Mahuelturata Huantata Huanacache Uco Jaurua Diamante MalalhueHuar-pe: significa pariente de huar. Se distribuían en el territorio entre los ríos Mendoza, Diamante, Desaguadero y la cordillera de Los Andes. Se encontraban junto a los cursos de agua, principalmente en las lagunas de Huanacache y del Rosario, y en los valles de Cuyo-Huantata, junto al río Mendoza, y de Uco-Jaurúa, junto al Tunuyán.

Estaban organizados en familias que conformaban grupos reunidos alrededor de un cacique, propietario de un territorio. Eran agricultores y en sus chacras cultivaban quinoa, poroto, zapallo, con riego por acequias que surcaban las tierras de cada cacique, tomando sus nombres. Sus caseríos de quincha (ramas y paja recubiertos con barro) eran reducidos.

Como complemento de la agricultura eran cazadores y pescadores. Recolectaban algarroba para hacer patay (pan) y aloja (bebida), así como otros frutos y semillas (chañar), raíces (totora) a incluso insectos (langostas), que secaban y molían para amasar.

Los Huarpes Laguneros eran hábiles pescadores y secaban truchas. Sus canoas de totora y su cestería, denotan influencias de la cultura andina del Titicaca.

Se dividieron en tres grandes grupos, según la ubicación geográfica:

- Norte (San Juan): Huarpes Allentiac.
- Sur (Mendoza): Huarpes Milcayac.
- Este (San Luis): Huarpes Puntanos.

A nivel social practicaban 2 aspectos muy curiosos; el levirato, al morirse el marido, la viuda y los hijos pasan a depender del hermano menor del fallecido y; el sororato, al casarse el varón adquiere el derecho de casarse con las demás hermanas menores de la novia.

Huarpes y Colonizadores (Documentos históricos)

Con los descubrimientos del valle de Cuyo (Gran Mendoza) por Francisco de Villagra y su expedición a fines de 1550 y principios de 1551; los Huarpes son sometidos a partir de un enfrentamiento encabezado por Huchiquimi en la zona de Taitanquen (El Bermejo, Guaymallén), en el que es abatido (5). Luego de ello, Villagra se hace del control de la región y son los Huarpes los que le informan que hay más gentes (tribus, Pueblos Originarios) en el camino que va a la Mar del Norte (Patagonia, Argentina). Es así como, los aborígenes de la región pasan a formar parte del engranaje colonial, y en consecuencia sus actividades fueron documentadas, a partir de los repartimientos de encomiendas a los que fueron sometidos.

La expedición de Villagra levanta un campamento, y según relatos del maestre de campo Alonso de Reinoso, por una gran borrachera de todos sus integrantes, sus tiendas de campañas se incendian; perdiendo una gran cantidad de caballos, indumentaria y provisiones; siendo socorridos por aborígenes con pasta de quinoa y panes de algarroba, para su sustento. Luego, Diego de Maldonado junto a 8 hombres, cruzan por el valle del Aconcagua y llegan a Chile, para anoticiar al gobernador Pedro de Valdivia, de los descubrimientos realizados en la región y a la espera de instrucciones para volver a Uspallata, donde había quedado Villagra y el grueso de la expedición. Luego de la reunión entre Valdivia y Maldonado, el Gobernador, le ordena que cruce la cordillera y le avise a Villagra que debe regresar a Chile. Maldonado llega hasta el valle del Aconcagua y viendo que la cordillera estaba cerrada por las nevadas, se queda en la zona y envia a algunos aborígenes de la región a que lleven a cabo el cruce del macizo andino a riesgo de sus vidas.

El gobernador Valdivia hace merced de una encomienda a Juan de Cuevas en noviembre de 1552 en el valle de Mahuelturata (Uspallata), conformada por los caciques y principales Ilchuna, Nicha, Cachino, Equilima y Coinincha, con todos sus indios (Pueblos Originarios) y sujetos, utilizados para la explotación de minas y canteras, viñedos y obras públicas; bajo las órdenes de su majestad el Rey.

A partir de la muerte del gobernador Valdivia en 1553 a manos del toki Lautaro, en la batalla de Tucapel (Chile); la guerra de Arauco se transforma en una cuestión de estado y por consiguiente, la suerte del pueblo Mapuche (Chile) y los Naturales (aborígenes) de otras regiones comienzan a tener incidencia en la toma de decisiones de las autoridades colonialistas.

A fines de 1560, algunos Huarpes viajan a Santiago de Chile (Chile) a comprar ovejas de Castilla y pagan con metales preciosos las mercancías adquiridas; luego, piden entrevistarse con García Hurtado de Mendoza y le solicitan que envie españoles a poblar sus tierras, siendo testigos de la entrevista Esteban Rojas y García de León. Es por ello que, García Hurtado se decide y organiza una expedición al mando de Pedro del Castillo. (6)

En enero de 1561, parten desde Chile los expedicionarios y al llegar al valle del Aconcagua, Castillo envia a unos yanaconas (servidumbre aborígen) de la encomienda de Cuevas para que crucen la cordillera y anoticien a los aborígenes de Uspallata que va en camino una expedición con españoles. Una vez llegado, Castillo es recibido por el cacique Conecho y su hijo Chacha, quien le ofrece leña, agua y yerba para alimentar su ganado. Levantado el campamento, Castillo convence a algunos aborígenes de Uspallata para que se incorporen a la expedición y los encomienda a los capitanes Lope de la Peña y Pedro Moyano Cornejo. A mediados de febrero, Castillo y los expedicionarios, arriban al valle de Huantata y son recibidos por el cacique Esteve, gran señor del Valle, y los caciques Tabalque, Allaime, Goaimalle, Anato y otros. Luego, Castillo a ruego del cacique Goaimalle se instala en la zona de Peipolota (Dorrego y Las Cañas, Guaymallén), fundando la Ciudad de Mendoza Nuevo Valle de Rioja el 2/3, repartiendo solares y chacras entre los integrantes de la expedición; entre los cuales, se encontraban los caciques venidos con Castillo desde Chile: Pedro Guelenguele, Martin y Felipe Inga (Inca). Luego del acto fundacional, las autoridades del Cabildo; los alcaldes, Alonso Campofrío de Caravajal y Juan de Villegas; y los regidores, Pedro de Zárate, Gabriel de Cepeda y Niño, Lope de la Peña, Pedro Moyano Cornejo, Hernando Ruiz de Arce y Francisco de Urbina, junto al capitán Castillo, deciden trasladar la ciudad a otro lugar. A partir de la intermediación de Estepe, la madre de Goaimalle, le vende una oveja de la tierra (guanaco o llama u oveja de castilla) al cacique Coyo, a cambio de una parte de sus tierras de Taitanquen (Belgrano y El Bermejo, Guaymallén). Las tierras eran de propiedad del cacique Coyo (éjido para huerta y viña) una parte, y la otra parte del cacique Esteve (éjido público o casco urbano); éste último, le hace entrega de tierras abastecidas por acequias (Goaimalle en calle Allayme y Carrizales en calle Avellaneda) a partir del Río de la Ciudad (Canal Zanjón Cacique Guaymallén).
Castillo y Pedro de Rivas, salen a recorrer el valle y al llegar a las lagunas de Huanacache son recibidos por el cacique Callaupacatapa, quien les dice que su tribu pertenece a la encomienda de Juan de Cuevas.
El 20/5, el capitán Castillo emite una merced en favor de Gaspar Ruiz de Rojas y por la cual le hace entrega de la encomienda del cacique Caracara o su sucesor, los principales Alguipri, Achuay y Arún y sus súbditos, de la tierra de Octoyán; el cacique Calalapis y su tierra en Ocoya; el cacique Chorunda y su tierra en Semis; el cacique Colopus y su tierra en Lanqueta; el cacique Toxo y su tierra en Mié, y el cacique Choroanta y su tierra en Semeta.
Para el 9/10, Castillo después de mensurar las tierras, realiza la distribución de chacras para viña y huerta contiguas al casco urbano. A los pocos días, Pedro de Meza llega a la ciudad de Mendoza y destituye a Castillo. (6)

A principios de febrero de 1562, llega otra expedición al mando de Juan Jufré y, para el 28/3, por las provisiones recibidas del gobernador Francisco de Villagra, funda la Ciudad de la Resurrección Provincia de los Guarpes. Entre tanto el 1/5, el escribano Tomás Nuñez por orden de Juan Jufré, hace merced a Diego de Velasco de la encomienda del cacique Anato y su tierra de Amaycate (Pedro Molina, Guaymallén) que está ubicado en el valle de Huantata o Cuyo; el cacique Sumac y sus tierras de Tuoboto y Tunián; el cacique Coyocanta y su tierra de Olvo; y el cacique Relanta con todos sus indios y sujetos; dando la posesión de la misma el 30/6 el teniente interino Diego Jufré. A partir de aquí, las expediciones de Castillo y Jufré, comienzan a disputarse los territorios en cuestión, produciendose un éxodo masivo de conquistadores a Chile y manejando sus tierras y encomiendas a distancia.

Por carta emitida en el Cabildo de Santiago de Chile el 14/4/1563, por orden del teniente de la ciudad Juan Jufré y del gobernador Francisco de Villagra; se intima a los vecinos encomenderos de Cuyo: Diego Ronquillo de Peñaloza, Cristóbal de Buiza, Alonso de Videla, Francisco de la Peña, Juan Martín Gil, Nicolás de Aguirre, Diego de Velasco, Martín de Santander, Antonio Cardozo, Juan Fernandez Herrador, Hernado Arias de Sayavedra, García Hernández y Francisco Rubio, que regresen a Cuyo a sustentar sus encomiendas y yanaconas, porque los mismos se podrían revelar; para el que no cumpla con la orden perderá su encomienda y se le dará a otro vecino (1,15). En la ciudad de Concepción (Chile) el 19/8, el gobernador Pedro de Villagra le hace merced a Diego de Velazco, llegado en la expedición de Juan Jufré en 1562, de una encomienda compuesta por 500 indios: el cacique Anato que están el valle de Cuyo y señor del pueblo de Amaycate, y el cacique Sumaoz y su pueblo de Tuobolo, Otimini y el cacique Layo con Caitillanta con el pueblo Olvo, y el cacique Choronta con su tierra en Caniguez, y el cacique Relanta con su tierra que está junto al pueblo Zanibra, y en las lagunas (Huanacache) el cacique Namio con su tierra de Gozmita; y, en el valle de Uco el cacique Aguarinez; el cual, había sido encomendado por Juan Jufré y Francisco de Villagra a Francisco de Peñaloza. (1,1)

Para el 12/9/1564, en sesión de Cabildo de Mendoza, presidida por el alcalde Francisco de Urbina y rubricada por el escribano Gaspar Ruiz, se da la posesión del cacique Coyocanta y toda su tribu a Diego de Velazco, siendo testigos del acto: Pedro Moyano Cornejo, Juan de Rivas y Juan Gomez de Yebenes. Dos meses después, el 29/11, el gobernador Pedro de Villagra hace merced a Diego de Velazco de la encomienda que había sido del difunto Alonso de Torres y que tenía al cacique Allalme o Allaime (Algarrobero) de la provincia o tierra de Icanio como cabeza de tribu. También, le da la posesión de los caciques Mozán y su heredero Guanagual de la zona de Palaya, Puelches o Algarroberos; y, el cacique y principal Cuco del valle de Uco; el cacique Quellalque, en las lagunas de Guanacache; y los caciques y principales: Jachas, Olvaina, Chavica, Lobaneta, Chachatatani, Ancina o Encina, Levin y su heredero Cleocuro y Echeuta de la zona de Paraguata; Lalén su tierra Cavananeto o Menta, su tierra Mojoibe; Oyoba y su tierra Jaracolene; Elima u Olima y su tierra Colalta; Cochalevi y su tierra Binchi; y, el cacique Alale en donde quiera que estuviera. El acta, es rubricada por el escribano del Cabildo de Santiago de Chile, Diego Ruiz de Oliver y, en ella, se nombra a la ciudad como: Resurrección ó Mendoza. El 5/12, Diego de Velazco y su fiador Diego Jufré, se presentan ante el escribano Diego Ruiz de Oliver en Santiago de Chile, para que los autorice a tomar posesión de la encomienda dada en Cuyo por el gobernador Pedro de Villagra y pagan 50 $ de un total de 450 $. Una semana después, el vecino Antón de Niza entrega un poder a Martín Pérez de Mercotegui y Francisco de Urbina, para que en su nombre tomen posesión de una encomienda en Cuyo, que le había otorgado el gobernador Villagra por merced en Santiago de Chile. El 11/12 el gobernador Pedro de Villagra notifica a Diego de Velasco, Juan de Coria Bohorques, Diego Rodriguez Fragoso, Alonso de Cepeda y Hernando Diaz, que el miércoles primero que viene, contarán con 13 días para salir de Santiago y viajar a Cuyo a sustentar sus vecindades, bajo pena de perder los yanaconas que tienen en encomienda. (6,T14,425)

