuación de que VE cuidaría del mejor arreglo de la Escuadra y que el interés por el buen éxito de la Campaña era igual al mío han producido la prescindencia que he manifestado, pero tal deferencia ha coartado la autoridad que me corresponde y de la que soy responsable a la Patria, ni deja de ser una prueba de la absoluta confianza con que he descansado en el celo de VE. Sobre este principio ha de determinarse que VE dé a entender que he oído de quejas de los Oficiales de la Escuadro como en grado de apelación en sus decisiones. La nota que dirigí a VE el capitán Prunier fue en consecuencia de estar este oficial bajo mis inmediatas órdenes, por decreto de 18 de agosto del año anterior; en los mismos términos que la goleta Moctezuma; pero aun cuando no lo estuviera VE no ha podido derivar del modo en que he dirigido la solicitud de aquel oficial ningún acto que perturbe la disciplina de la Escuadra que eclipse la autoridad que respectivamente corresponde a VE. Carta de San Martín a Cochrane, Lima 22/7. (4,T37,109)

Cochrane pide a San Martín bloquear todos los puertos entre Pisco y Ancón

He recibido hoy de Chile noticias que los españoles han determinado enviar buques de guerra a estos mares, y que habían recibido 10 millones de pesos de los mercantes y otros de Francia e Inglaterra. Cuanto importa mi estimado amigo, la rendición del Castillo (del Callao) antes que lleguen. Aquí, donde está la Escuadra ahora, y con mar tan manso, se puede desembarcar los cañones de 24 y todos los del San Martín, o la mitad, para abrir una brecha, si quiere Usted no tiene más que mandar. Carta de Cochrane a San Martín, a bordo del Ohiggins en la Boca del río Rimac (Callao) 22/7. (1,T17,199)

Me quedo aquí por algunos días para arreglar todo en la Escuadra y hacer una tentativa para tomar agua del río Rimac, los buques casi estando sin ésta. Si lo cree conveniente establecer comunicaciones con la Escuadra, por medio de señales, desembarcaré unos 4 marineros y las banderas necesarias. Carta de Cochrane a San Martín, a bordo del Ohiggins en la Boca del río Rimac 22/7. (1,T17,200)

La Escuadra Naval en la Bahía del Callao la noche del 24 de Julio

Tengo el honor de informar a VE que en cumplimiento de sus órdenes procedí con una parte de los botes de la Escuadra, cuya lista incluyo, al anclaje de El Callao pronto después de nuestra llegada al lado interior de la cadena y percha, principió el enemigo un fuego continuado de fusilería, acompañado de los cañoes de los castillos. Después de los esfuerzos grandes y deliberados de los que tenía a mis órdenes, y sin pérdida ninguna de nuestra parte, logramos sacar 3 fragatas (San Fernando, Milagro y Resolución) y varias lanchas y botes pequeños y quemado dos de los buques enemigos. Lista de los oficiales y botes de la Escuadra empleados: Ohiggins 3 botes (Capitanes: Crosbie, Wilkinson, Ferout; Teniente: Morguel; Alférez: Mendes), Independencia 2 botes (Teniente: Riaden; Capitán de Marina: Hove), Lautaro 1 bote (Teniente: Wosbridge; Piloto: Gullidge; Contador: Prior), Galvarino 1 bote (Teniente: Cull), Araucano 1 bote (Capitán: Simpson). Oficio de Crosbie a Cochrane, Bahía del Callao 24/7. (1,T17,215)

Los Realistas se reorganizan en las Sierras Peruanas

SE el Protector del Perú, ha recibido una comunicación fidedigna de fecha 31 de julio anterior datada en la cordillera de Quiuillopa, por la cual se participa que la División desembarcada de Canterac unida a la tropa que estaba al mando de Carratalá, entró en la provincia de Jauja en los días 23, 24 y 25, y que mató muchos adultos y párvulos sin otra causa que la perversidad de estos lobos sedientos de sangre americana. Se afirma igualmente, que la división al mando del general La Serna se hallaba en el pueblo de Carania el 29 de julio, y que en ella había muchos enfermos, quedando el resto muy disgustado y con deseos vehementes de engrosar nuestras filas, como estaba sucediendo en la diaria deserción que sufría dicha División. (1,T18,250)

Ayer a las 3 de la tarde pasó por acá Canterac y Carratalá con las siguientes tropas: 4 regimientos de infantería con 700 hombres, la caballería de más de 700, la tropa de Carratalá entre infantería y caballería como 1.000 hombres. Es indecible los muertos, enfermos y en mayor número los desertores que han tenido. Vienen tras de VS a ver si logran derrotar la tropa de VS y si no logran derrotar a VS son enteramente perdido. Carta del cura José Herrera a San Martín, Chupaca (Junín, a 200 km al este de Lima) 24/7. (1,T17,209)

Miller frente al Puerto de Quilca

La comunicación que le he adelantado con el mayor Soler informará a VE de nuestro embarco en Arica y navegación a este puerto el 22 del corriente; también sobre mi intención de desembarcar en Quilca y ejecutar el plan preparatorio de operaciones de VE, ya sea marchar sobre Arequipa o revolucionar Candevergos. Anoche anclé en el Puerto pero el viento ha soplado tan fuerte que con nuestros botes atiborrados intentar un desembarco ha sido altamente peligroso y creo casi imposible llevarlo a cabo teniendo solo 3 días de abastecimientos y agua a bordo y no podíamos perder el tiempo. Esta circunstancia me ha impedido proseguir inmediatamente al puerto de Pisco. Y la información que logré allí dirigió mis movimientos, aunque por el capitán Portacarrero, salí con la mitad de mis tropas. Es afortunado que embarquemos tan pronto para aparecer por cuenta de Mr Crompson quien está en Mollendo, donde como mínimo 1.500 hombres de tropas estaban sobre nuestros talones y que Ramírez estaba en la completa certeza de aniquilar todas nuestras fuerzas Las Heras tenía órdenes precisas de seguirnos a donde fuéramos o podríamos ir y dirigirse dentro del mar si intentábamos hacer un alto sobre la costa. Carta de Miller a Cochrane, a bordo de la goleta Macedonia frente a Quilca (a 1000 km al sur de Lima) 26/7. (1,T17,201)

Arenales retrocede a San Juan de Matucana y solicita una entrevista con San Martín

He hecho mi retirada hasta aquí exactamente en conformidad con sus prevenciones y con las advertencias por mi parte de que para subsistir las tropas en la provincia de Tarma, era de absoluta necesidad mantenerse en aquel Valle; pues ni el temperamento, ni la total falta de abrigo y recursos (excepto carne) no permiten la subsistencia de tropa. Usted en la estimable del 25 se sirve prevenirme, que es preciso me sostenga en la sierra sin comprometer una acción desentajosa. Me dice Usted que poco le importa perder la Sierra en comparación con otras meditadas medidas, debemos adoptar otro sistema de guerra por otros lugares y con distintos designios. Sobre estoy y sobre otras mucha cosas desería hablar con Usted para poder explicarle lo que no es fácil ni conveniente hacerlo por la pluma. Carta de Arenales a San Martín, San Juan de Matucana (500 km al sudeste de Lima) 27/7. (1,T17,203)

San Martín declara la Independencia de Lima el 28 de Julio

Los últimos movimientos del enemigo en las Sierras me ponen en la necesidad de aumentar las guerrillas y armar las que están desarmadas, y siendo muy urgente en que los fusiles y útiles del Ejército, existentes a bordo del Lautaro, se desembarquen tan pronto como sea posible. Oficio de San Martín a Cochrane, Lima 27/7. (4,T37,111)

Los enemigos trabajan para reponer sus pérdidas y es necesario no dejarlos descansar; me falta armamento y no puedo llenar mis planes sin el que está a bordo del Lautaro y el Galvarino; si Usted me lo envía pronto, daremos qué hacer al general La Serna. Mañana se jura la Independencia de Lima y no parece aún, aunque yo quisiera, que los compañeros de trabajo y en incomodidades, acompañásemos y presenciásemos este gran acto. Venga Usted pues. Oficio de San Martín a Cochrane, Lima 27/7. (4,T37,111)

Proclama a los habitantes de Lima

¡Compatriotas! Hemos llegado al tiempo de nuestros deseos. Los enemigos han huído vergonzosamente de los bravos que mando, y que en Chacabuco y Maipo les dieron lecciones eternas de lo que vale el Patriotismo. Nos queda todavía por perseguir a esos cobardes que en medio de su fuga conducen el saqueo y toda clase de violaciones. Una gran parte de vosotros habéis tenido la generosidad de ofrecerse a mi para que os emplee en el Ejército LIBERTADOR. Estoy penetrado de vuestros sentimientos, y condescendiendo a vuestras solicitudes. Podéis ya apresuraos a alistaros en las banderas de la PATRIA. Un cuerpo de cívicos hará una guarnición de honor a la capital. Pero los que aspiran a la gloria, los que verdaderamente amen a la PATRIA volarán a tomar parte activa en la guerra, contando con la seguridad de que luego que exterminemos a los opresores, volveréis a recibir el premio debido a vuestras fatigas. San Martín. Nota: los patriotas que voluntariamente gusten alistarse, lo verificarán en casa del señor Mariscal de Campo marqués de Montemira. (4,T15,252)

Proclama a los habitantes de los Departamentos libres

¡Compatriotas y amigos! Acabo de experimentar por última vez hasta dónde llega la obstinación de los españoles y su cruel empeño en privarnos aún del ejercicio de nuestra natural generosidad, a fuerza de provocar nuestro justo resentimiento. En Miraflores y Punchauca, la paz ha sido el grande objeto que he recomendado a mis diputados, con tal que la independencia de los pueblos no quedase expuesta a las antiguas agresiones. En ambas circunstancias he hecho propuestas que conciliaban todos los intereses, y que habrían puesto término no sólo a los males de la guerra, sino al sordo estímulo de las pasiones recíprocas. En Punchauca se me hizo entrever que el Perú iba a entrar en su propio destino, y que las fuerzas de ambas partes no servirián ya sino para conservarlo en él. Pero el despecho de la ambición ha exaltado el furor de algunos jefes, y a las esperanzas de paz se ha sustituído la certidumbre de una guerra tanto más justa cuanto es cada día más necesaria. En vano he querido ahorrar la sangre de ambos ejércitos, la angustia de las madres, esposas y familias de los que combaten por una y otra parte, y la desgracia de tantas inocentes víctimas, que deben participar los estragos de la discordia. Todo, todo ha sido infructuoso, como se os manifestará más por extenso.
Por consiguiente no queda más recurso que apelar a la bravura americana, y decidir por la fuerza lo que no ha podido transigirse por los consejos de la razón. ¡Pueblos del Perú! cuarenta días más de sacrificio y constancia bastarán para concluir una campaña en que nuestras armas han obtenido señaladamente la protección del Eterno. Pensad que todo los vamos a perder o a adquirir en este período decisivo; y con tal convencimiento, tomad el partido que os dicte el amor a vuestra existencia, a vuestras familias, a vuestros amigos, a vuestra patria, y en fin, a vuestro honor. Los que entre vosotros hagan mayores sacrificios por la libertad, serán más dignos de ella, y tendrán más derechos a la gratitud universal. El enemigo tiembla por su destino; él ve que por el Sur la división libertadora no ha encontrado sino enemigos que vencer y amigos que abrazar. El observa que su ejército está dividido y sin moral, exasperado y sin recursos, y puesto en fin en la alternativa de perecer de hambre o de morir sin gloria. Las tropas que han venido a protegeros, se hallan por el contrario sedientas del combate, robustas con vuestra opinión, y decididas a sellar vuestro destino con la victoria o con la muerte.
¡PERUANOS! Haced lo que la patria aguarda de vosotros, y yo os respondo de la conducta de los bravos, a cuya cabeza voy a buscar los peligros y vivir en ellos, hasta que la independencia corone vuestros esfuerzos, y me asegure la recompensa de poder contemplar tranquilamente vuestra prosperidad. San Martín. (4,T15,252-254)

Los Peruanos reconocen en San Martín a su Libertador

Felicito a Usted con todo el gozo de que está poseído mi corazón por la ocupación que ha hecho de mi país para hacerlo feliz. Todos mis conciudadanos conmigo reconocerán a Usted siempre como a su generoso Libertador. Tenga Usted la bondad de usar este pañuelo que he cosido para que Usted sirva como una fineza de nuestra amistad. Se repite a Usted su más apasionada amiga paisana y atenta servidora. Carta de María Echeverría de Tagle a San Martín, Trujillo 28/7. (1,T17,20)

Colombia es libre

Excelentísimo Señor tengo la satisfacción de anunciar a Usted el suceso más importante a los intereses de Colombia y de una trascendencia infinita a la causa de América. La capital de Caracas fue tomada el 14 de mayo por la División del Oriente de Venezuela a las órdenes del señor general Bermúdez (José Francisco), el 15 evacuaron los españoles la plaza de Guayra y la consecuencia infalible de estos acontecimientos es que la República se halle completamente libre en el norte. La situación de los restos del ejército español reducía a la nulidad cualquier esfuerzo que pretendiera para prolongar su dominación en Venezuela. Los muros de Porto Cabello serán su único asilo momentáneamente, y allí se colocarán en la alternativa de entregarse o perecer de hambre. La plaza de Cartagena sufría las más grandes escaseses a fines de mayo. Se asegura que en Santa Marta se preparaba una expedición para Panamá y nos lisonjeabamos que muy brevemente los departamentos de Cundinamarca y Venezuela serán completamente libres. El de Quito gozará también de estos bienes en muy poco tiempo. Oficio de Antonio José de Sucre (General de la División del Sur en el Departamento de Quito, Ecuador) a San Martín, Guayaquil 29/7. (1,T18,76)

Arenales en desacuerdo con órdenes de San Martín

No podrá Usted cuánta es mi sensibilidad al verme en la dura necesidad de objetas las proposiciones que Usted me hace en su estimable del 27 a las 9 de la noche. He hablado con Otero, le he hecho cuantas instancias e interrogantes se pueden ofrecer en el asunto, pero ni él ni otro que conoczca la localidad, clima y circunstancias puede proponerme un arbitrio para llenar en algún modo los deseos de Usted. Bien claro está y Usted lo conoce mejor que yo, que esto no se puede verificar sin pelear con los enemigos; y, entre no pelear ni desocupar aquellas posiciones, no hay un medio. El batallón de Numancia en cuanto supo la retirada del Ejército a Lima, sus aspiraciones es venirse a ella. Por la demora de Aldao que muy escasamente llega por falta de bestias, con monturas en los hombros, no he podido remitir a Usted antes los estados de las fuerza con expresión de la efectiva y total de la disponible. Carta de Arenales a San Martín, Matucana 30/7. (1,T17,211)

Miller deja Arica y se embarca con destino a Boca Negra

Tengo el honor de incluir a VE que en este momento he recibido del coronel Miller, participándome su embarque en Arica y venida a estas costas, debido a la fuerza mayor que marchaba sobre él después de la cesasión del armisticio y a que no se le hubiese remitido a Chile las armas y demás necesarios que yo había solicitado desde Arica. Estando la tropa muy incómoda en los buques que le han traído espero que VE dará las órdenes necesarias para su desembarco en Boca Negra (a 10 km al noroeste de Lima). Carta de Cochrane a San Martín, Lima 30/7. (1,T17,213)

San Martín en problemas con la Escuadra Naval

Se ha deslizado aproximadamente 12 meses hasta ahora, en que la Escuadra, bajo el comando de VE dejó Chile; durante este tiempo hemos continuado cumpliendo nuestros deberes en nuestras respectivas situaciones y soportado las dificultades propias de cada uno, sin murmurar y sin quejarnos. Nunca ni una vez, hemos perturbado a SE, el general San Martín, con nuestros deseos ni nos hemos quejado de las numerosas privaciones que sufrimos, sino que, por el contrario, reconfortamos con nuestro ejemplo incitando a los oficiales y marineros bajo nuestro mando a una paciente firmeza sobre los múltiples inconvenientes que nos depara un deseo del pago estando en un país extranjero, puede naturalmente ser supuesto por nuestra parte. Por lo tanto, en el momento presente, cuando el objeto de la expedición ha sido felizmente realizado con la rendición de la Capital, no podemos ser considerados como culpables al presentar nuestra demanda para la retroactividad del pago que nos es debido. Reclamo de Foord Morgele, John Grenfell, Thomas Crusy, Alejo Ruiz, Eugenio Gisuvst, Francisco Mendez a Cochrane. Bahía del Callao 26/7. (1,T17,218)

Tengo el honor de incluir a VE una representación de los tenientes y oficiales de la Escuadra, a quienes se debe cerca de 2 años de sueldos; además permítaseme decir que el plazo de tiempo que los marineros se obligaron a servir a la Escuadra se ha cumplido con la mayor parte de ellos, y que por el 20 del próximo mes, no habrá hombre alguno a quien no se le deberá un año, o año y medio de haberes, ignoro si VE podrá remediar esto; pero debo asegurarle que será imposible manejar la Escuadra si no se pague aquí o se mande para Chile para que esto se haga. Oficio de Cochrane a San Martín, Lima 30/7. (1,T17,217)

La situación política en las Provincias Unidas

Tengo el honor de comunicar a VS la importante derrota del intruso Ramírez cuyos planes combinados con Carrera tenían un influjo muy omnioso a los intereses de esa República. Carta de Miguel Zañartu al Ministro de Estado y Gobierno de Chile, Buenos Aires 30/5. (4,T15,215; explicación de las acciones y también en 228-229)

Mi siempre amable general; enferma de la bilis sólo tomo la pluma para decirle a Usted que, las tropas de Ramírez fueron batidas y él y su segundo muertos. Los jefes Lamadrid, Bustos y López, tratan de atacar las pocas fuerzas de Carrera que están en la Punta de San Luis. El Paraguay se ha unidos a Buenos Aires y los portugueses evacúan Montevideo porque el Gobierno está en completa revolución. Carta de Josefa Morales de los Ríos a San Martín, Mendoza 30/7. (1,T17,219)

Sucre se comunica con San Martín para entrar en Guayaquil

Las comunicaciones del general Sucre (José Antonio) y mía impondrán a Usted de los desgraciados acontecimientos en Guayaquil. De todo ha sido culpa el Gobierno por sus debilidades y torpes condescendientes. Entre los males que han resultado, el menos grave haberse paralizado enteramente la Campaña de Quito, haber dejado tiempo a los enemigos a organizarse más y más, y quizá lo ha puesto en aptitud de invadir Guayaquil y Piura, cualquier de cuyas pérdidas nos sería muy perjudicial. Por todo esto si Usted de acuerdo con el general Sucre no quitan los gobernantes y ponen a mandar en su nombre hombres de carácter y prácticos en los asuntos del día, la provincia de Guayaquil nos dará continuos cuidados cuando no caiga en manos de sus enemigos. Si Sucre tuviese la aprobación de Usted yo estoy persuadido que se conseguirá esto y las cosas tomarían un aspecto decididamente favorable. Carta de José de Tagle a San Martín, Trujillo 31/7. (1,T17,220)

Los Realistas incomunicados, Canterac y Serna desencontrados

Necesito que me avise cuanto sepa del enemigo y también si sabe que dirección tomó a su salida de Lima el Excelentísimo Virrey y en el día dónde se halla. Enviará Usted algunos indios racionales y de toda confianza así a Huarchori para saber noticias particularmente de Serna las que me transcribirá Usted haciéndomela pasar por parte de la Oroya con indio de confianza. En fin, si los enemigos hiciesen algún movimiento hago a Usted responsable me lo avise inmediatamente en papel que no necesitará firmar y sólo al pie de él pondrá esta señal *. Oficio de José Canterac al Cura Interino de Yauli (150 km al este de Lima), Cuartel General Realista en Jauja (100 km al este de Yauli) 31/7. (1,T17,223)

El Gobernador de Yauli comunica a Arenales el plan de Serna

Por las últimas noticias que he adquirido del pueblo de Yauli, se sabe que el plan del general Serna es de quedarse en Jauja con su División, que Valdez con la suya marcharía por el Cerro y Canta para Lima, Canterac, acaso tomaría su ruta por este camino al mismo punto con 2.000 hombres, y que el señor general San Martín tendría la necesidad de abandonar la ciudad. Los enemigos se mantienen en Jauja y Tarma, 40 vecinos de los de Tarma salieron hasta Jauja a recibir a Serna. Oficio de Manuel Montejo (Gobernador de Yauli) a Arenales, Runichaca 1/8. (1,T17,224)

El general La Serna al abandonar esta Capital con el Ejército del Rey, se propuso ocupar la Sierra; la primera División al mando de Canterac, fuerte, de 2.800 hombres, se dirigió a Huancavélica; la segunda, de 3.000, siguió con igual rumbo, pero habiendo yo dispuesto que el general Arenales con toda su fuerza repasase la Cordillera y se estacionase en Matucana, donde en el día existe con su ejército de 4.000 hombres, intentó La Serna penetrar por Yauyos para tomar posesión de Jauja. El patriotismo de los naturales (aborígenes) de este punto le obligó a contramarchar, y siguiendo el camino de Tauripampa, se adelantó a reunirse con Canterac, a quien anteriormente se le había incorporado el coronel Carratalá con 600 hombres en Huancavélica, la mayor parte reclutas; y en el día debe considerarse que toda la fuerza de los enemigos, deducidos 1.600 hombres que La Serna y Canterac perdieron en sus marchas entre desertores, muertos y pasados, ocupa la provincia de Juaja, según las últimas noticias. Carta de San Martín a Miller, Lima 2/8. (1,T20,317)

San Martín es Protector del Perú por Decreto del 3 de Agosto

Al encargarme de la importante empresa de la libertad de este país no tuve otro móvil que mis deseos de adelantar la sagrada causa de la América y de promover la felicidad del pueblo peruano. Una parte muy considerable de aquellos se ha realizado ya; pero la obra quedaría incompleta, y mi corazón poco satisfecho, si yo no afianzase para siempre la seguridad y la prosperidad futura de los habitantes de esta región.