El 9/1/1565 el alférez Alonso Campofrío de Caravajal otorga un poder en Santiago de Chile a Antonio Chacón y Gonzalo de los Ríos, para que se hagan cargo de su encomienda en Cuyo. En Santiago de Chile a 10/11, Gaspar de Lemos cede Juan Fernández, en atención a buenas obras que le ha hecho el cacique Manio, heredero del cacique Capatay, de la tierra Tibulebuli, junto a las Lagunas (Lavalle), que le fue encomendado por Pedro del Castillo. (7,T1,7)

En la ciudad de Mendoza, a 29/4/1566, ante Sancho de Medrano, Alcalde, y Juan de Herrera, Escribano, rinde Gaspar de Rojas información de testigos para acreditar que, cuando el general Juan Jufré, por orden del gobernador Francisco de Villagra, fue a fundar la ciudad de San Juan de la Frontera, le quitó, como a otros pobladores de Mendoza, los indios que le diera Pedro del Castillo, llevándole consigo y haciéndole Veedor y Factor de la nueva Ciudad, y dándole un reparto de indios. Acredita también que uso en muy buena forma su cargo, pero que los indios le resultaron escasos, motivo por el cual se encuentra endeudado. Declaran los siguientes testigos: Juan de Villegas, fundador de Mendoza; Alvaro Cortés, de 30 años que fue a Cuyo con Juan Jufré; Gabriel de Cepeda, de 35 años, fundador de Mendoza; Juan de Herrera, Escribano de 32 años; Hernando de Salinas, de 37 años, que depone de oidas y Diego Rodriguez Fregoso, de 40 años, estante en la ciudad, quien dijo que los indios de Rojas fueron dados por Jufré a Francisco Rubio. (7,T1,12)

En 1567 las autoridades del Cabildo de Mendoza; el alcalde Lope de la Peña y los regidores Sancho de Medrano, Pedro Moyano Cornejo, Pedro de Ribas y Gaspar Ruiz de Rojas; se reunen y acuerdan que el alcalde Antonio Chacón salga de la ciudad para castigar a algunos aborígenes que se han revelado contra la autoridad. (1,73)

El 28/8/1574 las autoridades del Cabildo de Mendoza, ordenan realizar una junta de caciques comarcanos para determinar cuáles son las tierras de los aborígenes y cuáles las que estaban vacías para poder repartirlas. Acordada la junta de caciques, se llevó a cabo el 1/9, con la presencia de Alonso de Reinoso como encomendero de los caciques Goaimalle, Allallao y Selitian; y, en resguardo de sus derechos los caciques Esteve, Aoimalle, Añato, Ayallo, Acmallén, el principal Uliatán y otros. El acto se rubricado por el escribano Antonio Bello, y se determina que las tierras vacías que pueden repartirse son las que se encuentran entre la acequia de Goaimalle (+ o - calle Allayme, Guaymallén) y la acequia de los Carrizales (+ o - calle Avellaneda, Guaymallén). (7,T1,15)

Sus majestades dijeron el 12/11/1574, que las tierras vacías que al presente están en esta dicha ciudad, tierras que solían ser de Guaymaye (cacique), se le remitan al alcalde Francisco Saenz de Mena y al regidor Diego de Loayza. (1,97)

Comparece presente Juan indio yanacona del Cuzco, zapatero; para solicitar al Ayuntamiento, atento a que hace muchos años que está en la ciudad con su esposa, de un solar lindero con otro que se le dio al yanacona Pedro, de la encomienda de Juan de Villegas, calle en medio. La autoridades; los alcaldes, Gabriel de Cepeda y Pedro Moyano Cornejo; y los regidores, Hernando de Robles, Juan Gomez de Don Benito, Gaspar Ruiz, Bartolomé de Bustos, Cristóbal Varela y Alonso de Reinoso; le hacen merced de las tierras solicitada, con la condición que las cerque y las pueble en el curso del año. En noviembre de 1574, el gobernador Rodrigo de Quiroga, prohibe salir a hacer nuevos descubrimientos a capitanes, corregidores y alcaldes, la real provisión es pregonada en la Plaza Mayor (plaza Pedro del Castillo) por voz del indio Alonso.

Para el 11/3/1576 el gobernador Rodrigo de Quiroga otorga en merced al alcalde Alonso de Reinoso, unas tierras ubicadas a 4 leguas de la ciudad en el asiento de Anantata, y que antes eran sembrada por el Inga (Huarpe) y ahora están vacías porque los indios se han ido a vivir cerca de la ciudad. (7,T1,18)

A raíz de un viaje que realiza Gaspar Ruiz de Rojas a España, deja su encomienda a Andrés de Escobar el 14/1/1577, que le había dado el capitán Castillo en 1561 y que estaba conformada por: los caciques Guenti y Sao y sus tierras en Tono; el cacique Alnamanta y su tierra de Conotila en el valle de Latué; el cacique Inisia y su tierra en Tomanén; los caciques Eque y Ulutumán; el cacique Neucal y su tierra en Oronda; los caciques Achacoto, Anasuta, Tonquín y Alabe; y, el cacique Laronta y su tierra en Taquina. A raíz de la muerte de Escobar, toma posesión de la encomienda su hijo Juan Ruiz de Estrada el 5/2/1578. (7,T1,20-21)

En el juicio entre Antonio Bello y Juan de Coria Bohorquez por la posesión de Ayguil y Curucho; el juez Agustín Busto le toma declaratoria al cacique Tonuta, originario de la zona de Locloctuyta en las lagunas de Huanacache, que pertenece a la encomienda de Bohorquez. Tonuta dice que Huchiquimi, el padre de Ayguil, pertenecía a su tribu y residía en las lagunas, hasta que vino a Huantata a desposarse con Inchuacce que pertenecía a la tribu del cacique Gues, con residencia en la zona de Taitanquen. A partir de ello, Huchiquimi se queda en Taintanquen junto a su esposa y nace Ayguil. En 1551, al llegar Villagra al valle de Huantata, es Huchiquimi quien lo enfrenta, pero muere en la batalla; es entonces que, Inchuacce debe contraer matrimonio con Achagua, hermano del fallecido. Achagua e Inchuacce, se van a vivir a las lagunas y por los malos tratos, ella decide escapar y regresar a Huantata junto a su hermano Yumututum. Bello presenta un documento del 7/1/1576, en el que dice que Antonio Chacón pide por los indios al corregidor Alonso de Miranda, y que el 9/1 le confirma la posesión. (5)

En la escribanía de Diego Muñoz el 29/12/1588, se presenta Alonso de Reinoso y emite su testamento, dice que a su hija María Quincoses de Reinoso le dio en casamiento el tributo de dos caciques indios que tenía y poseía, llamados Yanquieta y Elarca; además, les deja a ambos aborígenes 6 vacas y novillos, por los servicios prestados, aunque aclara que no le dio doctrina por que estaban en lugares remotos y no había sacerdote. (X,EC,P2,107)

Paula Gómez le da un poder a su marido Francisco Muñoz el 31/1/1596, para iniciar una demanda judicial contra Pedro de Rivas que se apropió en forma ilegal de la encomienda de indios del cacique Uvecian, y que fueron otorgados por el general Pedro del Castillo en 1561 a Juan Gómez de Don Benito, su padre. (X,EC,P4,76)

Comparece ante las autoridades del Cabildo el 8/1/1600, el nuevo alguacil mayor de la ciudad, Roque de Arrocha; los capitulares le solicitan que tenga cuidado con las borracheras de los yanaconas. Para el 16/1, Pablo Flórez obtiene la correspondiente cédula para que se recojan los indios que andaban dispersos y que le fueron encomendados a fines de enero de 1587 por el gobernador Alonso de Sotomayor. (1,190)

Desde la ciudad de Rancagua (Chile) el 19/10/1604, llega a Mendoza un decreto del gobernador Diego de Araya, notificando las Leyes Premáticas (Pragmáticas) y ordenanzas, cédulas y provisiones reales, procurando la conservación de los naturales (aborígenes) y, que sean relevados (censados) y bien tratados de modo que no se les haga agravio alguno y que sean adoctrinados en las cosas de nuestra santa fe católica, ley natural y buena policía, castigando con demostración a los que mal y daño le hicieren, guardándoles su libertad como a vasallos de su Majestad y haciéndoles buenos tratamientos, para que aficionados de ellos los que están por reducir a su real servicio lo hagan, y cuando no bastaren, les haréis las corredurías y malocas que convengan para excusar los daños que hacen a los españoles caminantes que andan en sus contrataciones de la dicha provincia (Cuyo) a la de Tucumán. La transcripción del decreto al libro de cabildo es realizado por el escribano Juan Flores en febrero de 1605. (1,316)

Debido a que los vecinos de Córdoba en enero de 1605, sin tener derecho, ni poder, ni licencia, de su Gobernador, han traspasado los límites de la ciudad de San Luis y entrado a Mendoza, por caminos no usados, muchos son soldados armados y han sacado indios y se los han llevado. A raíz de ello, se le da un poder a los capitanes Juan de Godoy y Andrés de Fuensalida Guzmán, vecinos encomenderos de San Luis, para que recuperen los caciques y yanaconas a sus tierras. (1,310)

A mediados de enero de 1606 y a raíz de las incursiones de los aborígenes desde el sur, las autoridades del Cabildo de Mendoza; los alcaldes, Alonso de Reinoso y Gaspar Calderón; los regidores, Juan Luis de Guevara, Francisco Codina y Diego de Quiroga; y el escribano Juan Flores; convienen en nombrar a Diego Pérez Moreno como Teniente de Corregidor de los valles de Uco y Diamante. El nombramiento es emitido por el corregidor de Cuyo, Sebastián de Espinoza; y le prohibe castigar con pena de muerte y mutiliación, pero puede azotar y transquilar (cortar o rapar el pelo) a los yanaconas; y a los españoles, según la causa, se le haga un acta artículo de sentencia. Y en este mismo artículo, me la remitirá (al Corregidor) así la de los españoles; como naturales (pueblos originarios) que merecieran pena de muerte, mutilación de miembros; para que yo (el Corregidor) examine las causas y proceda en sentencia (1,349). Ese mismo año y a pedido del corregidor Espinoza, el escribano Juan Flores certifica en el Libro de Protocolos un censo realizado en las encomiendas de aborigenes y como cabeza de tribu figuran los caciques: Anchete, Coti, Pantele, Lorquina, Alacama, Yzcuy, Cacaye, Imquitan, Yanquilan, Bocalu, Yumeonta, Niquica, Papelquina, Lancu, Gorba, Qualtarra, Albanu, Logota, Chomozo, Sacamquina, Lapanta, Yegueta, Donyza, Ayay, Tutunerabo, Cozmala, Paluas, Cachumbe, Canuma, Culampayo, Quilcatec, Challao, Aycompta, Alluna, Campay, Illvaccho, Azcompta, Myacyo, Mingote, Coancha, Tausaquiri, Panque, Getar (difunto), Tabalque, Olalla, Pallamay, Quinauce, Aguantay (difunto) (X,EC,P3,63-113).

El 13/1/1607 reunido el Cabildo de Mendoza; los alcaldes, Gregorio Morales de Albornoz y Juan de Contreras; y los regidores, Alonso de Videla, Alvaro de Gelves, Alonso de Cepeda, Antonio Borjes y Bartolomé de Rojas; tratan que hay que poner remedio a las piezas de yanaconas (chinas y muchachos), que se llevan hurtadas al Tucumán, Paraguay y Santiago de Chile; por lo cual mandan que ninguna persona o mercader lleve hurtada contra la voluntad de su dueño ningún aborígen, bajo pena de 100 $ de multa. (1,382)

El 10/11/1608 se produce un conflicto con las gobernaciones de Córdoba y La Rioja por el robo de yanaconas de Mendoza; entonces, las autordidades del Cabildo; los alacaldes, Juan Luis de Guevara y Diego de Quiroga; y los regidores, Gregorio de Puebla, Jusepe de Villegas, Pedro de Zárate, Andrés de Videla, Gregorio de Lorca y Juan Amaro de Ocampo; deciden enviar un emisario a Santiago de Chile y exponer la situación ante el gobernador Alonso García de Ramón y le ponga remedio al asunto. (1,472)

El 22/1/1609 se presenta ante las autoridades del Cabildo de Mendoza; los alcaldes, Gregorio Morales de Albornoz y Mauricio Bravo de Naveda; y los regidores, Alonso de Reinoso, Juan de Contreras, Alvaro de Gelves, Juan de Godoy, Juan de Vega de Varzena y Agustín Muñoz; el nuevo teniente de corregidor, justicia mayor y capitán de guerra, Juan de Vega; de los pueblos de Barrancas, Uco, Xauries, Diamante y los pueblos de los caciques Tapa y Gara. (1,488-492)

El 10/3/1612, por decreto del gobernador Alonso de Rivera, hace merced al capitán Gregorio de Puebla y para sus ganados, de un pedazo de tierra que linda con tierras de Pedro de Zárate por una parte y por el otro lado con unos carrizales llamados Ananta, linderas con unas tierra contiguas a su estancia y con tierras del cacique Ininco. (7,T1,46)