Desde mi llegada a Pisco anuncié que por el imperio de las circunstancias me hallaba revestido de la suprema autoridad y que era responsable a la patria del ejercicio de ella. No han variado aquellas circunstancias puesto que aún hay en el Perú enemigos exteriores que combatir y, por consiguiente, es de necesidad que continúen reasumidos en mí el mando político y el militar.

Espero que, al dar este paso, se me hará la justicia de creer que no me conducen ningunas miras de ambición, si sólo la conveniencia pública. Es demasiado notorio que no aspiro sino a la tranquilidad y al retiro después de una vida tan agitada; pero tengo sobre mí una responsabilidad moral, que exige el sacrificio de mis más ardientes votos. La experiencia de 10 años de revolución en Venezuela, Cundinamarca, Chile y Provincias Unidas del Río de la Plata, me ha hecho conocer los males que ha ocasionado la convocación intempestiva de congresos, cuando aún subsistían enemigos en aquellos países: primero es asegurar la independencia, después se pensará en establecer la libertad sólidamente. La religiosidad con que he cumplido mi palabra en el curso de mi vida pública me da derecho a ser creído; y yo la comprometo ofreciendo solemnemente a los pueblos del Perú que en el momento mismo en que sea libre su territorio, haré dimisión del mando para hacer lugar al gobierno que ellos tengan a bien elegir. La franqueza con que hablo debe servir como un nuevo garante de la sinceridad de mi intención. Yo pudiera haber dispuesto que electores nombrados por los ciudadanos de los departamentos libres designasen la persona que había de gobernar, hasta la reunión de los Representantes de la nación peruana; más como por una parte la simultánea y repetida invitación de gran número de personas de elevado carácter y decidido influjo en esta capital para que presidiese a la administración del Estado me aseguraba un nombramiento popular; y por otra había obtenido ya el asentimiento de los pueblos que estaban bajo la protección del Ejército Libertador, he juzgado más decoroso y conveniente el seguir esta conducta franca y leal, que debe tranquilizar a los ciudadanos celosos de su libertad.

Cuando tenga la satisfacción de renunciar el mando y dar cuenta de mis operaciones a los Representantes del pueblo, estoy cierto que no encontrarán en la época de mi administración ninguno de aquellos rasgos de venalidad, despotismo y corrupción que han caracterizado a los agentes del gobierno español en América. Administrar recta justicia a todos recompensando la virtud y el patriotismo, y castigando el vicio y la sedición en donde quiera que se encuentren, tal es la norma que reglará mis acciones, mientras esté colocado a la cabeza de esta nación.

Conviniendo, pues, a los intereses del país la instalación de un gobierno vigoroso, que lo preserve de los males que pudiera producir la guerra, la licencia y la anarquía. Por tanto declaro lo siguiente:

1. Quedan unidos desde hoy en mi persona el mando supremo político y militar de los departamentos libres del Perú, bajo el título de Protector.

2. El Ministerio de Estado y Relaciones Exteriores está encargado a don Juan García del Río, Secretario del despacho.

3. El de la Guerra y Marina, al teniente coronel don Bernardo Monteagudo, auditor de guerra del Ejército y Marina, Secretario del despacho.

4. El de Hacienda, al doctor don Hipólito de Unánue, Secretario del despacho.

5. Todas las órdenes y comunicaciones oficiales serán firmadas por el respectivo secretario del despacho y rubricadas por mí; y las comunicaciones que se me dirijan vendrán por medio del Ministerio a que correspondan.

6. Con la posible brevedad se formarán los reglamentos necesarios para el mejor sistema de administración y el mejor servicio público.

7. El actual decreto sólo tendrá fuerza y vigor hasta tanto que se reúnan los Representantes de la nación peruana y determinen sobre su forma y modo de gobierno. (4,T15,302)

San Martín no le paga a Cochrane

San Martín en el primer día de su Protectorado, en presencia de sus ministros Monteagudo y García, me informó en despecho a su manifiesto en Valparaíso, "que jamás pagaría a las tripulaciones ni un real de sus haberes, a menos que la Escuadra le fuese transferida a él". Oficio de Cochrane a José de Olmedo (Presidente de la Junta Gubernativa de Guayaquil que destituyó a Escobedo). (1,T18,322;14/2/1822)

El navío San Martín se hunde en Chorrillos

Siendo necesario investigar el hecho que causó la pérdida del navío San Martín (16/7) por un Consejo de Guerra y creyendo que las ocupaciones de VS no darán lugar para que asista personalmente como Auditor, espero que me designará la persona que irá en su representación. Nota de Cochrane a Monteagudo, Lima 5/8. (1,T17,233)

Muy sensible es la pérdida del San Martín, pero mucho más me es la conducta que Usted me dice sigue el lord Cochrane. Yo he tenido que humillarme a los jefes británicos con tal de conciliar las locuras de este hombre con la marcha de orden de nuestra revolución. Carta de Ohiggins a San Martín, Santiago de Chile 6/8. (1,T17,236)

El Senado Chileno traba a Ohiggins, Carrera intenta entrar a Chile

No puede Usted figurarse lo que me da que hacer nuestro Senado, ellos me han quitado todos los medios de auxiliar ese Ejército, cerrando las puertas a un sinnúmero de aribtrios que les he presentado y, últimamente con la baja de derechos en las harinas, del ramo de licores, del derecho del carbón, leña y otros artículos, agregándose la cesación de la contribución mensual en todo el Estado, me han puesto al borde del precipicio o me veo en la precisión de disolver este cuerpo mauloso o pierdo la provincia de Concepción por falta de recursos. Carrera se sostiene y con el objeto de pasar la Cordillera luego que las nieves se lo permitan, pues muerto Ramírez (Francisco) se concluyeron sus planes contra el Río de la Plata, y aunque le cueste el pellejo no le queda otro que el de aniquilar el país que tuvo la desgracia de darle el ser. Blanco (Encalada) ha pedido volver a la Marina y se lo he concedido porque él no puede recidir aquí; ha sido juzgado en Consejo de Guerra y condenado a ser suspendido de su empleo. Carta de Ohiggins a San Martín, Santiago de Chile 6/8. (1,T17,237)

Arenales recibe información de los movimientos de Serna

El día 2 pasaron 500 soldados de infantería para Atunguasi con dirección por donde se halle Serna con su División. El dicho día durmieron en la Quebrada de Huayunca en donde quemaron todos los ranchos que habían y mataron todos los ganados que encontraron. Me aseguran que un escuadrón de caballería se halla en Orconunca. Me dicen que los de Huancaya desataron los puentes que había en la entrada de dicho pueblo. De los nuestros, el capitán José María Palomo se halla en Laraos con 200 hombres. El capitán Caynos y su compañero Lorena se hallan en Huaqui. Carta de Rafael Vivas a Arenales, Cochas (300 km al este de Lima) 5/8. (1,T17,235)

Hoy debe llegar el batallón de Numancia al punto de San Pedro, Mama o Santa Inés, mañana a Pariche y el jueves entrará en esa Capital (Lima). Cazadores del Ejército y el Nº 2 se siguen con un día de intermedio, y el Nº 7 de retaguardia con igual distancia. Oficio de Arenales a San Martín, El Rincón (140 km al oeste de Lima) 7/8. (1,T17,239)

Verá La Serna lo que es bueno, y si es lo mismo proyectar lisonjeramente que obrar en campañas de cordillera con la opinión del país en oposición. Hoy pasan Cazadores para Lurín y mañana pasa el Nº 7 para Villa o Surco; veré lo mejor, y el Nº 2 quedará entre ellos. Carta de Arenales a San Martín, Pariache 10/8. (1,T17,245)

La conservación de Ica es intersante al mismo tiempo que el llamar la atención al ejército enemigo por Huancavélica y Huamanga, más como para esto es necesario proporcionarse antes que todo de movilidad descanso en el celo de Usted sobre este punto interín tomo medidas para reforzarle. Carta de San Martín a Miller, Lima 11/8. (1,20,319)

Es abolida la Constitución de España

Subsistiendo hasta el presente en vigor todas las leyes que no están abrogadas, y siendo compatible con los altos destinos del Perú, y con la voluntad universal fuertemente manifestada el régimen prescripto por la Constitución de España, que con violencia se hizo jurar a los pueblos, para esclavizarlos a las sombras de unas leyes calculadas para hacer feliz a una sección pequeña de Europa a expensas del Nuevo Mundo, he resuelto quede enteramente abolida en todas sus partes la Constitución de España, y que las actas de reconocimiento que existan en todos los tribunales y coroporaciones del Estado peruano, se desglosen del libro en que estén insertas y remitan inmediatamente al ministro de Gobierno, esperando del patriotismo que han acreditado todas ellas, que se apresurarán a dar el más puntual cumplimiento a esta resolución. Firman: San Martín y Monteagudo, Lima 9/8. (1,T18,252)

San Martín y la Propiedad Privada de los Peruanos

La seguridad individual del ciudadano, y la de su propiedad, debe constituir una de las bases de todo buen Gobierno. Con dolor he sabido que aquella base ha sido atacada por algunos malvados, que, tomando el nombre respetable del Gobierno y otras autoridades han cometido excesos y abusos escandalosos; y deseando poner término a ellos, y contener todos desorden. Por tanto, declaro:

1. No podrá ser allanada la casa de ningún vecino sin una orden expresa firmada por mi.

2. Toda persona tiene derecho a hacer resistencia, y no permitir que su casa sea allanada mientras no se le presente por el Comisionado al efecto la referida orden mía.

3. La persona o personas que sean destinadas por el Gobierno para el reconocimiento de alguna casa, no podrán, bajo cualquier pretexto, hacer registro ni embargo alguno sino en presencia del interesado, y bajo el correspondiente inventario.

4. Los que tengan que quejarse de la infracción de alguno de los artículos anteriores, interpondrán su recurso ante el Presidente de este Departamento para que sean castigados los contraventores.

Firman: San Martín y Juan García del Río, Lima 7/8. (1,T18,253)

San Martín quiere descansar

Los amigos me han obligado terminantemente a encargarme de este Gobierno. He tenido que hacer el sacrificio, pues conozco que al no hacerlo así el país se envolvía en anarquía. Espero que mi permanencia no pasará de un año, pues V que conoce mis sentimientos, sabe que no son mis deseos otros que el de vivir tranquilo y el retirarme a casa a descansar. Carta de San Martín a Ohiggins, Lima 10/8. (4,A1,309)

Corte Marcial al capitán Wilkinson. San Martín y Cochrane en problemas

Habiendo llegado aquí para dar las necesarias órdenes relativas a la Corte Marcial del capitán Wilkinson (Comandante del navío San Martín); he sido requerido por los oficiales cuyo memorándum adelante hace algún tiempo para informarles de las respuestas del Protector del Perú (San Martín); y la he puesto el asunto presente para informar a ellos que la espero en este día o mañana como máximo y disponiendome yo mismo mientras tanto a asesorar a Usted y su Excelencia a través suyo que otorgarlo no estará en mi poder para reforzar la disciplina y el buen orden que el período en que ellos y las tripulaciones pueden ser mantenidos en ignorancia de las últimas intenciones de los consejeros de su Excelencia. Es decir, no pagar a los marineros a menos que los buques sean vendidos por Chile al Perú; una condición en la cual ellos nada pueden hacer; ni a mi convertir sobre esa lo que fuere. Oficio de Cochrane a Monteagudo, a bordo de la Ohiggins 9/8. (1,T17,241)

Ante Dios tengo nada más en el corazón que sus reales intereses y yo estoy angustiado para verlo llevando ya novedades, las cuales deben conducir a consecuencias muy serias. Ruego hagan todos Ustedes lo que puedan para detener una explosión. El mes ha finalizado ahora y nada puedo prevenir que tal cual como he predicho y otra vez advierto a Usted de ello. Carta de Cochrane a Monteagudo, a bordo de la Ohiggins 9/8. (1,T17,244)

Quiera Dios que el sábado 5 de este mes me haya sido borrado de los días de mi vida. Las penosas sensaciones aún vibran y ellas me hacen desgraciado ¡ Qué ! ¿ San Martín, el justo y honorable, expresó sentimientos que no deben haber surgido de su mente generosa ? ¿ No lo hizo ? ¡ No lo hizo ese San Martín a quien yo consideré mi amigo, mirando con fría indiferencia, dejándome enviar la Escuadra donde yo quisiera e ir donde me gustaría, solamente porque yo le pedí algo que era bueno para el servicio ! General, fue un penoso día para mi, uno que nunca esperé haber visto, aunque las dudas por momentos surgen en mi mente. Que Usted pueda tener éxito en todas sus empresas para bien de la humanidad. Que Usted pueda ser tan grande como la justicia, honor, sabiduría y todas las virtudes puedan hacerlo, es el ruego de su dolido pero sincero amigo. Carta de Cochrane a San Martín, a bordo de la Ohiggins 9/8. (1,T17,244)

Solicitando la decisión de SE, el Protector, tocante la paga de los sueldos de los oficiales y tripulaciones de los buques de guerra, e incluso una representación de los oficiales exponiendo su situación, le aseguro a VS es peor que la de un marinero en el servicio británico. Permítame ahora solicitar, por última vez, alguna contestación a estas materias, en orden a que no recaigan sobre mi la culpa de consecuencias, a saber, la total pérdida del servicio útil de la Escuadra por 150 mil pesos que se deben, será la causa de la pérdida total del poder y la destrucción de las esperanzas del gobierno. Carta de Cochrane a Monteagudo, a bordo de la Ohiggins 12/8. (1,T17,249)

Oyendo a las reclamaciones de VE es indispensable hacer una previa clasificación de ellas para poner en evidencia los deberes que reconoce SE, el Protector. Desde luego, existe en la Escuadra un derecho evidentemente atendible a los 50 mil pesos ofrecidos por el servicio que hizo en la toma de la Esmeralda (buque), no lo es menos el que le asiste por la promesa hecha en Valparaíso a los marineros enganchasen para el caso de la toma de esta capital. Una rigurosa justicia unida a la más plausible gratitud, exigen no sólo el cumplimiento de ambos deberes sino también el de añadir otras brillantes recompensas que desde ahora tiene previstas el Protector del Perú para premiar la constancia y el valor de los oficiales y tripulación que han tenido parte en esta campaña memorable. VE me permitirá observarle que a más que a la práctica constante en Inglaterra y otras provincias marítimas, es diferir el pago de los buques de Guerra destinados a cualquier servicios hasta su regreso a los puertos de los Estados a que pertenecen, SE el Protector del Perú no puede en manera alguna creerse obligado a la satisfacción de los atrasos de la Escuadra, ni en su capacidad de General en Jefe, ni como depositario del poder supremo que ha resumido por las circunstancias. SE el Protector ha declinado justamente reconocer aquellas obligaciones y juzga que sólo pueden referirse al Gobierno de Chile de quien depende la Escuadra del mando de VE. Resta solo fijar el tiempo en que podrán ser satisfechas las deudas que reconoce SE el Protector; hasta la fecha no han podido integrarse en Caja ni la suma de 30 mil pesos para atender las necesidades del Ejército que, después de una penosa campaña, reclama al menos lo preciso para cubrir su desnudez. Carta de Monteagudo (Ministro de Marina del Perú) a Cochrane, Lima 13/8. (1,T18,1)

Los esclavos nacidos a partir del 28 de julio son libres

Cuando la humanidad ha sido altamente ultrajada y por largo tiempo violados sus derechos, es un gran acto de justicia, si no resarcirlos enteramente, al menos dar los primeros pasos al cumplimiento del más santo de todos los deberes. Una porción numerosa de nuestra especie ha sido hasta hoy mirada como un efecto permutable, y sujeto a los cálculos de un tráfico criminal; los hombres han comprado a los hombres y no se han avergonzado de degradar la familia a la que pertenecen, vendiéndose unos a otros. Las instituciones de los siglos bárbaros, apoyadas con el curso de ellos, han establecido el derecho de propiedad en contravención al más augusto que la naturaleza ha concedido. Yo no trato, sin embargo, atacar de un golpe este antiguo abuso, es preciso que el tiempo mismo que lo ha sancionado lo destruya, pero yo sería responsable a mi conciencia pública y a mis sentimientos privados, si no preparase para lo sucesivo a esta piadosa reforma, conciliando, por ahora, el interés de los propietarios con el voto de la razón y de la naturaleza. Por lo tanto declaro lo siguiente:

1. Todos los hijos de esclavos que hayan nacido y nacieren en el territorio del Perú desde el 28 de julio del presente año en que se declaró su Independencia, comprendiéndose los departamentos que se hallen ocupados por las fuerzas enemigas y pertenecen a este Estado, serán libres y gozarán de los mismo derechos que el resto de los ciudadanos peruanos, con las modificaciones que se expresarán en un reglamento separado.