Por decreto del 11/4/1618, se prohibe a los Corregidores del Reino de Indias hacer visitas a los indios y tasar las respectivas encomiendas. (X,EC,C2,D7)

Para el 23/8/1618 ante el alcalde de Santiago de Chile, Rodrigo de Araya, el capitán Juan Ortiz de Urbina toma posesión de una encomienda compuesta por: Callanga y Alonso, herederos del cacique Azerun; Martín Quistola heredero del cacique Causque y todos los indios de la tribu llamados laguneros y originarios de las tierras de Aguartraques; los caciques Cilitita, Ullungasta, Guacape y Coscuta, con su heredero Costrar y que residen en Mendoza y San Luis. La merced se hace a cambio que Urbina adoctrine a los indios, y que componga los caminos y puentes de su jurisdicción; además, deberá alojar a los visitantes y no salir del Reino de Chile. (7,T1,52-53)

Por ley del año 1620, la encomienda de aborígenes para que sea legal y conforme a derecho, debe primeramente ser publicada en edictos por si alguien se opone y las reclama para si; y en segundo lugar, deben tener confirmación real a partir del título público y la toma de posesión, siendo rubricado el acto por un Escribano Público y de Cabildo en cuerpo presente. Para el que no cumpla con tal disposición deberá restituirlas y devolver el dinero ganado por el tiempo que las explotó y ceder al Ayuntamiento, los beneficios que obtuvo a partir de la toma de posesión ilegal de la misma. (7,T2,371)

El gobernador Pedro Ozores de Ulloa nombra el 30/12/1621, al sargento mayor Andrés Jiménez de Lorca en el cargo de Protector de Naturales de Santiago y de Guarpes de la Provincia de Cuyo, y queda a cargo de la protección de aborígenes que llegan a Chile. (7,T1,58)

El 21/1/1622 se designa al capitán Miguel Zamora para trasladarse a la Provincia de Cuyo y por su intermedio traiga por orden del gobernador, 100 Huarpes para realizar trabajos de canalización en Santiago de Chile. Los aborígenes son traidos por García Hernandez de Villanueva y muchos de ellos estaban enfermos y eran portadores de sarampión. (7,T1,59-60)

El 5/4/1623 es emitida una real provisión en Santiago de Chile; por la que el capitán Diego Simón de Espina, vecino encomendero de Mendoza, para que el escudero que los tiene a cargo, reduzca a los indios de su encomienda que andan dispersos y están hiriendo a diferentes personas en la Provincia (7,T1,68). Por real provisión remitida a Mendoza el 19/10, al capitán José de Villegas, en defensa del cacique e indios del pueblo de Huanacache y sus Lagunas, por contravenciones ejercidas por el corregidor Juan Ugalde de Zalazar, quien, nombró a Juan Luis Pacheco como teniente de corregidor en la zona; el cual, manda a las pesquerías a los pobres indios y los despacha con recuas de mulas y ganados a las ciudades de Córdoba y La Rioja con la pesca sacada; además, les tiene prohibido sembrar sus tierras y por tal motivo no pueden sustentarse. La Real Audiencia de Chile le ordena al corregidor Zalazar, que destituya a Pacheco; ya que, nunca había sido nombrado un corregidor para la zona, y que le entregue la encomienda de indios a Juan Manuel de Basturias, para que los reduzca y vivan con él. (7,T1,69-70)

A partir del 19/12/1624, es separado en dos el cargo por el cual eran protegidos los aborígenes que llegaban a Chile y, son creados los cargos de Protector de Naturales de Santiago, a cargo de Alonso Chimeno de Zúñiga; y también, el cargo de Protector de Naturales Guarpes de Cuyo, siendo elegido para el oficio Gonzalo Becerra. (7,T1,72)

Por acuerdo del Cabildo de Santiago de Chile el 17/4/1626, se envia un racaudo al alcalde Mauricio Bravo de Naveda, para que en cumplimiento de lo dispuesto por el gobernador Francisco de Alava y Nurueña, se envien los indios necesarios para el trabajo de los tajamares y obra públicas, dándoseles 8 pesos de 5 reales por cada uno para las costas del envio. El 6/11, se comisiona a Diego Hurtado de Mendoza con el objeto de que saque a los indios Huarpes que están repartidos, para los trabajos del tajamar y obras públicas. El 12/12, se comisiona al sargento mayor Rafael de Zárate a fin de que traiga indios de San Juan de la Frontera y San Luis para las obras públicas, dándoles a cada uno 5 patacones, y de los cuales deben venir por lo menos 20. (7,T1,59-62)

Por acuerdo del Cabildo de Santiago de Chile del 4/1/1627, en relación con la traida de los indios Huarpes de Mendoza, San Juan y San Luis; que el Gobernador de este reino ha concedido para las obras públicas y con el concierto hecho con Zárate y el capitán Manuel Gonzalez Farías, se obligan los bienes y rentas de esta ciudad para la paga de los jornales de los indios que trajeron, a sus encomenderos como se concertaron. (7,T1,61-62)

El 6/3/1628 por real cédula fechada en Madrid (España), se dispone que no se saquen a los indios fuera del reino y se los ponga a trabajar en las minas de oro. Por un altercado respecto de la posesión de una encomienda que había sido donada en limosna al hermano Fabián Martínez, procurador del Colegio de Mendoza, por el capitán Diego Simón de Espina; solicita a la Real Audiencia de Chile que le sean devueltos, ya que algunos están dispersos y otros se los han quedado vecinos de la ciudad (7,T1,78). El 18/4, la Real Audiencia dicta sentencia en el asunto y los aborígenes en cuestión son restituídos a los Jesuítas (7,T1,79).

En reunión del Cabildo de Mendoza del 15/3/1629, comparece Francisco de Urbina y Quiroga, quien presenta una orden de la Real Audiencia de Chile, en razón que los vecinos paguen 1,5 $ de plata corriente por cada indio para adoctrinarlo (2,76). El 21/3, llega una carta del visitador Cristóbal de la Serda, presidente de la Real Audiencia; en respuesta al pedido realizado por el Cabildo para que no se permita cruzar indios a Santiago de Chile. A mediados de año, el oidor Serda informa que no puede viajar a Cuyo y por información que ha recibido está notificado de la gran necesidad que hay de que se cumpla y ponga en efecto las reales cédulas de su Majestad en cuanto a las Reducciones de los indios naturales de aquella provincia, para que vivan en policía y se les administren los Santos Sacramentos. Ordena a todos los alcaldes de Cuyo, que en 15 días de notificados hagan las dichas reducciones, señalando tierras suficientes y los mejores y más capaces para que vivan y se sustenten y en ninguna manera concientan llevar indios a Santiago de Chile, Rioja o Tucumán, bajo pena de 500 $ de multa; y doy comisión al sargento mayor Mauricio Bravo de Naveda para notificar a los alcaldes. El auto es pregonado en la Plaza Mayor el 5/4, siendo testigos: Gregorio de Arce, Alonso Rodriguez, Pedro de Ribas y Antonio Borges; con la presencia de los alcaldes Rodrigo de Bustos y Juan Amaro de Ocampo. (2,84-85)

Por una petición realizada por el vecino encomendero Francisco Bravo el 9/1/1633, a raíz que un Huarpe se había robado 2 pollinos y se los había comido junto a otros aborígenes; las autoridades de Santiago de Chile, disponen dictar sentencia a los infractores y envian la orden al teniente de corregidor Antonio Moyano, para que tome cartas en el asunto y los castigue (7,T1,86). Ese mismo año, el 15/1, a petición del fiscal del Cabildo y, porque los Corregidores de la Provincia, con el pretexto de administrarlos, sacan a los aborígenes de sus tierras, se dictan autos de amparo en favor de los caciques: Gaspar Tolenta del valle de Uco y de Fernando Galambo (7,T1,85-86).

A pedido del Fiscal y en defensa de los naturales de la Provincia de Cuyo y de la ciudad de La Rioja, solicita al Tribunal una querella penal contra el capitán Juan de la Guardia; que, con otros y poco temor de Dios, se llevó del Valle Fértil (San Juan) y se fue a la ciudad de La Rioja, y en ella y en la estancia del maestre de campo Pedro de Velazco, se llevó una gran cantidad de indios e indias y los cautivó estando de paz y sin haberse alzado y rebelado, y los llevó a la ciudad de San Juan en donde públicamente los ha vendido como esclavos, motivo por el cual el 21/4/1633, se dicta sentencia por los ilícitos cometidos. Cinco días después, en Santiago de Chile, se ordena que no salgan de la Provincia de Cuyo los indios de la encomienda de Pedro de Zárate Bello: Pedro (soltero), Crespo de 40 años, Miguel de 40 años y soltero, Pablito de 12 años y tartamudo, Pedro Moreno de 14 años y Alonso cabezón de 40 años; además, se extiende la orden para la encomienda de Pedro de Videla: Pablo casado con Angelina, Juan casado con María y sus hijos Jerónimo de 11 años, Lázaro de 20 años y soltero, y, Juan de 20 años y soltero. (7,T1,88)

El 23/11/1633 el capitán Alvaro Rodriguez dice que hace 5 años dio un poder al capitán Lorenzo de Umaña para administrar unos indios de su encomienda y, que, se ha enterado por cartas y dichos, que los trata mal y los envia a Buenos Aires; por lo que solicita se reboque el poder y se haga un poder nuevo en favor de otra persona. El 12/12, se dicta una real provisión que es enviada al Corregidor de Aconcagua, Juan de los Ríos Sotomayor, para que prohiba el paso sin licencia del gobierno a indios, esclavos y sacerdotes; ya que, se había detectado que los traficantes traían aborígenes del Tucumán y Paraguay, pasándolos de contrabando a Chile vestidos en hábitos religiosos.

A petición del Fiscal el 29/1/1636, se notifica al Corregidor de Cuyo, Juan de Adaro y Arrasola, se avoque a la causa seguida por Andrés de Lemos, protector de indígenas, contra el ayudante de sargento mayor Diego Vaca, por hacer maltrato de los indígenas, con azotes y trasquiladuras (7,T1,96). En abril de este año, por real provisión dictada en Santiago de Chile, a petición de doña Juana Chumacero, esposa del maestre de campo, Andrés Jiménez de Lorca; se ordena reducir los indios que tiene su marido en Cuyo, que andan perdidos y muchos de ellos en la ciudad de Santiago de Chile (7,T1,97).

El 26/12/1639 según las Leyes de Indias, los aborígenes de Cuyo deben pagar 12 $ anuales por adoctrinamiento. Las autoridades eclesiástica solicitan al obispado que la suma se eleve a 18 $ ya que cuando se dictó la ley habían más indios de los que hay en la actualidad. (7,T1,113)

En el Cabildo de Santiago el 3/3/1643, se trató de la Ordenanza Real que dispone que los indios de Mendoza, San Juan y San Luis, donde quiera que estén, deben pagar ocho pesos con ocho reales (8,8 $) de tributo, de los cuales, 5,5 $ serán para el encomendero (patrón o dueño), 1,5 $ para la doctrina (Orden Religiosa que los evangeliza) y 0,5 $ para el Corregidor y Protector (gobernador y legislador o representante) respectivamente. (7,T1,110)

Reunido el Cabildo de Mendoza el 10/4/1644, ordenan que todos los vecinos de esta ciudad den cada uno un indio para cubrir con barro el techo de las Casas de Cabildo. Firman el acta; los alcaldes, Pedro Morales y Juan Ruiz de la Cuesta; y los regidores, Juan Ruis de Villegas, Juan Bustos, Pedro de Fuentes, y el alguacil mayor Gerónimo de Alderete. (2,201)

El 4/3/1645 llega fray Fulgencio de Oria, con un mandamiento que lo autoriza a sacar yanaconas para llevar a Chile durante 6 años para construir el convento de San Agustín. Se le notifica a Antonio Chacón de Quiroga que entregue 15 indios de su encomienda. El 8/3 el corregidor Luis López Gallardo le pregunta a Chacón si acepta entregar los indios para ser enviados a Chile, y el 20/3 por orden del gobernador Francisco López de Zúñiga y Meneses, Chacón lleva 10 indios a Chile, siendo asentados sus nombre en el Cabildo de Mendoza: Diego Sayanca, Diego Septa, Alonso Samel, Miguel Guala, Jusepe, Pablo, Domingo, Alonso, Cristóbal, Jacinto y Rodrigo. Son testigos de la entrega: Juan Duque de Estrada y Martín de Amoscotegui. (2,265)

En marzo de 1646 el fraile Juan de Castro, Presidente del Convento de Nuestra Señora de las Mercedes (calle Montecaseros entre San Luis y Córdoba, Ciudad de Mendoza), pide un indio para realizar trabajos en el Convento de la Merced. El Cabildo decide sacar un indio de la encomienda de Francisco de Mena o Antonio Chacón para ser entregado al fraile Castro. (2,334)

A raíz de la muerte de Francisco Ortiz de Urbina, el gobernador Martín de Mujica, en auto fechado en la ciudad de Concepción el 29/10/1648, queda vacante su encomienda de indios de la Laguna de la Quijada, que poseía en segunda vida y ordena que las personas beneméritas que se crean con derecho a esa encomienda, se opongan en 20 días a partir de la publicación de los edictos. El 12/11, los edictos son publicados en Santiago de Chile y Concepción, y acompañada de la lista de aborígenes por la que se compone la encomienda: el cacique Sallanga y su heredero Diego de 20 años; Juan Curaquilla, casado y con un hijo; y, Agustín, casado y sin sucesión; y además todos los indios sujetos a ellos que residen en la laguna:
- Indios tributarios 14, de los cuales 12 son casados.
- Indios reservados 3, de los cuales 2 son casados.
- Indios fugitivos 4.
La distribución de la encomienda termina en un juicio entre la esposa de Urbina, Esperanza de Quiroga y Leonor de Córdoba y Figueroa, hija del gobernador interino de Chile, Alonso de Figueroa y Córdoba. (7,T1,129)

El 28/5/1652 el procurador Pedro Gómez recibe la noticia que se ha desatado una epidemia de viruela y sarampión en Tucumán y Buenos Aires, y otra en San Juan de la Frontera de chabalongo y tabardillo. La autoridades del Cabildo de Mendoza nombran al alcalde de la santa hermandad, Manuel Rodriguez de Ocampo, para que controle el ingreso de carretas y si encuentra algún infectado que lo deporte a 6 leguas de la ciudad, bajo pena de multa pecuniaria si es español y si es negro, mulato o indio se le den 200 azotes y se le quite el pelo. (3,19)

Para el 19/4/1655, a pedido del corregidor Luis de Molina Parraguez y Vasconcelos, presenta un poder del fiscal protector del Reino de Chile, Antonio Ramírez de Laguna; para que en su nombre administre el cargo de Protector de Naturales de Cuyo. (3,51)

El 11/3/1656 por ordenanza del Cabildo de Mendoza, se le ordena al alcalde de la santa hermandad Alonso de Coria Bohorquez, que visite los ranchos de los indios donde se hace pitarrilla (vino de baja calidad o mosto antes de fermentar), y se los derrame y quiebre los vasos (vasijas llamadas pitarras) donde se hallaran, y se le aplique el castigo correspondiente. (3,88)

El Cabildo de Mendoza el 1/6/1658, le ordena al alguacil mayor Juan Gonzalez Pallero, que notifique a todos los vecinos para que den un indio con su asadón para limpiar la Plaza Mayor para que esté arreglada para la procesión de Corpus Christi. (3,195)

Por fallecimiento de Antonio Moyano Cornejo, el Gobernador de Chile, Pedro Porter Casanate, en Concepción a 30/7/1658; otorga a Antonio Moyano Cornejo y Aguilar la encomienda de Corocorto (La Paz) con el cacique Juan, sus dos hijos y diez y siete indios casados, y quince solteros y el cacique Bartolomé con un hijo, y cuatro indios casados y cuatro solteros. (7,T1,200)

El 27/11/1661 se presenta Francisco Chirino de Posada ante las autoridades del Cabildo de Mendoza, para reclamar la encomienda de indios que había dejado vacante su difunto primo Marcos del Toro Mazote, ya que, había quedado a cargo de sus sobrinos y cargado de hijos. La encomienda estaba compuesta por: Lorenzo Quinvangala y 15 súbditos (7,T1,262). El 24/4/1662, el corregidor Juan de Roa hace entrega de la misma (7,T1,220).

En la sesión del Cabildo de Mendoza del 4/11/1662, se presenta el protector de naturales Gregorio de los Olivos y pide se haga testimonio de las razones por las cuales un indio ha ido preso y se le han puesto grilletes; las autoridades del Ayuntamiento; los alcaldes, Joseph Pardo Parraguez y Juan de Torres Barros Hinojosa; los regidores, Andrés de Videla Narvaez, Gregorio Morales de Albornoz, Pedro Gomez Pardo de Albornoz, Bartolomé de Villegas y Figueroa, Antonio Moyano Flores y Alonso de Figueroa; el alcalde de la santa hermandad Francisco de Reinoso y el procurador Alonso de Coria Bohorquez; emiten el correspondiente testimonio. (3,244)

Por el fallecimiento de Antonio de Gelves y Castañeda, quedan vacantes las encomiendas que posee en Corocorto, compuesta por 6 indios y 5 tributarios. Pedro Moyano Cornejo dice que su hermano Juan Moyano de Aguilar es benemérito de la Provincia de Mendoza, por ser niento de conquistadores; por lo cuál, pide se le haga entrega de la encomienda. El gobernador Angel de Pereda hace merced de la encomienda y, el 29/1/1664, el capitán y alcalde Pedro Gómez Pardo da la posesión a Aguilar. (7,T1,226)

El procurador general Pedro Gómez Pardo propone el 7/3/1665, que debido a que muchas personas que son vecinos encomenderos pasan a la ciudad de Santiago de Chile con vacas, y se llevan los indios desnaturalizándolos de la Provincia; y que resulta en gran daño para Mendoza por falta de mano de obra para trabajar. Es por ello que pide a las autoridades del Cabildo de Mendoza, que dichos indios vuelvan a la ciudad y le ordena al alguacil mayor Miguel Busto de Lara que notifique a todas aquellas personas que arrian vacas a Chile, que deben presentar una memoria e informar los nombres de los indios que llevan en dicho viaje y que los dichos indios no podrán viajar con sus esposas e hijos, bajo pena de 50 $ de multa para aquellos que no cumplan con la orden. (3,325)

El 15/11/1665 se realiza el primer acta de bautismo de un niño Huarpe y es en la Iglesia Parroquial de la ciudad de Mendoza, el cura puso óleo y carisma a Ignacio, hijo legítimo de Alonso y de Lorenza, indios al servicio del maestre de campo Juan Moyano. Los padrinos son Gonzalo Villegas y Francisca su mujer; y hacen de testigos, Francisco Reinoso y Juan de Rivas. (12)

En la sesión del Cabildo de Mendoza del lunes 4/7/1667, la autoridades ordenan despachar al río (Mendoza) a soltar agua porque no viene el caudal suficiente y que se aperciba a los vecinos y moradores, y los que tienen heredades den los indios que el alguacil mayor Francisco Nuñez de Villoldo les pida, y que el mismo alguacil aperciba para que abran las acequias para que no se empantanen las calles. (3,373)

En la sesión del Cabildo de Mendoza del 9/5/1668, es repuesto en su cargo de Alguacil Mayor el capitán Francisco Nuñez de Villoldo; y por decreto del gobernador Fransico de Meneses, comparece Juan de Ribas Cepeda y presenta un título de Coadjuntor de los Indios Naturales para la Provincia de Cuyo, despachado por el capitán Francisco de Eraso, Protector General del Reino de Chile. (3,415)

Los alcaldes Juan Moyano de Aguilar y Lorenzo de Coria Bohorquez, en la sesión del Cabildo de Mendoza del 20/12/1669, proponen que a raíz que se está anegando la plaza y las paredes de ella, sacar un indio de cada vecino para repararlas, y le dan comisión para que se hagan cargo al Alguacil Mayor y como ayudante a Francisco Nuñez de Villoldo; para que junten la gente y desvíen el agua por dónde se pueda y que hagan un terraplén en las paredes. (3,496)

Para el 31/5/1670 comparece Pedro de Trilles con un nombramiento y poder del capitán Francisco de Eraso, vecino de la ciudad de Santiago de Chile y Protector General de los Naturales del 16/4, refrendado por Jerónimo de Ugas, Escribano de dicha ciudad; al que nombra como Protector General de Naturales de Mendoza y su Coadjuntor (Protector de Aborígenes). El corregidor Antonio de la Maza le toma el juramento correspondiente a Trilles y asume en su cargo. (3,515)

El alcalde Francisco Chirino de Posadas emite una petición al Cabildo de Mendoza el 13/10/1671, respecto que fue a un paraje como a una legua de la ciudad en la siesta (+ o - en el Aeropuerto Francisco Gabrielli), en donde vio unos paredones caídos y desechos que fueron una casa; y estando presente un indio llamado Andrés, de la encomienda que hoy tiene y posee Juan de Cobarrubias y que antes fue de Manuel de Carbajal, y le pregunté quién había hecho esos paredones y dijo que aquella había sido la casa del cacique Tabalque, la que está rodeada por un monte de chilcas y otros árobles silvestres, y tiene orientación de este a oeste; y que en ella tambén vivía doña Clara, su hija, y que a la muerte del cacique ella se quedó con la casa y tierras, hasta que ella murió; y en la casa quedó un pariente suyo, Catimai; y cerca de la casa, hay unas señales que parecen fueron paredes y el dicho Andrés dijo que fue la Iglesia donde se decía misa y se enteraban (enterraban) los naturales sujetos al dicho cacique Tabalque, y según parece coría (corría) de este a oeste, y en partes está montuoso cubierto de chilca y otras yerbas que se enredan. Y cerca de los paredones como a un tercio de cuadra, mas o menos, está la ramada, botijería y horno de Andrés Sanchez Chaparro. Y entre los dichos paredones y señal de Iglesia está un corral de dos tapias en alto, que dijeron era el corral de Andrés Sanchez Chaparro y en donde encerraba sus cabalgaduras y ganado vacuno. Acto seguido, le preguntó al dicho Andrés de donde había obtenido aquellas noticias, dijo que de un tío suyo le contó sobre la muerte del dicho cacique Tabalque, y que él vio aquello poblado y conoció por ser de aquellos sujetos el dicho cacique Tabalque que eran del capitán Lope de Peña, primer encomendero del dicho cacique y sus sujetos, y el dicho indio Andrés, por su cara y canas tenía más de 70 años, y a todo lo dicho estaba presente el padre Luis de Toro, Cura y Rector del colegio de esta dicha ciudad, de quien fui llamado y llevado al dicho paraje y me pidió por testimonio, todo lo que el dicho indio Andrés había dicho, por convenir a su derecho y del dicho colegio. También fueron testigos: Diego Requena de la Compañía de Jesús, Pedro Morales Negrete y el algucil Pedro Ponce de León, e Ignacio de Figueroa. (X,EC,C29,D2)

El corregidor Juan de Oro y Bustamante el 4/8/1673, hace memoria de las encomiendas de los pueblos de Morro y Diamante, que están vacantes y compuestas por:
a) Morro: cacique Juan Cuaiguacuendi y sus sujetos.
b) Diamante: cacique Andrés Paucan y sus sujetos.
La vacancia se produce por la muerte de Jacinto Videla que los poseía en segunda vida y por no haber traído confirmación para no perderlas. Por lo cual, luego de publicados los edictos el 27/8 en la ciudad de Santiago de Chile, presentan oposición para hacerse de la encomienda los capitanes: Pablo de Villela (Regidor del Cabildo de Santiago de Chile) y Jerónimo de Quiroga (Regidor Perpetuo del Cabildo de Santiago de Chile). En la ciudad de Concepción, el 26/11/1674, el gobernador Juan Henríquez, hace lugar al pedido y falla en favor de Quiroga, quien, tenía más servicios a su Majestad que Villela. (7,T1,252)

Por real cédula emitida por el rey Carlos II, ordena que todos los dueños de encomiendas del reino, deben legalizarlas a partir de un título de propiedad emitidio y rubricado por autoridad competente.

El Protector General de Naturales de Chile, Bartolomé de Jorquera, emite el título de Protector Principal de Naturales de la Provincia de Cuyo a nombre de Juan de Ribas Cepeda; que lo presenta ante las autoridades del Cabildo de Mendoza; los alcaldes, Juan Ruiz de la Cuesta y Juan de Villegas y Guevara; y los regidores, Alonso de Coria Bohorquez y Gabriel de Triviño; el 7/4/1674. (3,576)

A pedido del alférez José Morales Albornoz, el Cabildo de Mendoza se reune el 20/5/1677; se presenta con el nombramiento en el cargo de Protector o Coadjuntor de Naturales de Cuyo; elegido por Bartolomé de Jorquera, Protector General de Naturales del Reino de Chile y, firmado y autorizado por el Escribano Público y Real de Santiago de Chile, Juan de Agurto y Caztañaga. Los alcaldes, Bartolomé de Villegas y Figueroa y Alonso de Videla; y los regidores, Gregorio de Arce Lucero y Alonso de Coria Bohorquez; reciben en el cargo a Albornoz. (4,62)

El alguacil mayor Francisco Nuñez de Villoldo, se presenta ante las autoridades del Cabildo de Mendoza el 3/1/1678, y solicita se anule la elección del alcalde Nicolás Lucero y Arce, diciendo que antes de ayer que se hizo la elección de Alcaldes Ordinarios de la ciudad, salió electo mi sobrino, Luis Chirino de Posada, con la misma cantidad de votos que Arce; y sin embargo que contradije tal elección por no ser legítima e inválida, pues Arce no es vecino de esta ciudad, y de dónde dicen lo es, que es de la ciudad de San Luis de Loyola, no ha tendio ni tiene pueblo ni cacique, no tiene indio ninguno; y otras causas que expresaré ante la Real Audiencia de Chile, por donde es nula la elección que se ha hecho en Arce, y la que se ha hecho en mi sobrino es legítima, pues es vecino encomendero de dicha ciudad, con pueblo y cacique que tiene. (4,69)

El rey Carlos II promulga la Nueva Recopilación de las Leyes de las Indias el 18/5/1680, dividadas en 4 tomos y un total de 9 libros, que contienen 6.385 leyes, agrupadas en 218 títulos. El libro 6 de los Indios se subdivide en 19 títulos:
01 De los Indios.
02 De la libertad de los Indios.
03 De las Reducciones, y Pueblos de Indios.
04 De las caxas de censos, y bienes de Comunidad, y su administración.
05 De los tributos, y tasas de los Indios.
06 De los Protectores de Indios.
07 De los Caciques.
08 De los repartimientos, encomiendas, y pensiones de Indios, y calidades de los titulos.
09 De los Encomenderos de Indios.
10 De el buen tratamiento de los Indios.
11 De la sucesión de encomiendas, entretenimientos y ayudas de costa.
12 Del servicio personal.
13 Del servicio en chacras, viñas, olivares, obrajes, ingenios, perlas, tambos, requas, carreterías, casas, ganados y bogas.
14 Del servicio en coca y añir.
15 Del servicio en minas.
16 De los Indios de Chile.
17 De los Indios de Tucuman, Paraguay y Rio de la Plata.
18 De los Ságleyes.
19 De las confirmaciones de encomiendas, pensiones, rentas y situaciones.