2. Las partidas de bautismo de los nacidos serán un documento auténtico de la restitución de este derecho.

Firman: San Martín y Monteagudo, Lima 12/8. (1,T18,252)

El Ministerio de Hacienda con nuevas directivas

Se pasó a todas las oficinas de la Hacienda del Estado orden del Excelentísimo Señor Protector para que en el 31 de julio último se cortasen todas las cuentas del antiguo Gobierno, y se comenzase el 1 de agosto, en nuevos libros, las del actual, cuya orden se comunica igualmente a ese Tribunal de Cuentas. Hipólito Unanue, Lima 13/8. (1,T18,255)

San Martín envía víveres al Sur para Miller

Con esta fecha ordeno al Comandante de Transporte salga de Ancón la fragata Argentina con 15 días de víveres para 600 hombres con dirección a Pisco en donde debe permanecer a las órdenes de Usted todo el tiempo que crea necesario. Carta de San Martín a Miller, Lima 11/8. (1,T20,319)

Las comunicaciones de Usted sobre sus movimientos después de tomada Ica han satisfechos mis esperanzas. Si se consigue sublevar a Huancavélica y Huamanga e interceptar de algún modo la comunicación con Cuzco los hombres son perdidos. Carta de San Martín a Miller, Lima 11/8. (1,T20,320)

Perú es libre, Chile festeja

No es posible describir las demostraciones de júbilo con que el pueblo chileno ha celebrado las noticias recibidas sobre la libertad de la capital del Perú, debida al valor y sabiduría del General San Martín. A las dos de la tarde del 13 del corriente llegó el primer aviso comunicado por el Gobernador de Valparaíso en que por equivocación vino un pliego distinto del que contenía los partes oficiales del general en jefe. Sin embargo, como corrieron algunas cartas fidedignas que por mayor anunciaban el suceso, y el parte del Gobernador decía expresamente que Lima quedaba libre por las armas de la PATRIA, una salva de artillería y repiques generales sirvieron de seña que congregó un inmenso pueblo en el Palacio Dictatorial, donde cerciorado de él, desplegó los sentimientos más exaltados de placer. No se oían más voces que las de VIVA LA PATRIA, VIVA LA AMERICA, VIVAN NUESTROS HERMANOS LOS PERUANOS, VIVAN LOS HEROES OHIGGINS Y SAN MARTIN [...] Gazeta Ministerial Extraordinaria de Chile, Santiago de Chile 15/8. (4,T15,255; el día 14 regresan las Banderas perdidas en Rancagua)

Cochrane con problemas de abastecimiento para la Escuadra Naval

De la pérdida de una cantidad muy considerable de galleta en el San Martín (hundido) y hallándose su tripulación distribuida en la Escuadra, espero se darán las órdenes necesaria para que se ponga a bordo 400 quintales de galleta; y de haber estado la gente sin socorro de carne fresca, y comido la salada durante las últimas 6 semanas, será preciso que se procure una cantidad antes que los buques estén sin víveres. Oficio de Cochrane a Monteagudo, a bordo de la Ohiggins 15/8. (1,T18,5)

Si acaso los múltiples asuntos que rodean a VS impidan que puedan atender a mis solicitudes de aguardiente, carnes, frutas, verduras, etc. para la Escuadra, le suplico que haga esto presente a SE el Protector. Oficio de Cochrane a Monteagudo, a bordo de la Ohiggins 15/8. (1,T18,5)

Las desgracias del Perú y rápidamente las de Sudamérica cuelgan de un hilo estirado al máximo, el cual ante una leve brisa haría estallar todo en pedazos. Trastornado, sin embargo, como estoy; peleando contra las bajas intrígas y con la tripulación, quienes sospechan, quizá en forma justificada, que serán engañados, no puedo hacer nada; y mis poderes están considerados en igual forma, quizás por el Gobierno, que la débil habilidad de un hombre como Guise. No escribiré más cartas públicas después de este día que no sea dirigida a la gran causa, al Gobierno o la fuerza naval. Oficio de Cochrane a Monteagudo, a bordo de la Ohiggins 15/8. (1,T18,6-7)

San Martín crea la Legión Peruana de la Guardia

He dispuesto crear un cuerpo, cuyo eminente privilegio sea servir de modelo a los demás, por su valor en los combates, y por su disciplina en todas circunstancias, por tanto se formará un cuerpo denominado Legión Peruana de la Guardia, el comandante será el Marqués de Torre Tagle y el jefe de batallón Guillermo Miller. El Escuadrón de Husáres de la Escolta será la base de los Escuadrones de la Guardia, y el sargento mayor Eugenio Necochea tendrá el mando de ambos. Firman: San Martín y Monteagudo, Lima 18/8. (1,T18,247)

San Martín insta a Miller a tomar Huancavélica y Huamanga para llegar a Cuzco

Convencido de la necesidad de adelantar cuanto sea posible nuestras operaciones hacia Huancavélica y Huamanga es urgente se contraiga Usted a reunir las mulas y caballos que permita la situación actual de esa Provincia para contar siempre con la movilidad y emprender rápidamente con presencia de los movimientos que hiciere el general La Serna, cuya fuerza está aún en desorganización y cuyo Cuartel General permanece en Jauja. Recomiendo a Usted salga 2 o 3 hombres hacia Cuzco para poder internar hacia aquella provincia y a la de Arequipa los papeles públicos y cartas que remitiere desde esta Capital como para adquirir noticias frecuentes de los movimientos de las tropas del general Ramíres y de su dirección. Carta de San Martín a Miller, Lima 18/8. (1,T20,322)

San Martín no permite licenciar a los esclavos

Traería funestos resultados a la Agricultura y el orden el que se consintiese a los esclavos de las haciendas la licencia que pretenden tomarse. Conservar los intereses de la justicia con los de la política es indispensable en el día respecto a esta raza infeliz. Tome Usted cuantas medidas crea justas para contenerlos y proteger la propiedad mitigando de algún modo la crueldad con que han sido tratados los esclavos. Carta de San Martín a Miller, Lima 18/8. (1,T20,325)

Serna y Canterac en Jauja, San Martín sin acceso al Castillo del Callao

La Serna se mantiene en Jauja donde se reunió con Canterac hace pocos días. El número de sus enfermos es muy considerable y la deserción aún no para. El Castillo del Callao se halla aun en poder de los enemigo, su guarnición se va disminuyendo por el número de pasados (desertores) que hay diariamente y la escazes de víveres les va apurando, yo espero que su resistencia dure poco. Carta de San Martín a Miller, Lima 18/8. (1,T20,325)

José de Torre Tagle es nombrado Inspector General y Comandante

Por cuanto atendiendo a los méritos y servicios del Mariscal de Campo Marqués de Torre Tagle he venido en nombrarle Inspector General de los Cuerpos Cívicos de Infantería, Caballería y Artillería del Estado Peruano y Comandante en Jefe de la Legión Peruana de la Guardia. Nombramiento de San Martín, Lima 18/8. (1,T20,456)

San Martín ordena que todos los buques dejen el Callao

Quiere SE que todos los buques mercantes que están al frente del Callao pasen inmediatamente a Ancón, para lo cual se servirá dar VE la orden oportuna. Oficio de Monteagudo a Cochrane, Lima 18/8. (1,T18,10)

Se han expedido órdenes al comandante del puerto del Chorrillo y al señor intendente del Ejército para que aquél entregue diariamente al comisario de la Escuadra 25 carneros para su consumo, por no haber vacas; y los últimos 15 pesos para legumbres. SE el Protector del Perú mandará en breve un buque procedente del puerto de Samanco, en el que vendrá ron. Oficio de Monteagudo a Cochrane, Lima 19/8. (1,T18,12)

No vacilo en asegurar a Usted que de la vigilancia que se guarda en la Escuadra, ningún grano ni auxilio alguno han entrado al Callao por mar; sin embargo, he dado órdenes que los buques mercantes se pasen a Ancón luego que haya hecho su aguada. Oficio de Cochrane a Monteagudo, a bordo de la Ohiggins 19/8. (1,T18,13)

Hoy he tenido que mandar al Lautaro a Ancón para solicitar víveres, pues no los hay en la Escuadra, y abandonarán el bloqueo por esta razón, pues los pocos carnes que vinieron eran casi incomibles. Oficio de Cochrane a Monteagudo, a bordo de la Ohiggins 20/8. (1,T18,16)

Tengo el honor de incluir a VE la factura de 46 fardos con 6.900 pares de pantalones de brin, que con esta fecha doy orden a Valparaíso para que los embarquen en el bergantín Rápido. Oficio de Rodriguez Peña a San Martín, Santiago de Chile 21/8. (1,T18,18)

He escrito a Monteagudo pidiendo carne, galleta y otras cosas indispensables para la Escuadra; pero, en lugar de mandar carne fresca a Boca Negra, me dice que está mandada a Chorrillos, en donde es casi imposible traerla por falta de botes a propósito. Todo está en un letargo en la Escuadra, y la otra noche, cuando quise que los botes fuesen a un servicio, apenas conseguí 5 en toda la Escuadra; y, en tales casos es inútil valerse de la fuerza contra la voluntad de la gente. Jamás en mi vida he estado en una situación más llena de dificultades y tan desagradable. Carta de Cochrane a San Martín, a bordo de la Ohiggins 22/8. (1,T18,21)

Miller incauta dinero de los Realistas

Consecuente al oficio de Usted del 10 en que me consulta cuál es el destino que debe darse al dinero y efectos tomados por la División a su mando, tanto en Puertos Intermedios como en Pisco, debo decirle que: la parte que le corresponda a esa División debe reaprtirse entre los individuos de ella. Si de la cantidades que tenga Usted que recibir se puede invertir algunas para vestuarios para el soldados, podrá acceder Usted a su construcción. Carta de San Martín a Miller, Lima 20/8. (1,T20,326)

México es libre

La capital de México ha sido tomada por el insigne general Iturbide (Agustín) con 20.000 hombres, y aquella parte septentrional ha jurado gloriosamente su independencia, según noticias recibidas por el bergantín inglés Tiber, procedente de Acapulco, y confirmada por otro que llegó posteriormente a Guayaquil y tocó en San Blas y en el mismo Acapulco. Gaceta de Lima 21/8. (1,T18,75. Tratado de Paz entre México y España en la Villa de Córdoba: 4,T29,83-89)

Serna dice que el nombramiento de San Martín es ilegal

Que el haberse VE mismo elegido por Suprema Autoridad del Perú que llama libre a pesar de cuanto para ello alega y puede alegar es en mi concepto un acto de aquellos que sólo un sistema puramente despótico puede ser admitido; que las misma personas que en esa capital acaban de jurar la independencia libre y espontáneamente como VE dice, puede ser que vuelvan dentro de poco tiempo a jurar la Constitución de la monarquía española con más libertad y voluntad; en fin, que el tiempo hará conocer si el nuevo título que ahora ha tomado VE de Protector del Perú es tan adecuado como el de Libertador del Perú. Oficio de Serna a San Martín, Jauja 22/8. (1,T18,20)

Una imagen de San Martín y los festejos en Chile

SE el señor Director Supremo (Ohiggins) que anhelaba por anticiparse a demostrar el sumo interés que toma en tan justo regocijo público, presentó la noche del miércoles 22 en su palacio Directorial un magnifico sarao, a que concurrieron cerca de 500 personas entre ambos sexos, de lo más lucido y circunstanciado de la capital... El salón de baile, cuya longitud pasaba de 180 pies, se veía ligeramente dividido en 3 secciones iguales en que competían el fausto y el primor... Un majestuoso Pabellón de ricos tejidos de seda, en que con suma elegancia se veían distribuidos los tres colores de nuestra bandera nacional, y cuya gran cúpula que pendía de lo más elevado del pavimento superior, servía de dosel a la honorable imagen del Exmo Sr General en jefe D.José de San Martín. Gaceta Ministerial de Chile, Santiago de Chile 25/8. (4,T15,291)

Bolivar entra en Caracas y se comunica con Ohiggins

Las noticias que por separado se sirve Usted comunicar y la carta de Olmedo (José de), me han ilustrado mucho sobre las últimas ocurrencias del Norte. La toma de Caracas (Batalla de Carabobo el 24/6/1821) en especial tiene mucho influjo en los progresos de la Independencia, y por acá tenemos de tal modo auyentado a La Serna con su ejército y tan acobardados a los del Castillo (Callao), que pronto, según todas las apariencias, veremos libre al Perú de sus más crueles enemigos. Carta de San Martín a Torre Tagle, Lima 23/8. (1,T20,459)

Desde el momento en que la providencia concedió la victoria de las armas de Colombia en los campos de Carabobo, mis primeras miradas se dirigieron al Sur, la ejército de Chile.
Lleno de los más ardientes deseos de participar de las glorias del ejército libertador del Perú, el de Colombia marcha a quebrantar cuantas cadenas en los pueblos que gimen de la América meridional.
En marcha para tan santa misión dirijo a mi Edecán, el coronel Ibarra, cerca de SE el general San Martín, para que se sirva tener la bondad de facilitar los medios de reunir el ejército de Colombia con el de Chile.
Donde quiera que estos hermanos de armas recibas los primeros ósculos, allí nacerá una fuente de libertad para todos los ángulos de America. Oficio de Bolivar a Ohiggins, Cuartael General en Trujillo 23/8. (4,T30,16)

San Martín apoya a la Junta Gubernativa de Guayaquil

Desde que recibibí la primera noticia del feliz cambio que hizo esa provincia de su antigua forma, me anticipé a mostrar al Gobierno que entonces existía, por medio de mis diputados, el general Luzuriaga y el coronel Guido, cuáles eran las ideas que me animaban con respecto a su destino. Mi gran anhelo fue entonces, y nunca será otro, ver asegurada su independencia bajo aquel sistema de gobierno que fuese aclamado por la mayoría del pueblo, puesto en plena libertad de deliberar y cumplir sus votos. Yo no tomaré otra parte en los negocios de ese país que la que convenga al cumplimiento de la resolución heróica que adoptó el día de su regeneración. Por lo demás, si el pueblo de Guayaquil oportunamente quiere agregarse al departamento de Quito o prefiere su incorporación al Perú, o si en fin resuelve mantenerse independiente de ambos, yo no haré sino seguir su voluntad y considerar a esa provincia en la posición política que ella misma se coloque. Oficio de San Martín al Presidente de la Junta Gubernativa de Guayaquil, Lima 23/8. (1,T18,24)

Los Realistas logran infiltrar suministros

SE el Protector del Perú ha sabido de que 4 lanchas que salieron del Callao a Bujama en solicitud de víveres para los enemigos han regresados cargados de ellos; a efecto de que no se repitan tales sucesos quiere SE el Protector que un buque menor se sitúe en el Boqueron. Oficio de Monteagudo a Cochrane, Lima 23/8. (1,T18,26)

La situación en la Escuadra Naval es tensa, Cochrane enfermo en el Callao

No tengo como remediar aquellos males que veo apresurarse con pasos acelerados a ese punto de donde no pueden retirarse. Estoy en cama, así perdone Usted que soy corto. Las cosas han llegado a una crisis por un camino y pronto llegarán a una crisis por otro camino. No he escrito ésta de mi puño porque estoy tan enfermo que no lo he podido hacer. Carta de Cochrane a San Martín, a bordo de la Ohiggins 24/8. (1,T18,28)

He recibido la de Usted que me informa que las lanchas que están cargando a barlovento, y de las que se dicen han entrado al Callao, aunque se han tomado todas las precauciones de noche con los botes, para impedir tal consecuencia, y tomo esta oportunidad de repetir mi deseo de ver la Escuadra puesta en un pie que se podía hacer guardar la disciplina y cumplimiento de mis órdenes, bajo la pena de perder los oficiales sus empleos, pero en las circunstancias existentes, si se recurre a medios fuertes, dónde hallaré otros que se pongan voluntariamente en situaciones tan destituídas y abandonadas, como las suyas son y han sido hace tiempo. Con un buque, buenos oficiales y bien tripulado; debidamente abastecido y todos confortables y unidos, más se haría que con 10 Escuadras como ésta, sin paga, mal comida, destituída de camas, casi desnuda, todos descontentos y desconfiados y sin los motivos que hacen actuar a los hombres a esforzarse, y con mil motivos que engendran mi disgusto de todo lo que tiene una apariencia de riesgo y trabajo. Oficio de Cochrane a Monteagudo, a bordo de la Ohiggins 24/8. (1,T18,29)

He mandado la Valdivia, que es el único buque que tiene algunos víveres, a Pisco a comprar aguardiente o tomarlo. La Ohiggins no tiene una galleta, charqui ninguno, y carne salada para 3 días solamente; ni cacao, ni aguardiente. La Lautaro no tiene más víveres que un día de mal pan, uno de charqui podrido que pertenece al Ejército y sin aguardiente, ni víveres de ninguna otra clase. La Indepenencia tiene pan para 10 días, carne salada para 12 y charqui para 14; pero no tiene cacao, grasa, aguardiente, ni leña. Repartiré hoy los víveres de la Independencia a los 3 buques, la Ohiggins, Lautaro, Independencia y tripulación del San Martín, que vituallarán por 3 días completos. Me hallaré en la penosa necesidad de proceder primero a Ancón a conseguir los medios necesarios para la subsistencia de la Escuadra. Oficio de Cochrane a Monteagudo, a bordo de la Ohiggins 24/8. (1,T18,30)

Deberá seguir inmediatamente con el barco bajo su mando hacia el puerto de Ancón con el propósito de procurar aprovisionamiento de las distintas naves, y una vez concretado retornará al bloqueo del Callao. Memorandum de Cochrane a Forster, a bordo de la Ohiggins 26/8. (1,T18,35)

Cochrane recibe víveres en Ancón

Celebro infinítamente que las órdenes que el Gobierno ha tenido a bien expedir relativas a proveer de víveres a los buques de guerra hayan sido tan eficaces que la Independencia ha podido reunirse al Galvarino, Araucano y Aranzazú, en el bloqueo del Callao, para cuyo destino se hizo a la vela esta mañana a las 4. Oficio de Cochrane a Monteagudo, a bordo de la Ohiggins en Ancón 28/8. (1,T18,45)

Llegan noticias al Perú por la muerte de Napoleón Bonaparte

¡Pobre Bonaparte! Lamento la muerte (5/5) de ese hombre como el más grande que haya vivido, probablemente en las páginas de la historia; ciertamente como el más grande de nuestro tiempo. Carta de Cochrane a Monteagudo, a bordo de la Ohiggins en Callao 29/8. (1,T18,47)

Arenales en Trujillo

Me reuní en el día siguiente de mi llegada por las instancias de Torre Tagle, apurado por soltar la carga y volver a su Lima. Sin embargo, no partirá tan pronto, porque estos hombres no marchan a la ligera como nosotros, y tienen mucho tren que acomodar y conducir. Carta de Arenales a San Martín, Trujillo (700 km al norte de Lima) 1/9. (1,T18,53)

La Casa de la Moneda del Perú

En la Casa de la Moneda se han entregado, conforme a los certificados que obran en mi poder, las partidas de plata siguiente: en 4 barras, 683 marcos 2 onzas. En 5 piñas, 115 marcos 2 onzas. En 5 piñas, 46 marcos. En 13 piñas, 297 marcos 2 onzas; en chafalonía, 119 marcos. En 7 tejos de oro, 1.185 castellanos 4 tomines. Asimismo en 6 tejitos de oro pequeño, 59 onzas. Idem para chafalonía para las medallas, 107 onzas 1/4. Por la demostración que antecede verá Usted que ascienden las pastas y chafalonía de plata entregadas a 1.260 marcos 6 onzas; y las de oro, por una parte 1.185 castellanos, y por otra 166 onzas 1/4. El dinero acuñado y puesto en el el poder de los Ministros del Tesoro Público hasta la fecha, son 15.975 pesos, quedando en casa para gastos extraordinarios de 4 a 5 mil pesos, y en moneda de cruz e inservible 1.435 pesos 2 reales. Del miércoles al jueves inmediato podré reunir 21.000 pesos y a más las onzas de oro amonedado que existen en la goleta Sacramento. Oficio de Lemos a San Martín, Lima 1/9. (1,T18,54)

En cumplimiento de las órdenes de SE del 27 y 28 de agosto último, el señor Pedro Nolasco Foro y el doctor Fernando Dueñas han entregado por formal inventario las alhajas, plata y bienes pertenecientes a las iglesias de Concepción y a las de Chillán, del Estado de Chile, cuyo testimonio legalmente autorizado queda en mi poder para sacar las copias correspondientes para mi resguardo y demás interesados. Oficio de José de Boqui (Director de la Casa de la Moneda), Lima 1/9. (1,T18,55)

En cumplimiento de la orden superior de SE del día de la fecha, sobre que se enzurrone y tenga pronta la plata piña y demás intereses que existen hoy en esta Casa de la Moneda de mi dirección, se han tomado todas las provisiones, las más ejecutivas y por ellas espero quedarán llenos todos los deseos de SE. Oficio de Boqui a San Martín, Lima 3/9. (1,T18,61)

En cumplimiento de su orden del día de ayer, he hecho enzurronar toda la plata sellada, piña y labrada reducirla a rieles, como también el oro en pasta y sellado que componían las existencias de las respectivas oficinas que indican las listas que acompaño, para su conocimiento en cada una de sus partidas y resguardo de esta Casa de la Moneda. Todo lo cual compone 35 cajones que salen en la madrugada del día de la fecha, conducidos a sus destino por los comisionados de toda confianza, José Meneses, José Oyague y Francisco Lizansaburu, empleados en esta misma Casa. Oficio de Boqui a San Martín, Lima 3/9. (1,T18,63)

La Moneda

Juan José Ruiz dona una moneda acuñada en Lima en 1821 con el lema "Bajo la protección del Ejército Libertador del Perú al mando del Gral San Martín". Diario de Juan Manuel Beruti (Buenos Aires 18/1/1847;10,T13,N35,189. Personas donaron monedas por la colocación de la piedra fundamental de una obra en Buenos Aires)

Cochrane reclama sueldos atrasados antes de regresar al Callao

Ya habría salido de éste ayer de no haber sido por un alboroto con la tripulación extranjera. Creo que la Lautaro no saldrá de aquí, después que la deje; porque he sido capaz de persuadir a la gente de la Ohiggins únicamente a levar el ancla para el bloqueo del Callao, asegurándola que inmediatamente que llegan al Callao haría lo posible para que se satisfaciese mis haberes vencidos. Oficio de Cochrane a Monteagudo, a bordo de la Ohiggins 1/9. (1,T18,54)

El disgusto que se observa en la tripulación extranjera, y la resistencia que ha mostrado el equipaje de la Lautaro a volver al Callao, no menos que al de la Ohiggins, son males tanto más sencible para el Gobierno cuanto más dista tener arbitrio para repararlos. Los deseos de SE el Protector del Perú son variables a este respecto, pero así como hasta el presente no ha podido subvenir a las necesidades del Ejército por no haber sido pagado está desnudo y descalzo, sin tener los auxilios más indispensables para salir en campaña, como debe realizarse, en breve. Con motivos idénticos, no le es dado al Gobierno pagar a la Escuadra sus haberes devenidos, y en este conflicto SE cree haber satisfecho a la justicia y a los reveses de su dignidad, reconociendo las deudas del Gobierno de Chile y garantizando su pago y el de sus propinas. Oficio de Monteagudo a Cochrane, Lima 1/9. (1,T18,58)

Tuve la mortificación de informar a Usted desde Ancón que los marineros de esta fragata, al rehusarse a trabajar, me obligaron a botar a 20 de los principales revoltosos a tierra, lo que produjo el efecto temporal de poder levar el ancla y reasumir el bloqueo del Callao. Oficio de Cochrane a Monteagudo, a bordo de la Ohiggins 4/9. (1,T18,65)