El 9/3/1680, el procurador general Diego de Videla, solicita a las autoridades del Cabildo de Mendoza, manden a los Alcaldes de la Santa Hermandad, que salgan a recorrer las chacras y rancherías de los indios por ser el tiempo de las pitarrillas (vino de baja calidad o mosto antes de fermentar), y excusar el daño tan grave que se sigue así de matarse, como el que roben las viñas; pues todo es en servicio de Dios. A raíz de ello, el Cabildo dispone que los Alcaldes acudan a recorrer las chacras y viñas, y castiguen a los que hagan daño. (4,113)

El gobernador Juan de Henriquez hace merced de una encomienda en Cuyo con fecha 20/5/1680, emitida en Concepción a Jacinta Sáenz de Mena, hija de Francisco Sáenz de Mena y María García (hija de Miguel García). También a Marcela de la Guardia y al alférez Eugenio Fernández de Villalta, que hace 40 años sirve en la guerra; quien se los dará a su hija Juana Fernández de la Guardia. (7,T1,286)

En 1681, el gobernador Henriquez hace merced al sargento mayor Pedro de Videla, de 5 indios y al alférez Luis de Videla de 4 indios para sustento de su madre viuda y hermanas, con fecha 13/10. El 12/12, el maestre de campo Juan Pardo Parraguéz, vecino de Mendoza, recibe unos indios que andan vagando con su cacique por San Luis. El 20/12 el alcalde de San Juan, Nicolás Gil de Quiroga, condena a pena de destierro por el término de 2 años a Agustín Ramírez, por haber dado maltrato a una india. Ramírez apela la sentencia y el protector de naturales Julián Asencio de Mallea le entabla juicio. (7,T1,290)

En la sesión del Cabildo de Mendoza del 18/10/1681, se propone que ni indio, ni negro, ni español, y de cualquier estado que sea, corte ni mande cortar los sauces de la acequia del Tajamar, por haberse puesto para reparo de esta ciudad (sombra), bajo pena de 10 $ de multa para los españoles, y a los indios y negros a 50 azotes; y que se fije un auto en la parte más pública de esta ciudad para que todos se anoticien. Firman el acta correspondiente; los alcaldes, Francisco Chirinos de Posadas y Pedro de Trilles; los regidores, Gregorio de Arce Lucero y Alonso de Coria Bohorquez; y el alguacil mayor Francisco Nuñez de Villoldo. (4,154)

El maestre de campo José Pardo Parraguez, vecino de la ciudad de Mendoza, solicita unos indios vagos, que no viven en pueblo, que son de nacionalidad guarpe, con su cacique respectivo. Por título fechado en Santiago de Chile el 13/12/1681, el gobernador Henriquez se los da a Pardo Parraguez, a condición que los reduzca cerca de la ciudad de San Luis. El 3/1/1682, el corregidor Antonio de Carvajal y Saravia, le da la posesión de la encomienda. El Fiscal de la Real Audiencia de Chile, en dictamen del 25/11/1696, dice que es nulo el título de encomienda de Parraguéz, por cuanto en la provisión correspondiente no figura la publicación de edictos, ni el cargo de confirmación de real, como se ordena en la Ley de 1620, y pide, en concecuencia, que se declare la vacancia de dicha encomienda con restitución de frutos, desde el día de la provisión. (7,T1,311)

Por real provisión del 7/5/1688 dictada por la Real Audiencia de Chile, para que se averigüe quién es el cacique de la encomienda de Domingo de Erazo. El 5/6 el capitán Juan Vidal Olguín asume en el cargo de Protector de los Indios Naturales de Cuyo. Juan Talquinca, administrador del cacicazco, por su sobrino Nicolás Talquinca, ofrece información sobre sus derechos. Francisco Cunampa hijo de Gaspar Cunampa cacique principal de los indios de Erazo dice que Talquinca no es tal cacique por ser hijo putativo. Talquinca dice que el cacicazgo está en su casa por línea recta desde hace más de 50 años; que caciques han sido su padre y su abuelo y que él mismo lo es desde hace 17 años, por la minoridad de su sobrino Nicolás Talquinca, todo lo cual ha sido y pasado sin contradicción alguna, sirviendo con armas como tales caciques, en las entradas del enemigo; que Juan Ruiz de la Cuesta para librar a Cunampa de la servidumbre que estuvo su padre ha querido introducirle de cacique; que su sobrino Nicolás Talquinca no es putativo sino legítimo hijo de su hermano Bartolomé Talquinca, cacique reconocido y respetado de sus vasallos; y que en la visita que practicó el oidor Gaspar de Cuba y Arce a la Provincia de Cuyo, redujo todos los indios de las Lagunas (Huanacache) al pueblo de Corral, entre ellos el cacique Bartolomé Talquinca con su gente. Francisco Cunampa dice que el cacicazgo le pertenece en línea recta: por su minoridad, Gaspar Cunampa, su padre; dio a Juan Talquinca la administración de él y se ha quedado ejerciéndolo. El sargento mayor del batallón de la ciudad de Mendoza, Luis Cherinos de Posadas certifica que Juan Talquinca ha acudido en toda ocación contra el enemigo, especialmente, cuando en tiempos del corregidor Antonio de Carvajal, se redujo a Lorenzo Chiquillán y recorrió toda la tierra hasta el río Latuer; y que bajo el gobierno de Bernardo Cruzat fue dicho Talquinca a la ciudad de Santiago para llevar pliegos de importancia. Domingo de Erazo en carta al cacique Juan Talquinca fechada en Santiago el 20/3/1688, le dice que le recomienda servir con buena voluntad y atención al administrador de la encomienda Gabriel de Toro, que trate bien a los indios y además que le lleve a la gente y niños para doctrina; y que, por el mismo Toro ha tenido noticias que un borracho quiere ser cacique de la dicha encomienda. Consta de la información rendida por Juan Talquinca que tres hermanos fueron a un tiempo caciques: uno de ellos no dejó sucesión; el segundo, Francisco Cunampa tuvo una hija legítima y un hijo natural, después de viudo, llamado Cunampa; y el tercero Gaspar Jauqueta que fue administrador del cacicazgo, a quién sucedió, en propiedad, Pablo Talquinca, padre de Nicolás Talquinca; y que Francisco Cunampa no tuvo hijos legítimos y su amo Juan Ruiz de la Cuesta se lo llevó a Chile. Consta de la información rendida por Francisco Cunampa que éste último es heredero del cacicazgo como nieto de Francisco Cunampa, cacique principal llamado el del brazo cortado; que éste último fue hermano mayor de Gaspar Jauqueta y hermano también del cacique principal Baltasar Honco; y que Francisco Cunampa el del brazo cortado fue padre de Gaspar Cunampa que no tuvo cacicazgo; quién a su vez procreó a Francisco Cunampa, que rinde la información. También consta que Gaspar Cunampa fue llevado a Chile con su mujer Esperanza y murió en Santiago, y que su hijo Francisco fue criado en Chile. (7,T1,360)

A raíz de la explotación de los aborígenes de Cuyo por parte de las autoridades de los Ayuntamientos de Mendoza, San Juan y San Luis; el gobernador José de Garro, por pedido del Procurador General de los Indios del Obispado del Reino de Chile, presenta un escrito el 8/11/1688, que con lo de él decretado, es como se sigue: muy Poderoso Señor, el licenciado Alonso Romero, Abogado la Real Audiencia de Chile, Protector General de los Indios Naturales del Reino de Chile, por la defensa de los que residen en la provincia de Cuyo (indios), comparezco ante Vuestra Alteza y digo que, a mi noticia es venido que los Alcaldes de la ciudad de Mendoza, conciertan (los toman como suyos) los indios para sí, asi de encomienda como los que residen en dicha Provincia siendo de otras provincias; en grave perjuicio de los dichos indios por hacer los dichos conciertos con desigualdad minorándoles su estipendio (bajando su remuneración) y dándoles la satisfacción en géneros (mercaderías) a precios muy subidos, imposibilitando el avío de los comerciantes o impidiendo a los que se aplican al trabajo de las minas, sin permitir que sus propios encomenderos se puedan aprovechar de los dichos indios en tiempos que son privilegiados por vuestras reales ordenanzas, diciendo que para lo referido se le concedió facultad por el general Juan Enriquez (exgobernador), por auto que se supone haber proveído la consulta de vuestros reales ministros de esta Real Audiencia. Que respecto de que los dichos Alcaldes y demás justicias no pueden concertar los dichos indios en forma referida, ni en otra alguna en perjuicio del común de vuestros reales haberes de los dichos indios y de los encomenderos, se ha de servir Vuestra Alteza de mandar que los Alcaldes de Cuyo, no hagan concierto con los dichos indios, ni con violencia ni espontáneamente, y que los dejen servir a la persona que quisieren en la ocupación que fuere de su mayor conveniencia, sin embargo de lo mandado por el gobernador Enriquez y, que ejecute, sin embargo de súplica, mandándole el dicho Corregidor que en cuanto a los dichos conciertos desagravie a los dichos indios, haciendo se les pague conforme a ordenanzas y a lo dispuesto por una ley recopilada que habla acerca del estipendio que su trabajo personal se debe dar a los indios de Cuyo y que, para ello, se le despache real provisión y se remita a esta Real Audiencia lo que en virtud se hubiere obrado. En Santiago de Chile el 15/11, las Justicias de Cuyo, en los conciertos y asientos que hicieren de los indios, se abstenga en causa propia de autorizar los dichos conciertos para sí y cuando los hubieren de hacer y necesitasen del servicio de los dichos indios, lo hagan ante el Corregidor de la Provincia y atiendan con especial cuidado a la justificación e igualdad de los conciertos, sin permitir que sean engañados ni defraudados con respecto a la edad, habilidad y ocupación para que fuere concertado el indio y debajo del supuesto de que los fueren gañanes tributarios y tuvieren robusta complexión (hombres fuertes y robustos) para trabajar de peones han de ganar real y cuartillo por cada día de trabajo, dándoles la comida; y observen lo dispuesto por las ordenanzas de la Real Tasa acerca de las Reducciones de los indios, para que no se ausente de ella en más distancia de 4 leguas de la prelación que el encomendero ha de tener para cobrar en servicio personal el tributo cuando el indios se hubiere concertado para servir a otro en los tiempos necesarios al beneficio de los frutos de sus haciendas; y el Corregidor de la dicha Provincia, en las visitas que hiciere de los indios de su distrito, desagravie a los indios si hubieren padecido engaño en sus conciertos y en la paga de lo que se les debiere por su servicio personal. Y si hubiere auto de gobierno en la forma que contiene el pedimento del Protector de los Indios, remita copia auténtica a esta Secretaría y despáchese provisión con inserción del pedimento del dicho Protector y de este decreto, para que las Justicias de Cuyo lo guarden y cumplan, bajo pena de 200 $ de multa, y de que se les hará grave cargo en sus residencias (juicio que se le hace a las Autoridades, en el que dan cuenta de sus mandatos), y que la dicha provisión se registre en los Libros de Cabildo de Mendoza, San Juan de la Frontera y San Luis de Loyola; firma la petición José de Morales, Escribano de Su Majestad.
En cuya conformidad el 18/2/1689, mando a las Justicias Mayores y Ordinarias de Cuyo, vean el decreto y, lo guarden, cumplan y ejecuten, so pena de 200 $ de multa. Por mandato de José de Garro (gobernador) y de de Su Señoría, José de Morales, Escribano de Su Majestad, concuerda con su original que lo devolvió al Protector de los Naturales de esta Provincia el 26/3/1689; siendo testigos Miguel Busto y José Rodriguez de la Fuente. (4,267))