Rozas y un mensaje a San Martín

El proyecto político, sabio, el único de tomar sobre sí el peso del Gobierno en estas circunstancias, lo considero el más a propósito para aquel fin tan deseado. La experiencia de 11 años debía haber enseñado a todos el dogma inefable que la libertad es un alimento de buen jugo, pero de difícil digestión, y que es preciso estómagos muy sanos para soportarla. ¿ Cuántos hemos conocido que parecían nos respiran más que libertad y que tenían su corazón lleno de todos los vicios de los esclavos ? Es preciso que se persuadan los hermanos que las leyes que han jurado cumplir son más auteras que lo que tiene de duro el yugo de los tiranos. Que el sol no puede mirarse de lleno sin ofender la vista y que es preciso sofocar las pasiones mucho más temibles que la servidumbre. Carta de José María de Rozas a San Martín, Santiago de Chile 6/9. (1,T18,179)

Los Realistas avanzan por tierra y por mar hacia Lima, San Martín los espera

Se han recibido noticias que el Ejército Español al mando del coronel Valdez avanza sobre la Capital con 5 batallones de Infantería, y otros tantos escuadrones de Caballería, cuya fuerza total se calcula cerca de 4.000 hombres. El enemigo marcha con rapidez, y su Armada se hallaba ayer a 16 leguas de esta ciudad. En estas circunstancias ha resuelto SE el Protector presentarles batalla y al efecto sale mañana todo nuestro ejército en número de 6.000 hombres a acampar fuera de Lima. La probabilidad del triunfo está por las armas de la Patria, si se considera la superioridad física y moral que tiene sobre los españoles; me ordena prevenga a Usted que mañana mismo desembarque toda la tropa disponible que hubiera a bordo de la Escuadra y venga a reunirse al ejército. Oficio de Monteagudo a Cochrane, Lima 2/9. (1,T18,60)

Cochrane y la toma de la Fortaleza del Real Felipe

Ojalá que pudiera acompañarlo con alguna ventaja a cosechar los laureles que le aguardan; pero si esto no puede ser es debido a lo que tanto tiempo he deseado evitar. En verdad el cuidado de los Castillos (Fortaleza), si los enemigos saliesen a ayudar a sus compañeros, es importante, y yo haré todo lo que pueda en este caso, como para pagar a los marineros de lo que hay adentro. Oficio de Cochrane a San Martín, a bordo de la Ohiggins 4/9. (1,T18,62)

Siento que me es imposible acompañar a Usted en el combate más glorioso que ha habido hasta ahora en la América del Sur, y tomar, al mismo tiempo, las providencias necesarias para asegurar Castillo, si sale su guarnición. Me voy ahora para Boca Negra y pienso enviar los bergantínes Galvarino y Araucano para cortar la retirada del enemigo para Cerro Azul, o al menos cooperar en su destrucción con el Ejército Libertador de si intenta el enemigo huir, como anticipo, por la playa. Carta de Cochrane a San Martín, 7/9. (1,T18,67)

San Martín en problemas con la Escuadra Naval

No obstante he hecho presente a las tripulaciones de la Escuadra las ofertas y promesas de SE el Protector, han objetado obedecer las órdenes que el bien del serivicio requiere y consiguientemente no he podido mandar al Galvarino y Araucano a molestar al enemigo si se retira para Cerro Azul. Tenemos víveres para muy pocos días a bordo, y he de esperar que inmediatamente mandará Usted 6 reses a la playa y 3 cada día consecutivamente, y si de alguna circunstancia hubiera falta en esto, tendré que mandar y tomar el ganado que está en el pasto o levantar el bloqueo. Oficio de Cochrane a Monteagudo, a bordo de la Ohiggins 7/9. (1,T18,67)

Habiendo recibido VE órdenes de proceder dentro del pasaje del buque Venganza con el propósito de entregar cualquier suministro al entrar en el Callao, estoy obligado a revelar a VE que los miembros de la tripulación del barco bajo mi mando dicen: "como consecuencia del gran atraso del pago y premios en dinero de sus períodos expirados hace mucho tiempo, no pueden cargar mercadería y sí elevar su protesta", pero que están listos para prestar cualquier servicio y defenderán el barco contra cualquier ataque del enemigo. Esto me hace pensar que el rechazo de la tripulación es consecuencia de la actitud tomada por otras naves de la Escuadra respecto de lo mismo. Oficio de Forster a Cochrane, a bordo de la Independencia en Callao 8/9. (1,T18,78)

Ohiggins teme una invasión a Concepción

Acabo de recibir la desagradable noticia de haber apresado Benavídez un buque inglés con 3.000 armas de chispa, efectos de Europa y pertrechos, en la costa de Arauco; con cuyos útiles intenta invadir la provincia de Concepción. Si el bergantín Araucano no hiciese notable falta, se sirva hacerlo venir a Valparaíso para que en unión con el Chacabuco, que hace mucha agua y no se puede confiar en ella, se persiga un bergantín y una goleta americanas armadas en piratería por el teniente coronel Vicente Benavídez, quien a nombre del Rey de España hace todas estas depredaciones. El bergantín Maipu que se fue de Chile ha sido apresado y conducido al Río de la Plata por un corsario de Buenos Aires. Oficio de Ohiggins a San Martín, Santiago de Chile 9/9. (1,T18,79)

La Logia Lautaro se sigue reuniendo en Santiago de Chile

Rozas enojado porque no lo mandan de enviado a Lima, tener lo mismo porque no entra su hermano o Francisco Vicuña de Ministro de Hacienda, es al que me sucede. Blanco (Encalada) se acercó anoche a SE en la comedia y le dijo "Me han dicho que Cruz va para Lima y que otro Cruz de quien nadie conoce en la Revolución, le sucede. Yo he dicho que no puede ser, si esto es cierto yo me quedaría mejor en Valparaíso". SE con mal modo le dijo que aquel no era lugar para hablar; pero Freire, que estaba presente, le contestó "que ese Cruz era un sargento mayor desde el principio de la Revolución y, a no ser que su hermano le gane en actividad". SE está firme en el hermano de Usted; el martes hay Logia y estamos prevenidos por si tocan algo. Blanco debe salir el miércoles para embarcarse en el Moctezuma. Carta de José Antonio Rodriguez a Luis de la Cruz, Santiago de Chile 9/9. (1,T18,80)

Guatemala es independiente

Siendo públicos e indudables los deseos de independencia del gobierno español que por escrito y de palabra ha manifestado el pueblo de esta capital, recibidos por el último correo diversos oficios de los ayuntamientos constitucionales de Ciudad Real, Comitán y Tuxtla, en que comunican haber proclamado y jurado dicha independencia, y excitan a que se haga lo mismo en esta ciudad. Palacio Nacional de Guatemala 15/9. (4,T29,152-155)

Cochrane en Ancón se apodera de dinero realista, San Martín lo reprende

Es indispensable que yo tenga que hacer algo como para obtener el pago y beneficios para la Escuadra; yo envío también cartas, las cuales le ruego remitir como una forma de exigencia, otorgando pasaportes para 3 personas por 1.000 dólares, si ellos juzgaran apropiado pagar esa suma. Oficio de Cochrane a Forster, a bordo de la Ohiggins 14/9. (1,T18,83)

En este día han fondeado las fragatas Valdivia y Ohiggins y esta conduce a bordo a SE el almirante (Cochrane), quien ha puesto tropa en la fragata Perla, persuadido que esta tuviera plata del gobernador, pues la que tiene es perteneciente a la Intendencia del Ejército y el Intendente vive en ese buque. Oficio de Manuel Lovo (Comisario de Transporte) a Monteagudo, Ancón 14/9. (1,T18,82)

Recibimos de la borda del barco Louisa, capitán Worthy; bolsas, afrecho, plata piña, sin permiso de aduana. Recibo firmado por Cochrane, 15/9. (1,T18,88)

Acabo de ser informado que VE con el uso de la fuerza ha sacado de diferentes buques, así neutrales como nacionales, propiedades que pertenecen al Estado, y otras que son de particulares que se hallan bajo la protección del Gobierno, sin que entre todos haya habido embarcado un centavo por contrabando o por la ley de las naciones pudiera estar sujeto a requisición alguna. Bajo estos principios ordeno a VE, como Protector del Perú y General en Jefe, restituya a bordo de los respectivos buques las propiedades que han sido tomadas de ellos, por pertenecer las unas al Gobierno, y las otras a particulares que de hecho se hallan bajo mi protección. Mi primer ayudante, el coronel Guido, va encargado de poner en vuestras manos esta nota. Carta de San Martín a Monteagudo y de Monteagudo a Cochrane, Lima 15/9. (1,T18,87)

No puedo contestar pronto a su oficio para que lo lleve el coronel Guido, pero lo haré luego que pueda acompañarlo con estos documentos necesarios para manifestar que he tomado sobre mi una responsabilidad enorme, para evitar consecuencias fatales a Usted, y quizás a los demás gobiernos dependientes de la Amércia, que dependen principalmente del suceso suyo. Si no hubiera dado este paso, el menor mal que había que esperar hubiera sido levantar el bloqueo y la entrada de viveres en El Callao, pues Usted sabe muy bien que tienen dinero para pagarlos bien; y los neutrales no querrían otra cosa. Sabe que los soldados del enemigos se pasan a Usted porque no son pagados, muertos de hambre en el Castillo. Y piense Usted que su Ejército no le hubiera servido con el entusiasmo que vi el otro día, si no hubiesen sido pagados sus sueldos, y sin más que comer que arroz malo, pan, charqui podrido y agua. Es que no ha podido Usted esperar y por consiguiente ha tomado las medidas sabias de seguir otro camino. Y estoy seguro que su deber público le hubiera hecho tomar el dinero de su mismo hermano si hubiese visto el espíritu de motín en el Ejército, antes que vieran los marineros que tenían una seguridad mayor que las promesas que dicen ellos han sido tantas veces burladas. Dicen que Usted y yo firmamos un papel en Valparaíso asegurándoles su paga y además una calificación a su llegada a Lima. Que esto no se cumplió. Que les prometió Usted mes y medio después de la toma del Callao, y que ya ven al Callao socorrido por el enemigo. Y dicen que luego se les prometerá pagarles cuando no haya enemigos en la América. Carta de Cochrane a San Martín, 16/9. (1,T18,89)

Carrera es apresado y fusilado en Mendoza

El 31 de agosto fue derrotada por la división de esta ciudad, esa horda de facinerosos que se había hecho celebre por su arrojo y por sus crímenes tan completamente que no ha escapado un solo hombre. El 4 del corriente fue pasado por las armas en la plaza mayor de esta ciudad el brigadier José Miguel Carrera con otro de sus princiaples secuases, y sus miembros mutilados para memoria de la posteridad y escarmiento de otros miserables que quisieren imitarle. El detalle de la jornada de la Punta del Médano, donde sucumibió el último resto de los anarquistas, que tengo el honor de acompañar a VE, dará una idea exacta de aquel acontecimiento. Oficio del gobernador Tomás Godoy Cruz a Ohiggins, Mendoza 10/9. (4,T15,351; detalle de la batalla 352-355)

Acompaño a VE la adjunta lista de los oficiales y jefes prisioneros de la división de Carrera que existen en este depósito para satisfacción de VE: José Miguel Carrera (Brigadier), José María Benavente (Coronel), Felipe Alvarez (Coronel), Manuel Arias (Coronel), José Gregorio Gutierrez (Gobernador de San Luis), Manuel Pueyrredón (Capitán), etc. Oficio del gobernador Tomás Godoy Cruz a Ohiggins, Mendoza 9/9. (4,T15,350)

El 4 del corriente fue fusilado Carrera en la Plaza de Mendoza y destruida enteramente su División, que contaba con 500 hombres entre el Retamo y las Catitas. Ahora podrá este Gobierno contraer toda su atención a Benavídez que nuevamente amenaza a Concepción. Carta de Rodriguez Peña a San Martín, Valparaíso 17/9. (1,T18,91)

San Martín pergeña el plan para tomar el Puerto del Callao

Tengo el gusto de anunciar a Usted que mi plan contra los enemigos va surtiendo el efecto que me propuse. Ayer, por la mañana, se decidió en la Junta de Guerra en el Callao que el Ejército español debía retirarse inmediatamente y dejar en el Castillo una guarnición de enfermos para capitular; luego que esta resolución trascendió a la tropa, comenzó la deserción y desde ayer a hoy se nos han pasado del enemigo 200 soldados y 8 oficiales. Anoche emprendió todo el Ejército su retirada para Boca Negra, y al llegar al río, retrocedió porque no podía acabar de cruzar el río antes que viniese el día, y mis partidas estaban sobre él. Los pasados convienen en que esta noche ejecutan su movimiento y, de todos modos, yo creo para mañana concluído este negocio, y que en consecuencia estaremos dueños del Puerto del Callao. Carta de San Martín a Cochrane, Lima 16/9. (1,T18,90)

San Martín intima al Gobernador de El Callao a rendirse

Abandonando VS por el ejército enemigo a discreción mía, perseguido este y disperso en gran parte, toda resistencia de VS haría vícitmas sin utilidad del gobierno a quien sirven en este Estado. Si VS quiere que las personas, empleos y equipajes que existen en esta plaza sean respetados y no sufran todo el rigor de la guerra, mañana, a las 10, deben ser entregados los Castillos en el pie en que se hallan a esta hora. Mi primer ayudante de campo (Guido) va encargado de recibir la contestación. Nota de San Martín a José de la Mar (Gobernador del Callao, Castillo del Real Felipe), Lima 17/9. (1,T18,91)

Bastante di a entender a VS en mi oficio de ayer sobre los sucesos del Ejército del Rey, pero si VS aún requiere más información sobre ello, puedo asegurarle que no solo va aquel en una precipitada fuga hacia la Sierra, dejando en nuestro poder centenares de soldados que se pasan cada hora y entre ellos 18 oficiales, sino que perseguido por el Ejército Libertador y por multitud de ciudanos armados, su ruina es infalible en medio de la desmoralización que marchan todas sus tropas. A vista de esta capitulación, espero de VS una terminante respuesta y la entrega de esa plaza, bajo las mismas condiciones que indiqué ayer, y que sólo puede otorgarla su generosidad. Si VS aún pretende dar extensión a su desinterés, conseguirá hacer desgraciados, poniéndome en el caso fatal que he procurado alejar aún deprimiendo los respetos de mi autoridad. Oficio de San Martín a José de la Mar, Lima 18/9. (1,T18,92)

Como hombre público y como privado he tenido siempre derecho a ser creído. Los jefes del Ejército del Rey se equivocaron con sus cálculos y han tenido que retroceder a la Sierra, desorganizando toda su fuerza, ellos huyeron perseguidos y el ejército va disolviéndose por momentos. Si esta explicación aún requiere más autenticidad, un oficial suyo puede venir a informarse de ello. En tales circunstancias, y cuando el furor del pueblo de Lima apenas ha podido contenerse contra los españoles de toda clase que aún existen reclusos en Lima y Ancón, es peligroso que suba de rumbo, si la Plaza del Callao, cuyos recursos actuales todos saben, se sostiene aún entonces la humanidad sufrirá más allá de lo que es fácil calcular, y yo, sin violar la justicia, no podría reprimir ciertas medidas. He venido, general, a este punto a aguardar solamente la respuesta de Usted, y yo espero que mis intimaciones no serán vanas, y que sujetando Usted sus deberes como militar a circunstancias que no he podido prevenir, me ahorreel disgusto de ver perderse a otros. Oficio de San Martín a José de la Mar, Lima 18/9. (1,T18,92)

No me considero en el caso de haber ofendido su delicadeza dejando de dar en corto a su aserciones, ni como hombre público, ni como particular, pero permítame Usted señor general manifestarle que en situaciones como la mía no es nueva toda detención de esta especie sin nota de agravio; bajo este concepto y la misma invitación que Usted se sirve hacerme para el brigadier Manuel Arredondo a hablar con alguno de los oficiales del Ejército Nacional. Ambiciono tanto como el que más la felicidad pública, hágame Usted el honor de creerme y de recibir mis respetos como su muy atento servidor. Oficio de José de la Mar a San Martín, Castillo del Real Felipe 18/9. (1,T18,93)

Consecuente con el oficio que acabo de recibir de Usted para el brigadier Manuel Arredondo y el capitán Manuel Yañez con el encargo de informarse de alguno de los señores oficiales y soldados del Ejército Nacional acerca de su estado, conforme a la misma oferta generosa y verificado este paso, trataré definitivamente la capitulación de estas fortalezas acorde con la que Usted se ha servido ofrecer a esta benemérita guarnición. Oficio de José de la Mar a San Martín, Castillo del Real Felipe 18/9. (1,T18,94)

En virtud de lo que ha manifestado el brigadier Manuel Arredondo, pasará mañana mismo una comisión suficientemente autorizada para tratar con Usted, conforme a su oficio del 17 del corriente, acerca de las condiciones sobre las que ha de fundarse la capitulación de estas Fortalezas, siguiendo entre tanto suspendidas las hostilidades. Oficio de Jose de la Mar a San Martín, Castillo del Real Felipe 18/9. (1,T18,94)

San Martín ordena enviar los buques mercantes a Ancón

Todos los buques mercantes que existen en esta bahía se trasladen a Ancón sin demora, pues SE el Protector sabe que clandestinamente introducen cantidades considerables de efectos y socorren al enemigos de sus necesidades. Oficio de Monteagudo a Cochrane, Lima 18/9. (1,T18,97)

Forster ataca al Ejército Español en el Callao

Habiéndome encargado SE, el vicealmirante del mando de la fragata Independencia y bergantín Galvarino y Araucano, y observado yo ayer que el ejército enemigo pasaba por la playa, dispuse en el acto que el Araucano y los botes de la Independencia, en estado de montar artillería, se acercasen a la costa, para molestar al enemigo en su retirada. Hasta la 1 del día el viento galeno del norte me impidió que me acercase con esta fragata, y aunque entonces anduvo de 4 a 5 millas, no logré a ponerla a tiro de cañon porque ya había abandonado la playa y ocupado las alturas. Oficio de Forster a Monteagudo, a bordo de la Indepencia en Callao 18/9. (1,T18,71)

Las Heras se posiciona cerca de Lima

Son las 9 de la mañana y todo el ejército se halla en marcha al frente de esta casa con dirección a Carabaillo. Los enemigos acamparon anoche en el Pueblo Viejo, extendiendo su línea hasta Copacabana; a las 7 de la mañana (según noticias) aún no se habían movido y yo marcho sobre ellos consecuente con las órdenes suyas. Nuestras partidas de línea como de montoneras ya están sobre ellas y unos paisanos venidos de Caballero me aseguran que Rodríguez, con las suyas, tienen ya tomada la quebrada. A cada momento se me presentan pasados (desertores), y éstos, como los paisanos del contorno, dicen que el ejército tomó ayer más de 600 reses. En este momento acaban de llegar parte que las guerrillas de Guinea y Dávalos han atacado la retaguardia del ejército que se puso en marcha con dirección a la Sierra. Oficio de Las Heras a San Martín, Chacra del Cerro 18/9. (1,T18,95)

A las 9 y media de la noche, al fin decidió el enemigo su movimiento a las 4 y 30 de la tarde, corriéndose sobre su ala izquierda, situándose en la embocadura de la quebrada de Caballero, como a legua y media más alla de la iglesia de Carabaillo; en su consecuencia, para seguridad del Ejército la posición que ocupamos es la mejor; como asímismo para perseguirlos mañana, según pienso. Continua la deserción del ejército y a cada momento se reciben pasados. Oficio de Las Heras a San Martín, Collique 18/9. (1,T18,97)

Para 3 días, inclusive hoy, tiene el Ejército que comer de carneros y vacas; el teniente coronel Reyes ha mandado a ésa en busca de 100 reses aunque pequeñas que dejó y que supliran otros dos días. Oficio de Las Heras a San Martín, Collique 19/9. (1,T18,108)

Por el capitán de artillería enemigo, Manuel Lastra, natural de Chile, que se me acaba de pasar, sé que el movimiento de los enemigos de ayer tarde fue de media legua, pero que esta mañana emprendieron su retirada debiendo verificarla por Caballero, y al ser justamente éste el mismo lado del río que yo ocupo, y que del todo asegura mi marcha en su persecución, que ya voy a emprender y que cuidaré durante ella dar a Usted partes repetidos. Dicho Lastra me asegura el escandaloso estado de desmoralización en que se halla el Ejército Real y que cree que aun algunos jefes se pasarán. Oficio de Las Heras a San Martín, Collique 19/9. (1,T18,109)