A pedido de Juan López Modón (Vicario Foráneo), fray Juan Cereso (Vicario in capite de la Orden de Predicadores), fray Juan de Dios Delgadillo (Vicario Prior), fray Juan de Dios Delgadillo (Vicario Prior) y fray Luis de Villalón (Comendador), el 31/1/1689 le solicitan a las autoridades del Cabildo de Mendoza que no entren en guerra con los indios que se han escapado de las Reducciones. El 3/2, el Cabildo a pedido del corregidor Lorenzo de Fagoaga y ante la súplica de los Prelados de esta ciudad, deciden no entrar en conflicto con los aborígenes huídos. (4,257)

El 14/4/1689, el gobernador José de Garro, declara vacante las encomiendas de Diamante y Cerro Nevado (río Diamante a 40 leguas y volcán Maipo a 50 leguas, San Carlos) y publica edictos en Santiago de Chile y lo propio hace en Mendoza, el corregidor Lorenzo de Fagoaga. Luego de la publicación, se presentan oposiciones y se inicia un litigio judicial entre Gonzalo Fernández de Córdova quien había heredado la encomienda de su padre Valentín y el capitán Diego Gómez Pardo. A raíz de ello, el corregidor Fagoaga matricula las encomiendas; encabezada por el cacique Juan, casado con sucesión, quien anda en Tunuyán en toldos como los Pampas; 14 indios sirviendo a Córdova en Santiago de Chile y los demás huidos. Pardo pide comisión de las encomiendas por vivir en Mendoza y ser conocedor de la tierra. El 21/5 la Real Audiencia hace lugar a Pardo, y le entrega 1 cacique y 2 reservados de propiedad de Córdova. El 5/5/1690 el gobernador Garro emite la merced en favor de Pardo y se hace del control de la encomienda conformada por: 42 indios, 7 reservados y 1 cacique, pagando el precio convenido el 10/5. (7,T2,363)

El general Pedro de Trilles, Teniente de Oficiales Reales de Santiago de Chile, comparece ante las autoridades del Cabildo de Mendoza el 7/5/1689, y hace entrega de 4 Tomos de las Leyes de la Nueva Recopilación de Indios. El 27/8, se pagan los Tomos y se dejan en poder del regidor y fiel ejecutor Gregorio de Arce Lucero. (4,270)

Por sentencia del corregidor Lorenzo de Fagoaga, fechada en Mendoza a 16/7/1689, se concede el cacicazgo de los indios de Domingo de Erazo a Nicolás Talquinca. Talquinca, cacique principal de Lenco, en atención a que Francisco Cunampa ha obtenido real provisión en que se le da derecho al cacicazgo pide, en fecha 7/4/1696, al corregidor de Mendoza, Juan de Urdinola, que se presenten a la Real Audiencia los autos obrados sobre la materia. Francisco Cunampa, cacique de Guanacache, reclama en contra de su encomendero Juan de Mayorga porque quiere hacerlo servir personalmente y le ha quitado su hijo Marcos, de 3 años de edad. El fiscal de la Real Audiencia en dictamen de 12/7/1696, dice que es nulo lo anteriormente actuado sobre el cacicazgo porque esas no son posesiones de facultad del Corregidor sino de la Real Audiencia. (7,T1,362)

Reunido el Cabildo de Mendoza el 24/9/1689, a pedido del gobernador José de Garro, con el fin de elaborar un informe acerca de la quita de indios que se le hace a los vecinos, para llevarlos a trabajar a las minas y que es en grave perjuicio de la ciudad. (4,280)

El rey Carlos emite en Madrid el nombramiento para Juan de Urdinola, en el cargo de Corregidor y Justicia Mayor de Cuyo por el lapso de 5 años a partir de su asunción; en el mismo documento y a raíz de múltiples denuncias recibidas por el Rey por ilícitos cometidos contra los aborígenes por las Autoridades de Indias, dice: "y porque he sido informado que, sin embargo de estar prohibido por diversas cédulas y ordenanzas reales que ninguno de los gobernadores y corregidores de las Indias puedan sacar de las cajas de comunidades de los indios la plata que está en ellas, contraviniendo a ellas muchos gobernadores y corregidores le han usado para emplearla en sus tratos, granjerías y otros usos propios, de que se han seguido muchos perjuicios a los indios, habéis de estar advertidos que de ninguna manera habéis de tocar a las dichas cajas de comunidades por ningún caso ni para ningún efecto que sea, ni serviros de los dichos indios ni ocuparlos en ningunos ministerios de vuestro servicio, con apercibimiento que se os hará cargo de ellos en vuestra residencia y seréis castigado por demostración; y porque asimismo se ha entendido en mi consejo de las Indias las dejaciones y agravios que reciben los indios cuando van los virreyes, presidentes y oidores de las audiencias de ellas y los gobernadores y corregidores, a servir sus puestos, obligándoles que le den bastimentos y bagajes sin pagarles lo que justamente se les debe dar por ellos, os mando que cuando vais a tomar posesión del dicho oficio ni cuando salgáis a la visita ordinaria de la tierra ni a otras comisiones, no obliguéis a los indios a que os den bastimentos ni bagajes sino que esto sea voluntario en ellos, pagándoles lo que justamente se les debe dar según el común precio o estimación de las cosas que hubiéredes menester, sin hacerles perjuicios ni vejación alguna por lo que se debe atender a su alivio y conservación y ser materia tan escrupulosa y digna de todo reparo lo contrario; y así observaréis lo referido, precisa y puntualmente, estando advertido que de cualquier contravención que en esto haya, se os hará cargo en vuestra residencia, siendo capítulo preciso de ella para con toda demostración como trasgresor de toda orden". Dada en Madrid a 31/10/1689. Yo el Rey. Yo don Francisco de Amolaz, secretario del Rey, nuestro señor, le hice escribir por su mando en la Secretaría de mercedes, que expido lo que su Majestad manda. Madrid, 3/11/1689. Don Antonio García Somoza. Vuestra Majestad lo mandó.

En 1690 el goberandor José de Garro, declara la vacancia de las encomiendas de Guanacache y de Chomes (San Luis) a raíz de la muerte del encomendero Antonio de Rojas. En Mendoza, el capitán Antonio de Peredo se opone a la vacancia por considerar que la encomienda era suya, entonces, el gobernador Garro envia los edictos correspondientes que dicen que el 27/10 se publicó en Santiago de Chile y el 1/11 se hizo lo propio en Mendoza, en la puerta de la casa del corregidor Santiago de Larraguibel y Marsana; en los edictos se adjunta el padrón de indios que conforman la dicha encomienda, integrada por: Gabriel Liche, soltero y 2 hermanos y 25 indios, de los cuales 1 es carpintero y 9 andan huídos. El 27/2/1691, por título emitido a Juan de Pereda se le confirma la encomienda y el 10/4 toma posesión de la misma. (7,T2,368)

Los vecinos de la ciudad presentan una petición al Cabildo de Mendoza y habiéndola visto el 9/10/1694, y siendo de razón y utilidad común lo que en ella piden y representan dichos vecinos, acordamos se mandasen a los vecinos moradores entrantes y salientes de cualesquier calidades que sean, ninguno sea osado a soltar ningún género (tipo) de ganados, sin pastor, por los daños que se siguen en dichas sementeras (sembradíos); y caso que por descuido de dicho pastor reciba algún daño alguno de los vecinos en sus sementeras, traiga la cabalgadura (caballos), bueyes o mulas u otro cualesquier ganados, aparte la justicia y traigan al corral del capitán Francisco Nuñez para que se reconozca el daño por cualquiera de los jueces, para que visto y reconocido el daño, se mande pagar y ninguno sea osado a sacar dichas cabalgaduras, sin autoridad de justicia de dicho corral (hacienda confiscada), pena de 20 $ aplicados en la forma ordinaria, en que desde luego lo damos por incursos, siendo españoles, siendo indios o negros, 50 azotes; y para que llegue a noticia de todos, se haga auto en forma de bando y que se publique en concurso de gente para que ninguno pretenda ignorancia y esta petición se arrime al libro de cabildo. Firman el Acta; los alcaldes, Pedro de Trilles y Luis Arias de Molina; el alguacil Diego de Funes y Salinas; y el regidor José Rodriguez de la Fuente. (4,448)

El 13/2/1695 el corregidor Juan de Urdinola prohibe sacar indios de Mendoza y llevarlos a Chile (X,EC,C3,D11). A partir del incumplimiento de la real provisión emitida en 1678 y en la cual se exigía la presentación de los títulos de propiedad de las encomiendas, el gobernador Poveda le envia al corregidor Urdinola la orden correspondiente para que sean matriculadas las encomiendas en Cuyo. Urdinola emite los bandos para Mendoza, San Juan y San Luis. El teniente de corregidor de San Juan, Manuel de Tobar Urquiza, lleva a cabo el censo el 9/6/1695 según el siguiente detalle:
1) encomienda de José de Laziar, del Valle de Mocna, cacique Nicolás Canrintuela de 25 años, casado y sin sucesión y 13 indios tributarios.
2) encomienda del capitán Marcos de Molina Vascóncelos, del Pueblo de los Tumanes; cacique Lorenzo Olayán, de 39 años, viudo, sin sucesión y 16 tributarios.
3) encomienda del capitán Diego Jufré de la Guardia, su pueblo en río Bermejo, cacique Bartolo Namio, de 52 años, casado sin sucesión y 30 tributarios y algunos huídos.
4) encomienda del capitán Francisco de Robledo, sin reducir, con cinco indios en la Ciudad.
5) encomienda del capitán Pedro de Mesa y Zúñiga, sin pueblo ni cacique con 12 indios. La administra el teniente Juan de Cevallos.
6) encomienda del capitán Juan Gregorio Morales de Albornoz, al parecer de indios de Valle Fértil. sin cacique y 19 tributarios.
7) encomienda del capitán Alonso del Pozo y Lernos, su pueblo en Río Bermejo; cacique Gaspar Quilica y 24 tributarios, de los cuales hay 7 huidos.
8) encomienda del capitán Francisco Macaya, vecino de Santiago, sin cacique y 7 indios originarios de dicha Ciudad. La administra Pedro de Toro Mazote y Bustamante.
9) encomienda que administra el capitán Francisco Antonio de Marigorta, por su mujer Maria de Morales, de indios de San Luis de Loyola: cacique Juan de 51 años con sucesión y 12 indios.
10) encomienda del capitán Pedro de Balmaceda, del Valle de Mocna: cacique Gaspar Mullmuy, soltero y 5 indios; cacique: Francisco Mangua de Valle Fértil y 1 indio; y cacique José Gualcusa de Río Bermejo, casado y con sucesión de 1 de familia y 5 indios.
11) encomienda de Juan Gil de Quiroga de Valle de Jachal, cacica doña Constanza viuda sin sucesión y 5 indios con 1 huído.
12) encomienda del sargento mayor Julián de Maltea, su pueblo Valle Fértil; cacica doña Clara y 23 indios, con 2 carpinteros y 2 huídos.
13) encomienda del capitán Melchor Moyana Cornejo; vecino de Mendoza; cacique Pablo, casado y con sucesión y 11 indios en la Ciudad.
14) encomienda del maestre de campo Juan de Oro Bustamante, reducida a la Ciudad de San Juan: cacique Gabriel. de 65 años, viudo, sin sucesión y 45 indios tributarios de los cuales 3 se han huido.
15) encomienda del capitán Tomás Jofré de Barreda, sin pueblo ni cacique y reducida a su viña con 11 indios.
16) encomienda de Clemente Gil de Quiroga, sin pueblo ni cacique y reducida a su viña, con 6 indios y 1 huido.
17) encomienda del capitán Miguel de Silva y Verdugo, vecino de Santiago y militar del Real Ejército, administrada por Juan Jofré de Barreda: cacique Jacinto Chancay, del Pueblo de Jachal, de 40 años, casado y con sucesión, con 16 indios y 8 fugitivos.
18) encomienda del capitán Pedro de Angula, residente en Santiago, administrada por el general Lorenzo de Fagoaga: cacique Pedro Santagua, del pueblo de Río Bermejo, casado y sin sucesión y 10 indios, de los cuales 5 son huidos.
19) encomienda del capitán José Jofré de Arce: 5 indios.
20) encomienda de Magdalena de Erazo, residente en Santiago; 9 indios y Juan Ocha, del Pueblo de Sata.
21) encomienda del capitán José del Pozo, residente en Santiago; cacique Gabriel llcaño, de 30 años, del Pueblo de Valle de Calingasta, soltero y 7 indios tributarios.
El 2/7 emite el bando en Mendoza y es pregonado por el alguacil mayor Diego de Funes y Salinas; la fecha límite de presentación de las encomiendas es el 6/7. El censo de encomiendas da como resultado:
1) Mendoza, 7/7: encomienda de Juan Godoy del Castillo.
2) Mendoza, 8/7: encomienda de Antón Rodriguez Brito de San Pedro.
3) Mendoza, 12/7: encomienda de Antonio Peredo.
4) Mendoza, 18/7: encomienda de Ginés de Salinas y Córdova.
5) Mendoza, 20/7: encomienda de Antonio Moyano.
6) Mendoza, 16/7: encomienda de Gregorio Ladrón de Guevara.
7) Mendoza, 19/7: encomienda de Diego Gómez Pardo.
8) Mendoza, 21/7: encomienda de Mariana de Vera y Aragón.
9) Mendoza, 6/9: encomienda de Gregorio de Morales.
10) Mendoza, 7/9: encomienda de Luis Arias de Molina.
11) Mendoza. 13/9: encomienda de Pedro de Videla.
12) Mendoza. 13/9: encomienda de Luis Cherinos de Posada.
13) Mendoza, 7/9: encomienda de Leonardo lbacache.
14) Mendoza, 30/9: encomienda de Sebastián de Pedraza.
15) Mendoza, 30/9: encomienda de Beatriz de Videla.
16) Mendoza, 1/10: encomienda de Martín Pizarro.
17) Mendoza, 2/10: encomienda de Juan de Malina.
18) Mendoza, 2/10: encomienda de Rodrigo de Carvajal.
19) Mendoza, 18/10: encomienda de Bartolomé de Villegas y Figueroa.
20) Mendoza, 20/11: Ecomienda de Pedro Gómez Pardo.
21) San Lorenzo (Uspallata), 14/12: encomienda de Miguel de Silva.
22) San Lorenzo, 14/12: encomienda de Andrés Sánchez Chaparro.
23) San Lorenzo, 14/12: encomienda de Andrés de Toro Mazote.
24) San Lorenzo. 15/12: encomienda de Juana de Elguea.
25) San Lorenzo, 15/12: encomienda de Juan de Mayorga.
26) San Lorenzo, 15/12: encomienda de Domingo de Erazo.
27) Mendoza, 19/11: encomienda de Juan Vidal Olguín.
28) Mendoza, 20/12: encomienda de Diego Ruiz de la Cuesta.
29) Mendoza, 20/12: encomienda de José de Morales.
30) Mendoza, 9/1/1696: encomienda de Alonso de Soto. (7,T2,403)

El gobernador Tomás Marín de Poveda, por auto fechado en Santiago de Chile el 21/3/1698, declara vacante la encomienda que poseía en segunda vida Antonio Rodríguez en la Ciudad de Mendoza y manda al corregidor Francisco de Larraniga y Axpe haga la matrícula, ponga edictos y deposite los indios en el alférez Lorenzo de Miranda para que pague los tributos reales. El gobernador Poveda por auto del 15/3, emplaza a los beneméritos, para que se opongan a la encomienda, y el 12/4 el corregidor Axpe le ordena al alguacil mayor Diego de Funes Salinas, que publique los edictos y emite la matrícula que está compuesta por: 15 indios, de ellos 5 ausentes y el cacique Pedro Telelí. El teniente de oficial real Pedro de Trilles, dice el 23/4, que Miranda para pagar los derechos que por razón de la vacancia pertenecen, presentó por fiador a Pedro Morales de Albornoz. El maestre de campo Ignacio Godoy y Figueroa, vecino de Mendoza, en donde ha sido alférez, capitán, sargento mayor y maestre de campo, dice que su padre el maestre de campo Francisco Felipe del Castillo, natural de los Reinos de España, militó en dicha Provincia en los principios de la fundación de dicha Ciudad y su madre Petronila de Videla y Reinoso, de los Videla, fundadores y pacificadores de la dicha provincia y Ciudad de Mendoza y por lo Reinoso de linea recta nieto del adelantado Alderete que venía por gobernador de este Reino y murió en Panamá en 1556. En Santiago de Chile el 12/11, el gobernador Poveda hace merced de la encomienda a Ignacio de Godoy. (7,T2,435)

En la sesión del Cabildo de Mendoza del 25/1/1698, se presenta Luis Arias con el título de Coadjuntor de los Naturales (Aborígenes), para hacer sus causas y defensas, despachado por el licenciado Juan del Corral y Calvo de la Torre y por el gobernador Poveda, refrendado por el escribano Gaspar Valdés el 30/11/1697. (4,546)

El gobernador Poveda por auto fechado en Santiago de Chile el 8/6/1698, declara vacantes las encomiendas que poseen en Mendoza, San Juan y San Luis de Loyola, de la Provincia de Cuyo, las siguientes personas: Esteban de Videla, por muerte del sargento mayor Pedro de Videla, su padre; capitán Juan de Videla; Gregorio de Cuevara; Alonso de Covarrubias; Ginés de Salinas, por muerte del maestre de campo José Pardo; Antonio Moyano; Antonio Peredo; Juan Ruiz de la Cuesta; José de Villegas; Leonardo de Ibacache, difunto; Luis Arias de Molina; Bartolorné de Villegas, por adjudicación; Domingo de Molina Vasconcelos; Pascuala de Escobar y los Ríos; Diego Gómez Pardo; Melchor Moyano; Victoria Moyano; José de Arias; Diego Jofré de la Guardia; Marcos de Malina Vasconcelos; Juan Gregorio de Morales; Luciana de Quiroga; Pedro de Balmaceda; Juan de Oro Bustamante; Tomás Jofré; José Jofré; Alonso del Pozo; Julián de Mallea; Juan de Morales y Contreras; Pedro de Oro; Lorenzo Muñoz de Aldana; Mariana de Vera y Aragón; Francisco Díaz Barrozo; José Pallero y Marcela Muñoz; por no haber comparecido con sus títulos y confirmaciones. En el mismo decreto se ordena que se publiquen los edictos de vacancia. En Mendoza, el 17/11, el corregidor Larrinaga despacha el auto en cuestión al teniente de corregidor de San Juan, Chirinos de Posada, para que lo publique. Para los encomenderos de Cuyo, se les da un plazo de 30 días para que revaliden sus títulos, pasado el plazo las encomiendas serán declaradas vacantes. Para ello se deberá confeccionar la matrícula (censo) de todos los indios y la información deberá ser remitida a la Secretaría de Gobierno. El 1/6, el teniente de Mendoza, el sargento mayor Luis Chirinos de Posada publica el bando en la Plaza. El 8/6, vencido el plazo y no habiéndose presentado ningún vecino de Cuyo, son declaradas vacantes todas las encomiendas. excepto: Marta Cajal, Rodrigo de Carvajal, Domingo de Herazo, Juana de Elgua, el capitán Andrés de Toro, Antonio Jofré, Pedro de Mesa, Miguel de Silva y Gerónimo de Quiroga. (7,T2,436)

Por fallecimiento del maestre de campo Domingo de Erazo queda vacante la encomienda de los caciques de la Punta y Pueblo de Guanacache, que poseía en segunda vida. El gobernador Juan Ibáñez de Peralta, en atención a que se han publicado bandos a fin de que los encomenderos inscriban sus titulos para reconocerlos, y como por muerte del alférez real Domingo de Erazo, no los han presentado, declara vacante la encomienda de Punta de Venados y Guanacache que poseyó dicho Erazo. Son publicados los edictos en Santiago de Chile el 11/1/1702 y en Mendoza el 15/2/1702, por el corregidor Nicolás Francisco de Retana; y la matrícula está compuesta por los caciques: Nicolás Talquinca, casado de 41 años; Antonio Talquinca, casado de 50 años; Francisco Cunampas, casado de 41 años y 35 vasallos. El sargento mayor Juan de Mayorga, hijo del maestre de campo Pablo Gallardo de Mayorga, que sirvió en Perú y Tierra Firme, se ocupó 12 años en los Presidios de Panamá y Portobelo, 2 años en el convoy de la guardia de aquellas costas y, pasó al Perú, donde fue Protector de Indígenas de la Villa de Huancavélica y Provincia de Ancarán, por el Virrey Arzobispo. Fue además 4 años minero en el Azogue de Huancavélica, y apenas llegó a Chile pasó a Cuyo, en donde ha sido Teniente de Corregidor y Alcalde de Minas en el asiento de San Lorenzo, más de 3 años. También ha sido azoguero más de 8 años y dueño de minas e ingenio. El gobernador Marín de Poveda le nombró capitán de infantería y el corregidor Retana, Sargento Mayor del Batallón, cargo que hoy ejerce. Pide las encomiendas que administra desde hace 7 años en mérito a sus servicios. En Santiago a 29/4/1703, el gobernador Peralta concede la encomienda a Mayorga. (7,T2,539)

EI maestre de campo Andrés de Toro Mazote, encomendero de 106 indios del pueblo de Ocolomilqui, en términos de San Luis, dice que el gobernador Martín de Poveda, por estar muy atrasados los indios de su encomienda les agregó los vacos (vacíos) de la encomienda que fue del capitán Bartolomé Maldonado, que andaban vagando por las pampas. El suplicante ha formado una reducción en un lugar muy aparente para labranza, llamado El Rosario y edificó iglesia decente, con los ornamentos necesarios al culto, reducción que sirve de alivio a los viajeros. En la Provincia de Cuyo todos los repartimientos que fueron en el principio de su conquista muy numerosos, se han extinguido y acabado por la mala forma que ha habido en la reducción de los dichos indios y las dificultades que en ella se han ofrecido, retírándose los dichos indios a las pampas, de calidad que son pocos los que se han bautizado y casado, y que los más viven en infidelidad y barbarie, casados a su usanza, sin doctrina cristiana y especialmente los de la encomienda del capitán Francisco de Pedraza y del maestre de campo Jerónimo de Quiroga en el pueblo de Diamante, que desamparados andan por los campos en tolderías. residiendo en un paraje hasta consumir y acabar la caza de animales silvestres y feroces con que se sustentan. Dice que perjudican las estancias y viajeros como lo hizo el cacique Chiquillán y pide se agreguen los dichos indios a su reducción del Rosario, para que su repartimiento tenga el número necesario de indios que puedan contribuir a la congrua sustentación del cura de dicho pueblo. En Santiago de Chile a 25/6/1705, se le conceden a Toro Mazote según las siguientes matrículas:
1) Indios de la Estanzuela y Rosario, del maestre de campo Andrés de Toro: un cacique y 15 indios, hecha en San Luis, a l0/12/1704 por Juan Alvarez de Toledo, cura y vicario.
2) Encomienda del capitán Sebastián de Pedraza, con vecindad de Mendoza hecha en esa ciudad el l/12/1704 por el protector de naturales, capitán José Vidal Olguín: 13 indios.
3) Encomienda que fue de Jerónimo de Quiroga, vecino de Santiago, en el pueblo de Diamante: cacique Sebastián Paucán, que asiste en Corocorto desde el alzamiento de Lorenzo Chiquillán y 31 vasallos repartidos, de los cuales algunos están con su señor.
4) De otro pueblo del mismo Quiroga: cacique Francisco Pauta y 29 vasallos, repartidos en Córdoba, las pampas, Río Quito, muchos de los cuales no son cristianos.
La matricula de estos indios de Quiroga se hizo por el dicho Vidal el 9/12/1704. (7,T2,546)

En Mendoza el 1/6/1709 el general José de Salinas, Corregidor de Cuyo, y con el objeto de que los indios no se disipen, concede la encomienda que fue del capitán Gregorio Ladrón de Guevara al capitán Juan de Guevara; a condición de pagar la tasa y obtener despacho del Gobernador de Chile. En Mendoza a 3/3/1711, el alcalde Juan Ruiz de la Cuesta, por ausencia del corregidor Pablo Giraldes de Rocamora, hace la matrícula de los naturales, que arroja un total de 28. (7,T2,557)

El Protector General de los Naturales (Aborígenes) de este Reino (Chile) por la defensa de Ramón Saparan como más haya lugar en derecho comparezco y digo: que según consta de la información que presenta el dicho Ramón ha sucedido en el cacicazgo del pueblo de Murmuta jurisdicción de la Ciudad de Mendoza como hijo legítimo de Juan Saparan, ya difunto, el cual fue cacique de dicho Pueblo y conocido por tal, para que pueda este dicho Ramón atender la posesión de dicho cacicazgo. Santiago de Chile, 17/3/1727. (X,EC,C2,D37)

Los alcaldes Joseph de Molina Vasconcelos y Luis de Villanueva se reúnen el 5/3/1729, y acordaron ir al Desagüe ya que la ciudad se inunda y producen perjucios en los templos y viviendas, y habiendo llegado al lugar y éste hallándose robado se procede a abrir otro Desagüe por ser de bien público, ordenando que cada vecino dé un peón con herramientas imponiéndoseles pena pecuniaria, y, a los indios, negros y mulatos libres que tienen vivienda propia, una pena de 50 azotes. (X,EC,SG,C13,D7,10)