El general Las Heras fue encargado de perseguir al enemigo con todo el ejército y guerrillas a excepción del Batallón Nº 4 y 30 caballos que quedaron sobre el Callao con el general en jefe (San Martín) para terminar la capitulación de los Castillos. Las instrucciones que se le pasaron fue la de perseguir al enemigo con tesón, pero sin comprometer una acción general, más con no poca sorpresa del general en jefe (San Martín) se recibió un oficio del general Las Heras al segundo día de su marcha en que decía no haber podido seguir al enemigo en razón de que se hallaba absolutamente sin víveres (este oficio original está en poder del general San Martín), en su consecuencia se le contempló que si absolutamente se encontraba en la imposibilidad de perseguir al enemigo se retirase. Carta de San Martín a Miller. (Bruselas, 1827;1,T20,355)

Capitulación del Callao

El Excelentísimo señor José de San Martín, Protector del Perú, y el señor mariscal de campo de los Ejércitos Nacionales y gobernador de la Fortaleza del Callao, José de la Mar, deseando evitar los males que debía causar a la humanidad la prolongada e inútil resistencia de la Plaza del Callao bajo las armas del Ejército español y convenidos en que se extienda una capitulación que concilie los intereses y deberes recíprocos, nombraron y autorizaron al efecto a saber SE, el excelentísimo señor Protector del Perú a un 1er ayudante de campo, coronel Tomás Guido, suboficial de la Legión de Mérito de Chile y el señor gobernador de la Plaza del Callao a los señores brigadier Manuel de Arredondo y el capitán de navío de la Armada Nacional, José Ignacio Colmenares. Baquijano 19/9. (1,T18,13 Artículos,109-112)

El Gobernador del Callao se rinde

Ratificada por mi a esta hora la capitulación que los comisionados de Usted y el mío plenamente autorizados han concluído esta tarde como impondrán aquellos señores a Usted para la entrega de la Plaza del Callao de un modo que concilia los deberes e intereses comúnes, sólo resta la ratificación de Usted, que espero. Ojalá que este paso nos proporciones a ambos la dicha de acelerar el término de las desgracias de esta parte del mundo y de estrechar sus relaciones con la España sobre principios de fuerza y conveniencia mutua. Oficio de José de la Mar a San Martín, Baquijano 19/9. (1,T18,99)

Con la gratitud correspondiente a las consideraciones que ha merecido VE la benemérita guarnición de estas fortalezas, devuelvo ratificada la capitulación para su entrega, acompañando a VE toda la efusión de mi alma en sus grandiosos sentimientos, y preciosos votos por la felicidad de nuestros semejantes. Oficio de José de La Mar a San Martín, Real Felipe del Callao 19/9. (4,T29,3)

El brigadier Manuel de Arredondo y el capitán de navio José Ignacio Colmenares pasan autorizados por mí a presentar a Usted la capitulación de estas Fortalezas, conforme a las bases generales que Usted se ha servido establecer. Oficio de José de la Mar a San Martín, Callao 19/9. (1,T18,99-108 y 4,T39,3-6: capitulación 12 Artículos; 11,T1,586)

Dávalos en el Sur

Desde Macas hasta la quebrada de Soco, angostura distante 1 legua, han sido perseguidos los tiranos tenzamente por 3 compañias de las de mi mando unidas a un piquete de granaderos. Oficio de Toribio Dávalos (Comandante de Granaderos a Caballo) a Las Heras, Campo en Soco 20/9. (1,T18,72)

Miller en el Norte

La División llegó a este punto sumamente fatigada a las 2 de la mañana. Ha comido y descansado 6 horas, y en este momento vamos a marchar para Puruchuco (88 km al nordeste de Lima), distante 3 leguas. Anoche el enemigo acampó de aquí solamente una legua y media. Oficio de Miller a Las Heras, Cuesta de Puruchuco 20/9. (1,T18,72)

Los marineros intiman a San Martín y Cochrane por sueldos y víveres

Respecto a Usted y a mi, alegan que les prometimos al salir de Valparaíso, bajo nuestras firmas, el premio de un año de sueldos, a más de sus haberes al entrar en Lima, pero que no han recibido ni premio ni sueldo; añaden que Usted retardó el cumplimiento de su promesa por un mes, y que no cumplió con su empeño a la expiración de este período y, últimamente, que Usted habiendo violado estos dos empeños solemnes, se dignó informarles por una gaceta que se les pagaría de derechos, todavía por colectarse, y de propiedades, cuya existencia y valor ignoran, y que no alcanzan a ver fin alguno. Carta de Cochrane a San Martín, a bordo de la Ohiggins en Ancón 20/9. (1,T18,115)

La Escuadra que yo había pensado calmar llevando el dinero a bordo (logrado bajo circunstancias peculiares en Ancón) está, a pesar de mis esfuerzos para tranquilizar sus mentes por esa medida, en un completo estado de insubordinación y lista para estallar en un motín abierto. Oficio de Cochrane a Monteagudo, a bordo del Araucano en Callao 20/9. (1,T18,115)

Proclama de San Martín a los Peruanos

Quince días hace que el Ejército Libertador salió de la Capital resuelto a no permitir que la sombra del pabellón español volviese a oscurecer la ilustre ciudad de Lima. El enemigo bajó de la Sierra orgulloso de los cálculos que había formado en las meditaciones de su ignorancia; creyó que le bastaba venir y ver nuestro campo para vences; encontró el valor armado de la prudencia, reconoció su inferioridad, tembló solo al pensar en la hora del combate y se aprovechó de las tinieblas para ir a buscar el asilo del Callao. Mi ejército luego se puso en marcha, y al cabo de 8 días de incertidumbre, el enemigo ha tenido que huir precipitadamente, convencido de su impotencia para tentar la suerte de las armas o permanecer en la posición que tenía. La deserción que experimenta anuncia que antes de llegar a la Sierra no existirá sino un puñado de hombres aferrados y confundidos con la memoria del poder colosal que tenían un año antes, y que hoy ha desaparecido como la ira de las olas del mar, cuando amanece un día sereno. El Ejército Libertador persigue a los fugitivos, ellos serán disueltos o batidos. De todos modos, la capital del Perú jamás será ya profanada por las plantas de los enemigos de la América, este desempeño es perentorio; el imperio español terminó para siempre. Peruanos. Vuestro destino es irrevocable; consolidadlo, por el constante ejercicio de las virtudes cívicas que habéis mostrado en la época de los conflictos. Ya sois independientes y nadie podrá impedir que seáis felices, si queréis serlo. (1,T18,70)

Proclama de San Martín a los Españoles

Cuando el general Canterac se propuso atacar esta ciudad, mis primeros deberes me obligaron a tomar una medida de precaución que abrazase la seguridad de la Patria y la vuestra propia. No se me ocultaba que había entre vosotros algunos que, sordos a la voz de la razón, trataban de cooperar a los planes del enemigo, y también sabía cuán difícil es contener el justo furor de un pueblo que ve amenazada su existencias y sus más preciosos derechos. La medida fue necesaria, fue saludable; pero pasaron los momentos críticos que la habían dictado y ya está revocada. Volved pues, españoles habitantes de Lima a vuestras pacíficas tareas en el seno de un pueblo que, como vosotros mismos los habéis experimentado, es el modelo de la moderación y de la generosidad; dedicados tranquilamente a ellas bajo la seguridad de que el Gobierno del Perú, tan amante de la justicia, tan fiel a sus promesas, como enérgico y severo cuando la salud de la Patria lo exige, no molestará en el ejercicio de su industria al ciudadano que sepa llenar los deberes que le imponen las leyes del país en donde reside, y merecer la protección del Gobierno bajo el cual vive. (1,T18,76)

El Ejército Español se rinde

A las 10 de la mañana las tropas de la Patria tomaron posesión de las fortalezas del Real Felipe, San Miguel y San Carlos y los pabellones del Estado libre del Perú flamearon en ellas por primera vez. Sucesivamente la guarnición española de la plaza desfiló con los honores concedidos en el artículo 1º de la capitulación y dejaron sus armas y correajes. Muy corto número ha preferido seguir la suerte del Ejército Real, el resto ha abandonado voluntariamente sus antiguas banderas. El inmenso parque de artillería, armamento y útiles navales que he encontrado aumenta en sumo grado el valor de la importante adquisición que ha hecho la Causa de América. Carta de Guido a San Martín, Castillo del Real Felipe del Callao 21/9. (1,T18,71)

Por la Gaceta de 20 de setiembre anterior, se impondrá VS de la capitulación para la entrega de la plaza del Callao que se verificó el 21, según parece del parte del honorable coronel Tomás Guido inserto en la del 22 del mismo. Oficio de Bernardo Monteagudo a Miguel Zañartu, Lima 11/10. (4,T29,16-20: movimientos de San Martín del 2 al 20/9)

San Martín libera al Perú

Al fin nuestros desvelos han sido recompensados con los santos fines de ver asegura la Independencia de la América del Sur. El Perú es libre, pues el único ejército en que podían confiar, es deshecho. Es incalculabre lo que hemos hallado en el Callao; en el solo ramo de artillería, pasan de 800 cañones de todos calibres. En conclusión, ya yo veo el término a mi vida pública y voy a tratar de entregar esta pesada carga a manos seguras y retirarme a un rincón a vivir como hombre. Los enemigos han sido batidos sin más que movimientos y tomar posiciones inexpugnables; al fin, desesperados de que no me sacaban de mi plan, y muertos de hambre, abandonan la plaza del Callao a su destino y emprenden su retirada. Carta de San Martín a Ohiggins, Lima 23/9. (4,A1,310)

Los marineros de la Escuadra Naval al borde del motín

Tengo que informar a Usted de la llegada a esta bahía de la Ohiggins, Valdivia y Lautaro, cuyas tripulaciones habían negado levar anclas en el puerto de Ancón, hasta que el total de sus haberes, premio de 1 año, y gratificaciones por la toma de la Esmeralda fueran satisfechos; una revolución que ha sido vencida por los esfuerzos de los oficiales. La situación en que me hallo es de la clase más llena de dificultades y puedo decir de peligros, hallándome por una parte, a permitir el total desmembramiento de la Escuadra o, por otra, incurrir en el desagrado del Gobierno del Perú, adoptando medidas que pueden ser incompatibles con sus miras. Oficio de Cochrane a Monteagudo, a bordo de la Ohiggins en Callao 23/9. (1,T18,123)

Habiendo observado varios marineros que abandonaron la Ohiggins por falta de sus sueldos, empleados ya en los botes del Estado del Perú; y sabiendo que estos individuos han recibido sueldos en tierra, cuando sus compañeros no han participado de esta indulgencia, he de esperar que sin demora se den las órdenes más positivas que ningún marinero que ha abandonado o abandonase esta Escuadra no recibirá ni destino ni sueldo alguno bajo el gobierno del Perú, en tierra, hasta que los de a bordo estén satisfechos en sus haberes. Oficio de Cochrane a Monteagudo, a bordo de la Ohiggins en Callao 23/9. (1,T18,125)

Tengo que informar a Usted que el total de los extranjeros de la Valdivia, habiendo desobedecido mis órdenes y las de sus oficiales, y estándo amotinados y en el estado más hostil para la seguridad de la Escuadra, fueron puestos en tierra mediante las enérgicas medidas adoptadas por el capitán Cobbett, ayudado de sus oficiales y tropas de Marina. La Ohiggins se hizo a la vela a punta de bayoneta. Oficio de Cochrane a Monteagudo, a bordo de la Ohiggins en Callao 23/9. (1,T18,124)

El dinero que se debe a los oficiales de las presas hechas en el sur ha sido pagado uniformemente como fue solicitado, sin que la superioridad se molestase. Oficio de Cochrane a Monteagudo, a bordo de la Ohiggins 27/9. (1,T18,141)

Cochrane paga sueldos a la Escuadra Naval con el dinero incautado en Ancón

Tengo que informar a Usted que mañana, a las 10 del día, se principiará el pago de las tripulaciones de la Escuadra de Chile, sintiéndome obligado a ello por las circunstancias inferiores en que me hallo, y espero que el comisario, si lo hay, estará pronto. Oficio de Cochrane a Monteagudo, a bordo de la Ohiggins en Callao 23/9. (1,T18,123)

Enterado de las notas suyas de ayer sobre la necesidad que se considera para empezar a pagar la Escuadra con los fondos del Estado que tomó en Ancón. SE el Protector, me ha ordenado prevenga a Usted que para el día de mañana, si es posible, formen los comisarios de cada buque el presupuesto del sueldo de 1 año que les corresponde con la exactitud y formalidad que previenen los reglamentos dados a la Escuadra. Oficio de Monteagudo a Cochrane, Lima 24/9. (1,T18,126)

Cochrane compra víveres a los marineros

Para salvar a la Escuadra que ha estado amotinada por sus haberes devengados; y que en este momento defiende su pan diario, de viveres comprados por mi, de dinero de cuya restitución soy responsable a los demandantes o captores. ¿ Qué motivo hay para que teniendo dinero no se ha abastecido a la Escuadra de pan, y que los buques estén destituídos de toda otra especie de víveres; y que (después que ha estado por dos meses sin una gota de aguardiente ni de vino), me hallé obligado a mandar una fragata a Pisco a comprarlo, de los fondos mencionados, o tomarlo dónde se hallare ? ¿ Es él el modo que la Escuadra ha de ser tratada ? No podrá decir Usted que yo no le he advertido el peligro, y si el honor del Gobierno ha de salvarse ahora, jamás dirá que yo no he hecho cuanto podía para que jamás se arriesgase. Oficio de Cochrane a Monteagudo, a bordo de la Ohiggins 25/9. (1,T18,129)

San Martín al frente del gobierno peruano

Nada asegura tanto la estabilidad de los nuevos Estados de nuestro continente, como la unión y buena armonía reciproca. VE que de continuo se desvela por la prosperidad de los pueblos que dirige, y sabe calcular tan bien todo lo que exige la felicidad de la América, tributa elogios al hecho de haber reasumido yo en mi persona el mando político y militar del Perú. Oficio de San Martín a Ohiggins, Lima 27/9. (4,T29,21. San Martín dicta el Reglamento Provisional del Comercio el 28/9: idem, 111-116)

La Escuadra Naval incauta dineros en Arica

He sido mandado por el Comandante de las Fuerzas Navales de Chile a distribuir el dinero tomado en Arica, según el reglamento prescripto por el Gobierno de Chile, y habiendo entregado a Usted de buena cuenta de la parte que le corresponde, la cantidad de 1.500 pesos, no me hallo autorizado para recibirlo, ni buscar el recibo que ha firmado Usted en la lista general del reparto. Oficio de Luis Benito Benet a Manuel Soler, a bordo de la Ohiggins 28/9. (1,T18,142)

Cochrane debe devolver el resto del dinero incautado

Respecto de haber pagado Usted ya a la Escuadra, se servirá entregar el resto de pastas y de plata amonedada del Estado y de particulares a dos oficiales de la Casa de Moneda y al comisario de guerra José Santos Figueroa (Comisario del Ejército Libertador del Perú) que, al efecto, pasará mañana a bordo de la Ohiggins, pues no teniendo fondos colectados este Gobierno es necesario el resto indicado para la compra de las especies que ha pedido Usted en sus requisiciones de hoy. Oficio de Monteagudo a Cochrane, Lima 28/9. (1,T18,142)

En el momento que recibí la orden suprema que me comunicó el señor intendente del Ejército para pasar a la fragata Ohiggins a recibir los caudales que hubieren sobrado, hecho el pagamento de la Escuadra por el señor almirante, me puse en camino para este puerto, y habiéndome presentado en dicho buque y manifestando a SE mi comisión, me ha contestado que aún no ha concluído de hacer dicho pagamento hasta mañana. Oficio de José Santos Figueroa a Monteagudo, Callao 29/9. (1,T18,143)

Los Escalada felicitan a Ohiggins por la Expedición a Lima

Mi amado y distinguido señor; he recibido la muy apreciable de Usted con fecha 13 de agosto y con ellas las Gacetas que Usted se sirvió enviarme por lo que doy a Usted las gracias más expresivas. Sírvase Usted admitir en recompensa mis felicitaciones y las de toda estas su casa por los brillantes resultados de la expedición a Lima que con tanto acierto supo Usted preparar venciendo dificultades de tanta consideración. Recoja ahora Usted el fruto tan bien merecido de sus desvelos y fatigas por la felicidad general. Póngame Usted a la disposción de las señoras presentándoles las consideraciones más distinguidas. Carta de Remedios de Escalada a Ohiggins. Tengo el honor de felicitar a VE y de llamarme de VE un atento servidor. Posdata de Manuel de Encalada a Ohiggins. Buenos Aires 29/9. (1,T20,253;1,T1,410)

Cochrane y la devolución del dinero, versiones encontradas

A la vuelta de a bordo vino en el mismo bote un oficial de marina nombrado Alejo Ruiz, haciéndome el desentendido, le pregunté si habían pagado ya a la Marina y su tripulación; y me contestó que sí; le volví a preguntar si no faltaba aún pagar a alguna parte de ella y respondió que no, que a todos se había pagado. Le volví a preguntar cuánto había sobrado después de hecho el pago, y repuso que como 400.000 pesos. ¿ Y ese dinero -pregunté- es regular que se entregue al Gobierno para pagar al Ejército ? ¡ Demonios ! -repuso- ese dinero nos lo llevamos para Chile. Pregunté: Cuándo será eso, y contestó: Mañana o pasado, pues aunque no nos han permitido enganchar más marineros que ha sido la causa de la prisión del oficial en tierra, con los que tenemos hay suficiente para llevar el buque a Chile. Oficio de Figueroa a Monteagudo, Callao 29/9. (1,T18,143)

En las comunicaciones yo he insistido en el desembolso de 200.000 dólares. Le he enviado una rendición de dinero con deuda, es cierto, pero en cada nota le dije que era el misterioso tripulante quien exigía el desembolso, y que yo había hecho todo lo que estaba a mi alcance, sin resultado, para evitar su descontento y atenuar sus temores. Usted agregar que fue imposible pagar a estas clamorosas tripulaciones. Es cierto (y el hecho es indiscutible) que ellos ya han cobrado del dinero disponible no usado a vuestra disposción. Obseraré sólo se hizo más allá de las promesas de compartir 20% de los pagos con los soldados y de no satisfacer la mente de los marienoros, conociendo los de la división ya hecha. No fue suficiente con las provisiones traídas por el Moctezuma mientras la Escuadra se movía en absoluta pobreza de medios, sin incurrir en la ofensa de colocar guardianes a bordo y en la eslora. Le agradezco los elogios que me envió por mis servicios desde el 20 de agosto de 1820, los cuales serán siempre dedicados al verdadero honor del país al que me debo. Él no dijo ni declaró que pagaría la deuda a Chile, ni las obligaciones con la Armada, a menos que Chile no vendiera la Escuadra al Perú. Carta de Cochrane a Monteagudo, a bordo de la Ohiggins 29/9. (1,T18,144)

Por otros conductos sabrá Usted la conducta del Lord Cochrane pues es imposible que yo pueda enumerar a Usted los crímenes de este noble pirata. Al saber que los enemigos venían en marcha para atacarme sobre la capital, hice embarcar en los transportes, ciento y pico mil pesos pertenecientes al ejército, cuatrocientos mil y pico en barras, piña y dinero que varios particulares habían depositado en la Casa de Moneda para que se acuñasen, y otros para formar un banco de rescate; igualmente hice poner en la fragata inglesa Luisa para que ésta con la pólvora que conduce pusiese a disposición de Usted la plata de la Catedral de Concepción. De todos estos caudales se ha apoderado este salteador, a pretexto de pagar a la Escuadra, diciendo que no tenían los marineros confianza en el gobierno de Chile por los engaños repetidos que le había hecho a la marinería, y lo mismo de este gobierno se había visto en la necesidad de apoderarse de estos caudales, para satisfacer a las tripulaciones de la Escuadra. A más de la expresadas cantidades se ha apoderado igualmente de 15 barras de piña tomadas en Pisco por la división de Miller, 140 mil pesos sellados tomados por la misma División de Tacna, y depositados en su buque. Lo espantoso de este monstruo de codicia es la propuesta que hizo al gobierno del Callao antes de entregarse de suministrarle los víveres que necesitase por 3 meses, siempre que gratificase con 200 mil pesos, pagando además los víveres por el valor que él impusiese. A más de esto, 4 días antes de la rendición del Callao, ha hecho embarcar en un bergantín fletado por él, 16 españoles que estaban encerrados en él mismo, de los más pudientes de este comercio, llevándoles a cada uno por el pasaporte 10 mil pesos y cobrándoles un tanto por ciento por el embarque de sus caudales. Este monstruo que deja a la División del coronel Miller abandonada, viniéndose con el San Martín, y que sólo pudo embarcarse en 3 pequeños buques guaneros y 1 inglés que afortunadamente entró en Arica y que pudo escapar a las fuerzas superiores enemigas que lo cargaban, no tuvo otro objeto que el de sacrificar aquella División para que no le reclamasen los caudales que han puesto depositados en su poder y no quiere entregar. Lo sensible es que este diablo vaya a cometer mil raterías que comprometan a Usted y a mi; pero si él no obedece la orden de irse a Chile como creo, voy a oficial a los comandantes de guerra neutrales, declarandolo un pirata. Carta de San Martín a Ohiggins, Lima 29/9. (1,T20,249-250)