Por un litigio judicial entre la Compañia de Jesús contra José Morales de Albornoz y Miguel de Guevara; respecto de la posesión de unas tierras, se presentan como testigos en el valle de Uco el 7/2/1733, ante Andrés de Vargas Machuca y para los efectos de dar posesión de la merced del titulo al padre Viñales:
a) Pablo, cacique de cien años de edad, quien dijo que Lolol era junto a Capi a la parte del Este en un cerrito, que estaba enterrada una piedra grande de molino, que en su lengua llaman Lolol.
b) Lucía de Toro, Cacica, de cien años de edad, quien dijo no sabía de Beomale ni Gelante; que Gorongolo era hacia la reducción de la Aguada; que Xaxalmaci y Moco era en la población de las Chacras, en medio de dos arroyos, uno llamado Salán, que nace de la parte del Sur; que Tilián es adelante del arroyo de Benítez, donde están unos hornos viejos; que Llacorón es donde está poblado Alvarado; que en tiempos antiguos había hecho una visita el corregidor Retana; y que también recordaba que el alcalde Diego Cabral ordenó medir unas tierras y que Morales se opuso. (7,T2,635)

Petronila de Torres, esposa del maestre de campo Thomas de Araujo, le vende al maestre de campo Juan de Oro el 19/10/1733, una mulata de su dominio llamada Quesera, de 33 años; la que vende por esclava y sujeta a servidumbre y cautiverio perpetuo, en precio y cuantía de 250$ de contado que recibió del comprador; la que vende con todas sus tachas, vicios y enfermedades. La escritura de posesión es certificada por el escribano Gaspar Oteisa, son testigos del acto: el maestre de campo Jorge Gómez de Araujo y el capitán Andrés Bargas Machucha. (X,EC,P43,42)

En 1737 el alférez Tomas de Lara y Ana María Miranda, venden una estancia a Domingo Pereira, que queda de la ramada de la otra banda del Rio de Tunuyan a orillas del distante de esta ciudad 14 o 15 leguas poco más o menos que de longitud tiene 2 leguas poco más o menos que es de oriente a poniente y de sur a norte la latitud que tendrá al parecer lo mismo que tiene de longitud que por el poniente linda con tierras del cacique Hernando Chaquis y por el naciente con tierras del cacique Diego Semie, que es el surdo que comúnmente llaman, por el norte con el citado Rio de Tunuyán y por el sur hasta donde alcanzaren las dichas tierras poco más o menos o como mejor lindaren, las quales dichas tierras dijeron dichos vendedores que las hubieron y heredaron de doña Luisa Othoyano, cacica principal como largamente consta de una de sus claúsulas de su testamento. (X,EC,P45,76)

María Joachincai, hija legítima de Marcelo Joachincai y de María Aimenuna, emite su testamento el 31/10/1739; y pide que su cuerpo sea sepultado en el Convento de San Francisco y amortajado con el hábito que usan los religiosos de la Orden; también declara, que tuvo por esposo a Joaquin, esclavo que fue del doctor Francisco Correa de Saa, Cura y Vicario de Cuyo; y que tuvo por hijos a Simón, Tadeo e Isidro. (X,EC,P46,216)

Reunído el Cabildo de Mendoza el 21/5/1752, se presenta Pedro Pacheco con un título despachado por Tomás de Azuathuruyán, Caballero de la Orden de Santiago del Consejo de su Majestad, su Protector Fiscal General de los Indios de fecha 11/4, autorizado por el escribano Francisco de Borda, en que le confiere título y nombramiento de Protector General de los indios de esta Ciudad; es recibido en el cargo por el corregidor Eusebio de Lima y Melo, los alcaldes Francisco García de Torres y Fernando Cerro Jurado, certificado por el escribano Gaspar de Castro. (X,EC,SG,C14,D7,18)

Bernardo Gonzalez, vecino encomendero de la ciudad de Tucumán, emite un poder el 28/6/1752 en favor de fray Miguel Chacón, de la Orden de los Hermitaños de San Agustín de Mendoza, a fin de averiguar el paradero de los indios de su encomienda que andan fugitivos; enterado que en San Juan hay un indio llamado Ramón del pueblo de Amuicha, y que está en poder de Manuel Godoy; pide que se le devuelva y se le pague los réditos correspondientes. (X,EC,P61,120)

El Protector de Indios se presenta ante el Cabildo de Mendoza el 1/12/1755, y declara que los indios de Corocorto se quejan que en sus tierras ponen sin permiso ganados un Religioso de San Benito y Francisco Corbalán, y no le pagan el arrendamiento. Asímismo, Joseph Semeyan se queja que no se le ha devuelto un escrito que su padre Diego Semeyan, le presentó al escribano Francisco Videla. Como así también, dan cuenta que Marcelo, Alcalde de Corocorto, les usurpa sus tierras y embaraza el agua para cultivarlas; como también, les da permiso a españoles para que corten madera de 7 años a esta parte en las tierras de los Semeyan, siendo que el oidor Francisco de Laisequilla le hizo entrega a Marcelo de otras tierras. (X,EC,C29,D22)

Antonio Maturano emite su testamento en la escribanía de Simón de Videla el 12/8/1761, y declara que Pascual Talquenca le debe una mula chúcara de 3 años y Clemente Talquenca le debe una mula de 3 años, manda que se le cobren. (X,EC,P76,5)

Joseph Semeyano, cacique del pueblo de Corocorto, Pascuala y Rosa, sus hermanas, comparecieron ante el escribano Gaspar de Castro el 12/4/1765 y otorgaron un poder a Pedro Nolasco Semeyano, su sobrino, para que en su nombre comparezcan ante todas las justicias para solicitar la posesión de inmemorial tiempo que han tendio del terreno de Corocorto, que se entiende hasta la agua dulce, que llaman, presentando ante los jueces los despachos de amparos de la dicha posesión que tienen por el Excelentísimo Señor Joseph Manso de Velasco, Gobernador y Capitán General que fue de esta Real Audiencia de este reino de Santiago de Chile, y asímismo amparados por el general Joseph de Frías, Corregidor que fue de esta provincia de Cuyo, en fuerza de una real provisión que tuvo de los Señores Presidente y Oidores de dicha ciudad de Santiago de Chile; y en virtud de ellos, pueda hacer todos y cualesquiera pedimentos, requerimientos, citaciones; presentando escritos, escrituras, testimonios, testigos y provanzas, y los demás recados que convengan. Son testigos del acto: Nicolás Lemus, Pascual de Castro y Bentura Camilo. (X,EC,P82,28)

Desde la ciudad de Santiago de Chile el 9/11/1765, los Oidores de la Real Audiencia ordenan que respecto de la consulta hecha por el Corregidor de Mendoza del 6/9, sobre el abuso que hay en dicha ciudad sobre que los jueces quitan a la gente ordinaria a sus hijos y que los ponen a servir en casas de sus parientes o amigos, y que lo mismo ejecutan con las mujeres solteras que no tienen padres, y que con la muerte de Pedro Pacheco, no hay coadjuntor que defienda a los indios en las causas que ocurren. Por tanto, declararon que ningún juez puede ni le es facultativo quitar a ninguna persona sus hijos, de cualesquiera calidad que sean, sino sea en el caso que sus padres o parientes no los eduquen ni enseñen la doctrina cristiana, solo entonces podrán depositarlas en alguna personas de caridad que los instruyan y una vez instruídos devolverlos a sus padres o parientes, apercibiéndoles su enseñanza o corrección; y en cuanto a las mujeres solteras que no tuvieren padres, para que no anden vagando y evitar su perdición, las apremiaran los jueces a que elijan y busquen por su voluntad, casas de personas honradas y de buena vida a quien servir. Por falta de coadjuntar apercibimos al fiscal la protección de los indios. (X,EC,C40,D85)

El gobernador Francisco Xavier Morales y Castejón por orden del 17/5/1771 y que es tratada en el Cabildo de Mendoza el 25/6, sobre que su Alteza de que esta frontera goza de la primitiva paz que aclamaron los indios en el parlamento general que se celebró en Negrete, se suspendan las guardias del Fuerte de San Luis y se arreglen las Compañías de esta ciudad al estado en que estaban previas al levantamiento; pero, los vecinos declaran que siguen los inconvenientes y los insultos y los robos a las haciendas. (X,EC,SG,C15,D10,22)

Según un censo realizado entre 1777 y 1778, hay en Mendoza 8.765 habitantes: 4.344 Blancos. 446 Aborígenes. 2.129 Negros. 563 Mestizos.

Juan Morel firma un listado emitido el 29/3/1788, que ordena a familias que residen en las Lagunas (Guanacache) y que deberán mudarse al nuevo Fuerte de San Carlos a cargo de Francisco Esquivel Aldao, a saber; la familia Allaime: Lorenza, Bernarda, Martina, Tomasa, Juan Domingo, Rosalía, Pascuala, Joseph, y otros; Pascuala Carmona con su marido y sus hijos; María Cañas y sus 4 hijos: Mariana, María Antonia, Juan y Francisco; Mateo y sus dos hermanitos huérfanos; Clemente Allaime y Joseph Santos Peleytai. (X,EC,C28,D8)

Lorenzo de Fagoaga, Corregidor de Cuyo, visita los hornos de fundición y hace un inventario de los metales extraídos el 28/10/1788. Además, ordena que a los indios que trabajaren en minas y fundiciones se les pague sus salarios y jornales en bayeta a 12 Reales y pañete a 6$ (telas). (X,EC,P99,28)

Juan Morel le escribe a Josef Amigorena el 24/11/1791, y le dice que tiene noticia como Domingo Allaime, criollo de las Lagunas, que fue destinado a esta villa de San Carlos, se fugó y se llevó algunos caballos de los indios. (X,EC,C69,D41)

Fray Juan Crisóstomo Perez le envía una carta a Domingo Torres, Subdelegado de Real Hacienda, con fecha 19/1/1807, en la que le manifiesta que Pedro Sarandón, Comisionado del Partido de San José de Corocorto, y por orden del virrey Sobre Monte que se reserva a los indios de Corocorto los terrenos infelices desde ¿Topaco? hasta Las Averías, y que en esta virtud se proceda a la tasación de los terrenos denunciados por Mateo Delgado, haciéndomelo saber, y que devuelva el citado oficio. En su consecuencia digo: que esto no lleva ni pies ni cabeza, ya lo veo. Una cosa tan extraña como es querérseles robar a cara descubierta a estos pobres infelices lo que legítimamente es suyo, es preciso que se diga también por unos medios extraños. (X,EC,C30,D50)

Siendo gobernador San Martín, el 20/8/1815 emite un bando para que sea remitido al Decurión de las Lagunas de Guanacache, en el que dice que si hubiese algunos indios que quisieren presentarse voluntarios en servicio de su País, hará que se le presenten y los remitirá a este Gobierno para destinarlos a los Cuerpos que fueren de mi agrado, bajo la inteligencia que el día 31 de este se cumpla el plazo prefijado. (X,C283,D38)

Comunidades Huarpes

El 27/5/2011, en el espacio físico de la Subsecretaría de Agricultura Familiar, que cedió el lugar, queda formada la Organización Territorial Huarpe “Martina Chapanay” conformada por las comunidades autónomas:

- XAG XAG CARIGUE EYE CURUC.
- XAG XAG CARIGUE XUMEC.
- XAG XAG CARIGUE FRANCISCO TALQUENCA.
- XAG XAG CARIGUE LAGUNAS DEL ROSARIO.
- XAG XAG CARIGUE PINKANTA: MENDOZA, SAN JUAN Y SAN LUIS.
- XAG XAG CARIGUE GUAYTAMARI.

Donde se plantearon distintas áreas de trabajo como salud, educación, agricultura familiar, derechos humanos, y diversos temas que tienen que ver con la realidad política a nivel nacional y así cada una de las comunidades participará activamente en la reafirmación de la identidad Huarpe. (W4)

Bibliografía

1) Academia Nacional de la Historia (1945): Actas Capitulares de Mendoza, Tomo (T) 1.
2) Junta de Estudios Históricos de Mendoza (1961): Actas Capitulares de Mendoza, Tomo 2.
3) Academia Nacional de la Historia (1974): Actas Capitulares de Mendoza, Tomo 3.
4) Academia Nacional de Historia (2011): Actas Capitulares de Mendoza, Tomo 4.
5) Canals Frau, Salvador (1942): Acotaciones etnológicas a un pleito sobre indios mendocinos del siglo XVI.
6) Medina, José Toribio (1888-1902): Colección de documentos inéditos para la historia de Chile, Tomos 1 al 30.
7) Espejo, Juan Luis (1954): La Provincia de Cuyo del Reino de Chile, Tomos 1 y 2.
8) Instituto Nacional Sanmartiniano. Documentos para la Historia del Libertador General San Martín, Tomos 1 al 20.
9) Bibar, Gerónimo de (1558): Crónica y relación copiosa y verdadera historia de los Reynos de Chile.
10) Mariño de Lovera, Pedro (1865): Crónica del Reino de Chile, Tomo 6.
11) Michieli, Catalina Teresa (1994): Antigua Historia de Cuyo.
12) Caballero, Luis César (2003): Raíces y Rastros en el Tiempo en Mendoza.
13) Palacios, Ernesto (2018): Mendoza, la ciudad perdida.
X) Archivo General de la Provincia de Mendoza: Época Colonial e Independiente (EC,EI), Carpetas y Documentos (C,D), Protocolos (P).
W1) Pueblosoriginarios.com
W2) Naciones Unidas
W3) Teresamichieli.com
W4) Guaytamari.blogspot.com.ar