Habiéndome visto obligado a gastar para el servicio de la Escuadra la parte perteneciente al Estado del dinero tomado en Arica, y siendo los fondos que quedan a bordo muy inadecuados para cubrir las presentes exigencias, espero que el Gobierno pagará el saldo del importe de 181 botijas de aguardiente comprado a 14 pesos la botija, de cuya cuenta se han satisfecho 1.400 pesos. Oficio de Cochrane a Monteagudo, a bordo de la Ohiggins 3/10. (1,T18,159)

Cochrane informa la deserción de marineros

Participo a Usted que varios de los oficiales comisionados de los buques de la Escuadra de mi mando han desertado de sus buques e ido a tierra, así que espero que Usted dará las órdenes necesarias para que no sean admitidos en el servicio del Perú, porque en cualquier parte que yo los encuentre haré que sean aprehendidos y juzgados por desertores, conforme a los artículos de Guerra que rigen en la Escuadra. Oficio de Cochrane a Monteagudo, a bordo de la Ohiggins 2/10. (1,T18,148)

Acabo de participar al señor gobernador del Callao que un guardiamarina, el condestable, el contramaestre, el carpintero, el cabo que estaba de guardia, 9 soldados y 4 marineros, desertaron anoche de la fragata Independencia, robando un bote de dicho buque; y del San Martín desertaron todos los marineros chilenos después de haber saqueado el bote. Oficio de Cochrane a Monteagudo, a bordo de la Ohiggins 3/10. (1,T18,158)

El ministro Monteagudo reprende a Cochrane

Contesto la nota suya del 29 del pasado en que sólo se contrae en excusar sus escandalosos procedimientos de un modo que los hace aún más trascendentales, pues se empeña en justificar un gran acto de piratería en Ancón, en violación de las leyes del país y del sagrado derecho de propiedad. Prescindiré del desorden en que venía la Escuadra y el convoy durante la navegación por la inobservancia de las órdenes de SE. La venta que hizo Usted en Pisco de una cantidad considerable de botijas de aguardiente que recibió para el uso de la Escuadra, con otros accidentes que ocurrieron allí, y me remitiré a una época en que los disgustos y ansiedades que Usted ha causado al Protector del Perú, sin duda, deben refutarse como la única calamidad que ha sufrido en el curso de esta delicada campaña. Pocas pérdidas ha experimentado el Gobierno de Chile más severas ni de más importancia que la del navío San Martín, que naufragó en Chorrillos por culpa suya. Haber abandonado el objeto a que fue destinada la expedición del coronel Miller, y dirigióse Usted por su propia autoridad, sin anuencia ni consulta del general en jefe, a puertos intermedios, donde hizo un desembarco, cuyo resultado, al paso que honra la bravura de aquel jefe y la disciplina de nuestras tropas, muestra la falta de prudencia con que se hizo, sin más objeto que el de apoderarse de algunas propiedades considerables que Usted a distribuido a su arbitrio. A esto se agrega el abandono en que luego dejó Usted al coronel Miller, exponiéndolo a ser sacrificado, el descrédito que ha experimentado nuestra causa por las violaciones inoportunamente cometidas y los compromisos en que ha puesto Usted a los gobiernos de Chile y del Perú con los neutrales que traficaban en aquella costa, a quienes impuso Usted contribuciones sin autoridad, y dio pasavantes quebrantando el bloqueo declarado por el Gobierno de Chile para enriquecer Usted al pequeño número que se aprovechaba de estas depredaciones. En fin, es doloroso tener que decir que la aparición suya en Arica ha dejado las mismas impresiones que en Pisco y demás puertos del Pacífico adonde arribó Usted antes que viniese el Ejército. Al mismo tiempo, el contraste que ella forma con la gloria militar que Usted tiene adquirida, y que, sin duda, hubiera aumentado en el Nuevo Mundo, fuera de todo paralelo, a no haber declinado tan abiertamente de los principios que debió seguir. En tales circunstancias vuelvo a prevenirle, de orden del Protector, salga sin demora para su destino, haciéndole de nuevo responsable si a las infracciones anteriores añade la de diferir el cumplimiento de esta orden. Carta de Monteagudo a Cochrane, Lima 3/10. (1,T18,149)

San Martín ordena a la flota zarpar a Chile y Guayaquil

Estoy muy sorprendido por haber sido encomendado por SE para dar órdenes de las cuales ambos saben perfectamente que son imposibles de obedecer. Pero, señor, que SE no tenga dudas de mis intenciones para dar seguridad a esta Escuadra. Si es posible su disolución, mandaré la mayor cantidad de naves que pueda a Chile, y las otras a Guayaquil para reparar y conseguir algunos tripulantes para hacerlos navegar hacia su destino final. Permítame agregar, en contestación a su pregunta, que desde el día en que SE el general San Martín, se autodeclaró Protector y me informó en vuestra presencia, al hablarle al respecto al pago de la Escuadra, que él nunca reembolsaría a Chile un real, ni pagaría a la Armada a menos que esto fuera vendido por Chile a Perú y entonces como parte del dinero de compra. Yo digo, que desde aquel día desfavorable, yo he considerado a SE el jefe de un distrito de gobierno, cuyos enfoques fueron incompatible con los de Chile, y con el juramento por el cual yo estoy atado a mi situación oficial. Oficio de Cochrane a Monteagudo, a bordo de la Ohiggins en Callao 3/10. (1,T18,162)

Ohiggins le escribe a San Martín ante el reclamo de Cochrane

Me ha sido tan sorprendente el énfasis con que se vierte Lord Cochrane en su descripción animosa sobre la falta de víveres que dice experimenta la Escuadra (remite copia carta de Cochrane de 12/8), a fin de que penetrándome Usted del verdadero sentido de su contenido se sirva estar a la mira del accidente misterioso que presagia el Lord y darme sobre ellos oportunos avisos, bien entendido que he dispuesto no se conteste por ahora a su comunicación. Oficio de Ohiggins a San Martín, Santiago de Chile 4/10. (1,T18,160)

Cochrane informa el pago de sueldos a la Escuadra Naval

Razón de las sumas pagadas a los oficiales y tripulaciones de la Escuadra Libertadora en pesos: Ohiggins 29.825, San Martín 28.425, Valdivia 17.600, Lautaro 5.385, Independencia 19.619, Galvarino 13.861, Araucano 9.804, Pueyrredón 4.166, Potrillo 1.632, Aranzazú 1.301; se han pagado 131.618 pesos y resta pagar a los capitanes de los respectivos buques y a los oficiales de la Ohiggins, además de varios individuos que estaban ausentes cuando fueron pagados sus buques, un año de sueldo. Oficio de Cochrane a Monteagudo, a bordo de la Ohiggins 5/10. (1,T18,161)

Las Fuerzas de mar y tierra en busca de armonía

Acaba de informarme el capitán de puerto que en los días anteriores no ha concurrido comisionado alguno de la Escuadra a recibir los víveres que se suministraban diariamente, y que tiene motivos de presumir que la comunicación entre la Escuadra y la tierra está cerrada por disposición suya; en este caso demasiado sensible para los que están penetrados de que la armonía entre las fuerzas de mar y tierra es el mejor garante de las operaciones contra el enemigo común. Oficio de Guido a Cochrane, Fortaleza de la Independencia (ex Fortaleza del Real Felipe) en Callao 6/10. (1,T18,167)

Cochrane desobedece a San Martín y zarpa al Norte

Hoy 6 de octubre ha dado la vela Cochrane desobedeciendo las órdenes que le he dado, su dirección es para el norte. Veremos las maldades que va a hacer este hombre por estos puntos. Carta de San Martín a Ohiggins, Lima 29/9. (1,T20,252)

Homenaje a San Martín y el Estatuto Provisional del Perú

El Gobierno acaba de dar a los pueblos la garantía de sus futuros destinos. A las nueve de este día prestaron el Exmo señor Protector, y demás autoridades constituídas, el solemne juramento de observar el estatuto provisorio del Estado. Oficio de Juan García del Río a Joaquín de Echeverría, Lima 8/10. (4,T29,22)

Sólo era digno de gobernar el Perú el que rompiendo las duras cadenas del que le oprimían por más tres centurias lo ha restituído a la libertad e independencia que gozaba ante de la invasión de los españoles. Él es deudor de VE de este gran don. La Capital lo ha confesado así llena de gratitud. Ya la fama lo publica por todo los ángulos del orbe y los pueblos se reúnen en coros para cantar himnos inmortales al Genio tutelar de la Amércia meridional. La oficialidad del Batallón que tengo el honor de mandar como la primera del Perú ha explayado un júbilo verdaderamente marcial en el solemne juramento de hoy sobre la obediencia del nuevo Estatuto Provisional y la suprema autoridad de Usted. Ella y hasta el último tambor han protestado hasta el último aliento en defensa de la Patria y de su eminente Protector. Dígnese Usted aceptar este sincero homenaje y mandan se publique, para que en la posteridad sea un eterno monumento de los verdaderos sentimientos que lo animan. Oficio de Agustín Gamarra a San Martín, Lima 8/10. (1,T18,162)

Estatuto Provisional del 8 de Octubre

Dado por el Protector de la Libertad del Perú, para el mejor régimen de los departamentos libres, interín se establece la Constitución permanente del Estado. Al reasumir en mí el mando supremo bajo el título de Protector del Perú, mi pensamiento ha sido dejar puestas las bases sobre qué deben edificar los que sean llamados al sublime destino de hacer felices a los pueblos. Me he encargado de toda la autoridad para responder de ella a la Nación entera, he declarado con franqueza mis designios, para que se juzgue de ellos según los resultados: y de los campos de batalla donde he buscado la gloria de destruir la opresión, unido a mis compañeros de armas, he venido a ponerme al frente de una administración difícil y de vasta responsabilidad. En el fondo de mi conciencia están escritos los motivos de la resolución que adopté el 4 de agosto, y el Estatuto que voy a jurar en este día, los explica y sanciona a un mismo tiempo.

Yo habría podido encarecer la liberalidad de mis principios en el Estatuto Provisorio, haciendo magníficas declaraciones sobre los derechos del pueblo, y aumentando la lista de los funcionarios públicos para dar un aparato de mayor popularidad a las formas actuales. Pero convencido de que la sobreabundancia de máxima laudables, no es la principio el mejor medio para establecerlas, me he limitado a las ideas prácticas que pueden y deben realizarse.

Mientras existan enemigos en el país, y hasta que el pueblo forme las primeras nociones del gobierno de sí mismo, yo administraré el Poder directivo del Estado, cuyas atribuciones, sin ser las mismas, son análogas a las del Poder Legislativo y Ejecutivo. Pero me abstendré de mezclarme jamás en el solemne ejercicio de las funciones judiciarias, porque su independencia es la única y verdadera salvaguardia de la libertad del pueblo; y nada importa que se ostenten máximas exquisitamente filantrópicas cuando el que hace la ley o la ejecuta, es también el que la aplica.

Antes de exigir de los pueblos el juramento de obediencia, yo voy a hacer a la faz de todos el de observar y cumplir el Estatuto que doy por garante de mis intenciones. Los que con la experiencia de lo pasado mediten sobre la situación presente, y estén más en el hábito de analizar el influjo de las medidas administrativas, encontrarán en la sencillez de los principios que he adoptado, la prueba de que yo no ofrezco más de lo que juzgo conveniente cumplir; que mi objeto es hacer el bien y no frustrarlo, y que conociendo en fin la extensión de mi responsabilidad, he procurado nivelar mis deberes por la ley de las circunstancias, para no exponerme a faltar a ellos.

Con tales sentimientos, y fiado en la eficaz cooperación de todos mis conciudadanos, me atrevo a esperar que podré en tiempo devolver el depósito, de que me he encargado, con la conciencia de haberlo mantenido fielmente. Si después de liberar al Perú de sus opresores, puedo dejarlo en la posesión de su destino, yo iré a buscar en la vida privada mi última felicidad, y consagraré el resto de mis días a contemplar la beneficencia del grande Hacedor del universo, y renovar mis votos por la continuación de su propio influjo sobre la suerte de las generaciones venideras.

SECCIÓN PRIMERA

Art.1: La Religión Católica, Apostólica, Romana, es la Religión del Estado: El Gobierno reconoce como uno de sus primeros deberes el mantenerla y conservarla por todos los medios que estén al alcance de la prudencia humana. Cualquiera que ataque en público o privadamente sus dogmas y principios, será castigado con severidad a proporción del escándalo que hubiese dado.

Art.2: Los demás que profesen la Religión Cristiana, y disientan en algunos principios de la Religión del Estado, podrán obtener permiso del Gobierno con consulta de su Consejo de Estado, para usar el derecho que les compete, siempre que su conducta no sea trascendental al orden público.

Art.3: Nadie podrá ser funcionario público si no profesa la Religión del Estado.

SECCIÓN SEGUNDA

Art.1: La suprema potestad directiva de los departamentos libres del Estado del Perú, reside ahora en el Protector; sus facultades emanan del imperio de la necesidad, de la fuerza de la razón y de la exigencia del bien público.

Art.2: El Protector del Perú es el Generalísimo de las fuerzas de mar y tierra, y siendo su principal deber libertar a todos los pueblos que son parte integrante del territorio del Estado, él podrá aumentar o disminuir la fuerza armada como juzgue conveniente.

Art.3: Podrá imponer contribuciones, establecer derechos y exigir empréstitos para subvenir a los gastos públicos con consulta de su Consejo de Estado.

Art.4: Formará reglamentos para el mejor servicio y organización de las fuerzas navales y terrestres, comprendiendo en ellos la milicia del Estado.

Art.5: Arreglará el comercio interior y exterior conforme a los principios liberales de que esencialmente depende la prosperidad del país.

Art.6: Hará las reformas que juzgue necesarias en todos los departamentos de la administración pública, aboliendo los empleos que existían en el régimen antiguo, o creando otros nuevos.

Art.7: Establecerá el cuño provisional del Estado, pero no alterará el peso y ley, que ha tenido hasta el presente la moneda del Perú.

Art.8: Nombrará los enviados y cónsules cerca de las cortes extranjeras y promoverá el reconocimiento de la independencia del Perú, ajustando tratados diplomáticos o comerciales que sean conformes a los intereses del país, todo con consulta de su Consejo de estado.

Art.9: Tendrá el tratamiento de Excelencia, el que no podrá darse a ningún otro individuo o corporación, exceptuando lo que se indicará luego, por exigirlo así la dignidad del gobierno. Todos los que antes tenían el tratamiento de Excelencia, tendrán en adelante el de Usía Ilustrísima.

SECCIÓN TERCERA

Art.1: Los Ministros de Estado son los jefes inmediatos en su respectivo departamento, de todas las autoridades que dependen de cada uno de ellos.

Art.2: Expedirán todas las órdenes y dirigirán las comunicaciones oficiales a nombre del Protector, dentro y fuera del territorio del Estado bajo su responsabilidad y única firma, debiendo quedar rubricado el acuerdo de unas y otras por el Protector, en el libro correspondiente a cada Ministerio.

Art.3: Las órdenes y reglamentos que diese el Protector para la reforma de la administración, irán firmadas por él, y por el ministerio a quien corresponda.

Art.4: En las comunicaciones con los gobiernos extranjeros se dirigirán al ministerio a quien competan, guardando la misma regla respecto del que la remita.

Art.5: Todas comunicaciones oficiales se harán directamente a los Ministros, observando la clasificación de los negocios sobre los que se versan.

Art.6: El tratamiento de los Ministros será el de la Usía Ilustrísima, con el dictado de Ilustrísimo señor.

SECCIÓN CUARTA

Art.1: Habrá un Consejo de Estado compuesto de doce individuos a saber: Los tres Ministros de Estado, el Presidente de la Alta Cámara de Justicia, el General en Jefe del Ejército unido, el jefe del E.M.G. del Perú, el Teniente General Conde de Valle- Oselle, el Dean de esta Santa Iglesia, el Mariscal de campo Marqués de Torre-Tagle, el Conde de la Vega y el Conde de Torre-Velarde. La vacante que queda se llenará en lo sucesivo.

Art.2: sus funciones serán las siguientes: dar su dictamen al Gobierno en los casos de difícil deliberación, examinar los grandes planes de reforma que tuviese en contemplación el Protector, hacer sobre ellos las observaciones que mejor consulten el bien público, y proponer las observaciones que mejor consulten el bien público, y proponer los que sean ventajosos a la prosperidad del país.

Art.3: El Consejo de Estado tendrá sus sesiones en Palacio: a ellas asistirá, cuando convenga, el Protector para resolver, después de consultar y discutir sobre las arduas deliberaciones.

Art.4: El Consejo de Estado nombrará un secretario sin voto, quien extenderá las actas que celebre, y se encargará de redactar los proyectos que forme según el artículo 2o.

Art.5: El Consejo se reunirá siempre que la necesidad lo exija, y la urgencia de los negocios será la regla que siga para aumentar o disminuir sus sesiones.

Art.6: El Consejo de Estado tendrá el tratamiento de Excelencia.

SECCIÓN QUINTA

Art.1: Los Presidentes de los departamentos son los ejecutores inmediatos de las órdenes del Gobierno en cada uno de ellos.

Art.2: Sus atribuciones especiales son: administrar el gobierno económico del departamento, y aumentar la milicia en caso de necesidad hasta donde lo juzgue conveniente, con anuencia del inspector general de cívicos; promover la prosperidad de la hacienda del Estado, celando escrupulosamente la conducta de los empleados en este importante ramo, y proponiendo al Gobierno mejoras o reformas de que él sean susceptible según las circunstancias locales de cada departamento. cuidar que la justicia se administre imparcialmente, y que todos los funcionarios públicos inferiores a ellos, cumplan los deberes de que se hallen encargados, corrigiendo a los infractores, y dando cuenta de ello al Gobierno.

Art.3: Los Presidentes son los jueces de policía en los departamentos, y como tales velarán sobre la observancia de la moral pública, sobre los establecimientos de primeras letras y su progreso, y sobre todo lo que tenga relación con el adelantamiento de los pueblos y sanidad de sus habitantes.

Art.4: Quedan sancionados los artículos 5, 6 y 9 del Reglamento Provisional de Huaura del 12 de febrero de este año, relativos a las facultades de los Presidentes de los departamentos.

SECCIÓN SEXTA

Art.1: Las Municipalidades subsistirán en las mismas formas que hasta aquí, y serán presididas por el Presidente del departamento.

Art.2: Las elecciones de los miembros del cuerpo municipal desde el año venidero, se harán popularmente, conforme al Reglamento que se dará por separado.

Art.3: El tratamiento de la Municipalidad de la capital será el de V.S.I., y el de todas las demás del Estado el de V.E.

SECCIÓN SÉPTIMA

Art.1: El Poder Judiciario se administrará por la Alta Cámara de Justicia, y demás juzgados subalternos que por ahora existen o que en lo sucesivo se establezcan.

Art.2: A la Alta Cámara de Justicia corresponden las mismas atribuciones que antes tenían las denominadas Audiencias, y a más conocerá por ahora de las causas civiles y criminales de los cónsules y enviados extranjeros, y de los funcionarios públicos que delincan en el ejercicio de su autoridad. También se extiende por ahora su jurisdicción a conocer sobre las presas que se hicieren por los buques de guerra del estado, o por los que obtuvieren patentes de corso, conforme a la ley de las naciones. Las funciones del Tribunal de Minería quedan del mismo modo reasumidas en la Alta Cámara.

Art.3: La Alta Cámara nombrará una comisión compuesta de individuos de su propio seno, y de otros jurisconsultos que se distingan por su probidad y luces, para formar inmediatamente un reglamento de administración de Justicia que simplifique la de todos los juzgados inferiores, que tenga por base la igualdad ante la ley de que gozan todos los ciudadanos, la abolición de los derechos que percibían los jueces y que desde ahora quedan terminantemente prohibidos. La misma comisión presentará un reglamento para la sustanciación del juicio de presas.

Art.4: Los miembros de la Alta Cámara permanecerán en sus destinos mientras dure su buena conducta. El tratamiento de la Cámara será el de V.S.I.

SECCIÓN OCTAVA

Art.1: Todo ciudadano tiene igual derecho a conservar y defender su honor, su libertad, su seguridad, su propiedad y su existencia y no podrá ser privado de ninguno de estos derechos, sino por el pronunciamiento de la autoridad competente, dado conforme a las leyes. El que fuese defraudado en ellos injustamente, podrá reclamar ante el Gobierno de esta infracción, y publicar libremente por la imprenta el procedimiento que dé lugar a su queja.

Art.2: La casa de un ciudadano es un sagrado, que nadie podrá allanar sin una orden expresa del Gobierno, dada con conocimiento de causa. Cuando falte aquella condición, la resistencia es un derecho que legítima los actos que emanen de ella. En los demás departamentos, será privativo a los Presidentes el dar los allanamientos indicados; y solo en los casos de traición o subversión del orden, podrá darlo los Gobernadores y Tenientes Gobernadores.

Art.3: Por traición se entiende toda maquinación en favor de los enemigos de la independencia del Perú: el crimen de sedición sólo consiste en reunir fuerza armada en cualquier número que sean para resistir las órdenes del Gobierno, en conmover un pueblo o parte de él con el mismo fin, y en formar asociaciones secretas contra las autoridades legítimas: nadie será juzgado como sedicioso por las opiniones que tenga en materia política, si no ocurre alguna de las circunstancias referidas.

Art.4: Queda sancionada la libertad de imprenta bajo las reglas que se prescribirán por separado.

SECCIÓN NOVENA

Art.1: Son ciudadanos del Perú los que hayan nacido o nacerán en cualquiera de los estados de Américas que hayan jurado la independencia de España.

Art.2: Los demás extranjeros podrán ser naturalizados en el país, pero no obtendrán carta de ciudadanos, sino en los casos que se prescriben en el Reglamento publicado el 4 del presente, que desde luego se sanciona.

SECCIÓN ULTIMA

Art.1: Quedan en su fuerza y vigor todas las leyes que regían en el Gobierno antiguo, siempre que no estén en oposición con la independencia del país, con las formas adoptadas por este Estatuto, y con los decretos o declaraciones que s expidan por el actual Gobierno.

Art.2: El presente Estatuto regirá hasta que se declare la independencia en todo el territorio del Perú, en cuyo caso se convocará inmediatamente un Congreso general que establezca la Constitución permanente y forma de Gobierno que regirá en el Estado.

ARTÍCULOS ADICIONALES

Art.1: Animado el Gobierno de un sentimiento de justicia y equidad, reconoce todas las deudas del Gobierno Español que no hayan sido contraídas para mantener la esclavitud del Perú, y hostilizar a los demás pueblos independientes de América.

Art.2: El presente Estatuto será jurado por el Protector como la base fundamental de sus deberes, y como una garantía que da a los pueblos libres del Perú, de la franqueza de sus miras, y en seguida todas las autoridades constituidas y ciudadanos del Estado jurarán por su parte obedecer al Gobierno y cumplir el estatuto Provisional del Perú. En los demás departamentos los Presidentes jurarán ante las Municipalidades, y ante ellos lo harán todos los empleados y demás ciudadanos. La fórmula de los juramentos que deben prestar, es la que sigue:

JURAMENTO DEL PROTECTOR: Juro a Dios y a la Patria, y empeño mi honor, que cumpliré fielmente el Estatuto Provisional dado por mí para el mejor régimen y dirección de los departamentos libres del Perú, interín se establece la Constitución permanente del Estado, que defenderé su independencia y libertad, y promoveré su felicidad por cuantos medios estén a mi alcance.

JURAMENTO DE LOS MINISTROS DE ESTADO: Juramos cumplir y hacer cumplir el estatuto Provisional del Perú, y desempeñar con todo el celo y rectitud que exige el servicio público, los deberes que nos imponen el Ministerio de que nos hallamos encargados.

JURAMENTO DE LOS FUNCIONARIOS PÚBLICOS Y DEMÁS CIUDADANOS: Juro a dios y a la Patria reconocer y obedecer en todo al Gobierno Protectoral, cumplir y hacer cumplir en la parte que me toca el Estatuto Provisional de los departamentos libres del Perú, defender su independencia y promover con celo su prosperidad.

Dado en el Palacio Protectoral de Lima, a 8 de octubre de 1821. José de San Martín. Juan García del Río. Bernardo Monteagudo. Hipólito Unanue. (4,T29,23-31)

Remedios y su padre muy enfermos

La señora de San Martín, que está en cama bien enferma de su ataque nervioso y cuyo padre se halla sacramentado y sin esperanzas, ha agradecido a V. mucho la visita que le hice a su nombre y el abrazo de felicitación que le di por V., a pesar que está bien fea. Posdata de una carta de Miguel Zañartu a Ohiggins, Buenos Aires 9/10. (4,T6,253)

Arenales es Presidente de Trujillo

No es fácil explicarle el odio que han dejado los satélites que rodeaban al Marqués (Bernardo de Torre Tagle), especialmente el fraile, su capellán, el secretario y Sufriategui. Todos vivían con él en su casa, y queda eterna memoria de ellos después que han derrochado en dádivas, cohechos, secuestros, etc. lo que es indecible. Para allí y para aquí no tengo absolutamente armas, com habrá visto Usted por los estados que remití, estos escuadrones están desarmados y los que va a levantar Santa Cruz tampoco se podrán instruir en el manejo por el mismo defecto, como igualmente la infantería que creo de tanta necesidad el crearla en Piura, y más con el contraste que sufrió Sucre cerca de Quito. Carta de Arenales a San Martín, Trujillo 11/10. (1,T18,164)

Guido es Gobernador del Callao

Esta mañana se han recibido comunicaciones oficiales avisando que el ejército español que mandaba el general Latorre en la República de Colombia ha sido completamente derrotado en Carabobo por las fuerzas del general Bolivar. Oficio de Cochrane a Guido, Fortaleza de la Independencia 11/10. (1,T18,166)

San Martín desconfía de Cochrane

Temiendo que estuve que el lord se quitase la máscara que ya poco le encubría, desde que Usted me hizo algunas indicaciones acerca de su ilimitada codicia y arbitraria conducta; más lo que veo, me ha sorprendido porque nunca había cabido en mi imaginación que hubiese un hombre culto de alguna representación capaz de un arrojo semejante para un hecho tan audaz y criminal. Carta de Arenales a San Martín, Trujillo 12/10. (1,T18,168)

San Martín decreta el bloqueo de puertos del Pacífico

Los puertos y caletas comprendidos entre los paralelos de 15º y 22º 30' de latitud austral, desde el puerto de Caballas o de la Nazca hasta el de Cobija, con inclusión de ambos, se declaran en riguroso estado de bloqueo, luego que lleguen a aquella costa los buques de guerra del Perú destinados a hacerlo efectivo, y que estén proximo a salir. San Martín, Palacio Protectoral en Lima 15/10. (4,T29,236. Son 7 Artículos)

Los chilenos recuperan sus banderas

El sargento mayor Antonio Millán, con ocho oficiales más del ejército, y una escolta de 25 soldados más de línea, condujeron las banderas hasta la ciudad de Rancagua; en cuyo tránsito conmovieron la sensibilidad de todos los habitantes de la campaña, pues unos como testigos de la horrorosa carnicería ejecutada en su capital el citado día (2/10/1814), y otros como interesados por parientes, amigos o conexionados con los que fueron asesinados y saqueados, tuvieron que experimentar sensasiones de indignación contra los asesinos, pero que luego fueron templadas con las aclamaciones que exitaron las mismas insignias de: Viva la Patria, Viva la Libertad, Viva el genio benéfico de Chile, Viva el General del Ejército Libertador. Gaceta Ministerial de Chile, Santiago de Chile 20/10. (4,T15,392)

San Martín enfrentado con el Consulado de Lima

El Consulado ha visto entrar un Ejército victorioso desnudo, descalzo, y no ha hecho la menor insinuación para remediar tamañas necesidades, siendo así que sus cajas abiertas se hallan prontas para poner las cabezas del Ejército Libertador a premio y atacar nuestra santa libertad. El Gobierno sabrá hacerse respetar como corresponde y enseñará al Tribunal del Consulado a cumplir sus promesas religosamente y hacerle mirar con más intereses la causa pública. En esa inteligencia prevengo a Usted que a más que el residuo que quede de los 150.000 pesos de empréstito que precisa e indispensablemente deben estar entregados en las cajas del Estado el día 3 del entrante, se repartirán 50.000 mil pesos de donativo forzoso que serán depositados para el 20 del mismo, sin causa ni pretexto alguno. Borrador de Oficio de San Martín al Consulado, Lima 26/10. (1,T18,173)

Cristóbal Barcala renuncia al cargo de Escribano del Cabildo de Mendoza

Ante mí el Escribano Público de de Gobierno y Hacienda y testigos: que por compra en remate público en esta Ciudad fui el mejor postor de la Escribanía del Oficio de Público y Cabildo, y habiendo sido aprobados por la superioridad de que se le despachó el respectivo título, está ejerciendo el oficio de Escribano Público y Cabildo, y mediante a que se halla imposibilitado de continuar en su ejercicio para que no falte quien lo sirva; otorga que renuncia al mencionado oficio en poder del Estado de esta Ciudad. Son testigos: José Silvestre Videla, José Manuel Videla y Florencio Videla; certificado por el escribano Juan Manuel Pachecho, Mendoza 18/10. (X,EI,P182,97)

San Martín enfermo, Arenales y las buenas noticias desde Lambayeque

Por los papeles públicos supe que estaba enfermo, y me hallo con este gran cuidado. No podrá Usted figurarse el grado a que llega cuánto se detesta la conducta y manejo del gobernador de Lambayeque (al norte, 200 km de Trujillo y 800 km de Lima), Cásos (Juan del Carmen), por toda la gente de aquel pueblo y partido en general; no hay sufrimiento para tantísimos recursos, quejas y clamores por la intrigas, estafas, violencias, arbitrariedades y cuanto se pueda imaginar por todos respectos. Desde que aquellos infelices habitantes conocieron que ya no obraban los resortes, las dádivas y cohechos en la Secretaría y satélites, se rompió el dique que contenía la respiración de todos los oprimidos. Carta de Arenales a San Martín, Trujillo 28/10. (1,T18,174)

Ohiggins envía saludos a Remedios y avisa la caída del Callao y Concepción

Por los impresos que incluyo a V se instruirá del feliz estado de nuestros negocios en el Perú, donde situadas nuestras armas con las ventajas que reúne la ocupación del Callao, el abatimiento del enemigo y nuestro predominio en el mar, es muy fácil calcular la pronta y más ventajosa recuperación. Por los últimos parte del sur y providencias tomadas de allí, espero sea ésta la última campaña de la provincia de Concepción [...]
Incluyo a V esta vez un libramiento de 1.000 $ [...]
Pd 2: Una visita a mi nombre a la digna esposa (Remedios) del Protector del Perú, con mil expresiones. Carta de Ohiggins a Miguel Zañartu, Santiago de Chile 28/10. (4,T6,314)

Sucre desmiente dichos a Arenales

Señor General a Usted le han dado un falso informe cuando le han dicho que el tal Pablo Jeremías está de mi lado. No conozco ni existía tal hombre, hasta que el contenido de la nota suya, del 15 de octubre, me ha hecho dar una orden a Guayaquil para procurarlo y arrestarlo; más me dice el comandante general de la Provincia que, en efecto, estuvo allí unos días y luego se ha ido sin saberse dónde, sin haber estado jamás empleado, y sin que se tuviese ninguna noticia de las notables circunstancias criminales que Usted me indica. Usted se persuadirá que en nuestro servicio no se aceptan oficiales sin indagar su comportamiento y sin que se exhiban sus despachos o documentos porque degradaríamos nuestra dignidad. Los únicos oficiales que yo he recibido al servicio sin una rígida formalidad fueron los venidos de Chile, el año pasado. Oficio de Sucre a Arenales, Babaoya (Colombia) 2/11. (1,T18,177)

San Martín cree que Cochrane se dirige a México

Nada sé del malvado Cochrane pero por las últimas conversaciones que se dejó decir, su objeto era dejar la Ohiggins, Guayaquil y seguir haciendo raterías hasta las costas de México. Este malvado al tiempo de salir de Ancón por despedida se apoderó de cien y pico de botijas de aguardiente de un pobre chileno que las había desembarcado en aquel puerto. Carta de San Martín a Ohiggins, Lima 6/11. (1,T20,254)

San Martín y la reunión de un Congreso en Córdoba

Mi querido amigo; gracias infinitas por las noticias que Usted se sirve darme en su apreciable última por los sucesos de esta campaña, ellos son debidos al Ejército por su bravura, sufrimiento en las privasiones y buen comportamiento, pero quien debe recibirlas como triplicadas es Usted por la gloria que ha adquirido dando la paz a esas provincias por la destrucción del malvado Carrera; ellas deben estarle a Usted reconocidas eternamente a sus trabajos. Quiera la suerte que el ejemplo de lo pasado haga que la conducta, que en lo sucesivo observen, sea dirigido al bien y felicidad de todas ellas.
Deseo con ansia saber el resultado de la reunión del Congreso de Córdoba (reunido por el gobernador Juan Bautista Bustos, con el objetivo de promulgar una Constitución Federal); Dios les insipire acierto para formar un centro de impulsión que dé respetabilidad a esos pueblos y haga su bien; 11 años de desgracias deben enserñarnos la carrera que debemos seguir para que nuestros hijos gocen con honor y en tranqulidad los bienes de nuestra Independencia.
Los papeles públicos habrán impuesto a Usted de la toma de las fortalezas del Callao y demás incidentes de la campaña; el destino del Perú es irrevocable. Adiós mi querido amigo, ofrezca Usted mi respetos a su señor padre. Carta de San Martín a Godoy Cruz, Lima 6/11. (1,T12,178)

San Martín indignado con el Gobierno de Salta por el armisticio del 14 de julio

Sólo espero acabar de hacer unas chaquetas de paño para todo el ejército y ponerlo en marcha, que creo será para el 20 o 25, pues los enemigos tratan de reunir las fuerzas que tienen en el Alto Perú en Huamanga y Juaja, que añadidas a las de Olañeta que se han venido sobre puno y las de Ramírez en la costa, me pueden prolongar la guerra de un modo indefinible. El indigno armisticio de Salta ha hecho que todas las fuerzas caigan sobre mi, y esto no puede permitirse, por lo que suplico a Usted encarecidamente escriba sin perder momentos a los gobiernos de Tucumán, Salta y demás, como igualmente al Congreso que se haya formado en Córdoba, a fin de que reuniéndose hagan una distracción a los enemigos que en el día no tiene fuerzas ningunas en el Alto Perú. Carta de San Martín a Ohiggins, Lima 6/11. (1,T20,255)

San Martín y el Papel Moneda en Perú

Me veo en la precisa pero dura necesidad de levantar 500 mil pesos en papel moneda para acudir a las primeras atenciones del momento pues nada basta, especialmente para nuestra triste marina, y los oficiaes que se han quedado de la Escuadra en ésta. Con decirle a Usted que sólo el ajuste de oficiales que se han quedado aquí pertenecientes a la Escuadra de Chile por el año de sueldo que se les debe, he pagado ayer 22 mil pesos vaya con Dios que con Cruz veremos de tripular nuestros pequeños buques con marineros chilenos de aquí tenemos abundancia por haber quedado desertados de la escuadra. Carta de San Martín a Ohiggins, Lima 6/11. (1,T20,255)

Consumos del Ejército y la Escuadra desde el arribo al Perú

Para que Usted se convenza de lo que ha consumido, baste decir a Usted que los que constan de recibos de comandantes en cuanto a reses en pie suministradas desde que llegamos al país, pasan de las 2.300 sin contar las infinitas que han tomado sin recibo. En el sólo ramo de aguardientes entregadas por Miller y yo, asciende a más de 2.800 botijas, y 900 de vino. Carta de San Martín a Ohiggins, Lima 6/11. (1,T20,256)

El Comisario del Ejército del Perú solicita rebaja de sueldos

El señor Las Heras está percibiendo dos sueldos, uno por general en jefe y otro por coronel del Batallón Nº 11, según manifiestan las listas de revistas, y estoy persuadido que todo jefe que tiene comisión sólo goza la asignación de ésta o el sueldo de su empleo efectivo, a más de que todo oficial general de brigadier para arriba, estando en propiedad, ya no puede tener el mando de ningún cuerpo. Oficio de José de los Santos Figueroa a San Martín, Lima 11/11. (1,T18,185)

Se develan secretos de la reunión entre Serna y San Martín

VE cuando se ha visto con el señor San Martín, con sólo medio cuarto de hora que habló reservadamente con él, llamando enseguida y aparte a Llanos, La Mar, Canterac, Galdeano y a mi (Manuel Abreu), nos dijo que el plan de San Martín era admirable, que lo creía de buena fe, y aun dijo Usted que no quería estar mandado, consintió en él, comprometiéndonos a todos, con la particularidad de haberme dicho Usted, antes de la Junta con San Martín, que pensaba de poner de un acompañado de la Regencia al señor La Mar, ¿ Quién si no ? El diputado español le dijo a Usted había opuéstole al señor San Martín todas las razones y dificultades que estaban en oposición a sus planes, habiéndole dicho a Usted, y con particular secreto, después de la junta, una circunstancia que me dijo haber advertido igualmente, ¿ y quién si no Usted propuso a la Junta Pacificadora (anulado dicho plan) vaciar el Gobierno dándole diversa forma que la legítima y de la que antes había convenido con San Martín ? ¿ Y quién sino Usted y Canterac nos escribieron en un principio que propusiésemos a Lima por ciudad auténticas propuestas que jamás hicimos por considerarla demasiado débil porque no lo habíamos acordado en junta y porque en aquel tiempo los enemigos se daban por muy satisfechos con el Real Felipe y sus dos adyacentes, estas debilidades que alternaban con un egoísmo destemplado, verdaderamente son las que nos degradaban y aún nos separaban del círculo de nuestras atribuciones, pero VE jamás podrá probarme otra cosa que la inclinación a ceder algún partido o provincia, para obtener un bien tan general. Oficio de Manuel Abreu (exComisionado por el Rey para negociar con los Patriotas) a Serna, Lima 12/11. (1,T18,187;volver a 6/2/1821)

Luzuriaga deja su cargo en Huailas

Dígame Usted si le acomoda que le envíe a Luzuriaga de diputado por este Gobierno cerca de Usted conoce su moderación y carácter dulce. Carta de San Martín a Ohiggins, Lima 6/11. (1,T20,256)

Este departamento que Usted se ha servido encargarme, aún no se ha desnudado de la túnica del esclavo. Reducidas todas sus ideas al estrecho círculo del egoísmo, no mide la felicidad pública sino por la intacta coservación de las propiedades individuales. Felizmente mi antecesor, el señor Luzuriaga; ha preparado los elementos que deben componer la teoría de la administración pública. Pero habiendo desaparecido con la reasunción del supremo mando que Usted las circunstancias de una crisis, y habiéndose servido dictar en el Estatuto Provisional la forma política de los departamentos de Perú, creo conveniente regularizar la administración de éste a mi mando, bajo un pie que aproximándose al nuevo que han de tomar todas las instituciones, no desmienta del antiguo al que por espacio de 3 siglos se han familiarizado los habitantes del Perú. Oficio de José Ribadeneira y Tejada (Presidente del Departamento de Huailas;T18,208) a San Martín, Huarás 14/11. (1,T18,189)

Es indispensable, como lo informará a Usted el general Luzuriaga, proveer a los gobiernos de militares de suma probidad, prudencia y absoluto desinterés; por insinuación suya y porque son acreedores se conservarían en Cajatambo a Delgado, en Huamelíes a Risco y en Conchucos a Borja. Oficio de Ribadeneira a San Martín, Huarás 14/11. (1,T18,192)

Los españoles y americanos que dejen Perú pierden sus esclavos

Uno de los deberes del Gobierno es promover la libertad de los que han sufrido hasta hoy inhumanamente la usurpación de este derecho inadmisible, y no siendo justo que los españoles que regresen a la Península (España), porque sus sentimientos son diametralmente opuestos a la felicidad de América, en cuyo caso se hallan también algunos desnaturalizados que han nacido en ella, dejen en la servidumbre a individuos que la han experimentado por tanto tiempo, con la probabilidad de empeorar su condición. Por lo tanto, declaro lo que sigue:

1. Todo los esclavos de ambos sexos que pertenezcan a españoles o americanos, que salgan para la Península desde esta fecha, se declaran libres del dominio de sus amos.

2. Los esclavos que estén en estado de tomar las armas desde la edad de 15 hasta la de 50 años, se presentarán al presidente del departamento, para que les dé un boleto de seguridad y los pase con las formalidades correspondientes al general en jefe, quien los destinará a los cuerpos del Ejército.

3. Las mujeres y varones que no puedan llevar las armas se presentarán también al presidente del departamento, para que les conceda el indicado boleto y les señales al mismo tiempo alguna ocupación útil, según su edad y sexo.

4. Todas las enajenaciones que desde esta fecha inclusive se hicieren, se declaran nulas y de ningún valor.

Firmado: San Martín y Monteagudo, Lima 17/11. (1,T18,260)

Complot para asesinar a San Martín

En días pasados fueron llamados al palacio del Supremo Protector todos los jefes del Ejército (20/10 en la tarde:T18,204)y SE les hizo presente que el señor coronel Heres le había asegurado que algunos jefes del Ejército de los Andes debían hacerle una revolución para quitarlo y asesinarlo. En el momento fueron llamadas estas personas y habiendo sido careadas con el señor coronel resultó que nada había de lo que el señor Heres había dicho. Entonces fue nuevamente reconvenido que los señores jefes, a los que no tuvo qué contestar y sí se le convenció de que su objeto no había sido otro que el de fomentar entre ambos Ejércitos la división. Oficio de Enrique Martínez a Las Heras, Lima 14/11. (1,T18,197)

A fines del mes anterior concurrí a una reunión de los jefes del Ejército convocada por el Protector; con motivo de haberle dado parte el coronel Tomás Heres de que algunos jefes del Ejército trataban de deponerlo y asesinarlo. SE dando el debido valor a esta noticia no quiso tomar la menor providencia a pesar de las instancias de dicho coronel para que relevase con tropa de su batallón la guardia de su casa y Castillo en Santa Catalina que cubría el Nº 11, y adoptó el partido de reunirnos a todos para que Heres expusiera los motivos que había tenido para dar el paso de recriminar la conducta de varios de los jefes y dijo que aquella noticia le había sido dada por el señor deán de esta Catedral, el coronel Letamendi y el capitán Guerra de su Batallón, en vista de los cual todos invitamos para que comparecieren en la reunión estos testigos que eran los únicos con quienes Heres daba fundamento a su parte; el señor deán que aún no conocía a dicho coronel, que era cierto había oído un rumor de que se trataba de una revolución, de lo cual dio parte al señor general en jefe, pero que no había llegado a un oído de los jefes estuviere mezclado en ella; el coronel Latamendi desmintió completamente cuanto había dicho el coronel Heres; y el capitán Guerra dijo que no había dicho otra cosa al coronel sino que en el público se corría que estaba arrestado. Reconvenido por todos nosotros cómo se había atrevido a levantar una tan atroz calumnia, nada tuvo que contestar y sólo aseguró nuevamente que era efectivo que el coronel Latamendi le había dicho se trataba de una revolución. Creo que esta conducta tan sospechosa y criminal es la que ha dado margen a separar del Ejército al coronel de Numancia (Heres). Oficio de Mariano Necochea a Las Heras, Lima 15/11. (1,T18,199)

San Martín muy enfermo se recupera

En este momento acabo de llegar de la chacra de la Magdalena, algo más recuperado de mi última enfermedad; ésta me ha convencido del verdadero estado de mi máquina y imposibilidad que me es seguir con este ramo sin una certeza positiva de mi muerte. Carta de San Martín a Ohiggins, Lima 16/11. (4,A1,311)

San Martín y el rumor sobre su muerte

Pero admírese Usted hasta el grado que ha llegado la impudicia de ciertos hombres. Uno de los que me escriben con más empeño para decidirme a partir, es el mismo que hallándome en Lima, y habiendo corrido en Buenos Aires la noticia de mi fallecimiento, hizo en el célebre papel La Centinela, mi oración fúnebre siguiente: "El general San Martín fue la primera espada de Sud América, el primer tirano y el asesino de sus conciudadanos". Yo le he contestado simplemente que un tirano y asesino no era digno de mandar hombres libres. Carta de San Martín a Ohiggins. (París 22/12/1832;1,T20,290)

Bolivar y una posible visita al Perú

En el correo último no tuve comunicación oficial de Guayaquil, pero según me han informado iba para Usted por el Ministerio de Guerra, y por cartas particulares he leído que habían llegado allí tropas de Colombia y estaban por llegar otras hasta un número muy considerable, atribuyéndose a esto la retirada precipitada del comandante González desde más acá de Loja a reunirse con Aymerich que estaba de Ampato hacia la parte de Guayaquil. Escriben también que venía por esta parte el general La Torre con la división que antes se le había encargado para expedicionar sobre Quito por Juananbú y Sartos, por haber variado con esto su plan; y añaden que también viene al Perú el Libertador Bolivar. Carta e Arenales a San Martín, Trujillos 26/11. (1,T18,210)

María de los Ríos emite un poder en Mendoza

Ante mi el Escribano Público y testigos: María Josefa Morales de los Ríos dijo que da todo su poder amplio y general a su hermano Andrés Morales de los Ríos, Maestrante de Granada, residente en la Isla de León en las Andalucías del Reino de España, para que en su nombre y representando su propia persona, pida, demande, reciba y cobre, cualesquiera cantidades, y otras especies, que en dinero o efectos me deban o deber puedan cualesquiera persona, para que venda cualesquiera de mis fincas que poseo, percibiendo o depositando su producto, empleándolo en otras cosas que me sean más útiles. Son testigos: Juan Gordon, Clemente Miguez y Antonio Saez; certificado por el escribano José Manuel Pacheco, Mendoza 27/11. (X,EI,P182,121)

San Martín enfermo, envía Delegados a Chile y luego a Europa

Llevo una temporada cruel de padecimientos, los cuales me tienen aún en la cama, aunque algo aliviado; sin embargo de esto es demasiado visto que esta máquina necesita de algún reposo, si quiero conservar días más de vida. Al fin (y por si acaso, o bien dejo de existir o dejar este empleo) he resuelto mandar a García del Río (Juan) y Paroissien (Diego) a negociar no sólo el reconocimiento de la independencia de este país, sino dejar puestas las bases del gobierno futuro que debe regir. Estos sujetos marcharán a Inglaterra, y desde allí, según el aspecto que tomen los negocios, procederán a la península; a su paso por esa (Chile) instruirán a Usted verbalmente de mis deseos, si ellos convienen con los de Usted y los intereses de Chile, podían ir dos diputados por ese estado, que unidos con los de este, harían mucho mayor peso en la balanza política, e influirían mucho más en la felicidad futura de ambos Estados. Estoy persuadido de que mis miras serán de la aprobación de Usted, porque creo estará Usted convencido de la imposibilidad de erigir estos países en repúblicas. Al fin yo no deseo otra cosa que el establecimiento del gobierno que se forme sea análogo a las circunstancias del día, evitando por este medio los horrores de la anarquía. ¿ Con cuánto placer no veré en el rincón en que pienso meterme constituída la América bajo una base sólida y estable ?. Carta de San Martín a Ohiggins, Lima 30/11. (1,T20,257)

Cochrane mendiga viveres en Guayaquil

Se me escribe que Cochrane estaba haciendo esfuerzos con el gobierno de Guayaquil para que por cuenta del de Chile se le diese viveres, y se le compusiese la Ohiggins. No sé que partido habrá sacado. Su objeto, según me escriben, es el de reclutar 500 o 600 hombres y marchar sobre Manila. Dios haga que cuanto antes se vaya porque empiezo ya a sentir los efectos de sus agentes en ésta, pues ayer mismo se ha sublevado una goleta que tenía de guardacostas en Chorrillos, con 14 marineros ingleses, y el piloto que la mandaba, los que gritando viva el Lord Cochrane dieron la vela para Guayaquil. Dos marineros que no quisieron seguir se escaparon en el bote, con la noticia. Carta de San Martín a Ohiggins, Lima 30/11. (1,T20,258)

San Martín sin noticias de Alvarez Condarco

Dígame Usted si ha tenido alguna noticia de Alvarez Condarco, pues yo no sé lo que es carta suya, desde antes de salir la expedición (19/8/1820). Remito a Usted el adjunto pliego para mi padre. Hágame el gusto de mandarla por el correo, o como Usted determine. Carta de San Martín a Ohiggins, Lima 30/11. (1,T20,258)

Miller informa los dineros confiscados en el Sur

En Pisco se tomaron 15,5 arrobas de plata labrada que se redujo a barras, 1.123 pesos en dinero, de 200 a 300 botijas de aguardiente, 600 a 800 de vino y una cantidad considerable de azúcar, fuera de una pequeña porción de tabaco y otras especies de poco valor, de que no tengo una noticia exacta por haberse perdido mis papeles en el navío General San Martín. De esto sólo se dio a la tropa la plata sellada como a razón de sueldo pasándole el resto a disposición del señor almirante (Cochrane) a cuyas órdenes estaba. Oficio de Miller a San Martín, Lima 4/12. (1,T18,217)

Blanco Encalada a la Escuadra Naval del Perú

He encargado a Cruz la dirección general de la Marina y la capitanía del Puerto. El solo es capaz de enderezarme este ramo. A Blanco le he dado el mando interino del bloqueo de intermedios, y saldrá con una corbeta y dos bergantines a cruzar y mantener el bloqueo en aquellos puntos. Carta de San Martín a Ohiggins, Lima 30/11. (1,T20,258)

No hay inconveniente en que haga Usted el uso que más le agrade de los oficiales de la escuadra que quieran servir en la de ese Estado, digo lo mismo acerca de Blanco, él será más útil en el servicio de su arma en ese Estado que en el pasivo de que fue removido por las causas que Usted sabe y a que lo arrastraron malas amistades más bien que el empeño de su subversión. Carta de Ohiggins a San Martín, Santiago de Chile 12/12. (1,T18,220)

La Logia Lautaro desaparece en Buenos Aires y San Martín es desprestigiado

Usted debe acordarse que muy bien que repetidas veces conferenciamos y fundadamente recelábamos se verificasen alguna vez los desgraciados acontecimientos sucedidos con tanto dolor nuestro y descrédito de la revolución, aunque esta parte no quepa a nosotros. ¡ Pero no nos quejemos de falta de previsión y sí de resolución ! Todos tenemos la culpa y la Logia la mayor parte. Buenos Aires sigue invariable en su sistema de egoísmo y sin que vea sobre sí el nublado de todas las otras provincias, ella no moverá un hombre ni prestará el menor auxilio para tomar posesión del Perú. Yo he podido distinguir que después que extinguieron nuestra 0-0 que formaron otra bajo el título de Provincial en que están el gobernador, los secretarios, los clérigos Aguero, Sáenz, Ocampo y acaso Anchoris (Ramón de). De seglares no sé de otro que Arroyo y el inútil Terrada. Estos dan, por supuesto, dirección al país, su objeto parece ser amortiguar el espíritu público contra los españoles, porque además de haberles dado voto activo en las elecciones, medida que ha escandalizado mucho, han suspendido también las patentes de corso como si estuviéramos con ellos en una paz octaviana. Las victorias nuestras sobre Lima son para ellos asuntos tan indiferentes que, asómbrese Usted, en esta última noticia que confluyó con el Día de San Martín el gobernador celebró su aniversario al que concurrí y no se echó otro brindis que el mío por los grandes sucesos del día. Los pobres hombres siguen, creo que en odio a San Martín, una ruta tan contraria a la opinión general que por este principio cada día pierden más su partido a pesar que, en materia de rentas y gobierno, como verá Usted en sus papeles públicos, han hecho cosas buenas. Pero ellos no pueden sufrir que San Martín se cubra de tanta gloria después que les desobedeció en no venirse a mezclar con la montonera como querían, acaso, para fusilarlo. Por esta misma razón, a mi jucio no quieren Congreso porque suponen nombren a San Martín de Director, y aunque no temen que éste venga, temen que el nombramiento y la propiedad del Directorio, le dé sobre el sustituto y sobre el Estado una gran influencia. Si las provincias forman Congreso sin la cooperación de Buenos Aires éstos tiemblan porque aquí mismo la causa del Congreso tiene inmensos sectarios. Ahora se creen seguros con la amistad de Santa Fe, pero ya se dice que López bambolea y que está ganado por las otras provincias porque dejó su diputado en el Congreso. Si así fuese Buenos Aires, mal que le pese, hará lo mismo. Tucumán y Salta se despedazan y mudan gobiernos lo mismo que camisas, no oyen consejos, ni aun contestan. Ignoro quienes hayan mandado en el mes pasado, ni a los que les toca en el presente; no obstante me he dirigido a los que sean con los justos reclamos suyos reivindicándolos fuertemente y aun citándolos ante el servero tribunal de la Patria si desatienden la voz que los llama a unirse para concluir con el resto último de tiranos que aún se abrigan en el corazón del Perú. Aguardo la reunión del Congreso para o bien mandar un diputado sobre el particular o dirigir directamente mis comunicaciones. Se trabaja en particular para los demás pueblos al mismo objeto. Antes lo he hecho con el Gobierno de Buenos Aires y sólo veo contestaciones lisonjeras que iban a Usted en copia para el conducto de mi ministro de Estado Echeverría. No hay incoveniente alguno, tendré mucho gusto que venga Luzuriaga de diputado, como Usted me indica. Carta de Ohiggins a San Martín, Santiago de Chile 12/12. (1,T18,219)

Ohiggins recupera la artillería perdida en Cancha Rayada

Viene también la artillería que nos tomaron los enemigos en Cancha Rayada, pues ya no había una sola pieza de montaña que poder mandarle a Letelier, por haberse concluído todas en las campañas del sur y de la otra banda. Mi señora madre y Rosita desean el restablecimiento de su salud y felicidad. Carta de Ohiggins a San Martín, Santiago de Chile 12/12. (1,T18,222)

San Martín funda la Orden del Sol, pero deja fuera a Cochrane

El domingo 16 del corriente se reunirán a las 9 y media de la mañana, en el Palacio del Gobierno, todos los fundadores, beneméritos y asociados a la Orden del Sol; a las 10 se distribuirán por el presidente de la Alta Cámara las decoraciones de la Orden del Sol a los agraciados en las 3 clases. Todos los jefes del Ejército, asistirán a este acto, aunque se hallen acantonados fuera de esta Capital, hasta la distancia de 2 leguas. Siendo el objeto de esta función de solemnizar la Orden del Sol, con la que han sido agraciados individuos que pertenecen a diferentes corporaciones del Estado. Concluído el juramento cívico de cada clase habrá un breve intermedio que se toquen las marchas nacionales del Perú, Chile y Buenos Aires. Firma: San Martín y Monteagudo, Lima 12/12. (1,T18,267-276;Lista de Cargos)

También tiene V la bondad de indicarme la desagradable diferencia de San Martín y Cochrane. Compadezco los compromisos de V al resolver una cuestión entre dos personajes dignos de tantas consideraciones. Yo había extrañado antes de ahora que el Protector no diese lugar al benemérito Almirante en su nueva Orden del Sol, habiendo contribuido tan eficazmente al logro de la empresa; y si la desaveniencia me descubre el motivo, ella no podrá justificar tan injusta exclusión. Este sólo paso prueba mucho en favor de Cochrane, y manifiesta aceptaciones poco dignas del Gobierno Protectoral. Dije a V, con los rumores solos de aquel escandaloso pasaje, que la opinión pública había sentenciado en favor del Vicealmirante. Hoy está más pronunciada, y según traduzco por la de V y del amigo Echevarría, es forzoso confesar que nuestro Protector sólo protege lo presente, sin cuidar de lo que queda a la espalda. Política diabólica, cuyos efectos venenosos se verá obligado a precisar a cada paso. Carta de Miguel Zañartu a Ohiggins, Buenos Aires 28/12. (4,T6,266)

El gran Consejo de la Orden del Sol del Perú se ha servido nombrar a SE el Supremo Director (Ohiggins), fundador de dicha Orden. También ha nombrado por beneméritos de ella a los señores Ministros: Joaquín de Echeverría y José Antonio Rodriguez, y al brigadier José Ignacio Zenteno. (4,T30,84)

San Martín no acepta las condiciones de paz de Serna

Muchas pruebas tengo dadas de mis deseos por la paz y término de los males que afligen a la humanidad en esta porción de la Tierra, pero me ha sido harto sensible que todos los sacrificios que nos propusimos hacer para conseguirlo no se hubiesen realizado. El no hallarme facultado por el señor Virrey para la negociación que Usted me insinúa en su favorecida del 11 me priva de la satisfacción de entablar un armisticio conciliatorio. Oficio de Canterac a San Martín, Concepción (300 km al este de Lima) 20/12. (1,T18,229)

Usted (San Martín) se obstinó en exigir condiciones que no estaban en la esfera de nuestras facultades, y por consiguiente, ha sido preciso recurrir, como Usted mismo dice, a que las armas decidan la contienda. Oficio de Canterac a San Martín, Concepción 20/12. (1,T18,230)

Los caminos de Buenos Aires a Mendoza interceptados

José María Reyna vecino y del Comercio de esta ciudad de Mendoza, otorgo todo mi poder cumplido a Manuel Martínez del Comercio de Córdoba, para que por mi y a mi nombre proceda a la recaudación de 6 bultos, inclusas 2 barricas y 2 barriles de pólvora y munición, que se me remitieron de Buenos Aires para Mendoza por Miguel del Mármol Ibarrola, bajo la guía número 589 y en tropa de Santiago Puebla la que arribó a la Ciudad de Córdoba, y se depositaron en su Aduana dichos efectos, por estar interceptado el caminos para ésta. Son testigos: Domingo Avendaño, Vicente Lobos y José Antonio Maure; certificado por el escribano José Manuel Pacheco, Mendoza 23/12. (X,EI,P182,131)

Luzuriaga es condecorado por San Martín

Por cuanto el Coronel Mayor de Infantería Don Toribio de Luzuriaga ha pertenecido al Ejército Libertador del Perú, y tenido parte en sus difíciles empresas y gloriosos sucesos: por tanto, he venido en declararle acreedor a la Medalla y demás Gracias que concede a los de su clase el Decreto de quince de agosto de mil ochocientos veinte y uno; y le autorizo por el presente para que pueda usarla y recordar con orgullo a cuantos participen los beneficios de la Independencia del Perú, que él tuvo la Gloria de ser del Ejército Libertador (...). Lima, 27/12. (Y,Sala 7,Legajo 17)

Las Heras, Martinez y Necochea regresan a Chile

Aprovecho la ocasión de hacerse hoy a la vela el distinguido y recomendabilísimo general en jefe del Ejército del Perú, Juan Gregorio de Las Heras para el Estado de Chile, y remito con él los documentos referidos. Carta de José de Boqui a Florencio Terrada, Lima 31/12. (1,T18,287)

Espero los resultados de una negociación secreta que he entablado con Canterac; si ella se verifica, la guerra del Perú es concluida; algún dinero costará, pero todo se puede dar por bien empleado por dar la paz a estos pueblos. Las Heras, Enrique Martínez y Necochea me han pedido su separación y marchan creo para ésa. No me acusa la conciencia haberles faltado en lo más mínimo, a menos que se quejen de haber hecho partícipes a todos los Jefes del Ejército y Marina en el reparto de 500.000 pesos, y según he sabido no les ha gustado que los no tan rancios veteranos, como ellos se creen, fuesen igualados a Sanchez, Miller, Aldunate, Borgoño, Foster, Guise, Dehesa y otros jefes, cuya comportación ha sido la más satisfactoria. En fin, estos antiguos jefes se van disgustados (¡Paciencia!). Veo lo que Usted me dice de Buenos Aires. El partido actual no me perdonará jamás mi negativa a sacrificar la división que estaba en Mendoza a sus miras particulares; pero V ni yo, mi buen amigo, nos esperemos recompensas de nuestras fatigas y desvelos, y sí sólo enemigos; cuando no existamos, nos harán justicia. Carta de San Martín a Ohiggins 31/12. (4,A1,311)

Bibliografía

1) Instituto Nacional Sanmartiniano. Documentos para la Historia del Libertador General San Martín, Tomos (T) 1 al 20.
2) Espejo, Gerónimo. El Paso de los Andes.
3) Instituto Nacional Belgraniano. Documentos para la Historia del General Don Manuel Belgrano, Tomo (T) 1 al 7.
4) Instituto Ohigginiano. Archivo de Don Bernardo de Ohiggins, Tomos (T) 1 al 37.
5) Documentos para la Historia de la Bandera Argentina (2001), Guillermo Palomo y Valentín Espinosa.
6) Actas Capitulares de Mendoza, Tomo (T) 1 al 4.
7) El Redactor de la Asamblea 1813-1815.
8) Espinosa, José María. Memorias de Gervasio Antonio de Posadas.
9) Archivo Histórico de Tucumán.
10) Revista de la Biblioteca Nacional de Buenos Aires, Tomos (T) 1 al 25.
11) Registro Oficial y Nacional de la República Argentina.
12) Senado de la Nación Argentina, Biblioteca de Mayo, Tomos (T) 1 al 19.
13) Diario Los Andes.
X) Archivo General de la Provincia de Mendoza: Época Colonial e Independiente (EC,EI), Carpetas y Documentos (C,D), Protocolos (P).
Y) Archivo General de la Nación Argentina: Documentos Escritos.
Z) Archivo Nacional de Chile.